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Llegaron los mensajeros de David a casa de Abigail en Carmelo y le hablaron diciendo: «David nos envía a ti para tomarte por mujer.» (I Samuel 25, 40) © Nueva Biblia de Jerusalén (Desclee, 1998)

BHSEk - Biblia Hebraica Stuttgartensia (Enhanced; KJV versification)

וַ‎(וְ)

Hebrew|wa|and

Part-of-speech: conjunction
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[f.ab.aa] [519]
[ו] [GES1991] [BDB2226] [HAL2241]

יָּבֹ֜אוּ‎(בֹּוא)

Hebrew|yyāvˈōʔû|come

Part-of-speech: verb
Gender: masculine
Number: plural
Person: third person
State: not applicable
Verbal tense: wayyiqtol
Verbal stem: qal


[H935] [b.ap.aa] [212]
[בוא] [GES919] [BDB997] [HAL1011]

עַבְדֵ֥י‎(עֶבֶד)

Hebrew|ʕavᵊḏˌê|servant

Part-of-speech: noun
Gender: masculine
Number: plural
Person: not applicable
State: construct
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H5650] [p.ac.ab] [1553a]
[עבד] [GES5599] [BDB6193] [HAL6113]

דָוִ֛ד‎(דָּוִד)

Hebrew|ḏāwˈiḏ|David

Part-of-speech: proper noun
Gender: masculine
Number: singular
Person: not applicable
State: absolute
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H1732] [d.as.ag] [410c]
[דוד] [GES1632] [BDB1851] [HAL1860]

אֶל‎(אֶל)

Hebrew|ʔel-|to

Part-of-speech: preposition
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H413] [a.di.aa] [91]
[אל] [GES400] [BDB422] [HAL438]

אֲבִיגַ֖יִל‎(אֲבִיגַיִל)

Hebrew|ʔᵃvîḡˌayil|Abigail

Part-of-speech: proper noun
Gender: feminine
Number: singular
Person: not applicable
State: absolute
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H26] [a.ae.af]
[אביגיל] [GES27] [BDB32] [HAL35]

הַ‎(הַ)

Hebrew|ha|the

Part-of-speech: article
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[e.ab.aa] [459]
[ה] [GES1804] [BDB2019] [HAL2031]

כַּרְמֶ֑לָה‎(כַּרְמֶל)

Hebrew|kkarmˈelā|Carmel

Part-of-speech: proper noun
Gender: unknown
Number: singular
Person: not applicable
State: absolute
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H3760] [k.dd.af] [1042]
[כרמל] [GES3656] [BDB4077] [HAL4035]

וַ‎(וְ)

Hebrew|wa|and

Part-of-speech: conjunction
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[f.ab.aa] [519]
[ו] [GES1991] [BDB2226] [HAL2241]

יְדַבְּר֤וּ‎(דָּבַר)

Hebrew|yᵊḏabbᵊrˈû|speak

Part-of-speech: verb
Gender: masculine
Number: plural
Person: third person
State: not applicable
Verbal tense: wayyiqtol
Verbal stem: pi“el


[H1696] [d.ai.aa] [399]
[דבר] [GES1602] [BDB1811] [HAL1822]

אֵלֶ֨יהָ֙‎(אֶל)

Hebrew|ʔēlˈeʸhā|to

Part-of-speech: preposition
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H413] [a.di.aa] [91]
[אל] [GES400] [BDB422] [HAL438]

לֵ‎(לְ)

Hebrew|lē|to

Part-of-speech: preposition
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[l.aa.ab] [1063]
[ל] [GES3706] [BDB4135] [HAL4089]

אמֹ֔ר‎(אָמַר)

Hebrew|ʔmˈōr|say

Part-of-speech: verb
Gender: unknown
Number: unknown
Person: unknown
State: absolute
Verbal tense: infinitive (construct)
Verbal stem: qal


[H559] [a.ea.aa] [118]
[אמר] [GES535] [BDB564] [HAL587]

דָּוִד֙‎(דָּוִד)

Hebrew|dāwˌiḏ|David

Part-of-speech: proper noun
Gender: masculine
Number: singular
Person: not applicable
State: absolute
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H1732] [d.as.ag] [410c]
[דוד] [GES1632] [BDB1851] [HAL1860]

שְׁלָחָ֣נוּ‎(שָׁלַח)

