Ver contexto
Llegaron a Mará, mas no pudieron beber el agua de Mará, porque era amarga. Por eso se llama aquel lugar Mará. (Exodo  15, 23) © Nueva Biblia de Jerusalén (Desclee, 1998)

BHSEk - Biblia Hebraica Stuttgartensia (Enhanced; KJV versification)

וַ‎(וְ)

Hebrew|wa|and

Part-of-speech: conjunction
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[f.ab.aa] [519]
[ו] [GES1991] [BDB2226] [HAL2241]

יָּבֹ֣אוּ‎(בֹּוא)

Hebrew|yyāvˈōʔû|come

Part-of-speech: verb
Gender: masculine
Number: plural
Person: third person
State: not applicable
Verbal tense: wayyiqtol
Verbal stem: qal


[H935] [b.ap.aa] [212]
[בוא] [GES919] [BDB997] [HAL1011]

מָרָ֔תָה‎(מָרָה)

Hebrew|mārˈāṯā|Marah

Part-of-speech: proper noun
Gender: feminine
Number: singular
Person: not applicable
State: absolute
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H4785] [m.dq.ae]
[מרה] [GES4697] [BDB5250] [HAL5140]

וְ‎(וְ)

Hebrew|wᵊ|and

Part-of-speech: conjunction
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[f.ab.aa] [519]
[ו] [GES1991] [BDB2226] [HAL2241]

לֹ֣א‎(לֹא)

Hebrew|lˈō|not

Part-of-speech: negative particle
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H3808] [l.ab.aa] [1064]
[לא] [GES3708] [BDB4137] [HAL4092]

יָֽכְל֗וּ‎(יָכֹל)

Hebrew|yˈāḵᵊlˈû|be able

Part-of-speech: verb
Gender: unknown
Number: plural
Person: third person
State: not applicable
Verbal tense: perfect
Verbal stem: qal


[H3201] [j.bm.aa] [866]
[יכל] [GES3092] [BDB3456] [HAL3431]

לִ‎(לְ)

Hebrew|li|to

Part-of-speech: preposition
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[l.aa.ab] [1063]
[ל] [GES3706] [BDB4135] [HAL4089]

שְׁתֹּ֥ת‎(שָׁתָה)

Hebrew|šᵊttˌōṯ|drink

Part-of-speech: verb
Gender: unknown
Number: unknown
Person: unknown
State: construct
Verbal tense: infinitive (construct)
Verbal stem: qal


[H8354] [v.gi.aa] [2477]
[שתה] [GES8317] [BDB9157] [HAL9080]

מַ֨יִם֙‎(מַיִם)

Hebrew|mˈayim|water

Part-of-speech: noun
Gender: masculine
Number: plural
Person: not applicable
State: absolute
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H4325] [m.bt.aa] [1188]
[מים] [GES4250] [BDB4737] [HAL4661]

מִ‎(מִן)

Hebrew|mi|from

Part-of-speech: preposition
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H4480] [m.cl.aa] [1212]
[מן] [GES4398] [BDB4898] [HAL4822]

מָּרָ֔ה‎(מָרָה)

Hebrew|mmārˈā|Marah

Part-of-speech: proper noun
Gender: unknown
Number: singular
Person: not applicable
State: absolute
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H4785] [m.dq.ae]
[מרה] [GES4697] [BDB5250] [HAL5140]

כִּ֥י‎(כִּי)

Hebrew|kˌî|that

Part-of-speech: conjunction
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H3588] [k.bg.aa] [976]
[כי] [GES3481] [BDB3883] [HAL3852]

מָרִ֖ים‎(מַר)

Hebrew|mārˌîm|bitter

Part-of-speech: adjective
Gender: masculine
Number: plural
Person: not applicable
State: absolute
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H4751] [m.dq.ab] [1248a]
[מר] [GES4665] [BDB5213] [HAL5108]

הֵ֑ם‎(הֵם)

Hebrew|hˈēm|they

Part-of-speech: personal pronoun
Gender: masculine
Number: plural
Person: third person
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H1992] [e.bs.aa] [504]
[הם] [GES1922] [BDB2147] [HAL2141]

עַל‎(עַל)

