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Las ranas se apartarán de ti, de tus casas, de tus siervos y de tu pueblo, y quedarán sólo en el Río.» (Exodo  8, 7) © Nueva Biblia de Jerusalén (Desclee, 1998)

BHSEk - Biblia Hebraica Stuttgartensia (Enhanced; KJV versification)

וַ‎(וְ)

Hebrew|wa|and

Part-of-speech: conjunction
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[f.ab.aa] [519]
[ו] [GES1991] [BDB2226] [HAL2241]

יַּֽעֲשׂוּ‎(עָשָׂה)

Hebrew|yyˈaʕᵃśû-|make

Part-of-speech: verb
Gender: masculine
Number: plural
Person: third person
State: not applicable
Verbal tense: wayyiqtol
Verbal stem: qal


[H6213] [p.fy.aa] [1708]
[עשה] [GES6129] [BDB6780] [HAL6711]

כֵ֥ן‎(כֵּן)

Hebrew|ḵˌēn|thus

Part-of-speech: adverb
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H3651] [k.by.aa] [964b]
[כן] [GES3545] [BDB3960] [HAL3926]

הַֽ‎(הַ)

Hebrew|hˈa|the

Part-of-speech: article
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[e.ab.aa] [459]
[ה] [GES1804] [BDB2019] [HAL2031]

חֲרְטֻמִּ֖ים‎(חַרְטֹם)

Hebrew|ḥᵃrṭummˌîm|magician

Part-of-speech: noun
Gender: masculine
Number: plural
Person: not applicable
State: absolute
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H2748] [h.fq.ac] [738b]
[חרטם] [GES2643] [BDB2974] [HAL2959]

בְּ‎(בְּ)

Hebrew|bᵊ|in

Part-of-speech: preposition
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[b.ab.aa] [193]
[ב] [GES855] [BDB923] [HAL939]

לָטֵיהֶ֑ם‎(לָט)

Hebrew|lāṭêhˈem|secrecy

Part-of-speech: noun
Gender: masculine
Number: plural
Person: not applicable
State: absolute
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H3909] [l.ax.ab] [1092a]
[לט] [GES3826] [BDB4261] [HAL4216]

וַ‎(וְ)

Hebrew|wa|and

Part-of-speech: conjunction
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[f.ab.aa] [519]
[ו] [GES1991] [BDB2226] [HAL2241]

יַּעֲל֥וּ‎(עָלָה)

Hebrew|yyaʕᵃlˌû|ascend

Part-of-speech: verb
Gender: masculine
Number: plural
Person: third person
State: not applicable
Verbal tense: wayyiqtol
Verbal stem: hif‘il


[H5927] [p.cs.aa] [1624]
[עלה] [GES5859] [BDB6482] [HAL6403]

אֶת‎(אֵת)

Hebrew|ʔeṯ-|[object marker]

Part-of-speech: preposition
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H853] [a.gm.aa] [186]
[את] [GES828] [BDB894] [HAL913]

הַֽ‎(הַ)

Hebrew|hˈa|the

Part-of-speech: article
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[e.ab.aa] [459]
[ה] [GES1804] [BDB2019] [HAL2031]

צְפַרְדְּעִ֖ים‎(צְפַרְדֵּעַ)

Hebrew|ṣᵊfardᵊʕˌîm|frog

Part-of-speech: noun
Gender: feminine
Number: plural
Person: not applicable
State: absolute
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H6854] [r.dr.ad] [1963]
[צפרדע] [GES6806] [BDB7489] [HAL7428]

עַל‎(עַל)

Hebrew|ʕal-|upon

Part-of-speech: preposition
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H5921] [k.bg.ac] [1624p]
[על] [GES5848] [BDB6471] [HAL6395]

אֶ֥רֶץ‎(אֶרֶץ)

Hebrew|ʔˌereṣ|earth

Part-of-speech: noun
Gender: unknown
Number: singular
Person: not applicable
State: construct
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H776] [a.fx.aa] [167]
[ארץ] [GES751] [BDB802] [HAL824]

מִצְרָֽיִם‎(מִצְרַיִם)

Hebrew|miṣrˈāyim|Egypt

Part-of-speech: proper noun
Gender: unknown
Number: singular
Person: not applicable
State: absolute
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H4714] [m.df.ab] [1235]
[מצרים] [GES4629] [BDB5169] [HAL5069]

Biblia Comentada, Profesores de Salamanca (BAC, 1965)



