Ver contexto

Preliminares
Sueño de Mardoqueo.
(1a) El año segundo del reinado del rey Asuero el Grande, el día uno del mes de Nisán, tuvo un sueño Mardoqueo, hijo de Yaír, hijo de Semeí, hijo de Quis, de la tribu de Benjamín, (1b) judío, que habitaba en la ciudad de Susa, varón ilustre, adscrito al servicio del palacio real. (1c) Era uno de los deportados que Nabucodonosor, rey de Babilonia, había llevado cautivos de Jerusalén con Jeconías, rey de Judá. (1d) El sueño fue así: Voces y estrépito, truenos y terremotos, perturbación en la tierra. (1e) Dos enormes dragones avanzaron, prestos ambos al combate; lanzaron un gran rugido, (1f) y a su voz todos los pueblos paganos se dispusieron a la guerra para luchar contra el pueblo de los justos. (1g) Día de tinieblas y oscuridad, tribulación y angustia, ruina y gran turbación sobre la tierra. (1h) Todo el pueblo de los justos, estremecido por el terror de sus desgracias, se disponía a perecer y clamaba a Dios. (1i) A su clamor, de una pequeña fuente nació un gran río de abundantes aguas. (1k) La luz y el sol surgieron y los humildes se alzaron y devoraron a los soberbios.
(1l) Despertado Mardoqueo, después de tener este sueño, puso gran empeño y se esforzó, hasta la noche, en alcanzar su sentido y saber lo que Dios quería llevar a cabo.
(1m)
Conjura contra el rey.
Vivía Mardoqueo en el palacio con Bigtán y Teres, dos eunucos del rey, guardianes del palacio. (1n) Les oyó sus proyectos, descubrió sus intenciones y se enteró de que estaban dispuestos a poner sus manos en el rey Asuero. Entonces Mardoqueo los denunció al rey, (1o) que sometió a interrogatorio a los dos eunucos; y habiendo ellos confesado la verdad, fueron llevados al suplicio. (1p) El rey hizo escribir todo esto para memoria; también Mardoqueo, por su parte, escribió sobre estos sucesos. (1q) Por aquel servicio, el rey confió a Mardoqueo un puesto en palacio y le hizo regalos. (1r) Pero Amán, hijo de Hamdatá, del país de Agag, que gozaba del favor real, buscaba la ruina de Mardoqueo y de su pueblo, por el asunto de los dos eunucos del rey.


I. Asuero y Vastí
Banquete de Asuero.
En tiempo del rey Asuero, el que reinó desde la India hasta Etiopía sobre ciento veintisiete provincias, (Ester  1, 1) © Nueva Biblia de Jerusalén (Desclee, 1998)

BHSEk - Biblia Hebraica Stuttgartensia (Enhanced; KJV versification)

וַ‎(וְ)

Hebrew|wa|and

Part-of-speech: conjunction
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[f.ab.aa] [519]
[ו] [GES1991] [BDB2226] [HAL2241]

יְהִ֖י‎(הָיָה)

Hebrew|yᵊhˌî|be

Part-of-speech: verb
Gender: masculine
Number: singular
Person: third person
State: not applicable
Verbal tense: wayyiqtol
Verbal stem: qal


[H1961] [e.bf.aa] [491]
[היה] [GES1888] [BDB2113] [HAL2109]

בִּ‎(בְּ)

Hebrew|bi|in

Part-of-speech: preposition
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[b.ab.aa] [193]
[ב] [GES855] [BDB923] [HAL939]

ימֵ֣י‎(יֹום)

Hebrew|ymˈê|day

Part-of-speech: noun
Gender: masculine
Number: plural
Person: not applicable
State: construct
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H3117] [j.ay.aa] [852]
[יום] [GES3012] [BDB3361] [HAL3338]

אֲחַשְׁוֵרֹ֑ושׁ‎(אֲחַשְׁוֵרֹושׁ)

Hebrew|ʔᵃḥašwērˈôš|Ahasuerus

Part-of-speech: proper noun
Gender: masculine
Number: singular
Person: not applicable
State: absolute
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H325] [a.cp.am]
[אחשורוש] [GES316] [BDB337] [HAL353]

ה֣וּא‎(הוּא)

Hebrew|hˈû|he

Part-of-speech: personal pronoun
Gender: masculine
Number: singular
Person: third person
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H1931] [e.aw.aa] [480]
[הוא] [GES1856] [BDB2078] [HAL2078]

אֲחַשְׁוֵרֹ֗ושׁ‎(אֲחַשְׁוֵרֹושׁ)

Hebrew|ʔᵃḥašwērˈôš|Ahasuerus

Part-of-speech: proper noun
Gender: masculine
Number: singular
Person: not applicable
State: absolute
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H325] [a.cp.am]
[אחשורוש] [GES316] [BDB337] [HAL353]

הַ‎(הַ)

Hebrew|ha|the

Part-of-speech: article
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[e.ab.aa] [459]
[ה] [GES1804] [BDB2019] [HAL2031]

מֹּלֵךְ֙‎(מָלַךְ)

Hebrew|mmōlēḵ|be king

Part-of-speech: verb
Gender: masculine
Number: singular
Person: unknown
State: absolute
Verbal tense: participle
Verbal stem: qal


[H4427] [m.cd.ae] [1199]
[מלך] [GES4347] [BDB4849] [HAL4768]

מֵ‎(מִן)

Hebrew|mē|from

Part-of-speech: preposition
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H4480] [m.cl.aa] [1212]
[מן] [GES4398] [BDB4898] [HAL4822]

הֹ֣דּוּ‎(הֹדּוּ)