Hebrew|ʕal-|upon

Part-of-speech: preposition
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H5921] [k.bg.ac] [1624p]
[על] [GES5848] [BDB6471] [HAL6395]

כֵּ֥ן‎(כֵּן)

Hebrew|kˌēn|thus

Part-of-speech: adverb
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H3651] [k.by.aa] [964b]
[כן] [GES3545] [BDB3960] [HAL3926]

קָרָֽא‎(קָרָא)

Hebrew|qārˈā-|call

Part-of-speech: verb
Gender: masculine
Number: singular
Person: third person
State: not applicable
Verbal tense: perfect
Verbal stem: qal


[H7121] [s.cy.aa] [2063]
[קרא] [GES7087] [BDB7790] [HAL7719]

שְׁמָ֖הּ‎(שֵׁם)

Hebrew|šᵊmˌāh|name

Part-of-speech: noun
Gender: masculine
Number: singular
Person: not applicable
State: absolute
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H8034] [v.dv.ab] [2405]
[שם] [GES7989] [BDB8787] [HAL8726]

מָרָֽה‎(מָרָה)

Hebrew|mārˈā|Marah

Part-of-speech: proper noun
Gender: unknown
Number: singular
Person: not applicable
State: absolute
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H4785] [m.dq.ae]
[מרה] [GES4697] [BDB5250] [HAL5140]

Biblia Comentada, Profesores de Salamanca (BAC, 1965)



15. Cántico Triunfal de Moisés.
E l paso del mar colocaba a Israel fuera de las fronteras de Egipto, aunque no fuera de las tierras de su influencia; pero la destrucción del ejército egipcio ponía el sello a la liberación israelita. Ningún suceso más merecedor de esta manifestación de alegría para el pueblo y de hacerlo pasar a la historia con un cántico inspirado. En el libro de los Jueces, Débora celebra la victoria de Israel sobre los cananeosl. El cántico de Moisés, conservado en la Sagrada Escritura, sirve para renovar a través de los siglos las victorias que Dios había concedido a los suyos.
En la forma actual del cántico se advierten detalles y alusiones que arguyen una composición posterior al mismo Moisés; v.gr., la mención de Edom, de Moab, de los filisteos, con quienes, andando el tiempo, los israelitas tendrán muchos encuentros, pero que en tiempos del éxodo no les serían conocidos a los hebreos. Se habla, además, del monte de la heredad de Yahvé, en el cual las manos de Yahvé fundaron su santuario, el templo de Jerusalén. Todo esto arguye que el cántico, en su forma actual, es posterior a Moisés. Algo semejante hemos visto en la bendición de Jacob a sus hijos. De todos modos, en su primera parte (v.1-11) hay signos de arcaísmo, y bien puede ser obra del gran libertador israelita. Así, se citan como arcaísmos las designaciones de Yahvé como un guerrero (v-3) y su comparación con los dioses (v.11)2.

Primera Parte: la Victoria Sobre los Egipcios (1-11).

1Entonces cantaron Moisés y los hijos de Israel a Yahvé este canto diciendo:
Cantaré a Yahvé, que se ha mostrado sobre modo glorioso; El arrojó al mar el caballo y el caballero.
2Yahvé es mi fortaleza y el objeto de mi canto; El fue mi salvador,
El es mi Dios, y yo le alabaré;
es el Dios de mi padre, yo le exaltaré.
3Yahvé es un fuerte guerrero, Yahvé es su nombre.
4Precipitó en el mar los carros del faraón y su ejército; la flor de sus capitanes se la tragó el mar Rojo.
5Cubriéronlos los abismos,
y cayeron al fondo como una piedra.
6Tu diestra, ¡oh Yahvé!, engrandecida por la fortaleza; tu diestra, ¡oh Yahvé!, detrozó al enemigo.
7En la plenitud de tu poderío derribaste a los adversarios; diste rienda suelta a tu furor, y los devoró como paja.
8Al soplo de tu ira amontonáronse las aguas, se pararon las corrientes olas, como un dique; cuajáronse los abismos en el fondo del mar.
9Díjose el enemigo: Los perseguiré, los alcanzaré; me repartiré sus despojos, hartaráse mi alma. Desenvainaré mi espada, y los despojará mi mano.
10Enviaste tu soplo, y los cubrió el mar;
se hundieron como plomo en las poderosas aguas.
11¿Quién como tú, ¡oh Yahvé!, entre los dioses? ¿Quién como tú, magnífico en santidad, terrible en maravillosas hazañas, obrador de prodigios?