8. Otras Plagas Sobre Egipto.

La Segunda Plaga: Las Ranas (1-11).
1Yahvé dijo a Moisés: Dile a Aarón: Extiende tu mano con el cayado sobre los ríos, sobre los canales y sobre los estanques, y haz subir ranas sobre la tierra de Egipto. 2Aarón extendió su mano sobre las aguas de Egipto, y subieron las ranas y cubrieron la tierra de Egipto. 3Pero los magos hicieron otro tanto con sus encantamientos, haciendo subir ranas sobre la tierra de Egipto. 4El faraón llamó a Moisés y a Aarón y les dijo: Pedid a Yahvé que aleje de mí y de mi pueblo las ranas, y dejaré salir al pueblo a sacrificar a Yahvé. 5Moisés dijo al faraón: Dime cuándo he de rogar por ti, por tus servidores y por todo tu pueblo, para que aleje Yahvé las ranas de ti y de tus casas y no queden más que en el río. 6Mañana, respondió él. Moisés le dijo: Así será, y para que sepas que no hay como Yahvé, nuestro Dios, 7las ranas se alejarán de ti y de tus casas, de tus servidores y de tu pueblo, y no quedarán más que en el río. 8Salieron Moisés y Aarón de la casa del faraón, y Moisés rogó a Yahvé sobre lo que de las ranas había prometido al faraón. 9Hizo Yahvé como le pedía Moisés, y murieron las ranas en las casas, en los atrios y en los campos. 10Reuniéronlas en los montes, y se infestó la tierra. 11Pero el faraón, viendo que se le daba respiro, endureció su corazón, y no escuchó a Moisés y a Aarón, como Yahvé había dicho.

Sabido es cómo el valle de Egipto, muy llano, está regado por el Nilo, del que se derivan canales para extender el riego por toda la tierra circundante, y en donde se forman fácilmente estanques y charcas. Esto favorece la multiplicación de las ranas. El texto sagrado nos habla de una inundación de estos batracios hasta venir a constituir una verdadera plaga. Pero de nuevo encontramos un fenómeno literario semejante al de la plaga anterior. Moisés ordena a Aarón que se presente al faraón con la petición de antes, amenazándole con la plaga de las ranas, que invadirían toda la tierra, hasta las casas y dormitorios1. Luego es Aarón el que ha de ejecutar el prodigio con el cayado, tendiéndolo sobre las aguas del río, los canales y estanques de todo Egipto, con los efectos universales que antes ya se han descrito. Pero los magos pudieron hacer otro tanto. Lo que no lograron fue hacer desaparecer aquella innumerable plaga2. Por ello, el faraón tuvo que acudir a Moisés y a Aarón, prometiéndoles el permiso solicitado para que fueran a sacrificar a Yahvé en el desierto. Y en la hora señalada por el rey, Moisés hizo desaparecer las ranas de la tierra de Egipto, quedando sólo en su elemento natural el río, después de lo cual el faraón desistió de su promesa, para dar lugar a que Dios mostrase más su poder ante los egipcios. El Sabio considera todo esto como el castigo por la estúpida adoración de los animales entre los egipcios3. También en este relato parece que se entrelazan los documentos o tradiciones antiguas. Esta plaga está íntimamente ligada con el prodigio anterior, ya que la inundación putrefacta de agua trae como consecuencia la abundancia de ranas. También aquí habrá que explicarlo acudiendo al milagro quoad modum, es decir, en cuanto a sus circunstancias concretas. Y también aquí debemos recordar lo que hemos indicado antes sobre el género literario hiperbólico y taumatúrgico, tan querido de los pueblos de mentalidad primitiva. Entre los egipcios había una divinidad llamada Hqet, representada con cabeza de rana. Los magos pudieron acudir a ella con sus encantamientos para acabar con la plaga, pero fracasaron, y entonces el faraón acudió a Moisés. Este, para que quedara claro que era debido a Yahvé todo lo que hacía y no a ninguna otra divinidad, exigió la demanda antes hecha de que se les permitiera salir para adorarle en el desierto.

Tercera Plaga: los Mosquitos (12-15).
12Yahvé dijo a Moisés: Dile a Aarón: Extiende tu cayado y golpea el polvo de la tierra, que se convertirá en mosquitos en toda la tierra de Egipto. 13Aarón extendió su mano con el cayado y golpeó el polvo de la tierra, y vinieron mosquitos sobre los hombres y los animales. Todo el polvo de la tierra se convirtió en mosquitos en toda la tierra de Egipto. 14Los magos quisieron hacer otro tanto con sus encantamientos, pero no pudieron. Había mosquitos sobre hombres y animales, 15y los magos dijeron al faraón: El dedo de Dios está aquí. Pero el corazón del faraón se endureció, y, como había dicho Yahvé, no escuchó.