Hebrew|hˈōddû|India

Part-of-speech: proper noun
Gender: unknown
Number: singular
Person: not applicable
State: absolute
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H1912] [e.ao.ad]
[הדו] [GES1835] [BDB2058] [HAL2060]

וְ‎(וְ)

Hebrew|wᵊ|and

Part-of-speech: conjunction
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[f.ab.aa] [519]
[ו] [GES1991] [BDB2226] [HAL2241]

עַד‎(עַד)

Hebrew|ʕaḏ-|unto

Part-of-speech: preposition
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H5704] [p.aq.ad] [1565c]
[עד] [GES5654] [BDB6249] [HAL6171]

כּ֔וּשׁ‎(כּוּשׁ)

Hebrew|kˈûš|Cush

Part-of-speech: proper noun
Gender: unknown
Number: singular
Person: not applicable
State: absolute
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H3568] [k.az.aa] [k.az.ab] [969]
[כוש] [GES3461] [BDB3861] [HAL3834]

שֶׁ֛בַע‎(שֶׁבַע)

Hebrew|šˈevaʕ|seven

Part-of-speech: noun
Gender: unknown
Number: singular
Person: not applicable
State: absolute
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H7651] [v.av.aa] [2318]
[שבע] [GES7611] [BDB8383] [HAL8303]

וְ‎(וְ)

Hebrew|wᵊ|and

Part-of-speech: conjunction
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[f.ab.aa] [519]
[ו] [GES1991] [BDB2226] [HAL2241]

עֶשְׂרִ֥ים‎(עֶשְׂרִים)

Hebrew|ʕeśrˌîm|twenty

Part-of-speech: noun
Gender: masculine
Number: plural
Person: not applicable
State: absolute
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H6242] [p.gb.af] [1711e]
[עשרים] [GES6157] [BDB6810] [HAL6741]

וּ‎(וְ)

Hebrew|û|and

Part-of-speech: conjunction
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[f.ab.aa] [519]
[ו] [GES1991] [BDB2226] [HAL2241]

מֵאָ֖ה‎(מֵאָה)

Hebrew|mēʔˌā|hundred

Part-of-speech: noun
Gender: feminine
Number: singular
Person: not applicable
State: absolute
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H3967] [m.ac.aa] [1135]
[מאה] [GES3908] [BDB4351] [HAL4303]

מְדִינָֽה‎(מְדִינָה)

Hebrew|mᵊḏînˈā|district

Part-of-speech: noun
Gender: feminine
Number: singular
Person: not applicable
State: absolute
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H4082] [d.bh.am] [426d]
[מדינה] [GES4015] [BDB4465] [HAL4413]

Biblia Comentada, Profesores de Salamanca (BAC, 1965)

;;

Mardoqueo en escena (1:1-3).
1 El año segundo del reinado del gran Artajerjes, el primero de Nisán, tuvo un sueño Mardoqueo, hijo de Jaír, hijo de Semeí, hijo de Quis, de la tribu de Benjamín, 2 judío que moraba en la ciudad de Susa, varón ilustre, que servía en la corte del rey. 3 Era de los cautivos que Nabucodonosor, rey de Babilonia, había llevado en cautiverio de Jerusalén con Jeconías, rey de Judá.

Estos versículos pertenecen a la parte deuterocanónica del libro (10:4-16:26). En ellos presenta el autor al verdadero héroe del libro, Mardoqueo. Se habla del año segundo del reinado de Artajerjes. San Jerónimo y Eusebio lo identifican con Artajerjes II (405-362); pero modernamente prevalece la opinión de los que consideran el nombre de Artajerjes como una traducción falsa del nombre Asuero, que corresponde a Jerjes I (486-465). De ahí que algunos exegetas, en vez de hablar de Artajerjes, emplean constantemente los nombres de Asuero (Barucq.) o de Jerjes (Vaccar1). Fue Jerjes hijo de Darío I Hystaspes, conocido principalmente por su campaña contra Egipto (485) y por su derrota por las tropas griegas en Eurimedón (470 a.C.). Más cortesano que guerrero, entregóse a una vida de molicie y de placeres, como atestiguan el libro de Ester y el historiador Heródoto. Muerto en una conspiración (465), le sucedió su hijo Artajerjes I Longímanos.
El sueño de Mardoqueo tuvo lugar el primero de Nisán (Neh_2:1; Est_3:7), en cuyo mes empezaba el año (marzo-abril). Como a José (Gen_37:5-11; Gen_37:40,8; Gen_41:1), el porvenir se manifiesta a Mardoqueo por medio de los sueños. Con esta noticia se llama la atención de los lectores sobre la intervención palpable de Dios en los hechos que narra a continuación. Todo el libro, incluso el texto hebraico, demuestra un sentimiento religioso profundo y una confianza sin límites en los destinos de la Providencia. El nombre de Mardoqueo deriva del babilónico Marduk. El simple hecho de que este judío auténtico (Gen_2:5) escogiera el nombre de Mardoqueo, no autoriza la conclusión de que en un tiempo rindiera culto al dios Marduk. Toda la historia del libro demuestra lo contrario. Entre los deportados a Babilonia había algunos que llevaban este mismo nombre (Esdr 2:2; Neh_7:7).
La genealogía de Mardoqueo se repite en 2:5. Por 1Sa_15:7-9 sabemos que Saúl, hijo de Quis y del linaje de Benjamín, triunfó sobre Agag, rey de Amalee. Esta coincidencia sugiere la sospecha de que el autor sagrado no pretende fijar la ascendencia inmediata de Mardoqueo, sino hacer ver cómo un benjaminita que encarna el alma judía se impone y triunfa de un enemigo de Israel. Este varón ilustre moraba en Susa, que antiguamente fue capital de Elam 2 y que se convirtió en residencia invernal de los reyes de Persia (Neh_1:1). Conquistada en 596 por los persas, fue fortificada y embellecida por Darío I 3.
Mardoqueo fue llevado cautivo por Nabucodonosor a Babilonia, junto con Jeconías (Jer_24:1; Jer_27:20; Jer_28:4), llamado también Joaquín (2Re_24:8.15), el año 597. Con el fin de concordar el hecho de la presencia de Mardoqueo en la corte de Asuero o Herejes (hacia los años 484-482) y la fecha de su deportación por Nabucodonosor, algunos exegetas interpretan el texto en el sentido de que era descendiente de alguno que fue deportado en aquel tiempo. Tales anomalías textuales las hemos visto también en el comentario al libro de Judit, lo que nos invita asimismo a preguntarnos si el autor sagrado busca la máxima precisión en los datos cronológicos que refiere.