El poeta canta la gloria y poder de Yahvé, que se ha mostrado venciendo a los poderosos egipcios y anegando al caballo y al caballero (v.1)3. Se le llama enfáticamente fuerte guerrero, o mejor lit. hombre de guerra (v.3). El texto samaritano considera quizá la palabra irrespetuosa para Dios, y traduce: poderoso en el combate. Los LXX: el Señor que rompe las guerras. El nombre de Yahvé en boca del poeta es el símbolo del poder y el desafío a los enemigos, como el ¡Santiago y cierra España! de nuestros caballeros de la Edad Media: ¡Yahvé es su nombre! Ningún Dios egipcio puede medirse con El, como queda demostrado en la terrible derrota de los egipcios, que han caído al fondo como una piedra (v.5). Su furor es como un fuego devorador que devora a sus enemigos como paja (v.7). Es un símil corriente en la literatura profética4. Después el poeta describe las ansias de venganza y de botín de los enemigos que desean caer sobre el indefenso Israel (v.9). Pero de nada les sirvió su fuerza: se hundieron como plomo en las poderosas aguas (v.10). Ante ese milagro insólito, el poeta proclama la grandeza y poder de su Dios frente a la inanidad de los ídolos egipcios: ¿Quién como tú, magnifico en santidad...? (v.11). La santidad de Dios era lo específico y característico de la divinidad según los hebreos, lo que le aislaba y situaba en una atmósfera inaccesible a la criatura. Era una noción algo similar a la nuestra de trascendencia. El poeta, pues, proclama el carácter único de su Dios, que con un soplo anegó a los ejércitos del faraón. Es el soberano del mundo, obrador de prodigios.

Los Pueblos Gentiles, Atemorizados ante las Hazañas de Yahvé (12-21).
12Tendiste tu diestra, y se los tragó la tierra. 13En tu misericordia tú acaudillaste al pueblo que redimiste, y por tu poderío lo condujiste a tu santa morada. 14Supiéronlo los pueblos, y temblaron; el terror se apoderó de los filisteos. 15Los príncipes de Edom se estremecieron, se apoderó la angustia de los fuertes de Moab. Todos los habitantes de Canaán perdieron su valor. 16Cayeron sobre ellos el espanto y la angustia. Por la fuerza de tu brazo se quedaron inmóviles como una hasta que tu pueblo, ¡oh Yahvé!, pasó; piedra, hasta que pasó el pueblo que redimiste. 17Tú le introdujiste y le plantaste en el monte de tu heredad, ¡oh Yahvé!; en el santuario, ¡oh Yahvé!, que fundaron tus manos. 18Yahvé reinará por siempre jamás. 19Entraron en el mar los caballos del faraón, sus carros y sus caballeros, y echó Yahvé sobre ellos las aguas del mar. Mas los hijos de Israel pasaron por en medio del mar a pie enjuto. 20María la profetisa, hermana de Aarón, tomó en sus manos un tímpano, y todas las mujeres seguían en pos de ella con tímpanos y en coros, 21y María les respondía: Cantad a Yahvé, que ha hecho resplandecer su gloria, precipitando en el mar el caballo y el caballero.