Todas las plagas con que Dios, por medio de sus siervos, tiende a lograr la libertad de su pueblo y a darse a conocer como único Dios verdadero, así a los egipcios como a los hebreos, responden a fenómenos naturales de Egipto. La abundancia de mosquitos, que brotan de las aguas estancadas, es también grande en el valle del Nilo, y ellos, con el abandono de las gentes, son causa del gran número de enfermos de los ojos que aún hoy día se ven por aquellas latitudes. Sin preámbulo alguno, Moisés y Aarón traen esta plaga sobre Egipto, que los magos no pueden imitar, teniendo que confesar avergonzados que el dedo de Dios estaba allí4. Nótese la expresión del texto: todo el polvo de la tierra se convirtió en mosquitos en toda la tierra de Egipto. De nuevo es necesario acudir al género literario hiperbólico para explicar estas afirmaciones radicales. Para el autor sagrado, este portento es el triunfo de Yahvé sobre la sabiduría y la magia famosas de Egipto.

Cuarta Plaga; los Tábanos (16-28).
16Yahvé dijo a Moisés: Levántate temprano y preséntate al faraón al tiempo que sale él para ir a la ribera, y dile: Así habla Yahvé: Deja ir a mi pueblo para que me dé culto. 17Si no dejas ir a mi pueblo, voy a mandar tábanos contra ti, contra tus servidores y contra tu pueblo, contra vuestras casas, y se llenarán de ellos las casas de los egipcios y la tierra que éstos habitan; 18pero distinguiré en ese día el país de Gosén, donde habita mi pueblo, y allí no habrá tábanos, para que sepas que yo soy Yahvé en medio de la tierra. 19Haré distinción entre mi pueblo y el tuyo. Mañana será este prodigio. 20Hízolo así Yahvé, y vino una muchedumbre de tábanos sobre la casa del faraón y las de sus servidores, y sobre la tierra de Egipto, y se corrompió la tierra por los tábanos. 21Llamó el faraón a Moisés y a Aarón y les dijo: Id y sacrificad a vuestro Dios en esta tierra. 22Pero Moisés respondió: No puede ser así, pues para los egipcios es abominación el sacrificio que nosotros hacemos, y si a su vista lo ofreciéramos, nos apedrearían. 23Tenemos que ir por el desierto tres días de camino, para sacrificar a Yahvé, nuestro Dios, como él nos diga. 24El faraón contestó: Yo os dejaré que vayáis a sacrificar a Yahvé, vuestro Dios, en el desierto; pero no os vayáis más lejos, y rogad por mí. 25Moisés respondió: Al salir de tu casa, rogaré por ti a Yahvé, y mañana se alejarán los tábanos del faraón, de sus servidores y de su pueblo; pero que el faraón no nos engañe más, y permita al pueblo ir a sacrificar a Yahvé. 26Salió Moisés de casa del faraón y rogó a Yahvé. 27Yahvé hizo lo que le pedía Moisés, y los tábanos se alejaron del faraón, de sus servidores y del pueblo, sin quedar ni uno. 28Pero el faraón endureció su corazón también esta vez y no dejó salir al pueblo.

Como los mosquitos, así las moscas5 abundan en Egipto, y constituyen, si no una plaga, una verdadera molestia. La que aquí trae Dios es una verdadera plaga, en cuya producción Dios no interviene más que en el anuncio del azote y en la retirada del mismo. Para que la mano de Dios sea más visible, se anuncia que la región habitada por los hebreos estará libre6. La introducción es como en la primera plaga: Yahvé ordena a Moisés que salga de mañana al encuentro del faraón, a quien renueva la petición, amenazándole con plaga de moscas o tábanos que vendrán sobre Egipto, exceptuada la tierra de Gosén. El faraón comienza a ceder. Los autoriza para sacrificar en Egipto; pero Moisés, con el pretexto de no sobreexcitar los ánimos de los egipcios con sus sacrificios, que para éstos son abominación, rechaza la propuesta. En efecto, los egipcios tenían sus dioses y sus animales sagrados, y era peligroso dedicar alguno de éstos a un dios extraño, como pasó en el siglo V a.C. en la colonia de Elefantina (Alto Egipto): Los papiros de Elefantina, que datan del siglo V a.C., aluden a las disensiones de esta índole entre judíos y sacerdotes de Khnum, que se insurreccionaron por ver a los colonos judíos sacrificar el carnero, animal sagrado del dios de la catarata. Amón, venerado en todo Egipto, tenía también un carnero como animal sagrado. En el Delta había muchas divinidades adoradas en forma de carneros, de machos cabríos y de toros.7 Supuesta esta mentalidad, es perfectamente explicable la excusa buscada por Moisés. El faraón accede, al fin, a lo que se pide, pero suplica, a su vez, que los hebreos no vayan más allá de lo convenido: distancia de tres días de camino hacia el desierto8. Esta concesión estaba motivada por la presencia de la plaga, y, cuando ésta pasó, se volvió atrás. En toda esta narración no interviene Aarón, que en otras plagas es el ejecutor material de las órdenes de Moisés.

