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Aarón y sus hijos comerán a la entrada de la Tienda del Encuentro la carne del carnero y el pan del canastillo. (Exodo  29, 32) © Nueva Biblia de Jerusalén (Desclee, 1998)

BHSEk - Biblia Hebraica Stuttgartensia (Enhanced; KJV versification)

וְ‎(וְ)

Hebrew|wᵊ|and

Part-of-speech: conjunction
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[f.ab.aa] [519]
[ו] [GES1991] [BDB2226] [HAL2241]

אָכַ֨ל‎(אָכַל)

Hebrew|ʔāḵˌal|eat

Part-of-speech: verb
Gender: masculine
Number: singular
Person: third person
State: not applicable
Verbal tense: perfect
Verbal stem: qal


[H398] [a.dc.aa] [85]
[אכל] [GES389] [BDB413] [HAL428]

אַהֲרֹ֤ן‎(אַהֲרֹון)

Hebrew|ʔahᵃrˈōn|Aaron

Part-of-speech: proper noun
Gender: masculine
Number: singular
Person: not applicable
State: absolute
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H175] [a.bn.ab] [35]
[אהרון] [GES175] [BDB185] [HAL193]

וּ‎(וְ)

Hebrew|û|and

Part-of-speech: conjunction
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[f.ab.aa] [519]
[ו] [GES1991] [BDB2226] [HAL2241]

בָנָיו֙‎(בֵּן)

Hebrew|vānāʸw|son

Part-of-speech: noun
Gender: masculine
Number: plural
Person: not applicable
State: absolute
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H1121] [b.ca.aa] [254]
[בן] [GES1052] [BDB1189] [HAL1201]

אֶת‎(אֵת)

Hebrew|ʔeṯ-|[object marker]

Part-of-speech: preposition
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H853] [a.gm.aa] [186]
[את] [GES828] [BDB894] [HAL913]

בְּשַׂ֣ר‎(בָּשָׂר)

Hebrew|bᵊśˈar|flesh

Part-of-speech: noun
Gender: masculine
Number: singular
Person: not applicable
State: construct
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H1320] [b.dj.ab] [291a]
[בשר] [GES1218] [BDB1396] [HAL1402]

הָ‎(הַ)

Hebrew|hā|the

Part-of-speech: article
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[e.ab.aa] [459]
[ה] [GES1804] [BDB2019] [HAL2031]

אַ֔יִל‎(אַיִל)

Hebrew|ʔˈayil|ram, despot

Part-of-speech: noun
Gender: masculine
Number: singular
Person: not applicable
State: absolute
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H352] [a.bx.af] [45d]
[איל] [GES349] [BDB369] [HAL380]

וְ‎(וְ)

Hebrew|wᵊ|and

Part-of-speech: conjunction
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[f.ab.aa] [519]
[ו] [GES1991] [BDB2226] [HAL2241]

אֶת‎(אֵת)

Hebrew|ʔeṯ-|[object marker]

Part-of-speech: preposition
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H853] [a.gm.aa] [186]
[את] [GES828] [BDB894] [HAL913]

הַ‎(הַ)

Hebrew|ha|the

Part-of-speech: article
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[e.ab.aa] [459]
[ה] [GES1804] [BDB2019] [HAL2031]

לֶּ֖חֶם‎(לֶחֶם)

Hebrew|llˌeḥem|bread

Part-of-speech: noun
Gender: unknown
Number: singular
Person: not applicable
State: absolute
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H3899] [l.bi.ab] [1105a]
[לחם] [GES3815] [BDB4251] [HAL4207]

אֲשֶׁ֣ר‎(אֲשֶׁר)

Hebrew|ʔᵃšˈer|[relative]

Part-of-speech: conjunction
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H834] [a.gk.aa] [184]
[אשר] [GES812] [BDB872] [HAL890]

בַּ‎(בְּ)

Hebrew|ba|in

Part-of-speech: preposition
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[b.ab.aa] [193]
[ב] [GES855] [BDB923] [HAL939]

‎(הַ)

Hebrew||the

Part-of-speech: article
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[e.ab.aa] [459]
[ה] [GES1804] [BDB2019] [HAL2031]

סָּ֑ל‎(סַל)

Hebrew|ssˈāl|basket

Part-of-speech: noun
Gender: masculine
Number: singular
Person: not applicable
State: absolute
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H5536] [o.bp.ab] [1507a]
[סל] [GES5468] [BDB6069] [HAL5984]

פֶּ֖תַח‎(פֶּתַח)

Hebrew|pˌeṯaḥ|opening

Part-of-speech: noun
Gender: masculine
Number: singular
Person: not applicable
State: construct
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H6607] [q.ea.ab] [1854a]
[פתח] [GES6536] [BDB7201] [HAL7134]

אֹ֥הֶל‎(אֹהֶל)

Hebrew|ʔˌōhel|tent

Part-of-speech: noun
Gender: masculine
Number: singular
Person: not applicable
State: construct
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H168] [a.bl.ab] [32a]
[אהל] [GES168] [BDB180] [HAL186]

מֹועֵֽד‎(מֹועֵד)

Hebrew|môʕˈēḏ|appointment

Part-of-speech: noun
Gender: masculine
Number: singular
Person: not applicable
State: absolute
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H4150] [j.cb.ac] [878b]
[מועד] [GES4077] [BDB4545] [HAL4479]