En esta segunda parte se habla del eco que han tenido entre las gentes los prodigios de Yahvé en favor de su pueblo. Es un canto lírico-épico de redacción posterior en su forma actual, que procura continuar la composición poética anterior, si bien reflejando hechos posteriores.
El v.12 parece aludir al hecho narrado en Num_16:30.32: Coré, Datan y Abirón fueron tragados por la tierra en castigo de su rebelión. Con ello quedaba acreditada la autoridad de Moisés, como lo había sido en el paso del mar Rojo contra los egipcios. Yahvé condujo a su pueblo a la santa morada (v.13), la tierra santa, propiedad de Yahvé, o bien su mismo santuario en Jerusalén. Yahvé había sacado a los israelitas no sólo para librarlos de la servidumbre, sino sobre todo para darles la tierra prometida a los patriarcas5. En su peregrinación hacia la tierra prometida, Yahvé desplegó su poder sobrehumano, sembrando el pavor en todas las poblaciones con las que Israel iba entrando en contacto: Supiéronlo los pueblos, y temblaron; ... filisteos, principes de Edom..., fuertes de Moab, habitantes de Canaán perdieron su valor (v.14-15). De este modo se puede decir que Yahvé ha comprado a su pueblo a precio de portentos y maravillas. Son todos motivos para agradecerle por parte de los beneficiados, los israelitas: Tú le introdujiste y le plantaste en el monte de tu heredad (v.17), Jerusalén, centro 'de la teocracia, donde Yahvé moraba en su santuario como en los cielos. Allí permanecerá para siempre como Rey de su pueblo (v.18).
El v.19 es considerado como glosa redaccional para recordar la ocasión del cántico. Por su falta de ritmo no encaja en la composición lírica del contexto.
Las mujeres solían recibir a los vencedores con cánticos y danzas, como aún ocurre en las tribus del desierto6. Así, María, hermana de Moisés y Aarón, les sale al paso y se asocia al cántico general. Se la llama hermana de Aarón, sin mencionar a Moisés, porque aquél era mayor en edad, y quizá porque se iba a aliar con Aarón contra Moisés7. Se la llama profetisa quizá por ser hermana de Moisés, pero sobre todo porque aparece también como portavoz de Yahvé8. El nombre de María puede ser egipcio, como el de Moisés. Quizá haya que relacionarlo con el meri egipcio, que significa amado, que entra en la formación de nombres teóforos. Unido al nombre de Yahvé (Yam: Yaw), tendríamos el nombre teóforo: Meri-Yam (Miryam) : amada de Yahvé.9 San Jerónimo, leyendo Mar-yam, traduce stella maris. Probablemente haya que leer stilla en vez de stella, ya que mar significa gota de agua.10

Las Aguas de Mara (22-27).
22Mandó Moisés que los hijos de Israel se partieran del mar Rojo. Avanzaron hacia el desierto del sur y marcharon por él tres días, sin hallar agua. 23Llegaron a Mara, pero no pudieron beber el agua de Mará, por ser amarga; por eso se dio a este lugar el nombre de Mará. 24El pueblo murmuraba contra Moisés: ¿Qué vamos a beber? 25Moisés clamó a Yahvé, que le indicó un madero que él echó en el agua, y ésta se endulzó. Allí dio al pueblo leyes y le puso a prueba. 26Les dijo: Si escuchas a Yahvé, tu Dios; si obras lo que es recto a sus ojos, si das oído a sus mandatos y guardas todas sus leyes, no traeré sobre ti ninguna de las plagas con que afligí a Egipto, porque yo soy Yahvé, tu salvador. 27Llegaron a Elim, donde había doce fuentes y setenta palmeras, y acamparon allí junto a las aguas.

