Ver contexto
A más palabras, más vanidad.
¿Qué provecho saca el hombre?
(Eclesiastés 6, 11) © Nueva Biblia de Jerusalén (Desclee, 1998)

BHSEk - Biblia Hebraica Stuttgartensia (Enhanced; KJV versification)

כִּ֛י‎(כִּי)

Hebrew|kˈî|that

Part-of-speech: conjunction
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H3588] [k.bg.aa] [976]
[כי] [GES3481] [BDB3883] [HAL3852]

יֵשׁ‎(יֵשׁ)

Hebrew|yēš-|existence

Part-of-speech: noun
Gender: unknown
Number: singular
Person: not applicable
State: absolute
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H3426] [j.dr.ae] [921]
[יש] [GES3311] [BDB3697] [HAL3672]

דְּבָרִ֥ים‎(דָּבָר)

Hebrew|dᵊvārˌîm|word

Part-of-speech: noun
Gender: masculine
Number: plural
Person: not applicable
State: absolute
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H1697] [d.ai.ab] [399a]
[דבר] [GES1603] [BDB1811] [HAL1822]

הַרְבֵּ֖ה‎(רָבָה)

Hebrew|harbˌē|be many

Part-of-speech: verb
Gender: unknown
Number: unknown
Person: unknown
State: absolute
Verbal tense: infinitive (absolute)
Verbal stem: hif‘il


[H7235] [t.ai.aa] [2103]
[רבה] [GES7200] [BDB7933] [HAL7847]

מַרְבִּ֣ים‎(רָבָה)

Hebrew|marbˈîm|be many

Part-of-speech: verb
Gender: masculine
Number: plural
Person: unknown
State: absolute
Verbal tense: participle
Verbal stem: hif‘il


[H7235] [t.ai.aa] [2103]
[רבה] [GES7200] [BDB7933] [HAL7847]

הָ֑בֶל‎(הֶבֶל)

Hebrew|hˈāvel|breath

Part-of-speech: noun
Gender: masculine
Number: singular
Person: not applicable
State: absolute
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H1892] [e.af.aa] [463a]
[הבל] [GES1811] [BDB2029] [HAL2039]

מַה‎(מָה)

Hebrew|mah-|what

Part-of-speech: interrogative pronoun
Gender: unknown
Number: unknown
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H4100] [m.an.aa] [1149]
[מה] [GES4032] [BDB4486] [HAL4429]

יֹּתֵ֖ר‎(יֹותֵר)

Hebrew|yyōṯˌēr|rest

Part-of-speech: noun
Gender: masculine
Number: singular
Person: not applicable
State: absolute
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H3148] [j.ef.aj] [936d]
[יותר] [GES3039] [BDB3392] [HAL3370]

לָ‎(לְ)

Hebrew|lā|to

Part-of-speech: preposition
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[l.aa.ab] [1063]
[ל] [GES3706] [BDB4135] [HAL4089]

‎(הַ)

Hebrew||the

Part-of-speech: article
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[e.ab.aa] [459]
[ה] [GES1804] [BDB2019] [HAL2031]

אָדָֽם‎(אָדָם)

Hebrew|ʔāḏˈām|human, mankind

Part-of-speech: noun
Gender: masculine
Number: singular
Person: not applicable
State: absolute
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H120] [a.bc.ab] [25a]
[אדם] [GES123] [BDB134] [HAL135]

Biblia Comentada, Profesores de Salamanca (BAC, 1965)



6. Mas Sobre la Vanidad de las Riquezas y Fatigas por Conseguirlas.

Riquezas sin gozo (6:1-6).
1 Hay un mal que yo vi debajo del sol y que pesa muy gravemente sobre el hombre. 2 Uno a quien Dios dio riquezas, hacienda y honra, y a quien nada le falta de cuanto su deseo puede desear, pero a quien Dios no le deja gozar de todo eso, sino que lo gozan los extraños. 3 Esto es vanidad y mal trabajo. Aunque tenga cien hijos y viva muchos años, si no se hartó su alma del bien y ni siquiera halla sepultura, 4 digo que mejor que él es el abortivo, que si en vano vino y oscuramente se va y cubren su nombre las tinieblas, 5 y ni vio el sol ni supo nada, todavía más quietud goza que aquél, 6 y aunque dos veces mil años viviese sin gustar el bien, ¿no irían todos esos años por el mismo camino?