Sueño de Mardoqueo (2Re_1:4-10).
4 He aquí su sueño: 5 Soñó que oía voces y tumultos, truenos, terremotos y gran alboroto en la tierra, cuando dos grandes dragones, prestos a acometerse uno a otro, dieron fuertes rugidos, 6 y a su voz se prepararon para la guerra todas las naciones de la tierra, a fin de combatir contra la nación de los justos. 7 Fue aquel día día de tinieblas, de obscuridad, de tribulación y de angustia, de oprobio y de turbación grande sobre la tierra. 8 Toda la nación justa se turbó ante el temor de sus males, y se disponía a perecer. 9 Pero clamaron a Dios, y a su clamor, una fuentecilla se hizo un río caudaloso 10 de muchas aguas, y apareció una lumbrerita que se hizo sol, y fueron ensalzados los humildes y devoraron a los gloriosos.

Mardoqueo oye en la lejanía voces y tumultos acompañados de truenos (bronta1) y terremotos (seísmos), que presagiaban algo trágico que se avecinaba. En efecto, aparecen dos dragones en actitud de acometerse uno a otro. A un rugido suyo, todas las naciones de la tierra (paseznós) acometieron a la nación de los justos (dikaion eznós). Los primeros síntomas anunciadores de este combate recuerdan la escena del Sinaí (Exo_16:18; Exo_20:18) o la descripción que los profetas hacen del juicio (Isa_22:5; Jer_30:5). Según interpretación del mismo Mardoqueo, los dos dragones simbolizaban a él y a Aman (Jer_10:7).

Conatos para descifrar el sueño (Jer_1:11).
11 Mardoqueo, levantándose, luego de haber visto el sueño sobre lo que Dios se proponía ejecutar, lo guardó en su corazón, y a toda costa quería penetrar su sentido, hasta que llegó la noche.

Mardoqueo se levanta intrigado por la significación de su sueño (Gen_41:8) y pasa todo el día esforzándose para encontrarle una explicación. Otros videntes, en casos análogos, acudían a un intérprete (Gen_41:16; Dan_2:28), pero Mardoqueo prefirió conservar el secreto en su corazón (Luc_2:19.51), esperando a que Dios se lo revelara.

Mardoqueo denuncia una conjura (Luc_12:1-8).
1 Moraba Mardoqueo en el palacio con Gabata y Tarra, eunucos del rey, guardas del palacio, 2 y se enteró de sus planes y penetró sus proyectos, averiguando que trataban de apoderarse del rey Artajerjes, y los denunció al rey. 3 Mandó éste interrogar a los eunucos, que, habiendo confesado, fueron condenados a muerte. 4 Para conservar la memoria de estos sucesos, mandó el rey ponerlos por escrito, y el mismo Mardoqueo escribió un relato sobre ellos. 5 Por el servicio prestado, ordenó el rey dar a Mardoqueo un cargo en el palacio y le otorgó otras mercedes. 6 Pero Aman, hijo de Amasata, agagita, que gozaba de gran crédito ante el monarca, buscaba cómo perder a Mardoqueo y a su pueblo por la delación de los eunucos del rey.

Este relato se refiere a los mismos hechos de que se habla en 2:21-23; 6:1-3; pero el redactor griego quiso completarlos con nuevos datos, que explican el porqué llegó Mardoqueo a ocupar un puesto privilegiado en la corte a pesar de su condición de judío.

1 Libri Apocryphi V. T. graece (Leipzig 1871) p.30-72.
2 Introduction á la Bible I (París 1957) 778.
3 Véase F. X. Roiron, Les parties déuterocanoniques du live . d'Esther: Recherches de Science Religieuse, 6 (1916) 1-16.
4 Introductio in libros sacros V. T. 284.
5 E. Cosquin, Le Prologue-Cadre des Mulé et une Nuits, Les légendes et le Uvre d'Esther: RB, 16 (1909) 7-49; 161-197.
6 Heródoto, 7:61,
7 J. Straubinger, Ester y el misterio del pueblo judío (Buenos Aires 1943) 78
8 Ant. Jucí. h A13.
1 Las porciones deuterocanónicas las señalamos con un asterisco,
1* Hirt. IX Ô08-ÐÏ,
2 Heród., III 30,65:70; Jen., Cyr. VIII 6:22; Estrab., XV 3:2.
3 Mémoires de la Mission Archéoiogique en Irán (París 1900-1943).


El Gran Banquete Real y Sus Incidencias (c.1:1-22).

Poderío del rey Asuero (1:1-3).

