Zac 9,1-8
“
Segunda parte
Oráculo.
La nueva tierra.
La palabra de Yahvé
llega al país de Jadrac
y a Damasco, su lugar de reposo,
pues de Yahvé son las ciudades de Aram,
lo mismo que las tribus de Israel;
y también la fronteriza Jamat,
(Tiro) y Sidón, con fama de sabia.
Tiro se ha construido un baluarte,
ha amontonado plata como polvo
y oro como barro de las calles.
Pero el Señor la desposeerá:
hundirá en el mar su prosperidad,
y ella misma será pasto del fuego.
Ascalón lo verá aterrada,
Gaza se retorcerá de dolor,
y Ecrón, pues su esperanza ha fracasado;
desaparecerá de Gaza el rey,
Ascalón no será ya habitada,
y un bastardo habitará en Asdod.
Truncaré el orgullo de los filisteos;
quitaré la sangre de su boca,
y sus abominaciones de sus dientes.
También de él quedará
un resto para nuestro Dios,
será como una tribu de Judá,
y Ecrón será como el jebuseo.
Acamparé junto a mi Casa como guardia
contra quien pasa o quien viene;
no pasará junto a ellos el opresor,
porque ahora vigilo con mis ojos.
”
Segunda parte
Oráculo.
La nueva tierra.
La palabra de Yahvé
llega al país de Jadrac
y a Damasco, su lugar de reposo,
pues de Yahvé son las ciudades de Aram,
lo mismo que las tribus de Israel;
y también la fronteriza Jamat,
(Tiro) y Sidón, con fama de sabia.
Tiro se ha construido un baluarte,
ha amontonado plata como polvo
y oro como barro de las calles.
Pero el Señor la desposeerá:
hundirá en el mar su prosperidad,
y ella misma será pasto del fuego.
Ascalón lo verá aterrada,
Gaza se retorcerá de dolor,
y Ecrón, pues su esperanza ha fracasado;
desaparecerá de Gaza el rey,
Ascalón no será ya habitada,
y un bastardo habitará en Asdod.
Truncaré el orgullo de los filisteos;
quitaré la sangre de su boca,
y sus abominaciones de sus dientes.
También de él quedará
un resto para nuestro Dios,
será como una tribu de Judá,
y Ecrón será como el jebuseo.
Acamparé junto a mi Casa como guardia
contra quien pasa o quien viene;
no pasará junto a ellos el opresor,
porque ahora vigilo con mis ojos.
”