La afirmación precedente de que es Dios quien concede no sólo las riquezas y hacienda, sino también la facultad de gozar de ellas, ha sugerido estas reflexiones a Cohelet, en que continúa exponiendo la vanidad de las riquezas y, en consecuencia, de los esfuerzos por conseguirlas. Impresiona a nuestro autor el caso del rico a quien no permite disfrutar de sus riquezas. No es raro encontrarse con personas que abundan en bienes de fortuna a quienes una desgracia física o una pena moral no deja gozar de sus riquezas y sentirse felices. Otras veces, y a éstas más bien parece aludir Cohelet, una muerte prematura arranca al hombre de sus riquezas en el momento en que el éxito acababa de coronar sus esfuerzos y podía comenzar a disfrutar de una copiosa fortuna. Se fue al sepulcro sin poder dejar un hijo que heredase el fruto de su ingenio, y tal vez sudores, que vino a parar a manos extrañas.
Pero supongamos el caso del hombre a quien Dios concediese largos años de vida y una posteridad numerosa, dos beneficios que los israelitas estimaban sobremanera *, Si luego Dios no le concede gozar de esos bienes y su alma no siente alegría y satisfacción, y al fin de su vida no halla digna sepultura lo que constituía la mayor deshonra para un judío 2 , es mejor la condición del abortivo, que no llegó a ver la luz del sol, y, por lo mismo, no ha sufrido los trabajos y privaciones, las inquietudes y desilusión del que, habiendo conseguido reunir inmensas riquezas, no puede disfrutar de ellas. Semejantes pensamientos profirieron Job y Jeremías en la dura prueba y tormentos a que fueron sometidos 3. Las riquezas, en consecuencia, no pueden dar al hombre ni siquiera esa felicidad relativa, única que pueden proporcionar las cosas de la tierra, si Dios no concede juntamente con ellas la facultad de disfrutarlas.

Codicia insaciable y afanes inútiles (6:7-12).
7 Todo el trabajo del hombre es para su boca, y nunca se harta su alma. 8 ¿Cuál es la ventaja del sabio sobre el necio? ¿Cuál la del pobre que sabe ir su camino? 9 Mejor es tener que perderse en deseos, y también esto es vanidad y persecución del viento. 10 El que es, ya tiene nombre, y ya se sabe que es un hombre y que no puede contender con quien es más fuerte que él. 11 Cierto, muchas palabras aumentan la vanidad; pero ¿qué provecho hay en eso para el hombre 12 y quién sabe lo que es mejor para él en los días de la vida de su vanidad, que pasa como sombra? ¿Quién dará a saber al hombre lo que después de él sucederá debajo del sol?

La sentencia del v.7, según la cual todo el trabajo del hombre es para su boca, no tiene relación inmediata con lo que precede, ni tampoco con lo que sigue; pero la tiene con el contexto del capítulo. Significa que todo el trabajo que el hombre pone se ordena, de una u otra manera, fundamentalmente a procurarse el alimento y satisfacer sus necesidades materiales. Pero el avaro no se ve satisfecho con lo necesario, y siente constantemente un deseo de acumular más y más, que nunca se ve saciado, de modo que, por mucho que trabaje y se fatigue, nunca llegará a sentirse feliz.
Se pregunta Cohelet en el v.8, que los autores relacionan con los v.1-6, qué ventaja pueda tener el sabio el pobre de la segunda frase viene a ser sinónimo suyo 4 , que sabe obtener provecho de la vida mediante su trabajo, sobre el necio, que renuncia al esfuerzo que éste supone. El tono de la pregunta deja entrever una respuesta negativa en la mente de Cohelet. Y la razón de la misma la coloca, sin duda, en el hecho de que ninguno de los dos encuentra en las cosas de esta vida la satisfacción plena de sus ansias de felicidad y a los dos espera una misma suerte al final.
La primera parte del V.9 reproduce la doctrina, ya varias veces expuesta por Cohelet, de que es mejor gozar moderada y honestamente de los bienes de la presente vida que andar constantemente a la caza de mayores riquezas sin gozar jamás de ellas 5. La segunda, si no es una glosa de un copista que colocó fuera de lugar el constante estribillo de la obra, habría que referirlo, no a toda la sentencia precedente, en cuyo caso Cohelet desaprobaría la tesis de su libro, sino al perderse en deseos, con lo que el autor insistiría en la vanidad de los esfuerzos del sabio, que pondrán también de manifiesto los versos siguientes.
El ya tiene nombre del v.10 equivale a existía. El mas fuerte que el hombre se refiere sin duda a Dios. El sentido de la frase es que el hombre lo que fue ayer, es y será siempre, un hombre y nada más que un hombre, el cual nada puede contra el gobierno de Dios, cuyos planes no puede cambiar en orden a conseguir sus deseos, de modo que tenemos en este verso las ideas habituales del autor sobre la impotencia del hombre para prever y modificar el curso de los acontecimientos 6. Las muchas palabras a que alude el í. 11 son, según los comentaristas, las investigaciones y discusiones en torno a los ocultos juicios de Dios y las disposiciones de su providencia. Afirmó antes que el hombre no puede contender contra el más fuerte; añade ahora que el resultado físico de estas inquisiciones excesivas son la fatiga con sus consecuencias, el fastidio, el desaliento, la desesperación; el resultado moral es siempre idéntico: la vanidad (Âusy) 7. Además que, no obstante todos sus esfuerzos, no logra descubrir qué es lo mejor a realizar en cada momento, en orden a asegurar el éxito de sus planes, ya que éste depende de una serie de circunstancias y acontecimientos futuros cuyo desarrollo él ignora. Mientras que las cosas se suceden en un movimiento uniforme y continuo, la vida del hombre sobre la tierra pasa fugaz, como una sombra8, de modo que no puede él abarcarlas en su conjunto para poder conocer las leyes que las regulan, y así descubrir el porvenir. La expresión con que termina la perícopa, debajo del sol, indica a las claras que Cohelet no piensa en la retribución del más allá, sino en lo que ocurrirá en la tierra, en el decurso del tiempo, después de su muerte.