1 En tiempo de Asuero, el Asuero que reinó desde la India hasta la Etiopía, sobre ciento veintisiete provincias, 2 mientras se sentaba sobre su trono real en Susa, la capital, 3 el año tercero de su reinado dio un festín a todos sus príncipes y servidores,

El imperio de Asuero se dividía en 127 provincias (medinoth), de que se habla en 8:9 y en Esdr 3:2. En Dan_6:2 se dice que resolvió Darío constituir en su reino 120 sátrapas (ahaschdarpenaia) que gobernasen el reino. El autor del libro de Ester (Dan_3:2) distingue entre sátrapas, jefes de provincias y gobernadores. Según Heródoto (III 89), Darío dividió el imperio en veinte satrapías. La quinta (Neh_5:14) comprendía, según el cómputo de Heródoto (III 89-91), el territorio de Mesopotamia septentrional, Siria, Fenicia y Palestina. Algunos intérpretes dan un valor simbólico al número 127. Doce eran las tribus de Israel. Ahora bien, multiplicando este número por diez, número de plenitud, y añadiendo siete, el número de perfección, se obtiene la cantidad mencionada, con lo cual se quería significar que todas las naciones estaban sujetas a Asuero.
En el tercer año de su reinado (483 a.C.), una vez consolidado su trono, pensó Asuero en celebrar un gran festín en Susa, la capital. Hállase esta ciudad al pie del actual Luristán. El antiguo río Coaspes, el actual Kerka, dividía la ciudad propiamente dicha de la ciudadela (habbirah). El palacio real se levantaba en la parte de la ciudad conocida por la Apadana. El autor coloca la parte principal de los acontecimientos en el palacio real, que distingue de la ciudadela (Neh_3:15; Neh_8:14; Neh_9:11).

Los invitados al festín real (Neh_1:3-9).
3 Los comandantes del ejército de los persas y de los medos, los grandes y los jefes de las provincias, se reunieron en su presencia, 4 y él hizo muestras de la espléndida riqueza de su reino y de la brillante magnificencia de su grandeza durante muchos días, 5 durante ciento ochenta días. Pasados éstos, el rey dio a todo el pueblo de Susa, la capital, desde el más grande hasta el más pequeño, un festín, que duró siete días, en los jardines del palacio real. 6 Cortinajes blancos, verdes y azules pendían de columnas de mármol, sujetos con cordones de lino y de púrpura a anillos de plata. Lechos de oro y de plata estaban sobre un pavimento de pórfido, alabastro, mármoles de varios colores y nácar. 7 Servíase el vino en vasos de oro de diversas configuraciones, y se servía con real abundancia, gracias a la generosidad del rey; pero a nadie se le obligaba a beber, 8 pues había mandado el rey a todas las gentes de su casa que se hiciese conforme a la voluntad de cada cual. 9 También la reina Vasti dio un festín a las mujeres en el palacio real del rey Asuero.

Quiso Asuero que todas las clases sociales de sus dominios tomaran parte en los festejos organizados con motivo de su consolidación en el trono persiano después de la victoria sobre Egipto. Invitó al festín a los grandes (v.1-4), al pueblo (v.5-8) y a las mujeres (v.9), que lo celebraron aparte, presidiéndolo la reina.

Banquete para los oficiales.
Entre los invitados al festín (mishte) se citan los altos empleados (sarim) del reino y los funcionarios de rango inferior. Asistió el estado mayor que había apoyado al rey en las luchas que tuvo que sostener contra Egipto y Babilonia. Del ejército fue invitada la oficialidad de las tropas escogidas y la de la guardia personal del rey. También los nobles (partemim, 6:9; Dan_1:3) y los jefes de las provincias (sarey hamedinoth) acudieron al llamamiento.

Banquete popular.
Los habitantes de la ciudadela tomaron parte en este banquete de siete días de duración, en un recinto contiguo al palacio real. Recostados sobre divanes (Amo_6:4), con incrustaciones de oro y plata, comía el pueblo de los manjares reales y alegrábase con sendos vasos de vino. Entraba en el protocolo de los persas la costumbre de que los invitados debían vaciar un determinado número de copas; pero esta vez, con el fin de evitar abusos l, había dado el rey un decreto por el cual cada uno era libre de ingerir la cantidad de vino que le pluguiera. Esta descripción de la munificencia de la corte persa concuerda con los datos retransmitidos por Heródoto (IX 80-82) y Jenofonte 2.

El convite de la reina.
No prohibían las leyes persas la presencia de mujeres en los banquetes públicos 3; muchas veces los invitados acudían a los mismos acompañados de sus esposas o concubinas. Por el libro aparece natural que la reina convocara en un salón aparte a las mujeres de los grandes del reino. El texto hebraico dice que organizó el banquete la reina Vasti (v.5:1 1:16-17). En cambio, Heródoto (7:61; 9:108-113) no menciona otra reina y esposa de Jerjes que Amestris, hija de O tañes.

Propuesta del rey y negativa de Vasti (1:10-12).
10 El día séptimo, alegre por el vino el corazón del rey, mandó éste a Mahuman, Bizta, Harbona, Bigta, Abagta, Zetar y Carcas, los siete eunucos que servían ante el rey Asuero, 11 que trajeran a su presencia a la reina Vasti, con su real corona, para mostrar a los pueblos y a los grandes su belleza, pues era de hermosa figura; 12 pero la reina se negó a venir con los eunucos, y el rey se irritó mucho y se encendió en cólera.