Hebrew|šᵊlāḥˈānû|send

Part-of-speech: verb
Gender: masculine
Number: singular
Person: third person
State: not applicable
Verbal tense: perfect
Verbal stem: qal


[H7971] [v.dl.aa] [2394]
[שלח] [GES7935] [BDB8729] [HAL8661]

אֵלַ֔יִךְ‎(אֶל)

Hebrew|ʔēlˈayiḵ|to

Part-of-speech: preposition
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H413] [a.di.aa] [91]
[אל] [GES400] [BDB422] [HAL438]

לְ‎(לְ)

Hebrew|lᵊ|to

Part-of-speech: preposition
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[l.aa.ab] [1063]
[ל] [GES3706] [BDB4135] [HAL4089]

קַחְתֵּ֥ךְ‎(לָקַח)

Hebrew|qaḥtˌēḵ|take

Part-of-speech: verb
Gender: unknown
Number: unknown
Person: unknown
State: absolute
Verbal tense: infinitive (construct)
Verbal stem: qal


[H3947] [l.bx.aa] [1124]
[לקח] [GES3879] [BDB4316] [HAL4270]

לֹ֖ו‎(לְ)

Hebrew|lˌô|to

Part-of-speech: preposition
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[l.aa.ab] [1063]
[ל] [GES3706] [BDB4135] [HAL4089]

לְ‎(לְ)

Hebrew|lᵊ|to

Part-of-speech: preposition
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[l.aa.ab] [1063]
[ל] [GES3706] [BDB4135] [HAL4089]

אִשָּֽׁה‎(אִשָּׁה)

Hebrew|ʔiššˈā|woman

Part-of-speech: noun
Gender: feminine
Number: singular
Person: not applicable
State: absolute
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H802] [a.eq.ab] [137a]
[אשה] [GES774] [BDB829] [HAL851]

Biblia Comentada, Profesores de Salamanca (BAC, 1965)



Muerte de Samuel (25:1).
1 En tanto murió Samuel, y todo Israel se reunió para llorarle, y fue sepultado en su casa en Rama. David bajó al desierto de Maón.

Anticipadamente se da la noticia de la muerte y sepultura de Samuel. De este hecho se habla nuevamente en 28:3. Dice el texto que fue sepultado en el sepulcro de su casa en Rama. La expresión en su casa debe tomarse en sentido amplio de sepulcro familiar, que se encontraba en las afueras de la población, en una necrópolis (28:3; 1Re_2:34) o en un patio o jardín contiguo a la casa. Debe excluirse la sepultura bajo el pavimento, ya que, según Num_19:14, la casa hubiérase contaminado de manera permanente con la presencia de un cadáver en los sótanos. No señala el texto sagrado la duración de los días de luto por Samuel, que acaso fueron siete. Tampoco indica la edad que tenía al morir; por varios datos del texto se deduce que era de avanzada edad (Num_8:1). Debía ser así, por cuanto Dios premia con una vida larga a los que fielmente le sirven. Con su muerte desaparecía una figura señera en Israel. Samuel gozó de mucho prestigio en la tradición israelita, tanto que Jeremías (Num_15:1) lo compara a Moisés por su poder de intercesión, y el autor del Eclesiástico canta profusamente sus gestas (Num_46:13-20). Lo primero que aparece en Samuel es su acendrado yahvismo. Movido por el celo de Dios, luchó contra los filisteos, que amenazaban la independencia de la heredad de Yahvé; se opone, en cuanto le fue posible, a la institución de la monarquía, por considerarla como un atentado al dominio absoluto de Yahvé, único y supremo rey de Israel. Guando, por inspiración divina y por la voluntad popular, vióse constreñido a ungir a Saúl por rey de Israel, le recuerda que su poder viene de Dios, que sus atribuciones están limitadas, recortadas por la voluntad divina; que el rey es, en fin, un representante del verdadero rey de Israel, Yahvé. Al desviarse Saúl del camino recto, no temió Samuel echarle en cara su infidelidad, sacrificando sus simpatías personales a los intereses de Dios. Samuel fue un hombre austero, severo consigo mismo y con el prójimo. Quiere a Saúl, le aconseja, intercede por él y, a pesar de sus descarríos, no le abandona jamás en sus oraciones. A Samuel cupo la suerte de ungir como sucesor de Saúl a un hombre según el corazón de Yahvé (Num_13:14). En el Martirologio romano se recuerda su fiesta el 20 de agosto.