Biblia Comentada, Profesores de Salamanca (BAC, 1965)



29. La Consagración de los Sacerdotes.
E l ritual de la consagración incluía: a) la preparación de los sacrificios que se habían de ofrecer (v.1-3); b) ablución de los cuerpos, investidura de los sacerdotes y unción de Aarón (v.4-9); c) ofrenda de los sacrificios (v. 10-35); d) consagración del altar de los holocaustos (v.36-37).
Por la circuncisión entraba el israelita a formar parte del pueblo de Abraham, el pueblo de las promesas, el pueblo elegido, el pueblo primogénito entre todos los pueblos de la tierra, el que formaba el sacerdocio real, la nación santa.1 Pero este sacerdocio debía ser ejercido en nombre del pueblo, y para descargo de éste, por la familia de Aarón. Tal oficio santo requería una especial consagración, mediante la cual el sacerdote adquiría una santidad y una capacidad convenientes para ejercer las funciones sagradas de manera que resultasen gratas a Dios. En este lugar Yahvé determina a Moisés la consagración de los sacerdotes y concreta el ceremonial, cuyo cumplimiento queda para más adelante2. He aquí el esquema general de la ceremonia: después de haber preparado las víctimas y ofrendas necesarias para la consagración, el consagrante empieza por lavar con agua limpia a los consagrados. Con esto se les quitan las impurezas legales. Luego viste a cada uno sus propios ornamentos y derrama sobre la cabeza el óleo de la unción.
Esto los hace ungidos del Señor. Hecho esto, se ofrece un novillo por el pecado, para expiar los pecados de los consagrados. Luego, un carnero en holocausto y otro en sacrificio pacífico, con las ofrendas correspondientes. De éste comerán los consagrados en el santuario durante aquel día, consumiendo por el fuego lo que sobrare, pues no puede quedar nada para el día siguiente. Durante siete días se repetirán los mismos ritos en el santuario, del que no saldrán los consagrados. Así quedan los sacerdotes consagrados y adscritos al servicio del santuario de Yahvé.

Preparación de las Ofrendas (1-3).
1He aquí lo que has de hacer para consagrar los sacerdotes a mi servicio: tomarás de entre el ganado un novillo y dos carneros, todos sin tacha; 2panes ácimos, tortas ácimas amasadas en aceite y frisuelos ácimos untados con aceite, todo hecho de flor de harina de trigo; 3y lo pondrás en un cestillo, y lo presentarás así al tiempo de la presentación del novillo y de los dos carneros.

Las ofrendas a base de harina amasada con aceite deben acompañar al sacrificio de un novillo y dos carneros. La ofrenda o minjah se contrapone siempre en la legislación mosaica al sacrificio cruento3. Todos los sacrificios debían ir acompañados de estas ofrendas. El pan fermentado es excluido por considerarlo contaminado, en estado de corrupción o de descomposición.

Ablución, Investidura y Unción de Aarón (4-9).
4Haz a Aarón y a sus hijos avanzar a la entrada del tabernáculo de la reunión y lávalos con agua. 5Después, tomando las vestiduras, viste a Aarón la túnica, la sobretúnica, el efod y el pectoral y cíñele el efod con el cinturón. 6Pon sobre su cabeza la tiara, y en la tiara la lámina de la santidad. 7Toma el óleo de unciones, derrámalo sobre la cabeza y úngele. 8Haz que se acerquen sus hijos, y les revistes las túnicas, 9los ciñes con los cinturones y les pones las tiaras. A ellos corresponderá el sacerdocio por ley perpetua. Tú instituirás a Aarón y a sus hijos.

Lo primero que deben hacer es lavarse, pues esta pureza ritual debe simbolizar la pureza moral del alma consagrada al servicio directo de Yahvé4. Después a Aarón se le viste de todos sus ornamentos con la tiara y la lámina de la santidad (v.6), símbolo de su dignidad sacerdotal suprema5. Después viene la unción, por la que quedaba consagrado a Yahvé de modo particular. La consagración a la divinidad por la unción o derramamiento de aceite era usual en Asiria y aun en Egipto. No se sabe exactamente el sentido primario del óleo derramado en relación con la consagración a la divinidad. Jacob ungió con óleo la piedra de Betel donde había reposado mientras se le apareció Yahvé en sueños6. Y todo ello como recuerdo de la teofanía. Los reyes eran ungidos por los profetas o por el sumo sacerdote7. Según otros textos considerados como tardíos, también se ungía a los sacerdotes en general8.
Las palabras del v.6 Aarón y sus hijos faltan en los LXX y son consideradas por algunos como adición posterior.

El Sacrificio por el Pecado (10-14).
10Trae luego el novillo ante el tabernáculo de la reunión, y Aarón y sus hijos pondrán sus manos sobre la cabeza del novillo. 11Degüella el novillo ante Yahvé, a la entrada del tabernáculo de la reunión; 12toma la sangre del novillo, y con tu dedo unta de ella los cuernos del altar y la derramas al pie del altar, 13Toma todo el sebo que cubre las entrañas, la redecilla del hígado y los dos ríñones con el sebo que los envuelve, y lo quemas todo en el altar. 14La carne del novillo, la piel y los excrementos los quemarás fuera del campamento. Este es el sacrificio por el pecado.