Israel sale de Egipto después de haber vencido la resistencia del faraón, gracias al poder que Dios había depositado en las manos de Moisés. Con diversas imágenes, se nos dijo después que Dios caminaba a la cabeza del pueblo (en forma de nube o como ángel). Todo esto debía contribuir a enraizar en el corazón de Israel la fe en Dios y en Moisés. Como en los comienzos del Evangelio, abundaban las gracias carismáticas, con que el Espíritu daba testimonio de Jesús, según dice el mismo Salvador11, lo mismo a los comienzos de la historia de Israel, cuando Dios se disponía a ligarse mediante un pacto con el pueblo israelita, abundaban los prodigios acomodados a la condición del pueblo y a sus necesidades. Bien dice San Gregorio que, cuando se planta un árbol, es preciso regarle con frecuencia; pero el riego cesa a medida que el árbol se va enraizando en la tierra.
Estos milagros ofrecen una dificultad cuando se los compara con los evangélicos, y la dificultad está en la forma de su narración, según hemos visto en el paso del mar Rojo. Los doctores posteriores de Israel los han hecho materia de sus meditaciones y objeto de exégesis haggádica, que a veces ha sido consignada en la Sagrada Escritura. Todo esto es necesario tomarlo en cuenta, primero para ver la razón de la abundancia de los prodigios que leemos en el Pentateuco; luego para entender las dificultades de su exégesis y el valor que puedan tener los pasajes paralelos posteriores. A esto hay que unir la parte imaginativa que haya podido haber en la idealización de los mismos hechos prodigiosos, teniendo en cuenta que han sido cantados por la épica popular.
La primera etapa en pleno desierto es la de Mara, llamada así por sus aguas salobres y amargas -filtraciones del mar , endulzadas taumatúrgicamente por Moisés. Subsisten todavía, y llevan el nombre de Moisés: 'Ayun Musa (fuentes de Moisés)12.
En el v.26 encontramos una invitación al cumplimiento de los preceptos de Yahvé, sin que éstos se especifiquen. Probablemente son una serie de mandatos provisionales para dirigir la vida religiosa y campamental de los fugitivos antes de la legislación del Sinaí. Hemos de suponer que Moisés, al encontrarse con su pueblo en el desierto, tuvo que lanzarse a una obra inmediata de organización, dirigida siempre por ciertos preceptos religiosos recibidos de la época patriarcal o impuestos ahora por la autoridad del libertador, que obraba y legislaba como lugarteniente de su Dios. Estaban recientes las plagas de Egipto, y era fácil amenazarlos con los flagelos que habían sufrido los subditos del faraón. De hecho, por entonces el poder taumatúrgico de Moisés era la gran base de su prestigio político-religioso13.
La segunda estación es Elim, donde había doce fuentes y setenta palmeras (v.27), generalmente identificado con el oasis de Wady Garandel, lugar frecuentado por las caravanas que se cruzaban, camino de Egipto, en la ruta costera del mar Rojo14.

1 Jue 0:5. 2 Cf. Lagrange, Le cantique de Moïse aprés le passage de la mer Rouge: RB (1899) p.540. 3 En realidad, los egipcios no tenían caballería montada, y el texto hebreo dice literalmente al caballo y a su conductor, aludiendo al conductor del carro guerrero. 4 Cf. Isa_5:24; Isa_47:14; Joe_2:3; Abd_1:18; Mal_3:19. 5 Cf. Sal_78:54. 6 Cf. Jue_11:34; 1Re_18:6-7. 7 Cf. Num_12:1. 8 Cf. Num_12:2. 9 Es la opinión de Zorell, entre otros. 10 Otros prefieren ver una raíz heb.: marah (ser rebelde) o mara' (ser gorda). Cf. O. bar-denhewer, Der Name María (1895): Biblische Studien, citado por A. Clamer, o.c., p.152. 11 Cf. Jua_15:26. 12 Cf. Bourdon, La route de l'Exode: RB (1932) p.54Q. Sobre otras identificaciones véase Abel, o.c., I 434. 13 Algunos autores ven en el v.2ó una adición del deuteronomista. No obstante, la alusión a las plagas y el título dado a Yahvé de sanador (después de haber purificado las aguas de Mará) parecen reflejar la mentalidad del desierto. 14 Ehim puede ser un plural de elah (encina, terebinto), relacionado por la tradición popular con el nombre El de Dios. Véase Abel, o.c., II 210.

King James Version (KJVO) (1611)



Chapter XV.

1 Moses song. 22 The people want water. 23 The waters at Marah are bitter. 25 A tree sweetneth them. 27 At Elim are twelue wels, and seuentie palme trees.
1 Then sang [ Wis_1:20.] Moses and the children of Israel this song vnto the Lord, and spake, saying, I will sing vnto the Lord: for he hath triumphed gloriously, the horse and his rider hath he throwen into the Sea.
2 The Lord is my strength and song, and he is become my saluation: he is my God, and I will prepare him an habitation, my fathers God, and I wil exalt him.
3 The Lord is a man of warre: the Lord is his Name.

[Israels song of thankesgiuing.]