Negativa de Nabal (Num_25:2-17).
2Había en Maón un hombre muy rico, cuyos bienes estaban en el Carmel; tenía tres mil ovejas y mil cabras. Hallábase en el Carmel para el esquileo de sus ovejas. 3 Llamábase el hombre Nabal, y su mujer Abigaíl; era una mujer de mueho entendimiento y muy hermosa, mientras que él era un hombre duro y malo; era del linaje de Galeb. 4 Supo David en el desierto que Nabal estaba de esquileo, 5 y le mandó diez mozos a los que dijo: Subid al Carmel e id en busca de Nabal; y después de saludarle de mi parte, 6 le habláis de esta manera: La paz sea contigo, con tu casa y con cuanto tienes. 7 He sabido que estás de esquileo. Pues bien, tus pastores han estado tiempo con nosotros; nunca les hemos hecho ningún mal ni les ha faltado nada del ganado mientras han estado en el Carmel. 8Pregúntales a ellos y te lo dirán. Que hallen, pues, gracia a tus ojos estos mozos, ya que llegamos en un día de júbilo. Da, pues, a tus siervos y a tu hijo David lo que halles a mano. 9Cuando llegaron los hombres de David y en nombre de éste repitieron todas sus palabras, se quedaron esperando; 10 pero Nabal les respondió: ¿Quién es David y quién el hijo de Isaí? Son hoy muchos los siervos que andan huidos de su señor. 11¿Voy a tomar yo mi comida y mi bebida y el ganado que he matado para mis esquiladores para dárselo a gente que no sé de dónde es? 12Los servidores de David, dando media vuelta, tomaron el camino y se tornaron, y, una vez llegados, repitieron a David lo que Nabal les había dicho. 13 Entonces David dijo: Cíñase cada uno su espada. Ciñéronsela, y se ciñó también David la suya, y salió con unos cuatrocientos hombres, dejando doscientos custodiando el bagaje. 14 Uno de los criados de Nabal fue a decirle a Abigaíl, su mujer: David ha mandado del desierto unos mensajeros a saludar a nuestro amo, que los ha tratado duramente. 15 Siempre esas gentes se mostraron buenas con nosotros y nunca nos molestaron ni nada nos faltó de nuestros rebaños cuando estábamos en el campo. 16 Antes nos servían de defensa de noche y de día todo el tiempo que estuvimos con ellos guardando el ganado. 17Mira tú lo que has de hacer, porque la pérdida de nuestro amo y de su casa es segura, y es tan malo, que no se le puede hablar.

Según el texto griego, marchó David a Maón; según el masorético, a Farán. Por el contexto prevalece la lección de los LXX, por encontrarse Farán (Gen_21:21; Num_10:12; Num_10:12.16) al sur del Negueb y del mar Muerto, mientras que Maón (Num_23:25) no estaba lejos de Engaddi ni del Carmel, de que habla el texto a continuación. Por los contornos de Maón vivía un hombre muy rico llamado Nabal, del linaje de Caleb (Jos_15:13; Jue_1:12), con propiedades y mucho ganado. Por otra parte, él, como indicaba su nombre (nabal = necio, bruto, estúpido), carecía de virtudes personales y cívicas. Supo David que Nabal había subido al Carmel para el esquileo de las ovejas (Gen_38:12). El esquileo duraba muchos días, durante los cuales se organizaban fiestas a las que acudían familiares y amigos (2Sa_13:23-55). Con esta ocasión asistían también los pobres, que comían hasta saciarse. También David pensaba beneficiarse de aquella fiesta para proveer al sostenimiento de sus hombres. En su petición hicieron constar los enviados que, a pesar de la escasez de alimentos y de convivir con los pastores de Nabal, nunca se apropiaron indebidamente de alguna res. Por lo mismo, lo que le pedían era una recompensa por su buena conducta durante el año. Nabal se desató en improperios e injurias contra David y los suyos, calificándolos de rebeldes, de haraganes, que huían del yugo del rey. A1 enterarse David del recibimiento que hizo Nabal a los suyos, se indignó y marchó contra él con cuatrocientos hombres para vengar su honor. La actitud de Nabal puede explicarse, o porque temía a Saúl, recordando lo de Nob, o porque era partidario decidido de su método de gobierno.