Aarón y sus hijos deben estar libres de pecado antes de entrar en funciones. Para ello deben imponer las manos sobre la víctima o novillo ante el tabernáculo de la reunión o santuario. El gesto significa que los pecados de Aarón y de sus hijos se transmiten a la víctima, la cual es inmolada en sustitución de ellos. Las partes grasas deben ser quemadas después de haber ungido con su sangre el altar de los holocaustos y derramado el resto junto al altar. El resto de la víctima debe ser quemado fuera del campamento (v.14), de forma que no sea utilizado por los israelitas, ya que es cosa sagrada9.

El Holocausto (15-18).
15Tomarás luego uno de los carneros, y Aarón y sus hijos pondrán sus manos sobre la cabeza de aquél. 16Degüella el carnero y riega con su sangre el altar todo en derredor. 17Descuartiza el carnero, y, lavando las entrañas y las patas, las pones sobre los otros trozos y la cabeza, 18y lo quemarás todo sobre el altar. Es el holocausto a Yahvé de suave olor, el sacrificio a Yahvé por el fuego.

Era el sacrificio por excelencia, pues se quemaba toda la víctima; por ello era el más grato a Dios: de suave olor (v.18). La expresión es antropomórfica y encarece bien la excelencia de este sacrificio. La sangre se derramaba sobre el altar. Era el vehículo de la vida, y pertenecía por ello a Dios. Nadie podía tomarla. Para facilitar la cremación de la víctima, ésta era antes totalmente desangrada y después descuartizada y quemada totalmente.

El Sacrificio de Inauguración (19-26).
19Toma luego el otro carnero, y Aarón y sus hijos le pondrán sus manos sobre la cabeza. 20Degüella el carnero y, tomando su sangre, unta de él el lóbulo de la oreja derecha de Aarón y el lóbulo de la oreja derecha de sus hijos, el pulgar de su mano derecha y el pulgar de su pie derecho, y regarás de sangre el altar todo en derredor. 21Toma de la sangre que habrá sobre el altar, y el óleo de la unción, y asperge y unge a Aarón y sus vestiduras, y así será consagrado él y sus vestiduras, sus hijos y sus vestiduras. 22Toma el sebo del carnero, la cola, el sebo que cubre las entrañas, la redecilla del hígado, los dos ríñones con el sebo que los envuelve y la pata derecha, pues este carnero es carnero de inauguración. 23También el cestillo de ácimos puesto ante Yahvé; toma un pan, una torta y un frisuelo, 24y pon todo esto en las palmas de las manos de Aarón y de sus hijos, y haz que las agiten como ofrenda agitada ante Yahvé. 25 Luego los tomarás de sus manos y los quemarás en el altar, encima del holocausto, en suave olor ante Yahvé, para ofrecérselo. 26Tomarás el medio pecho del carnero de inauguración, que sería de Aarón, y lo agitarás como ofrenda agitada ante Yahvé; ésta será su parte.

Este sacrificio es similar en muchas cosas al sacrificio pacífico10, aunque aquí tiene un sentido peculiar. Así, se unge con la sangre de la víctima la oreja, el pulgar de la mano derecha y del pie derecho, para significar la docilidad y presteza con que los sacerdotes debían dedicarse al culto de Yahvé11. Algunos autores sugieren que primitivamente este rito se relacionaba con la idea de preservar al sacerdote de la influencia de espíritus malignos12. Se mencionan los miembros derechos del cuerpo (oreja, mano, pie), porque se consideraban, por su utilidad, como la representación de todo el cuerpo.
El v.21, en el que se habla de la aspersión con la sangre sobre Aarón y sus hijos, es considerado por algunos autores como adición posterior. El texto de los LXX varía en la distribución de los versículos13.
Las partes grasas de la víctima eran quemadas en el altar como porción selecta de las mismas. Además se añadía la oblación de pan y de aceite. Antes de quemar las partes grasas, Aarón y sus hijos deben tomarlas en sus manos y agitarlas o balancearlas ante Yahvé (v.24). Es el rito llamado de la tenufah (nuf: agitarse, moverse de un lado a otro), que se practicaba en los sacrificios pacíficos y de consagración. El sacerdote, con las ofrendas en la mano, avanzaba hacia el altar y retrocedía, para significar que ofrecía sus dones y que, a su vez, los recibía del Señor14. Moisés debe recibir de Aarón el pecho del carnero, haciendo el balanceo ritual ante Yahvé, quedándose después con él (v.26).

La Ofrenda de Elevación (27-28).
21Santificarás el otro medio de agitación y el brazuelo de elevación que han sido agitados y elevados del carnero de inauguración, lo que cede en favor de Aarón y de sus hijos, y ésa será la parte de Aarón y de sus hijos. 28Esa será la parte de Aarón y de sus hijos por ley perpetua, que guardarán los hijos de Israel, pues es ofrenda de elevación, y, en los sacrificios eucarísticos de los hijos de Israel, la ofrenda de elevación es de Yahvé.