1 Gen_24:60; Sal_127:3-5; 2Re_10:1; 2Cr_11:21. 2 Isa_14:19-20; Jer_16:4-5; 1Ma_7:17; 2Ma_5:10; 2Ma_13:7. 3 Job 3:1-26; Jer_15:10; Jer_20:7-18. 4 Mat_5:3. Frecuentemente el rico es inicuo e injusto, tanto que San Jerónimo dice om-nis dives aut iniquus, aut iniqui haeres. El pobre, que no tiene en el mundo dónde poner su corazón, más fácilmente lo levanta a Dios y pone en él su confianza; éste es sabio y justo. 5 2:12.17; 3:22; 5:17-19. 6 3:11.14; 7.245s. 7 CXc.j-p.240. 8 1Cr_25:15; Job_8:9; Sal_102:11; Sal_144:4.

La Biblia de Nuestro Pueblo (Liturgical Press, 2006),

Riquezas. Parece que riquezas y felicidad han intentado ir siempre de la mano. Qohelet centra su atención en este tema y va desgranando sus ventajas e inconvenientes. El discurso no resulta difícil de comprender, y no es extraño estar de acuerdo con sus afirmaciones. La misma sabiduría tradicional muestra expresiones y sentimientos semejantes: la fortuna no satisface a su dueño (Pro_19:4.6); el rico sufre insomnio (Sir_31:1a) y no puede disfrutar de sus bienes (Sir_30:19); existe un paralelismo entre pobre-sabio y rico-necio (Pro_11:28a; Pro_14:21b; Pro_17:5), etc. Pero el Eclesiastés, como ya decíamos al principio, sostiene su particular enfrentamiento con esta sabiduría presentando como aval su propia experiencia.
5,9 es una sátira, no del rico malvado, sino del dinero bien o mal adquirido y bien o mal empleado. 5,12-16 coincide con Job -obra que hemos de situar también entre aquellas que critican la tradición sapiencial clásica del Antiguo Testamento- en el «destino trágico del ser humano»: se va como el vino, pues nada se llevará del trabajo de sus manos (Job_1:21). Paralelo al versículo 16 es Job_14:1; Job_6:4s también coincide con Job cuando afirma que el aborto es mejor que el viviente (Job_3:13).
La inutilidad del esfuerzo humano corre paralela a la insatisfacción de las riquezas (Job_6:7-9; cfr. 5,9-11). De nuevo expresa su convicción de que no hay que dejarse llevar por el deseo de conocer lo incomprensible -expresado con un proverbio popular en 6,9-2Cr_6:12 es otro enfrentamiento directo con los proverbios tradicionales, paralelo a Ose_13:3; Job_7:9; Sal_39:7.
La conclusión se encuentra en 5,17-19; no es una renuncia a la posibilidad de ser feliz, sino una llamada al realismo: comer, beber y disfrutar (2,24s; 3,12s).
Una vez más debemos situarnos ante la realidad de la conexión entre riqueza y felicidad desde el punto de vista que lo hace el Eclesiastés, es decir, no en sentido moral, sino simplemente como quien observa y experimenta. De aquí parte su reflexión, y desde lo que le ha enseñado la sabiduría tradicional. Está convencido de que la felicidad no consiste en acumular bienes (cfr. Mat_6:19-21.24.25-34), sino en el don de Dios que consiste en disfrutar de las actividades cotidianas.

King James Version (KJVO) (1611)



Chapter VI.

[How riches are miserable.]