El día del banquete ocurriósele a Asuero exhibir a Vasti delante del pueblo y de los grandes. Esta noticia parece indicar que los tres banquetes se celebraban simultáneamente en lugares distintos, ya que el rey quiere mostrar a los representantes del pueblo y a los nobles la belleza de la reina, acto con el cual se pondría término al suntuoso festín. ¿Por qué Asuero determinóse a exhibir a Vasti? El texto griego supone que el rey en esta ocasión quería coronarla; lo más probable es que, siguiendo una costumbre persa (5:18), quisiera presentar a los comensales, a petición de éstos, a la reina, que gozaba de gran reputación por su belleza. Puede ser que en la frase mostrar la belleza haya un eufemismo (Eze_16:25)4. Según Plutarco5, al finalizar el banquete retirábanse las esposas y entraban las concubinas y danzarinas. A consecuencia de la negativa de Vasti, el rey se irritó mucho y se encendió en cólera (Jdt_1:12; Dan_3:13; Dan_6:15), porque, además de una desobediencia a sus órdenes, su negativa le ridiculizaba ante los comensales, los cuales podían llevarse la impresión de que las mujeres eran las que mandaban en palacio.

A suero se aconseja (Dan_1:13-15).
13 Y preguntó el rey a los sabios conocedores de las leyes, pues era costumbre que los negocios del rey se trataran con los sabios, legistas y juristas. 14 E hizo entrar a Carsena, Setar, Admata, Tarsis, Meres, Marsena y Memucan, siete príncipes persas y rnedos que asistían al rey y ocupaban el primer rango en su reino, 15 a los cuales dijo: ¿Qué debe hacerse, según la ley, a la reina Vasti por no haber hecho lo que el rey le había intimado por medio de los eunucos?

Asuero no consultó a los astrólogos propiamente dichos, sino a los que saben dar un consejo en el tiempo oportuno, por razón de que la experiencia diaria les ha familiarizado con la ley de la justicia (1Cr_12:33). En Esdras se alude a los siete consejeros del rey persa (1Cr_7:14). Su posición en el reino era preeminente; formaban parte de su séquito, veían la faz del rey (2Re_25:19) y tenían precedencia. Según Heródoto, se les permitía entrada franca al rey, excepto el caso en que éste se hallara en compañía de sus mujeres. El número siete se usa con profusión (2Re_1:10).

Consejo de los sabios (2Re_1:16-20).
16 Memucan respondió ante el rey y los príncipes: No es sólo al rey a quien ha ofendido la reina Vasti; es también a todos los príncipes y a todos los pueblos de todas las provincias del rey Asuero. 17 Porque lo hecho por la reina llegará a conocimiento de todas las mujeres y será causa de que menosprecien a sus maridos, pues dirán: El rey Asuero mandó que llevasen a su presencia a la reina Vasti, y ella no fue; 18 y desde hoy las princesas de Persia y de Media que sepan lo que ha hecho la reina se lo dirán a todos los príncipes del rey, y de aquí vendrán muchos desprecios y mucha cólera. 19 Si al rey le parece bien, haga publicar e inscribir entre las leyes de los persas y de los medos, con prohibición de traspasarlo, un real decreto mandando que la reina Vasti no parezca más delante del rey Asuero, y dé el rey la dignidad de reina a otra que sea mejor que ella. 20 El edicto del rey será conocido en todo su reino, por grande que es, y todas las mujeres honrarán a sus maridos, desde el más grande hasta el más pequeño.

En nombre de los siete sabios habló Memucan, presentando la cuestión de Vasti como de interés nacional. Teme un avance del feminismo en caso de quedar impune la conducta de Vasti. Por ser del dominio público la desobediencia, recomienda Memucan que el castigo tenga amplia difusión. A este fin sugiere al rey que publique un decreto irrevocable (Dan_6:8-10) prohibiendo a Vasti presentarse en adelante delante del rey Asuero, despojándola de la dignidad de reina.

Orden real (Dan_1:21-22).
21 Agradó al rey y a los príncipes este discurso, y mandó el rey que se siguiera el parecer de Memucan. 22 Y mandó cartas a todas las provincias del reino, a cada uno según su escritura y a cada pueblo según su lengua, ordenando que todo hombre había de ser amo en su casa y que todas sus mujeres le estuvieran sujetas.

El consejo de Memucan fue aprobado en toda su línea: Vasti fue repudiada y sustituida por otra.


King James Version (KJVO) (1611)



Chapter I.

[The Kings, and Queenes feasts.]

1 Ahasuerus maketh royall feasts. 10 Vasthi, sent for, refuseth to come. 13 Ahasuerus, by the counsell of Memucan, maketh the decree of mens soueraigntie.
1 Now it came to passe in the dayes of Ahasuerus, (this is Ahasuerus which reigned from India, euen vnto Ethiopia, ouer an hundred, and seuen and twentie prouinces.)
2 That in those dayes, when the King Ahasuerus sate on the throne of his kingdome, which was in Shushan the palace:
3 In the third yeere of his reigne, he made a feast vnto all his Princes, and his seruants, the power of Persia and Media, the Nobles and Princes of the prouinces being before him.
4 When he shewed the riches of his glorious kingdome, and the honour of his excellent maiestie, many dayes, euen an hundred and fourescore dayes.
5 And when these dayes were expired, the king made a feast vnto all the people that were [ Hebrew: found.] present in Shushan the palace, both vnto great and small, seuen dayes, in the court of the garden of the kings palace,
6 Where were white, greene and [ Or, violet.] blew hangings, fastened with cords of fine linnen, and purple, to siluer rings, and pillers of marble: the beds were of gold and siluer, vpon a pauement of [ Or, of porphyre, and marble, and alabaster, and stone of blew colour.] red, and blewe, and white, and blacke marble.
7 And they gaue them drinke in vessels of gold, (the vessels being diuers one from another) and [ Hebrew: wine of the kingdome.] royall wine in

[The Kings, and Queenes feasts.]