En estos v.27-28, considerados por algunos autores como fuera de lugar, se refiere a lo que pertenece a los sacerdotes en los sacrificios pacíficos15, y parecen interrumpir el ceremonial de la consagración. Antes se hablaba del balanceo o agitación del pecho en las manos de Aarón y de sus hijos; ahora se habla, además, de la elevación del pernil. Es el rito de la terumah (elevación), consistente en levantar y abajar reiteradamente la ofrenda ante el altar con el mismo sentido simbólico de entrega de la víctima a Yahvé, lo que trae como consecuencia las bendiciones de Yahvé al oferente.

Las Vestiduras Sagradas (29-30).
29Las vestiduras sagradas que usará Aarón serán después de él las de sus hijos; con ellas serán ungidos y con ellas se les llenarán las manos. 30Siete días las llevará el que de sus hijos sea sacerdote en lugar suyo y entre en el tabernáculo de la reunión para ministrar en el santuario.

También estos dos versículos parecen interrumpir el ritual de la consagración. Los sucesores de Aarón, como sumos sacerdotes, deben recibir las vestiduras de él.

Banquete de los consagrados (31-37).
31Tomarás la carne del carnero de inauguración y la harás cocer en lugar santo. 32Aarón y sus hijos comerán a la entrada del tabernáculo de la reunión la carne del carnero y los ácimos del cestillo. 33Comerán lo que ha servido para su expiación, para llenarles las manos y consagrarles. No comerá de ello ningún extraño, porque son cosas santas. 34Si algo queda de las carnes de la consagración o de los panes para el día siguiente, lo quemarán y no se comerá, porque es cosa santa. 35Cumplirás, respecto de Aarón y de sus hijos, todo cuanto te he mandado. 36Durante siete días los consagrarás, y cada día ofrecerás el novillo en sacrificio por el pecado sobre el altar, para expiación, y le ungirás y le santificarás. 37Durante siete días expiarás el altar y lo santificarás, y el altar será santísimo, y cuanto a él toque será santo.

El v.31 parece lógica continuación del v.26. En los sacrificios pacíficos, los oferentes debían tener un banquete sagrado, consumiendo parte de la víctima. Aquí Aarón y sus hijos consagrados deberán consumir la parte del carnero de inauguración (v.31), y con él los panes ácimos que se juntaban en dicho ritual16.
En el v.33 se habla de comer lo que ha servido para la expiación, que es el novillo, ofrecido en sacrificio por el pecado (v.14); pero en este v.33 parece que la expiación es atribuida también al carnero de inauguración, lo que es raro. Así, se supone que este v.33 ha sido retocado, no muy acertadamente, por un escriba posterior.
Tampoco los v.30-37, relativos a la consagración y a la expiación del altar, forman parte del ceremonial de consagración de los sacerdotes. De hecho, en el c.8 del Levítico, donde se da cumplimiento a estas ordenaciones del c.29 del éxodo, no se habla de la consagración y expiación del altar durante siete días.
El altar debía ser purificado, pues era obra de hombres, y para dedicarlo al culto de Dios era preciso someterlo a un rito de purificación y consagración17. Después de este rito de consagración del altar, éste se convierte en cosa de Dios e intocable, de tal forma que, si alguna persona lo toca aunque sea por accidente, debe morir18, y las cosas que lo toquen pertenecerán al santuario. Estas consecuencias resultan de la creencia que el contacto con lo que es santo, sagrado, es contagioso.19 Si la impureza se transmite por contagio, sea por la experiencia natural en ciertas enfermedades, sea por la creencia en los espíritus, cuya esfera de acción se extiende hasta allí..., el contagio en lo sagrado debe seguir el mismo camino, porque, como consecuencia del contacto, lo divino extiende de algún modo su dominio, y así, el objeto consagrado a Dios no puede ser considerado como profano y de libre uso. En una religión muy espiritual no se cree en el contagio propiamente dicho, pero se toman medidas que fluyen de la idea misma de santidad para mantener los límites entre lo sagrado y lo profano, y, en definitiva, para inspirar respeto de lo sagrado.20

El Holocausto Perpetuo (38-46).
38He aquí lo que sobre el altar ofrecerás: dos corderos primales cada día perpetuamente, 39uno por la mañana, el otro entre dos luces; 40con el primero ofrecerás un décimo de flor de harina amasado con un cuarto de hin de aceite de oliva machacada y una libación de un cuarto de hin de vino. 41El segundo cordero lo ofrecerás entre dos luces, con una ofrenda y una libación iguales a las de la mañana, en olor de suavidad; 42es sacrificio por el fuego a Yahvé, holocausto perpetuo en vuestras generaciones, a la entrada del tabernáculo de la reunión, ante Yahvé, allí donde me haré presente para hablarte. 43Allí me haré yo presente a los hijos de Israel y será consagrado por mi gloria. 44Yo consagraré el tabernáculo de la reunión y el altar, y consagraré a Aarón y a sus hijos para que sean sacerdotes a mi servicio. 45Habitaré en medio de los hijos de Israel y seré su Dios. 46Conocerán que yo, Yahvé, soy su Dios, que los he sacado de la tierra de Egipto para habitar entre ellos; yo, Yahvé, su Dios.