Sale Abigaíl al encuentro de David (2Sa_25:18-31).
18En seguida Abigaíl tomo doscientos panes, dos odres de vino, cinco carneros ya preparados, cinco medidas de trigo tostado, cien atados de uvas pasas y doscientas masas de higos secos, y, haciéndolo cargar todo sobre asnos, 19 dijo a sus criados: Pasad vosotros delante, que yo os sigo. Nada dijo a su marido; 20y cuando, montada en su asno, bajaba por lo cubierto del monte, se encontró con David y su gente, que bajaban frente a ella. 21 David se había dicho: Muy en vano he guardado yo todo cuanto ese hombre tiene en el desierto, y he hecho que nada de lo suyo le faltara; me ha pagado mal por bien. 22 Que castigue Dios a su siervo David si de aquí al alba queda con vida un solo hombre en todo lo de Nabal. 23En cuanto Abigaíl se dio cuenta de la presencia de David, bajóse del asno y, echándose ante David rostro a tierra, 24se prosternó a sus pies y le dijo: Caiga sobre mí, señor, la falta. Deja que te hable tu esclava y escucha sus palabras. 25No haga cuenta mi señor de ese malvado de Nabal, porque es lo que su nombre significa, un necio, y está loco. Yo, mi señor, no vi a los que mi señor envió. 26Y ahora, mi señor, como vive Yahvé, que te ha preservado Yahvé de derramar sangre y tomar por tu mano la venganza, ojalá que todos tus enemigos y cuantos te persiguen sean como Nabal. 27Ahí tienes este presente que tu sierva trae a mi señor; que se reparta entre la gente que sigue a mi señor. 28 Perdona, te ruego, la falta de tu sierva, pues, de cierto, Yahvé hará a mi señor casa estable, ya que mi señor combate los combates de Yahvé, y no vendrá sobre ti el mal en todo el tiempo de tu vida. 29Si alguno se levanta para perseguirte y buscar tu vida, la vida de mi señor estará atada en el haz de los vivos ante Yahvé, tu Dios, y la de tus enemigos será volteada dentro de lo cavo de la honda. 30Cuando Yahvé haga a mi señor todo el bien que le ha prometido y le haga jefe de Israel, 31 no sentirá mi señor el remordimiento de haber derramado sangre inocente y de haberse vengado por su mano. Cuando, pues, Yahvé favorezca a mi señor, acuérdate de tu esclava.

Apresuróse Abigaíl a deshacer el entuerto de su marido. David, con un contingente de hombres armados, se dirigía al Carmel. En el camino hizo David un juramento (2Sa_3:17; 2Sa_14:44; 2Sa_20:13), en virtud del cual recae sobre la persona que lo profiere el mal que desea a otro en caso de no ponerlo en práctica. De ahí que las palabras a los enemigos de David, que trae el texto masorético, deben considerarse como una glosa de un escriba, deseoso de evitar que cayeran sobre David los efectos de una maldición que, al no ponerla en práctica, debía recaer sobre él. Al final del v.22 se lee que no dejará David con vida de la casa de Nabal ni al que mea en la pared, frase usada repetidamente en la Biblia (1Re_14:10; 1Re_16:11; 1Re_21:11) que no debe entenderse de una distinción entre hombre y mujer ni entre el niño y el joven, que cubre sus pies al hacer esta necesidad (1Re_24:4), sino del perro. Con esta expresión quiere el autor expresar que David no dejará con vida a ninguna persona y animal que pertenezca a la casa de Nabal. Es de notar, dice Ubach, que la palabra hebraica mashtin, el que orina, se ha conservado en la palabra castellana mastín, que designa una raza canina.
Abigaíl, cuyo nombre significa mi padre es alegre, pide disculpa por la conducta de su marido, impío y malo (Isa_32:5). Abigaíl habla en términos claros del reinado de David y de la permanencia de sus descendientes en el trono, tal como le prometió más tarde el profeta Natán (2Sa_7:12).
En un saquito como en el de la mirra de la esposa de los Cantares (Can_1:12) guarda Dios a los que ama, conservando su vida; a los condenados a muerte los lanza lejos, como con una honda. Los judíos suelen grabar sobre sus tumbas las cinco letras iniciales t s n b h del versículo: Que su alma se guarde en el cofre de la vida, que corresponden a la inscripción cristiana R. I. P. La imagen mencionada es análoga a la del libro de la vida (Sal_69:29; Isa_4:3; Dan_12:1).