abundance, according to the [ Hebrew: according to the hand of the king.] state of the king.
8 And the drinking was according to the law, none did compell: for the king had appointed to all the officers of his house, that they should doe according to euery mans pleasure.
9 Also Uasthi the Queene made a feast for the women, in the royall house which belonged to king Ahasuerus.
10 On the seuenth day, when the heart of the King was merry with wine, he commanded Mehuman, Biztha, Harbona, Bigtha, and Abagtha, Zethar, and Carcas, the seuen [ Or, Eunuches.] chamberlens that serued in the presence of Ahasuerus the king,
11 To bring Uasthi the Queene before the king, with the Crowne royall, to shew the people, and the Princes her beautie: for she was [ Hebrew: good of countenance.] faire to looke on.
12 But the Queene Uasthi refused to come at the Kings commandement [ Hebrew: which was by the hand of his Eunuches .] by his chamberlens: therefore was the King very wroth, and his anger burned in him.
13 Then the king saide to the wise men, which knew the times (for so was the Kings maner towards all that knew law, and iudgement:
14 And the next vnto him, was Carshena, Shethar, Admatha, Tarshis, Meres, Marsena, and Memucan, the seuen [ Ezra.7.14.] Princes of Persia, and Media, which saw the Kings face, and which sate the first in the kingdome.)
15 [ Hebrew: what to doe?] What shall wee doe vnto the Queene Uasthi, according to law, because she hath not performed the commandement of the king Ahasuerus, by the chamberlens?
16 And Memucan answered before the king and the Princes; Uasthi the Queene hath not done wrong to the king onely, but also to all the Princes, and to all the people that are in all the

[Vasthi put away.]

prouinces of the king Ahasuerus.
17 For this deed of the queene shall come abroad vnto all women, so that they shal despise their husbands in their eyes, when it shall bee reported; The king Ahasuerus commanded Uasthi the queene to be brought in before him, but she came not.
18 Likewise shall the Ladies of Persia and Media say this day vnto all the kings princes, which haue heard of the deed of the Queene. Thus shall there arise too much contempt and wrath.
19 [ Hebrew: if it be good with the king.] If it please the king, let there go a royall commandement [ Hebrew: from before him.] from him, and let it bee written among the lawes of the Persians, and the Medes, [ Hebrew: that it passe not away.] that it be not altered, that Uasthi come no more before king Ahasuerus, and let the king giue her royall estate [ Hebrew: vnto her companion.] vnto another that is better then she.
20 And when the kings decree, which he shal make, shalbe published throughout all his empire, (for it is great:) all the wiues shall giue to their husbands honour, both to great and small.
21 And the saying [ Hebrew: was good in the eyes of the king.] pleased the king and the princes, and the king did according to the word of Memucan:
22 For he sent letters into all the kings prouinces, into euery prouince, according to the writing thereof, and to euery people after their language, that euery man should beare rule in his owne house, and [ Hebrew: that one should publish it according to the language of his people .] that it should be published according to the language of euerie people.

Nuevo Comentario Bíblico Siglo XXI (Editorial Mundo Hispano, 2019)



el Rey Jerjes Destrona a la Reina

1-3 El narrador primero introduce al rey Jerjes, su imperio y su capital. Khshayarsha, su difícil nombre persa, fue transcrito Ahasuerus en heb. (Asuero [RVA]; ver nota de la RVA del gr. Jerjes, mejor co nocido en la historia secular). Su imperio, que se extendía del río Indo en Paquistán al Alto Nilo en el norte del Sudán, estaba constituido por unas 127 provincias impresionantes. Susa, la antigua capital de Elam, había sido reconstruida por Darío, padre de Jerjes, como una de sus ciudades capitales. La ciudadela era el centro de la acrópolis, el punto alto de la ciudad, y fortificada para proteger al rey. El tercer año de su reinado (483 a. de. J.C.) marcó el final de la oposición al nuevo reino, y fue el momento apropiado para consolidar el imperio y juntar a sus personajes principales en la capital.

4-8
El rey exhibió sus tesoros reales por seis meses. Aunque su inmensa riqueza se debía a las conquistas, los impuestos y tributos, no hubo quien cuestionara la justicia de la codicia del rey. Ya que la riqueza se traduce en poderío militar, causaba admiración, pero el autor de Est. implícitamente pronunció jui cio sobre el autoengrandecimiento del rey describiendo sus extravagancias con lujo de detalles. El banquete fue la culminación de las festividades, y tenía la intención de impresionar a todos los líderes encargados de los asuntos civiles y militares, cuya lealtad era esencial para el bien del imperio. La opulenta hospitalidad del rey se extendía a todo el pueblo, su séquito, oficiales y dignatarios que le vi sitaban. El pabellón en los colores reales de blanco y púrpura, junto con el oro y plata sobre el trasfondo de columnas de mármol y pisos de mosaico, muestran un opulento y fabuloso escenario. Algunos de los vasos de oro de ese período todavía sobreviven, y se consideran obras de arte, individualmente diseñados. Se da énfasis a la abundancia de vino y a la libertad dada a los invitados para beber cuanto quisieran.

9-12 No se da una explicación de por qué las mujeres festejaban por separado, ni se da una razón de por qué la reina Vasti no quiso obedecer la orden del rey. Cualquier excusa hubiera sido considerada fuera de lugar, ya que ella no tenía derechos. Se les permitió a los siete eunucos, cuyos nombres apoyan un origen persa, el acceso al harén real (ver Hech. 8:27). El rechazo desafiante de la reina de comparecer en la fiesta del rey lo puso en ridículo, por eso su ira.