El holocausto perpetuo era el tributo que dos veces al día debía ofrecer Israel en el altar a su Dios. No se omitía ni en los días más solemnes, en que se ofrecían al Señor otros sacrificios21. El mismo precepto se repite detalladamente en Num_28:3-8. En los libros de los Reyes y de los Paralipómenos se hace mención con frecuencia de estos sacrificios22. Después del cautiverio este sacrificio se reanudó, creyendo que la salud de Israel estaba ligada a la ofrenda del doble sacrificio perpetuo23. En el libro de Daniel se habla con emoción de la supresión del sacrificio perpetuo como la mayor calamidad para su pueblo24. Por eso el primer cuidado de Judas Macabeo al reanudar el culto en el santuario profanado fue restaurar este sacrificio perpetuo25. Esto prueba la importancia que se dio en la historia de Israel a este sacrificio.
El sacrificio se ofrecía por la mañana y por la tarde, y, como indica el nombre de holocausto (üëïí êáßù), se quemaba toda la víctima en honor de Yahvé. Era el sacrificio más perfecto, porque suponía la entrega total y desinteresada de la víctima a Dios. Al holocausto seguía la ofrenda u oblación de productos que servían para el alimento del hombre, como la harina, el aceite, el vino. Las cantidades reglamentarias eran: un décimo de efah (.) de harina y un cuarto de hin (.) de aceite y de vino (v.40). Debía ofrecerse entre dos luces, al atardecer, el vespertino (v.39), mientras que el matutino al clarear el alba.
El capítulo se termina recordando que Yahvé se manifestará en el tabernáculo de la reunión (v.42), o santuario, punto de concentración religiosa de los israelitas. En Exo_25:8 se dice: Me harán un santuario, y yo habitaré en medio de ellos. Se hará presente de un modo sensible, bien en forma de nube o de fuego; pero, sobre todo, manifestando su protección, para que reconozcan que Yahvé es el que los ha sacado victoriosamente de Egipto (v.46).

1 Exo_19:5 2 Cf. Lev c.8. 3 Cf. Lev_2:4; Lev_7:11; DBS II p.36-38; 67-68. 4 Cf. Gen_35:2; Exo_19:10; Exo_19:14; Exo_30:17-21; Exo_40:30-32. 5 El baru, o adivino asirio, debía ser ungido con aceite; cf. F. Martin, Textes assyriens et babyloniens p.297. 6 Gen_28:16-18. 7 Cf. 1Sa_10:1; 1Sa_10:6; 1Sa_16:13; Isa_61:1. 8 Cf. Exo_28:41; Exo_30:30; Exo_40:15; Lev_7:36. 9 Cf. sobre el sacrificio por el pecado Lev 4 y el comentario. 10 Cf. Lev 3 y coment. 11 Cf. Lev_8:22-31; Filón, Vita Mosis II 150. 12 P. Heinisch, o.c., p.220. 13 Así A. Clamer, o.c., p.244. 14 Cf. Lev_7:30. 15 Cf. Lev_7:30; Lev_7:32. 16 Cf. Lev_3:1-17; Lev_7:11; Lev_8:31-32. 17 Cf. Eze_43:18-27; 2Sa_6:6-10; Num_4:15-20. 18 Cf. Num_4:15; 2Sa_6:6-7. 19 A. Clamer, o.c., p.246. 20 M. J. Lagrange, études sur les religions sémitiques p. 152-153. 21 Cf. Num_28:10; Num_28:15; Num_28:31; Num_29:6. 22 Cf. 1Re_18:29; 2Re_2:20; 2Re_16:15; 1Cr_16:40; 2Cr_2:4; 2Cr_31:3. 23 Cf. Esd_3:3. 24 Dan_8:11; Dan_9:27; Dan_11:31. 25 1Ma_1:47.

King James Version (KJVO) (1611)



Chapter XXIX.

1 The sacrifice and ceremonies of consecrating the Priests. 38 The continuall burnt offering. 45 Gods promise to dwell among the children of Israel.
1 And this is the thing that thou shalt doe vnto them, to hallow them, to minister vnto me in the Priests office: [ Lev_9:2.] Take one yong bullocke, and two rammes without blemish,
2 And vnleauened bread, and cakes

[The consecration of the Priests.]

unleauened, tempered with oyle, and wafers vnleauened, annointed with oile: of wheaten flowre shalt thou make them.
3 And thou shalt put them into one basket, and bring them in the basket, with the bullocke and the two rammes.
4 And Aaron and his sonnes thou shalt bring vnto the doore of the Tabernacle of the Congregation, and shalt wash them with water.
5 And thou shalt take the garments, and put vpon Aaron the coat, and the robe of the Ephod, and the Ephod, and the brestplate, and gird him with the curious girdle of the Ephod.
6 And thou shalt put the Miter vpon his head, and put the holy Crowne vpon the Miter.
7 Then shalt thou take the annointing [ Leviticus 30.25.] oyle, and powre it vpon his head, and annoint him.
8 And thou shalt bring his sonnes, and put coats vpon them.
9 And thou shalt gird them with girdles, (Aaron and his sonnes) and [ Hebrew: bind.] put the bonnets on them: and the priests office shall be theirs for a perpetuall statute: and thou shalt [ Hebrew: fill the hand of.] [ Leviticus 28.41.] consecrate Aaron and his sonnes.
10 And thou shalt cause a bullocke to bee brought before the Tabernacle of the Congregation: and [ Lev_1:4 .] Aaron and his sonnes shall put their hands vpon the head of the bullocke.
11 And thou shalt kill the bullocke before the Lord, by the doore of the Tabernacle of the Congregation.
12 And thou shalt take of the blood of the bullocke, and put it vpon the hornes of the altar with thy finger, and powre all the blood beside the bottome of the Altar.
13 And [ Lev_3:3 .] thou shalt take all the fat that couereth the inwards, and [ It seemeth by Anatomy, and the Hebrewe Doctours, to be the midriffe.] the caule that is aboue the liuer, and the two kidneis, and the fat that is vpon them, and burne them vpon the altar.
14 But the flesh of the bullocke, and his skinne, and his doung shalt thou burne with fire without the campe, it is a sinne offering.
15 Thou shalt also take one ram, and Aaron and his sonnes shall put their hands vpon the head of the ram.
16 And thou shalt slay the ramme, and thou shalt take his blood, and sprinkle it round about vpon the altar.
17 And thou shalt cut the ramme in

