Simón puso su campamento en Jadidá, frente a la llanura. (I Macabeos 13, 13) © Nueva Biblia de Jerusalén (Desclee, 1998)
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4. Simón, Principe del pueblo Judio (c.13-16).
Simón arenga a los Jadías (13:1-9).
1 Oyó Simón que había reunido Trifón un poderoso ejército para venir contra la tierra de Judá y aplastarla, 2 y, viendo al pueblo lleno de espanto y de temor, subió a Jerusalén y reunió al pueblo. 3 Los alentó, diciendo: Ya sabéis lo que yo, mis hermanos y la casa de mi padre hemos hecho por las leyes y el santuario, las guerras y las angustias que hemos soportado. 4 Por esta causa, que es la de Israel, dieron la vida todos mis hermanos, quedando yo solo. 5 No quiera el cielo que en esta hora de tribulación rehuya el peligro por amor de la vida, que no valgo yo más que mis hermanos, 6 antes tomaré la defensa de la nación y del santuario, de nuestras mujeres e hijos, ahora que, llevadas del odio, se han juntado todas las naciones para aplastarnos. 7 Se enardeció el pueblo al oír estas palabras, 8 y a grandes voces respondió, diciendo: Sé nuestro caudillo en lugar de Judas y de Jonatán tu hermano. 9 Combate nuestras batallas; cuanto nos digas lo haremos.
Simón era un guerrero. Mientras Judas luchaba en Gaulan, Simón conducía las tropas de Galilea a Jerusalén (5:20-23); en Mádaba vengaba la muerte de su hermano Juan (9:67-67); ayudó a su hermano Jonatán en Azoto (10:74-83); expugnó la fortaleza de Betsur (11:65-66), etc. Simón salió de Adida (12:38) y marchó a Jerusalén para levantar la moral del pueblo. Arenga a la multitud, empezando por hacer resaltar la entrega total de su familia a la causa del pueblo judío. Faltando ellos, muertos unos y encarcelados otros, se resigna a seguir la tradición familiar. La muchedumbre prorrumpe en gritos de aprobación, declarándolo caudillo (egoúmenos) suyo en lugar de Jonatán. De la dignidad de sumo pontífice no se dice una palabra.
Primeros encuentros (13:10-13).
10 Juntando todos los hombres de guerra, se dio prisa a concluir los muros de Jerusalén, que quedó fortificada toda en derredor, 11 Envió a Jonatás, hijo de Absalón, con bastante fuerza a Jope, que echó de allí a los que la guarnecían, quedándose en ella. 12 Trifón salió de Tolemaida con un poderoso ejército para invadir la Judea, llevando consigo a Jonatán preso. 13 Simón acampó en Adida, frente a la llanura.
Las amenazas de Trifón hiciéronse efectivas. Jope, junto al mar, era una plaza fuerte estratégica contra la amenaza de Trifón desde Tolemaida. Allá fue un tal Jonatás, hijo de Absalón. Se cree que era hermano de Matatías, hijo de Absalón, de que se habla en 11:70. Jope no sentía ninguna simpatía por los Macabeos (2Ma_12:3-7). Jonatán habíase apoderado de la ciudad, estableciendo allí la guarnición judía (2Ma_12:13) y algunos comerciantes. Desde este momento, Jope perteneció a Israel hasta los días de Pompeyo (63 a.C.). Esta hazaña se recuerda en el elogio de Simón (2Ma_14:5) y en el elenco de sus glorias.
Engaño de Trifón (2Ma_13:14-19).
14 Al conocer Trifón que habían nombrado a Simón caudillo en lugar de su hermano Jonatán y que estaba pronto a trabar batalla, le envió mensajeros, 15 diciendo: Hemos detenido a tu hermano a causa de la deuda que tenía en el tesoro real por los cargos que desempeñaba. 16 Envía, pues, cien talentos de plata y a dos de sus hijos como rehenes, por que al ser libertado no se rebele contra nosotros, y le dejaremos libre. 17 Aunque entendía Simón que hablaban con engaño, envió el dinero y los dos niños, por no concitar contra sí la enemiga del pueblo, que podría decir: 18 No ha enviado el dinero y los niños, y por eso pereció Jonatán. 19 Así, pues, envió los niños y los cien talentos; pero Trifón, faltando a su palabra, no puso en libertad a Jonatán.
Es repelente la figura de este general sirio, dominado por la ambición y esclavo de la mentira y del engaño. Todos los medios le parecen lícitos con tal de conseguir sus tenebrosos fines. Con su ejército descendía por la costa mediterránea. Pero tuvo noticia de que los judíos le esperaban, bien pertrechados, con Simón como caudillo. Fue entonces cuando recurrió a la burda estratagema de pedirle enviara trescientos talentos y dos de sus hijos, con la promesa de libertar a su hermano. Simón, por temor a lo que dirán, accedió, pero Jonatán no fue puesto en libertad.
Muerte de Jonatán (2Ma_13:20-24).