13-20 Algo tenía que hacerse, y los siete consejeros tenían la responsabilidad de concebir un castigo. (Nótese la importancia del número siete; 10, 14, ver Esd. 7:14.) Memucán habló por los siete príncipes en respuesta a la pregunta del rey. Fue astuto en generalizar el problema, dando a entender que ya que la reina Vasti había tenido influencia sobre las otras mujeres de la nobleza, cada hombre presente arriesgaba perder el control sobre su esposa. Los llamó a la solidaridad y aconsejó al rey que dictara un decreto para hacer desaparecer a Vasti (su título se omite de aquí en adelante). El decreto publicado restablecería la autoridad del rey y aseguraría que todo esposo disfrutaría del respeto debido de su esposa. Mientras tanto, alguien mejor que Vasti sería nombrada en su lugar. Cómo pudo la nueva reina salirse con la suya ante el rey es un tema que será explorado en el resto del relato.

21, 22 En vista de que hubo un acuerdo unánime de que Memucán había dado un buen consejo, el decreto fue formulado inmediatamente y traducido a los muchos idiomas representados por los presentes en la fiesta. Hay ironía entre el Jerjes que reinaba sobre 127 provincias (1), y la trivialidad de su proclamación de que todo hombre debía gobernar sobre su propia casa. A pesar del gran alarde de riqueza y poder, el rey Jerjes tenía limitaciones explícitas en su propia casa. También se nota la ironía en la referencia a las leyes de Persia y Media, que no podían ser revocadas y, sin embargo, podían ser dictadas por capricho por un monarca embriagado por el vino.

Nueva Biblia de Jerusalén (Desclée, 1998)


REFERENCIAS CRUZADAS

[1] 2Re_24:8; 2Re_24:15

[2] Est_8:16; Sof_2:3+

[3] Est_2:21 s; Est_6:2 s

[4] Est_6:1; Est_10:2

[5] Est_6:3

[6] Est_3:1 s

[7] Est_3:5-6

NOTAS

1 En cursiva, los pasajes que la versión griega añade al texto hebreo, adiciones que la Iglesia reconoce como inspiradas. San Jerónimo las relegó al apéndice en su versión latina, Est 10:4s. Nosotros volvemos a colocarlas conforme a la disposición del texto griego, con la numeración de la edición de los LXX de Rahlfs. Damos en el margen la numeración de estos pasajes en la Vulg.

1:1a (a) Asuero, trascripción latina y castellana de la forma hebrea del nombre persa Ksajarsa, en griego Jerjes, ver Esd_4:6. Por confusión con el nombre de sus sucesores, el griego dice Artajerjes.

1:1a (b) El texto griego, único que refiere este sueño, adelanta la trama del relato en forma enigmática y apocalíptica (la clave se dará en Est_10:3 a-k) y subraya así la intervención divina.

1:1b Ciudad situada al este de Babilonia, antigua capital de Elam y residencia de invierno de los reyes persas.

1:1c La cronología es muy libre: la genealogía de Mardoqueo no retiene más que algunos nombres para llenar cinco o seis siglos. A él mismo se le presenta como cortesano de Asuero (hacia el 480) y como deportado contemporáneo de Jeconías (hacia el 598).

1:1m Unificamos los nombres propios que tienen formas diversas según los textos.

Nueva Biblia de Jerusalén (1998) - referencias, notas e introducciones a los libros


REFERENCIAS CRUZADAS

[1] 2Re_24:8; 2Re_24:15

[2] Est_8:16; Sof_2:3+

[3] Est_2:21 s; Est_6:2 s

[4] Est_6:1; Est_10:2

[5] Est_6:3

[6] Est_3:1 s

[7] Est_3:5-6

NOTAS

1 En cursiva, los pasajes que la versión griega añade al texto hebreo, adiciones que la Iglesia reconoce como inspiradas. San Jerónimo las relegó al apéndice en su versión latina, Est 10:4s. Nosotros volvemos a colocarlas conforme a la disposición del texto griego, con la numeración de la edición de los LXX de Rahlfs. Damos en el margen la numeración de estos pasajes en la Vulg.

1:1a (a) Asuero, trascripción latina y castellana de la forma hebrea del nombre persa Ksajarsa, en griego Jerjes, ver Esd_4:6. Por confusión con el nombre de sus sucesores, el griego dice Artajerjes.

1:1a (b) El texto griego, único que refiere este sueño, adelanta la trama del relato en forma enigmática y apocalíptica (la clave se dará en Est_10:3 a-k) y subraya así la intervención divina.

1:1b Ciudad situada al este de Babilonia, antigua capital de Elam y residencia de invierno de los reyes persas.

1:1c La cronología es muy libre: la genealogía de Mardoqueo no retiene más que algunos nombres para llenar cinco o seis siglos. A él mismo se le presenta como cortesano de Asuero (hacia el 480) y como deportado contemporáneo de Jeconías (hacia el 598).

1:1m Unificamos los nombres propios que tienen formas diversas según los textos.

La Biblia de Nuestro Pueblo (Liturgical Press, 2006),

11:1-11 Sueño de Mardoqueo. El relato hebreo original, como quedó dicho en la Introducción, fue completado posteriormente con textos en griego, probablemente para introducirle un poco el ingrediente religioso que no es muy explícito en el original hebreo. Es un hecho que en el texto hebreo no se menciona a Dios por ninguna parte, aunque es fácilmente deducible que los acontecimientos y el desenlace de la trama sólo puede ser obra del Dios de los judíos. Quizás los lectores de la época en que el libro fue traducido al griego sintieron algún escrúpulo por la falta de esta explicitación religiosa, y ello motivaría las ampliaciones que fueron introducidas.
Esta primera sección corresponde, pues, a una de las varias adiciones en griego. Se anticipan aquí algunos elementos que van a jugar un papel importante a lo largo de la obra: el nombre de Mardoqueo y su procedencia; el sueño de Mardoqueo, que vendrá resuelto e interpretado al final de la obra a la luz de los hechos (10,5-11). Queda también planteado el esquema de la trama que corresponde a los modelos tradicionales de la narrativa judía: surge un grave peligro para el pueblo; el pueblo, en cabeza de su guía o de sus guías, se dirige a Dios; Dios responde librándolo del peligro y dándole la victoria.