[The consecration of the Priests.]

pieces, and wash the inwards of him, and his legs, and put them vnto his pieces, and [ Or, vpon.] vnto his head.
18 And thou shalt burne the whole ramme vpon the Altar: it is a burnt offering vnto the Lord: It is a sweet sauour, an offering made by fire vnto the Lord.
19 And thou shalt take the other ramme: and Aaron and his sonnes shall put their hands vpon the head of the ramme.
20 Then shalt thou kill the ramme, and take of his blood, and put it vpon the tip of the right eare of Aaron, and vpon the tip of the right eare of his sonnes, and vpon the thumbe of their right hand, and vpon the great toe of their right foot, and sprinckle the blood vpon the Altar round about.
21 And thou shalt take of the blood that is vpon the Altar, and of the anointing oyle, and sprinkle it vpon Aaron, and vpon his garments, and vpon his sonnes, and vpon the garments of his sonnes with him: and hee shall be hallowed, and his garments, and his sonnes, and his sonnes garments with him.
22 Also thou shalt take of the ram the fat and the rumpe, and the fat that couereth the inwards, & the caule aboue the liuer, and the two kidneis, and the fat that is vpon them, and the right shoulder, for it is a ram of consecration:
23 And one loafe of bread, and one cake of oyled bread, and one wafer out of the basket of the vnleauened bread, that is before the Lord.
24 And thou shalt put all in the hands of Aaron, and in the hands of his sonnes, and shalt [ Or, shake to and fro .] waue them for a waue-offering before the Lord.
25 And thou shalt receiue them of their hands, and burne them vpon the Altar for a burnt offering, for a sweet sauour before the Lord: it is an offering made by fire vnto the Lord.
26 And thou shalt take the brest of the ramme of Aarons consecrations, and waue it for a waue-offering before the Lord, and it shalbe thy part.
27 And thou shalt sanctifie the brest of the waue-offering, and the shoulder of the heaue offering, which is waued, and which is heaued vp of the ramme of the consecration, euen of that which is for Aaron, and of that which is for his sonnes.

[The consecration of the Priests.]

28 And it shalbe Aarons, and his sonnes by a statute for euer, from the children of Israel: for it is an heaue offering: and it shall be an heaue offering from the children of Israel, of the sacrifice of their peace offrings, euen their heaue offering vnto the Lord.
29 And the holy garments of Aaron shall be his sonnes after him, to bee anoynted therein, and to be consecrated in them.
30 And [ Hebrew: He of his sonnes .] that sonne that is Priest in his stead, shal put them on seuen dayes, when he commeth into the Tabernacle of the Congregation to minister in the holy place.
31 And thou shalt take the ramme of the consecration, and seethe his flesh in the holy place.
32 And Aaron and his sonnes shall eate the flesh of the ramme, and the [ Lev_8:31 ; Mat_12:4 .] bread that is in the basket, by the doore of the Tabernacle of the Cogregation.
33 And they shall eate those things, wherewith the atonement was made, to consecrate and to sanctifie them: but a stranger shall not eate thereof, because they are holy.
34 And if ought of the flesh of the consecrations, or of the bread remaine vnto the morning, then thou shalt burne the remainder with fire: it shall not be eaten, because it is holy.
35 And thus shalt thou doe vnto Aaron, and to his sonnes, according to all things which I haue commaunded thee: seuen dayes shalt thou consecrate them.
36 And thou shalt offer euery day a bullocke for a sinne offering, for atonement: and thou shalt clense the Altar, when thou hast made an atonement for it, and thou shalt anoynt it, to sanctifie it.
37 Seuen dayes thou shalt make an atonement for the Altar, and sanctifie it: and it shalbe an Altar most holy: whatsoeuer toucheth the Altar, shalbe holy.
38 Now this is that which thou shalt offer vpon the Altar; [ Num_28:3 .] two lambs of the first yere, day by day continually.
39 The one lambe thou shalt offer in the morning: and the other lambe thou shalt offer at euen:
40 And with the one lambe a tenth deale of flowre mingled with the fourth part of an Hin of beaten oyle: and the fourth part of an Hin of wine for a drinke offering.

[The consecration of the Priests.]