Abigaíl regresa a su casa (Dan_25:32-38).
32 David dijo a Abigaíl: ¡Bendito Yahvé, Dios de Israel, que te ha mandado hoy a mi encuentro! 33¡Bendita tu sabiduría y bendita tú, que me has impedido hoy derramar sangre y vengarme por mi mano! 34 De otro modo, ¡vive Yahvé, Dios de Israel, que no me dejó hacer el mal! si tú no te hubieras apresurado a venir a mi encuentro, que de aquí al alba no le hubiera quedado a Nabal hombre vivo. 35 David recibió de la mano de Abigaíl lo que ella había traído, y le dijo: Sube en paz a tu casa; te he oído y he acogido tu petición. 36 Volvióse Abigaíl a casa de Nabal. Hallábase éste sentado a un gran banquete, como de rey, y estaba enteramente ebrio. Nada le dijo ella, ni poco ni mucho, hasta ser de día; 37pero a la mañana, cuando ya había digerido el vino, le contó su mujer lo que había pasado, y el corazón se le quedó como muerto, como una piedra. 38 Unos diez días después, Yahvé hirió a Nabal y murió éste.

Quedó David satisfecho de la acción de Abigaíl y reconocido por las muestras de veneración y simpatía que le había manifestado. David tendrá en cuenta la petición que le ha hecho Abigaíl. Al regresar la mujer a su casa, contó a Nabal lo sucedido, muriendo éste a los pocos días fulminado por un ataque de apoplejía, cumpliéndose lo del v.29 de que Dios le arrojó a la región de los muertos como piedra lanzada por la honda.


Abigaíl, mujer de David (25:39-44).
39 Cuando supo David la muerte de Nabal, se dijo: ¡Bendito Yahvé, que ha defendido mi causa contra el ultraje que me hizo Nabal e impidió a su siervo hacer el mal! Yahvé ha hecho que la maldad de Nabal recayera sobre su cabeza. Después mandó mensajeros a Abigaíl para proponerla que quería tomarla por mujer. 40 Llegados a casa de Abigaíl, en el Carmel, los mensajeros la hablaron de esta manera: David nos envía a ti para decirte que quiere tomarte por mujer. 41Ella se levantó y, postrándose rostro a tierra, dijo: Que tu sierva sea una esclava para lavar los pies a los servidores de mi señor. 42Levantóse luego Abigaíl y, montando sobre su asno, acompañada de cinco de sus mozas, siguió a los mensajeros de David, y fue su mujer. 43 David tomó también por mujer a Aji-noam, de Jezrael. Una y otra fueron mujeres de David. 44 Saúl había dado su hija Micol, mujer de David, a Paltí, de Galim, hijo de Lais.

No debe interpretarse el texto en el sentido de que se alegró David de la muerte de su enemigo; únicamente quiere decir que acató la voluntad de Dios al quitar de en medio al enemigo de su causa. Decide David tomar a Abigaíl por esposa, a lo que accede ella gustosamente, tras unas palabras protocolarias que expresan un sentimiento de humildad. La mujer de David llamábase Ajinoam (14:50), natural de un pueblecito llamado Yezrael (Jos_15:55-56), de los alrededores del Carmel, en el desierto de Maón. Ahora entra también en casa de David Abigaíl; las dos esposas reaparecen en 27:3; 30:5. Ya hemos visto que, paulatinamente, de la monogamia se pasó en Israel a la poligamia 1. En una sociedad en que se admitía la poligamia, se consideraba como señal de poderío y de riquezas el tener un harén numeroso. Cuando David reinaba en Hebrón tenía ya seis mujeres (2Sa_3:2-5), que aumentaron con el tiempo (2Sa_5:13; 2Sa_15:16; 2Sa_16:21-22). Saúl retiróle su hija Micol (2Sa_18:20-27), que entregó por mujer a un hombre llamado Paltí (en 2Sa_3:15 es conocido por Paltiel), de Galim, al norte de Jerusalén, a un kilómetro al oeste de Anata (Isa_10:30). Los dos nombres, Galim y Lais, reaparecen también juntos en el citado texto de Isaías. Con el matrimonio con Abigaíl ganaba David para su causa al clan de los calebitas, que habitaban en la rica y piadosa ciudad de Hebrón (Jos_15:13-19; Jue_1:12-15), y se apoderaba de una hacienda considerable. Este matrimonio le asegurará además un refugio incondicional todas cuantas veces tenga que huir de las iras de Saúl y le proporcionará un contingente de hombres que apoyarán su encumbramiento en el trono de Israel.