1 The vanitie of riches without vse. 3 Of children, 6 and old age without riches. 9 The vanitie of sight and wandring desires. 11 The conclusion of vanities.
1 There is an euill which I haue seen vnder the Sun, and it is common among men:
2 A man to whom God hath giuen riches, wealth and honour, so that he wanteth nothing for his soule of all that he desireth, yet God giueth him not power to eate thereof, but a stranger eateth it: This is vanitie, and it is an euill disease.
3 If a man beget an hundred children, and liue many yeeres, so that the dayes of his yeeres bee many: and his soule be not filled with good, and also that he haue no buriall, I say, that an vntimely birth is better then he.
4 For he commeth in with vanitie, and departeth in darkenesse, and his name shall be couered with darkenesse.
5 Moreouer hee hath not seene the Sunne, nor knowen any thing: this hath more rest then the other.
6 Yea though he liue a thousand yeeres twice told, yet hath he seene no good: Doe not all goe to one place?
7 All the labour of man is for his mouth, and yet the [ Hebrew: soule.] appetite is not filled.
8 For what hath the wise more then the foole? what hath the poore, that knoweth to walke before the liuing?
9 Better is the sight of the eyes, [ Hebrew: then the walking of the soule.] then the wandering of the desire: this is also vanitie and vexation of spirit.
10 That which hath bene, is named already, and it is knowen that it is man: neither may he contend with him that is mightier then he.
11 Seeing there be many things that increase vanitie, what is man the better?
12 For who knoweth what is good for man in this life, [ Hebrew: the number of the dayes of the life of his vanitie.] all the dayes of his vaine life, which he spendeth as [ Psa_144:4 .] a shadow? for who can tell a man what shal be after him vnder the sunne?

Libro del Pueblo de Dios (San Pablo, 1990)



3. "Y ni siquiera le dan sepultura": verse privado de una honrosa sepultura era la peor de las desgracias para un israelita ( Isa_14:18-20; Jer_8:2; Jer_16:4; 2Ma_5:10; 2Ma_13:7).

6. "Al mismo sitio", es decir, al "Abismo" o morada de los muertos. Ver nota Sal_6:6.

10. "Lo que existe ya ha sido llamado por su nombre", es decir, ha sido establecido por Dios, y su destino ya esta fijado. A diferencia de Job (13. 21-22) y de Jeremías (12. 1-5), el Eclesiastés no se atreve a discutir con Dios, a quien reconoce de antemano como "más fuerte que él".



Nuevo Comentario Bíblico Siglo XXI (Editorial Mundo Hispano, 2019)



Un atolladero. Nombre habla de carácter. El mundo (El que existe), hombre y Dios (uno que es más fuerte que él) tienen todos caracteres fijos. El problema que se presenta en 1:2, 3 no desaparecerá. 12 Lo que se necesita es algo que será adecuado para cada día (los contados días ... él pasa) pero que durarán toda la vida (el hombre durante ... su vana vida), algo que puede hacer frente al enigma de la vida (vana vida) y que da experiencia y valores que valen la pena (lo que es mejor). Las dos preguntas implican que por lo general las personas no descubren tal remedio, y otros no pueden fácilmente ayudar. Pocos tienen una respuesta ahora; no existe una certeza práctica para el futuro. La sección ha llegado a un atolladero. Solamente 5:18-20 ha dado alguna ayuda.

Dios Habla Hoy (Sociedades Bíblicas Unidas, 1996)



Dios Habla Hoy 1996 Notes:



[1] 6.2 No les permite gozar de todo ello: ya sea a causa de enfermedad o de muerte prematura. Cf. Eclo 30.14-20; Lc 12.20.

[2] 6.3 Cien hijos: En el antiguo Israel se consideraba que los muchos hijos eran una de las mejores bendiciones divinas. Cf. Dt 28.11; Job 1.2; Sal 127.3-5; 128.3,6; Pr 17.6; 31.28.

[3] 6.5 Ver el sol: es decir, gozar de la vida en este mundo, donde la luz es agradable (Ec 11.7), en oposición al sheol o Reino de los muertos (véase Sal 6.6 n.), donde los días de oscuridad serán numerosos (Ec 11.8).

[4] 6.6 ¡Todos van al mismo lugar!: Cf. Ec 2.15-16; 3.19-20; 9.5-6.

[5] 6.9 Este v. parece sugerir que lo más conveniente es aprovechar las oportunidades que están al alcance de la mano, sin dejarse arrastrar por deseos ilusorios o inalcanzables.

Biblia Textual IV (Sociedad Bíblica Iberoamericana, 1999)

¿qué provecho?... Es decir, de tanto hablar.

Jünemann (1992)


11 j. Planes de los avaros acerca del porvenir de sus riquezas.