4 Pharaohs charets and his hoste hath he cast into the sea: his chosen captaines also are drowned in the red Sea.
5 The depths haue couered them: they sanke into the bottome as a stone.
6 Thy right hand, O Lord, is become glorious in power, thy right hand, O Lord, hath dashed in pieces the enemie.
7 And in the greatnesse of thine excellencie thou hast ouerthrowen them, that rose vp against thee: thou sentest forth thy wrath, which consumed them as stubble.
8 And with the blast of thy nostrils the waters were gathered together: the floods stood vpright as an heape, and the depths were congealed in the heart of the Sea.
9 The enemie said, I will pursue, I wil ouertake, I wil diuide the spoile: my lust shall be satisfied vpon them: I will draw my sword, mine hand shall [ Or, repossesse.] destroy them.
10 Thou didst blow with thy wind, the sea couered them, they sanke as lead in the mighty waters.
11 Who is like vnto thee, O Lord, amongst the [ Or, mighty ones?] gods? who is like thee, glorious in holinesse, fearefull in praises, doing wonders!
12 Thou stretchedst out thy right hand, the earth swallowed them.
13 Thou in thy mercie hast led forth the people which thou hast redeemed: thou hast guided them in thy strength vnto thy holy habitation.
14 [ Deu_2:25 ; Jos_2:9 .] The people shall heare, and be afraid: sorrow shall take hold on the inhabitants of Palestina.
15 Then the dukes of Edom shal be amased: the mighty men of Moab trembling shall take hold vpon them: all the inhabitants of Canaan shal melt away.
16 [ Deu_2:29 ; Jos_2:5 .] Feare and dread shall fall vpon them, by the greatnesse of thine arme they shall be as still as a stone, till thy people passe ouer, O Lord, till the people passe ouer which thou hast purchased.
17 Thou shalt bring them in, and plant them in the mountaine of thine inheritance, in the place, O Lord, which thou hast made for thee to dwell in, in the Sanctuary, O Lord, which thy hands haue established.
18 The Lord shal reigne for euer and euer.

[Israels song of thankesgiuing.]

19 For the horse of Pharaoh went in with his charets and with his horsemen into the sea, and the Lord brought againe the waters of the Sea vpon them: But the children of Israel went on drie land in the mids of the sea.
20 And Miriam the prophetesse the sister of Aaron, tooke a timbrell in her hand, and all the women went out after her, with timbrels & with dances.
21 And Miriam answered them, Sing ye to the Lord, for he hath triumphed gloriously: the horse and his rider hath he throwen into the sea.
22 So Moses brought Israel from the red sea, and they went out into the wildernesse of Shur: and they went three dayes in the wildernesse, and found no water.
23 And when they came to Marah, they could not drinke of the waters of Marah, for they were bitter: therefore the name of it was called [ That is, Bitternesse .] Marah.
24 And the people murmured against Moses, saying, What shall wee drinke?
25 And he cried vnto the Lord: and the Lord shewed him a [ Sir_38:5 .] tree, which when hee had cast into the waters, the waters were made sweete: there he made a statute & an ordinance, and there he proued them,
26 And said, If thou wilt diligently hearken to the voice of the Lord thy God, and wilt doe that which is right in his sight, and wilt giue eare to his Commandements, and keepe all his Statutes, I will put none of these diseases vpon thee, which I haue brought vpon the Egyptians: for I am the Lord that healeth thee.
27 [ Num_33:9 .] And they came to Elim: where were twelue wels of water, and threescore and ten palme trees, and they encamped there by the waters.

La Biblia de Nuestro Pueblo (Liturgical Press, 2006),

Murmuraciones por la carencia de agua. Todavía con el sabor de la victoria, los israelitas guiados por Moisés emprenden una primera etapa por el desierto, marco propicio para establecer hasta qué punto el grupo de liberados está o no preparado para asumir su vida como quien tiene que empezar a vivir el don de la liberación. El relato subraya el hecho de que el pueblo encuentra agua pero no la puede beber, ante lo cual la queja no se hace esperar. No conocemos los términos de la queja; el hecho es que Moisés clama al Señor, quien responde indicándole la manera de transformar el agua salobre en agua dulce. No se trata de un milagro, se trata más bien de una costumbre antigua de los campesinos, quienes aplicaban pedazos de cactus al agua salobre, los cuales absorbían instantáneamente la sal y permitían el consumo del líquido. Este incidente subraya la asistencia divina en el desierto, pues ni aún en los detalles más elementales, como el suministro del agua, el Señor descuida a su pueblo. Subraya también el aspecto generoso del Señor que proporciona lo elemental para vivir. Hay una conexión entre el agua como elemento esencial, pero indispensable para vivir, y las leyes y mandatos que da el Señor, cuyo cumplimiento garantizará siempre la vida y la salud del pueblo (25s) como anticipo del bienestar que le trae el cumplimiento de las leyes divinas. Termina esta primera etapa en un paradisíaco lugar provisto con «doce manantiales y setenta palmeras», donde acamparon (27).