20 Trifón emprendió luego la marcha para invadir la tierra y devastarla. Para ello, rodeando, vino a Adora; pero Simón, con su ejército, le salía al encuentro dondequiera que él iba. 21 Los de la ciudadela enviaron mensajeros a Trifón, rogándole que se diera prisa a venir en su socorro por el desierto y les trajese víveres. 22 Preparó Trifón toda su caballería para llegar aquella noche, pero no pudo a causa de la mucha nieve que había caído. Llegó a Galaad, 23 y en Bascama dio muerte a Jonatán, que fue sepultado allí. 24 Después Trifón dio la vuelta y se volvió a su tierra.
Trifón había ganado una batalla diplomática e intentó coronarla con otra bélica. Al frente de sus tropas bordeaba la costa del Mediterráneo con el intento de torcer a la izquierda y enfilar alguno de los caminos que por los wadis conducen a Jerusalén. Pero la presencia de Simón en Adida le infundió temor, tratando entonces de alcanzar la capital haciendo un gran rodeo por tierras de Idumea, llegando hasta Adora, la actual Dura, situada a ocho kilómetros al sudoeste de Hebrón. De sus movimientos tuvo noticia Simón, que le acechaba sin cesar, en busca de un momento propicio para atacarle.
De la ciudadela de Jerusalén pudieron evadirse algunos, que fueron a contar a Trifón la urgente necesidad que tenían de víveres. Como medio de burlar la vigilancia, y con el fin de hacer frente a las borrascas del invierno, le aconsejaron que subiera a Jerusalén por el camino del desierto, pasando por Tecoa y Belén. Una nevada abundante borró toda huella del camino e imposibilitó la ayuda de urgencia a los de la ciudadela. No son frecuentes en Jerusalén estas tempestades de nieve, por lo que cogiólos a todos de improviso. Temiendo quedar bloqueados en tierra extraña, Trifón encaminó sus tropas a la orilla occidental del mar Muerto, hacia las riberas del Jordán, continuando su marcha hacia Galaad (2Ma_5:2555). Bascama, que se encontraba en la región septentrional de TransJordania, al noroeste del lago de Genesaret, fue el lugar donde Trifón, cansado de arrastrar a Jonatán en calidad de prisionero, le dio muerte. Aunque no lo dice el texto, es probable que sus dos hijos siguieran el mismo destino.
Mausoleo familiar (2Ma_13:25-30).
25 Mandó Simón por los restos de su hermano Jonatán, y les dio sepultura en Modín, la ciudad de sus padres. 26 Todo Israel hizo por él gran duelo y le lloró muchos días. 27 Edificó Simón sobre los sepulcros de sus padres y hermanos un monumento de piedras labradas por una y otra cara, alto y visible desde muy lejos. 28 Encima levantó siete pirámides, unas enfrente de otras, dedicadas a su padre, a su madre y a sus cuatro hermanos. 29 Las asentó sobre sus basas y las rodeó de grandes columnas, y puso en ellas panoplias para eterna memoria; y junto a las panoplias, naves esculpidas, que pudieran ser vistas de todos los que navegaban por el mar. 30 Ese sepulcro que erigió en Modín perdura hasta el día de hoy.
Simón fue en busca de los despojos de su hermano, que enterró en Modín. Hubo el consabido duelo nacional. Pensó entonces levantar Simón un mausoleo para honrar la memoria de la familia, inspirándose en la arquitectura griega. Sobre una mole de piedras labradas se colocaron siete pirámides, dedicadas a su padre, a su madre, a sus cuatro hermanos, y reservándose una para sí. Para que el monumento pudiera ser visto del mar, tenía que estar emplazado sobre una colina, quizá en Scheik el-Garbawi, en las afueras de Modín. Sobre los restos de este mausoleo se levantó más tarde un edificio bizantino.
Trifón en el trono (2Ma_13:31-32).
31 Trifón, que procedía dolosamente con el joven Antíoco, acabó por darle muerte, 32 se declaró rey en su lugar y ciñó la diadema del Asia, trayendo con esto una gran calamidad sobre la tierra.
Después de haberse apoderado alevosamente de Jonatán se ensaña Trifón contra el joven Antíoco VI Dionisios. Sube al trono de Antioquía con el título de autocrator, para significar que escalaba aquel puesto por sus méritos y no por derecho de sucesión. Arrogábase también el título de rey de Asia, cuando en realidad era muy insignificante la parte del reino que tenía bajo su mando. Los historiadores paganos 2 hablan del regicidio de Trifón, aunque discrepan en los detalles de cómo se llevó a efecto.
Alianza de Simón con Demetrio (2Ma_13:33-40).