1 Exo_7:25-29. 2 Exo_8:1-4. 3 Sab 11:16s; 15:185. 4 Cf. Sal_105:31. 5 La palabra que traducimos por tábano, en hebreo es 'arob, que literalmente significa enjambre. La Bible de Jérusalem traduce también taons o tábanos. 6 Cf. Sab_16:9. 7 B. Courayer, L'Exode (Bible de Jérusalem) p.53. 8 Cf. Exo_3:18; Exo_5:3.

King James Version (KJVO) (1611)



Chapter VIII.

1 Frogges are sent. 8 Pharaoh sueth to Moses, 12 and Moses by prayer remoueth them away. 16 The dust is turned into lice, which the Magicians could not doe. 20 The swarmes of flies. 25 Pharaoh inclineth to let the people goe, 32 but yet is hardened.
1 And the Lord spake vnto Moses, Goe vnto Pharaoh, and say vnto him; Thus sayeth the Lord, Let my people goe, that they may serue me.
2 And if thou refuse to let them goe, beholde, I will smite all thy borders with frogges.
3 And the riuer shall bring foorth frogges abundantly, which shall goe vp and come into thine house, and into thy bed-chamber, and vpon thy bed, and into the house of thy seruants, and vpon thy people, and into thine ouens, and into thy [ Or, dough .] kneading troughes.

[Plagues of frogges, of lyce, of flyes,]
4 And the frogges shall come vp both on thee, and vpon thy people, and vpon all thy seruants.
5 And the Lord spake vnto Moses; Say vnto Aaron, Stretch foorth thine hand with thy rodde ouer the streames, ouer the riuers, and ouer the ponds, and cause frogges to come vp vpon the land of Egypt.
6 And Aaron stretched out his hand ouer the waters of Egypt, and the frogges came vp, and couered the land of Egypt.
7 [ Wis_17:7 .] And the Magicians did so with their inchantments, and brought vp frogges vpon the land of Egypt.
8 Then Pharaoh called for Moses, and Aaron, and said, Intreat the Lord, that hee may take away the frogges from me, and from my people: and I will let the people goe, that they may doe sacrifice vnto the Lord.
9 And Moses saide vnto Pharaoh, [ Or haue this honour ouer me, etc.] Glory ouer mee: [ Or, against when.] when shall I entreat for thee, and for thy seruants, and for thy people, to [ Hebrew: to cut off.] destroy the frogges from thee, and thy houses, that they may remaine in the riuer onely?
10 And he said, [ Or, against to morrow.] To morrow. And hee said, Bee it according to thy word: That thou mayest know that there is none like vnto the Lord our God.
11 And the frogs shall depart from thee, and from thy houses, and from thy seruants, and from thy people; they shall remaine in the riuer onely.
12 And Moses and Aaron went out from Pharaoh, and Moses cried vnto the Lord because of the frogs which he had brought against Pharaoh.
13 And the Lord did according to the word of Moses: and the frogges died out of the houses, out of the villages, and out of the fields.
14 And they gathered them together vpon heapes, and the land stanke.
15 But when Pharaoh saw that there was respit, he hardned his heart, and hearkened not vnto them, as the Lord had said.
16 And the Lord saide vnto Moses, Say vnto Aaron, Stretch out thy rod, and smite the dust of the land, that it may become lice, thorowout all the land of Egypt.
17 And they did so: for Aaron stretched out his hand with his rod, and smote the dust of the earth, and it became lice, in man and in beast: all the