41 And the other lambe thou shalt offer at Euen, and shalt doe thereto, according to the meat offering of the morning, and according to the drinke offering thereof, for a sweet sauour, an offering made by fire vnto the Lord.
42 This shalbe a continuall burnt offering throughout your generations, at the doore of the Tabernacle of the Congregation, before the Lord, where I wil meete you, to speake there vnto thee.
43 And there I will meet with the children of Israel: and [ Or, Israel.] the Tabernacle shalbe sanctified by my glory.
44 And I will sanctifie the Tabernacle of the Congregation, and the Altar: I will sanctifie also both Aaron and his sonnes, to minister to me in the Priests office.
45 And [ Lev_26:12 ; 2Co_6:16 .] I will dwell amongst the children of Israel, and will be their God.
46 And they shall know that I am the Lord their God, that brought them foorth out of the land of Egypt, that I may dwell amongst them: I am the Lord their God.

Nuevo Comentario Bíblico Siglo XXI (Editorial Mundo Hispano, 2019)



La consagración de los sacerdotes. Las instrucciones respecto a la consagración de Aarón y sus hijos forman una secuela natural del pasaje anterior. Para que los sacerdotes ministren en la presencia santa de Dios también deben ser santos. Como el libro de Exo. revela en diferentes ocasiones, sólo Dios tiene una naturaleza innata, por tanto deben tomarse varias medidas si un ser humano ha de llegar a ser santo. El presente relato revela las etapas mencionadas en 28:41 que conducen a la consagración de los sacerdotes: vestir, ungir, llenar sus manos y consagrar.

Después de reunir los elementos necesarios (1-3), Moisés debía vestir a Aarón y a sus hijos con sus vestimentas sacerdotales (5-9). Luego debía ofrecer tres diferentes sacrificios, que incluían un novillo y dos carneros. El primero (10-14 mejor entendido como ofrenda de purificación) implicaba un novillo, y seguía muy de cerca las instrucciones dadas con posterioridad en Lev. 4:3-12 en relación con un pecado no intencional de un sacerdote ungido. Sin embargo, en esta instancia probablemente la sangre se ponía en los cuernos del gran altar de bronce en el atrio y no en el incensario de oro del altar en el tabernáculo (12; cf. Lev. 4:7). La sangre purificaba el altar que había sido profanado por el contacto con individuos que eran considerados inmundos.

El siguiente sacrificio (un holocausto, vv. 15-18) seguía exactamente las instrucciones dadas más tarde en Lev. 1:10-13 para la ofrenda del carnero. El holocausto expiaba los pecados de Aarón y de sus hijos. La destrucción total del animal era un vívido recordatorio de que el hombre pecador no podía acercarse al Dios santo. El animal moría como substituto de aquellos que fueron identificados con éste al poner sus manos sobre su cabeza. El tercer sacrificio (19-34) se asemejaba íntimamente al compañerismo o a la ofrenda de paz, hecha como una expresión de agradecimientos (cf. Lev. 3:6-11; 7:12-15).

Sin embargo, a pesar de las similitudes con las ofrendas regulares, el ritual descrito aquí tiene aspectos distintivos, apropiados para la exclusividad de la ocasión. Primero, Aarón, sus hijos y sus vestimentas debían ser consagradas por sangre de sacrificio (19-21); todo lo que la sangre tocaba llegaba a ser santo. El sacerdote debía tener oídos consagrados para escuchar siempre la voz santa de Dios; manos consagradas en todo tiempo para hacer obras santas; y pies consagrados para caminar siempre en caminos santos (A. Dillmann, Exodus und Leviticus, 2nd edn [Hirzel, 1880], p. 465). Segundo, los vv. 22-35 se centran en la remuneración que Aarón y sus hijos recibirían como sacerdotes. La RVA se refiere a éste como el carnero de la investidura (22; cf. 29:26, 27, 31, 34). Lit. esto es el carnero de [la] llenura. Esta llenura se refiere a la porción que los sacerdotes recibían en sus manos después de ofrecer diferentes sacrificios (cf. Lev. 6:14-18, 25-29; 7:1-38). Este ritual que Moisés debía ejecutar consagraba el muslo derecho y el pecho del animal de sacrificio para el consumo sacerdotal. Una distinción se trazaba entre el pecho que era de la ofrenda mecida, y el muslo que era de la ofrenda alzada (27). En este caso, el pecho se daba a Moisés como su recompensa por ofrecer el sacrificio (26) y el muslo era quemado en el altar, junto con algunos panes (25). En futuras ocasiones, después de consagrarse los sacerdotes, el pecho del sacrificio de la comunión debía ser presentado a todos los sacerdotes, y el muslo dado al sacerdote que oficiaba (Lev. 7:28-36). Aparte del pecho, muslo y varias porciones grasosas, el resto del carnero era cocinado y comido, junto con el pan sobrante, a la entrada del tabernáculo. Sólo a los sacerdotes se les permitía comer esta comida sagrada.

El ritual bosquejado en los vv. 1-34 era esencial para la consagración de los sacerdotes. Muchos comentaristas creen, sobre la base del v. 35, que este ritual debía ser repetido cada día por siete días. Alternativamente, los sacrificios bosquejados en los vv. 36-41 pueden haber sido ofrecidos durante los siguientes seis días, con Aarón y sus hijos bajo estricta instrucción de permanecer en el atrio del tabernáculo (cf. Lev. 8:33-35). En cualquier caso, el proceso de consagración o santificación requería tiempo.