33 Simón edificó las fortalezas de Judea, las rodeó de altas torres y muros fuertes, les puso puertas y cerrojos y las proveyó de vituallas. 34 Envió algunos hombres escogidos al rey Demetrio, pidiendo que concediera al país la remisión de los tributos, por cuanto los actos de Trifón habían sido actos de saqueo. 35 Contestó el rey Demetrio a estas peticiones enviándo-les letras del tenor siguiente: 36 El rey Demetrio a Simón, sumo sacerdote y amigo de los reyes, y a los ancianos y a la nación judía, salud. 37 Hemos recibido la corona de oro y la palma que nos habéis enviado, y estamos dispuestos a hacer con vosotros una paz definitiva y a escribir a los intendentes reales que os condonen las deudas. 38 Todo cuanto hemos pactado con vosotros sea firme, y las fortalezas que habéis edificado sean vuestras. 39 Os perdonamos también las faltas y las ofensas cometidas hasta este día, y la corona que debéis, y si algún tributo se cobraba en Jerusalén, ya no se cobre. 40 Si algunos de vosotros estáis dispuestos a alistaros en nuestro ejército, podréis hacerlo, y que reine entre nosotros la paz.
Simón comprendió la farsa de los soberanos seléucidas; prescindió de ellos, entregándose a la consolidación de todas las fortalezas de Judea. La traición del partido de Alejandro (2Ma_10:46-47) caló hondamente en su ánimo. Escribió a Demetrio manifestándole que la conducta de rapiña de Trifón le había desilusionado y que, por consiguiente, estaba dispuesto a pasarse a su bando en caso de que eximiera al país, exhausto por las guerras, de los tributos. La propuesta de Simón fue recibida como agua en mayo. Con un aliado en Palestina, la presión de Trifón disminuiría y le acercaría a Antioquía. Concede Demetrio en su carta el título de sumo sacerdote a Simón, al que llama amigo de reyes. Le dice que ha recibido la corona de oro (2Ma_10:11.35) y la palma (2Ma_14:4).
Autonomía de Israel (2Ma_13:41-48).
41 El año ciento setenta quedó Israel libre del yugo de los gentiles, 42 y comenzaron a encabezarse así los documentos y contratos: El año primero de Simón, gran pontífice, general y caudillo de los judíos. 43 En los días aquellos acampó Simón contra Gazer, y la cercó con sus fuerzas, construyó máquinas de asedio y las aproximó a la ciudad, acometiendo una de las torres y apoderándose de ella. 44 Invadieron la ciudad los que estaban en la máquina, produciéndose en aquélla gran conmoción. 45 Los de la ciudad subieron a las murallas con sus mujeres e hijos, rasgadas las vestiduras, y a grandes voces clamaban pidiendo a Simón la paz, 46 y le decían: No obres con nosotros según merecen nuestras maldades, sino según tu misericordia. 47 Simón se dejó aplacar y suspendió las hostilidades contra ellos, pero expulsó a los de la ciudad, purificó las casas en que había ídolos, y así hizo su entrada en ella en medio de cánticos y bendiciones. 48 Después de limpiarla de toda impureza, instaló en ella gente observante de la Ley, la fortificó, y construyó allí para él una morada.
En las monedas que acuñó se da Simón el nombre de egoumenos. Se posesiona de manera oficial los dos cargos de sumo sacerdote y etnarca, que ostenta simultáneamente.
En el corazón de Palestina quedaban todavía dos espinas que urgía arrancar aprovechando las buenas disposiciones de Demetrio: la ciudad de Gazer y la ciudadela de Jerusalén. Contra la primera marchó Simón con el propósito firme de conquistarla. Decisiva fue la acción de la gran torre móvil, de madera, llamada en griego elepoli, inventada por Demetrio Poliorcetes (336-283 a.C.), revestida de recios y puntiagudos clavos de hierro. Constaba de diversos planos; los soldados del plano superior saltaron sobre los muros y penetraron inesperadamente en la ciudad. Inmediatamente empezó Simón a fortificar la ciudad, construyendo allí una morada para él. En las excavaciones practicadas en el lugar por Macalister 3 se han encontrado restos de construcciones macabaicas y un testimonio del odio que un prisionero sentía por el Macabeo, y que dejó grabado sobre una piedra (Abel).
La ciudadela desaparece (2Ma_13:49-54).
49 Los de la ciudadela de Jerusalén no podían salir de ella ni entrar en la región para comprar o vender, y pasaban mucha escasez, pereciendo de hambre muchos de ellos. 50 Clamaron a Simón en demanda de paz, y él se la otorgó, echándolos de allí y limpiando la ciudadela de impurezas. 51 El día veintitrés del mes segundo del año ciento setenta y uno entró en ella con cánticos, palmas y acompañamiento de cítaras, címbalos y arpas, con himnos y cánticos, porque había sido aplastado un gran enemigo de Israel. 52 Estableció que cada año se solemnizara este día con regocijo. 53 Fortificó el monte del templo, que está próximo a la ciudadela, y habitó allí él con los suyos. 54 Viendo que Juan, su hijo, era hombre animoso, le hizo jefe de todas las tropas, con residencia en Gazer.
A los sirios del Acra llegó también su hora. Trifón no pudo ayudarles; su situación hacíase cada día más precaria. Muchos perecieron de hambre. Reducidos a optar por el dilema perecer o pactar, siguieron el ejemplo de los de Gazer, acudiendo a Simón en demanda de paz, que se les concedió. El templo fue también objeto de sus desvelos; fortificó sus muros y estableció la residencia en la Barís, a la que sucederá la torre Antonia en tiempos de Heredes.