[Plagues of frogges, of lyce, of flyes,]
ust of the land became lice throughout all the land of Egypt.
18 And the Magicians did so with their enchantments to bring foorth lice, but they could not: so there were lice vpon man and vpon beast.
19 Then the Magicians said vnto Pharaoh; This is the singer of God. And Pharaohs heart was hardned, and he hearkened not vnto them, as the Lord had said.
20 And the Lord saide vnto Moses, Rise vp early in the morning, and stand before Pharaoh: loe, he commeth foorth to the water, and say vnto him; Thus saith the Lord, Let my people goe, that they may serue me.
21 Els, if thou wilt not let my people goe, beholde, I will send [ Or, a mixture of noysome beasts, etc.] swarmes of flies vpon thee, and vpon thy seruants, and vpon thy people, and into thy houses: and the houses of the Egyptians shall bee full of swarmes of flies, and also the ground whereon they are.
22 And I will seuer in that day the lande of Goshen in which my people dwell, that no swarmes of flies shall be there, to the end thou maiest know that I am the Lord in the midst of the earth.
23 And I will put [ Hebrew: a redemption.] a diuision betweene my people and thy people: [ Or, by to morrow.] to morrow shall this signe be.
24 And the Lord did so: and [ Wis_16:9 .] there came a grieuous swarme of flies into the house of Pharaoh, and into his seruants houses, and into all the lande of Egypt: the land was [ Or, destroyed.] corrupted by reason of the swarme of flies.
25 And Pharaoh called for Moses and for Aaron, and said, Goe yee, sacrifice to your God in the land.
26 And Moses said, It is not meete so to doe; for we shal sacrifice the abomination of the Egyptians, to the Lord our God: Loe, shall we sacrifice the abomination of the Egyptians before their eyes, and will they not stone vs?
27 We will goe three dayes iourney into the wildernesse, and sacrifice to the Lord our God, as [ Exo_3:18 .] he shall command vs.
28 And Pharaoh said, I wil let you goe that ye may sacrifice to the Lord your God, in the wildernes: onely you shall not goe very farre away: intreate for me.
29 And Moses said, Behold, I goe

[of the murraine.]

out from thee, and I will intreate the Lord that the swarmes of flies may depart from Pharaoh, from his seruants, and from his people to morrow: but let not Pharaoh deale deceitfully any more, in not letting the people goe to sacrifice to the Lord.
30 And Moses went out from Pharaoh, and intreated the Lord:
31 And the Lord did according to the word of Moses: and he remooued the swarmes of flies from Pharaoh, from his seruants, and from his people: there remained not one.
32 And Pharaoh hardened his heart at this time also, neither would hee let the people goe.

La Biblia de Nuestro Pueblo (Liturgical Press, 2006),

Segunda plaga: ranas. Continúa la terquedad del faraón con su negativa a dejar salir al pueblo y a través de la figura de los magos y hechiceros, que repiten el mismo prodigio obrado por el Señor a través de sus emisarios Moisés y Aarón. Si a los hebreos los asiste un Dios poderoso, también Egipto -entendido aquí como sistema, como estructura de dominación- está asistido por divinidades poderosas. Ése es el gran error de quienes llegan a tener dominio: se creen amos y señores del mundo y de las vidas de las personas, con el argumento de estar asistidos por Dios. Pero también se nota una primera «limitación» o debilidad del faraón que no recurre a sus magos para liberar al país de las ranas. Esto sólo lo puede hacer el Dios de Moisés, y explícitamente se lo pide. Moisés, pues, intercede ante el Señor y el país es liberado efectivamente de la plaga; pero el faraón, con todo, se obstina de nuevo y no obedece al mandato del Señor (8,11).

Nuevo Comentario Bíblico Siglo XXI (Editorial Mundo Hispano, 2019)



La plaga de las ranas. La solicitud del faraón a Moisés (rogad a Jehovah para que quite las ranas de mí y de mi pueblo) introduce en esta sección un tema que será recurrente en otros episodios. El faraón reconoció la capacidad de Moisés de mediar con Dios para la restauración de las condiciones normales en Egipto (cf. 8:28-31; 9:28, 29, 33; 10:17, 18).

Biblia Peshitta en Español (Holman, 2015)

a Éxo 7:11; Éxo 7:22

Libro del Pueblo de Dios (San Pablo, 1990)



22. "Son una abominación para los egipcios": algunos animales, como el carnero, el chivo y el toro, eran considerados sagrados por los egipcios, y ofrecerlos en sacrificio significaba cometer una acción sacrílega.

Sagrada Biblia (Conferencia Episcopal Española, 2011)

*7:26-8:11 En la plaga de las ranas comienza a manifestarse la preocupación del faraón por la acción de este Dios, al que antes decía desconocer, y pide la intercesión de Moisés.

Dios Habla Hoy (Sociedades Bíblicas Unidas, 1996)



Dios Habla Hoy 1996 Notes:



[1] 8.23 Haré distinción: según la versión griega (LXX); heb. realizaré una liberación.

Torres Amat (1825)



[6] Sal 105 (104), 30.

[7] Sab 17, 7.

[22] El Señor confirmasu promesa de estar en medio de quienes protege. Deut 7, 21; 23, 14; Jos 3, 10.

[24] Sab 16, 9.

[27] Ex 3, 18.