Luego se le instruyó a Moisés sobre la consagración del altar (36, 37). El sacrificio del novillo como un sacrificio por el pecado se asemeja al sacrificio mencionado en los vv. 10-14. La muerte del animal purificaba el altar al hacer expiación; el ungimiento del altar con sangre lo hacía santo (36). Este debía ser repetido por siete días. Finalmente, recibieron instrucciones con respecto al sacrificio diario de dos corderos como holocausto; un animal debía ser sacrificado en la mañana, el otro al atardecer. Estos debían ser ofrendas regulares, diariamente ofrecidas después que los sacerdotes y el altar hubieran sido completamente consagrados. Los vv. 42, 43 destacan el propósito de estas instrucciones: El establecimiento del rito de sacrificio era un requisito necesario antes de que Dios se reuniera con los israelitas. Como Dios afirmó: También me encontraré allí con los hijos de Israel, y el lugar será santificado por mi gloria (43). Como el v. 46 lo deja claro, el propósito final de la liberación de los israelitas de Egipto era que Dios pudiera habitar en medio de los hijos de Israel. El cumplimiento de las instrucciones con respecto a la consagración de Aarón y sus hijos se registra en Lev. 8:1-36.

Notas. 4 Pureza y limpieza estaban íntimamente asociadas con ser santo (cf. 19:10, 14). 14 La ofrenda por el pecado se entiende mejor como una ofrenda de purificación (véase Lev. 4:1-5:13; 6:24-30).

Sagrada Biblia (Conferencia Episcopal Española, 2011)

*24:12-40:38 Mientras que la primera y la última parte de la sección (Éxo 24:1-18; Éxo 25:1-40; Éxo 26:1-37; Éxo 27:1-21; Éxo 28:1-43; Éxo 29:1-46; Éxo 30:1-38; Éxo 31:1-18 y Éxo 35:1-35; Éxo 36:1-38; Éxo 37:1-29; Éxo 38:1-31; Éxo 39:1-43; Éxo 40:1-38) giran en torno al Santuario, la parte central gravita en torno al becerro de oro y la alianza renovada (Éxo 32:1-35; Éxo 33:1-23; Éxo 34:1-35). La nube y la gloria del Señor, símbolos de la presencia divina, abren y cierran la sección (Éxo 24:15-18 y Éxo 40:34-38).

La Biblia de Nuestro Pueblo (Liturgical Press, 2006),

Ritual de consagración. Los versículos 1-9 se refieren al rito de la consagración sacerdotal. Este rito comprende tres momentos importantes: la purificación mediante el baño (4), la imposición de los ornamentos (5s) y la unción (7). El versículo 9b declara la perpetuidad del sacerdocio de Aarón y sus descendientes. Es probable que un rito como éste sólo haya empezado a verse en Israel después del exilio (587-534 a.C.), cuando el sumo sacerdote asume prácticamente el papel de rey.
Los ritos de consagración del sacerdote y del altar duraban siete días (37) y contemplan tres tipos de sacrificios: 1. El novillo que se ofrece por el pecado (10-14); de esta víctima no se puede comer nada, porque es ofrecida como expiación. 2. Se sacrifica un carnero, el cual se ofrece en holocausto, es decir, se quema todo en presencia de Dios (15-18). 3. El sacrificio de un carnero, cuyo sacrificio es de comunión (19-25.31-37). La parte que corresponde al sacerdote es el pecho (26-28). En esta comida, que tiene la característica de ser sagrada, no participan los laicos (33b). Nótese cómo para resaltar el carácter sagrado del altar se estipulan siete días de duración para su consagración y el sacrificio diario de un novillo con cuya sangre debía ser ungido el altar (36). Era tal la santidad del altar, que quien lo tocase quedaba santificado (37).
La convicción de la permanente presencia del Señor en medio de su pueblo hace que éste le ofrezca continuamente sus dones y ofrendas, convicción concreta de la corriente sacerdotal (P). La detallada elaboración de todos estos utensilios, ornamentos y ritos cultuales son puestos bajo la autoridad del mismo Dios que los sacó de Egipto (46).

Dios Habla Hoy (Sociedades Bíblicas Unidas, 1996)



Dios Habla Hoy 1996 Notes:



[1] 29.18 Olor agradable: expresión usual para indicar que Dios aceptaba las ofrendas y los sacrificios (Gn 8.21).

[2] 29.20 Al untar con sangre estas partes del cuerpo se simbolizaba la consagración de toda la persona.

[3] 29.22 Referencia a una raza oriental de carnero que tenía la cola muy ancha y llena de grasa.

Nueva Biblia de Jerusalén (1998) - referencias, notas e introducciones a los libros


REFERENCIAS CRUZADAS

[1] Lev_8:31

Nueva Biblia de Jerusalén (Desclée, 1998)


REFERENCIAS CRUZADAS

[1] Lev_8:31

Torres Amat (1825)



[13] Lev 3, 3.

[32] Lev 8, 31; 24, 9; Mat 12, 4.

[37] La santidad que debe tener quien toque el altar.

[38] Num 28, 3.

[40] El hin equivale aproximadamente a 3.66 litros.