1:1-22 El banquete del rey Asuero. Se inicia esta primera sección del libro en un ambiente de palacio, de fasto y de derroche de opulencia. En realidad no se trata de un solo banquete, se trata de tres: el que ofrece el rey a los nobles, cortesanos y generales (2-4), el que ofrece para el pueblo (5), y el tercero que es ofrecido por la reina para las mujeres de palacio (9). En los tres casos, según nos señala el narrador, el motivo de los banquetes es hacer alarde del poder, de la riqueza y del esplendor del reino. El marco del banquete es propicio para que el rey sienta deseos de compartirlo con su esposa oficial, la reina Vasti (11) quien se niega rotundamente a tal requerimiento (12); esto provoca la ira del rey y el consiguiente derrocamiento de la reina por tratarse de un acto de rebeldía.
Una lectura femenina de este incidente no dudará en respaldar la actitud de Vasti como figura de todas las mujeres que a lo largo de la historia hasta nuestros días han tenido que soportar, y siguen soportando, el dominio patriarcal que sólo ve en ellas un objeto sexual, comercial y mercantilista. Vasti desaparece de escena. Ni siquiera supimos los términos con los cuales se negó comparecer ante el rey; sin embargo, queda el testimonio de alguien de sexo femenino que fue capaz de desobedecer una orden del gran señor y dueño de todo el territorio que va «desde la India hasta Nubia», y no sólo del territorio, también de sus habitantes.

Biblia Hispano Americana (Sociedad Bíblica Española, 2014)

— Asuero: Este nombre se aplica en los textos hebreos (ver también Esd 4:6) al rey persa conocido como Jerjes I (486-465 a. C.). La versión de los LXX lo traduce por Artajerjes. El imperio persa fue uno de los grandes imperios de la antigüedad y se extendía desde la India hasta Etiopía. Ver ÍNDICE DE MAPAS.

Est 1:1 a: — Artajerjes: El texto hebreo utiliza el nombre de Asuero, que se corresponde al griego Jerjes. Aunque conocemos a tres Artajerjes que reinaron en Persia, parece que el autor quiere referirse a Jerjes I (485-465 a. C.) sucesor de Darío I.— día primero del mes de Nisán: Mes del calendario babilónico que se corresponde con nuestros meses de marzo-abril. Es el primer mes del calendario judío por lo que la fecha se refiere al día de año nuevo.— Mardoqueo: Nombre teóforo del dios babilónico Marduk. Encontramos este nombre entre los que regresan de Babilonia (Esd 2:2; Neh 7:7).

Est 1:1 b: — Susa: Antigua capital del reino de Elam. Situada al sureste de Babilonia, en las estribaciones de los montes Zagros, los reyes persas la hicieron ciudad de residencia estacional.

Est 1:1 c: — Jeconías: La ambientación histórica que hace el v. Est 1:1 a nos situaría ciento doce años después; esto significa que la exactitud histórica de los datos no es primordial para el autor.

Biblia Peshitta en Español (Holman, 2015)

a Esd 4:6; Dan 9:1;b Est 8:9

Dios Habla Hoy (Sociedades Bíblicas Unidas, 1996)



Dios Habla Hoy 1996 Notes:



[1] 1.1 Asuero: Este nombre se aplica en los textos hebreos (cf. también Esd 4.6) al rey persa conocido en la historia con el nombre de Jerjes I (486-465 a.C.).

[2] 1.19 Est 8.8; Dn 6.8.

[3] 1.22 Y hablaran como mejor les pareciera: texto probable. Heb. y que hablaran la lengua de su pueblo.

Reina Valera (Sociedades Bíblicas Unidas, 1960)

Aconteció en los días de Asuero,a el Asuero que reinó desde la India hasta Etiopía sobre ciento veintisiete provincias,

a Esd 4:6.

Traducción En Lenguaje Actual Con Deuterocanonicos En Orden Alejandrino (2004)

[1] [1a-1d] Abib: Primer mes del calendario lunar judío. En nuestro calendario solar corresponde al período que va de mediados de marzo a mediados de abril.

Nueva Traducción Viviente (Tyndale House, 2009)

En hebreo Asuero, otro nombre para Jerjes; también en todo el libro de Ester. Jerjes reinó del 486 al 465 a. C.

En hebreo Cus.

Libro del Pueblo de Dios (San Pablo, 1990)



1. El rey "Asuero" es probablemente Jerjes I, el monarca persa derrotado por los griegos, que reinó entre el 486 y el 465 a.C.

Torres Amat (1825)



[19] Había entre los persas edictos o leyes hechas con tales formalidades que se tenían por irrevocables aun por el mismo rey. Dan 6, 8-15.

Biblia Textual IV (Sociedad Bíblica Iberoamericana, 1999)

Asuero... Nombre gr. del monarca persa Jerjes;
el mismo... Sir. añade él era hijo de.

Nueva Versión Internacional (SBI, 1999)

[a] Asuero. Variante hebrea de Jerjes, nombre persa; así en el resto de este libro.

Jünemann (1992)


1 a. Jerjes = Asuero.