Nuevo Comentario Bíblico Siglo XXI (Editorial Mundo Hispano, 2019)



Las aguas de Mara. El breve relato de Moisés transformando las aguas amargas en dulces provee una adecuada transición de la situación que confrontaban los israelitas en Egipto y la del éxodo. El incidente ilustra el cambio que había experimentado Israel entre la amarga vida en Egipto y la libertad recientemente encontrada y que ahora disfrutaban. El pasaje también destaca los beneficios que pertenecen a Israel si permanecen leales a Dios. Obediencia a los mandamientos y decretos de Dios es un tema que reaparece frecuentemente en el resto de Exo., especialmente en conexión con el pacto hecho en el Sinaí. Un tema relacionado es cómo Dios probó al pueblo con el propósito de indagar hasta dónde llegaría su obediencia (25; cf. 16:4; 17:2, 7; 20:20).

Nueva Biblia de Jerusalén (1998) - referencias, notas e introducciones a los libros


REFERENCIAS CRUZADAS

[1] Núm_33:8

[2] Rut_1:20; Éxo_14:11+

NOTAS

15:23 Mará: amarga, amargura, en hebr. mar.

Nueva Biblia de Jerusalén (Desclée, 1998)


REFERENCIAS CRUZADAS

[1] Núm_33:8

[2] Rut_1:20; Éxo_14:11+

NOTAS

15:23 Mará: amarga, amargura, en hebr. mar.

Libro del Pueblo de Dios (San Pablo, 1990)



14-15. La referencia a la conquista de Canaán y la mención de los filisteos indican que este canto de triunfo no ha sido compuesto totalmente en tiempos de Moisés. Su núcleo más antiguo es la estrofa retomada por Miriam en el v.21. Esta exclamación hímnica -cantada y transmitida en el culto israelita- se fue ampliando paulatinamente hasta incluir la conquista de Canaán, hecho posterior a la muerte de Moisés.

Sagrada Biblia (Conferencia Episcopal Española, 2011)

*15:22-18:27 Por el desierto, Israel tendrá que enfrentarse con el hambre y la sed, con los amalecitas y con problemas de organización de la comunidad. El mismo Señor que libró a los israelitas de la esclavitud los guiará y ayudará en esta nueva etapa de su historia.

Biblia Peshitta en Español (Holman, 2015)

a Núm 33:8; Rut 1:20

Torres Amat (1825)



[1] Sab 10, 20.

[2] Sal 118 (117), 14; Is 12, 2.

[13] Es una profecía de lo que hará Dios conduciendo a su pueblo hasta la tierra de promisión.

[25] Los padres han considerado este leño como figura del madero de la cruz de Cristo.

[25] Jdt 5, 15; Eclo 38, 5.

[27] Num 33, 9.

Dios Habla Hoy (Sociedades Bíblicas Unidas, 1996)



Dios Habla Hoy 1996 Notes:



[1] 15.2 Señor: heb. Yah, otra forma del nombre Yahvé, el nombre sagrado del Dios de Israel (véase Ex 3.15 n.).

[2] 15.15 Cf. Nm 20.14-21; 21.13-15.

[3] 15.23 En hebreo, Mará significa amarga.

Reina Valera (Sociedades Bíblicas Unidas, 1960)

Y llegaron a Mara, y no pudieron beber las aguas de Mara, porque eran amargas; por eso le pusieron el nombre de Mara.5

5 Esto es, Amargura.

Biblia Textual IV (Sociedad Bíblica Iberoamericana, 1999)

beber... TM añade las aguas. Se sigue LXX → §194;
Mara... Esto es, amargura.

Biblia Hispano Americana (Sociedad Bíblica Española, 2014)

— Mará: Palabra hebrea que significa “amargura”.

Nueva Versión Internacional (SBI, 1999)

[b] En hebreo, Mara significa amarga.

Biblia Latinoamericana (San Pablo, 1995)



[=] *Rut 1:20 *Num 33:8