King James Version (KJVO) (1611)



Chapter XXV.

1 Samuel dieth. 2 Dauid in Paran sendeth to Nabal. 10 Prouoked by Nabals churlishnesse, hee mindeth to destroy him. 14 Abigail vnderstanding thereof, 18 taketh a present, 23 and by her wisedome 32 pacifieth Dauid. 36 Nabal hearing thereof, dieth. 39 Dauid taketh Abigail and Ahinoam to be his wiues. 44 Michal is giuen to Phalti.
1 And [ 1Sa_28:3; Sir_46:13; Sir_46:20.] Samuel died, and all the Israelites were gathered together, and lamented him, and buried him in his house at Ramah. And Dauid arose, & went downe to the wildernesse of Paran.
2 And there was a man in Maon, whose [ Or, busines.] possessions were in Carmel, and the man was very great, and hee had three thousand sheepe, and a thousand goates: and he was shearing his sheepe in Carmel.
3 Now the name of the man was Nabal, and the name of his wife, Abigail: and shee was a woman of good vnderstanding, and of a beautifull countenance: but the man was churlish and euill in his doings, and hee was of the house of Caleb.
4 And Dauid heard in the wildernesse, that Nabal did sheare his sheepe.
5 And Dauid sent out ten yong men, and Dauid said vnto the young men, Get you vp to Carmel, and goe to Nabal, and [ Hebrew: aske him in my name, of peace.] greete him in my name;
6 And thus shall ye say to him that liueth in prosperitie, Peace be both to thee, and peace be to thine house, and peace be vnto all that thou hast.
7 And now, I haue heard that thou hast shearers: now thy shepheards which were with vs, wee [ Hebrew: shamed.] hurt them not, neither was there ought missing vnto them, all the while they were in Carmel.
8 Aske thy yong men, and they will shew thee: wherefore let the yong men

[Nabals churlishnes.]

finde fauour in thine eyes: (for we come in a good day) giue, I pray thee, whatsoeuer commeth to thine hand, vnto thy seruants, and to thy sonne Dauid.
9 And when Dauids yong men came, they spake to Nabal according to all those words in the name of Dauid, and [ Hebrew: rested.] ceased.
10 And Nabal answered Dauids seruants, and said, Who is Dauid? and who is the sonne of Iesse? There bee many seruants now a daies that breake away euery man from his master.
11 Shall I then take my bread and my water, and my [ Hebrew: slaughter.] flesh that I haue killed for my shearers, and giue it vnto men, whom I know not whence they bee?
12 So Dauids yong men turned their way, and went againe, and came and told him all those sayings.
13 And Dauid said vnto his men, Gird you on euery man his sword. And they girded on euery man his sword, and Dauid also girded on his sword: and there went vp after Dauid about foure hundred men, and two hundred abode by the stuffe.
14 But one of the yong men told Abigail Nabals wife, saying, Behold, Dauid sent messengers out of the wildernesse to salute our master: and [ Hebrew: flew vpon them.] he railed on them.
15 But the men were very good vnto vs, and we were not [ Hebrew: shamed.] hurt, neither missed we any thing as long as wee were conuersant with them, when we were in the fields.
16 They were a wall vnto vs both by night and day, all the while we were with them keeping sheepe.
17 Now therefore know and consider what thou wilt doe: for euill is determined against our master, and against all his houshold: for he is such a sonne of Belial, that a man cannot speake to him.
18 Then Abigail made haste, and tooke two hundred loaues, and two bottles of wine, and fiue sheepe readie dressed, and fiue measures of parched corne, and an hundred [ Or, lumps.] clusters of raisins, and two hundred cakes of figges, and laid them on asses.
19 And she said vnto her seruants, Goe on before me, behold, I come after you: but she told not her husband Nabal.
20 And it was so as she rode on the

[Abigails wisdome.]

asse, that she came downe by the couert of the hill, and behold, Dauid and his men came downe against her, and she met them.
21 (Now Dauid had said, Surely in vaine haue I kept all that this fellow hath in the wildernesse, so that nothing was missed of all that pertained vnto him: and he hath requited me euil for good.
22 So and more also doe God vnto the enemies of Dauid, if I leaue of all that pertaine to him by the morning light, any that pisseth against the wall.)
23 And when Abigail saw Dauid, she hasted, and lighted off the asse, and fell before Dauid on her face, and bowed her selfe to the ground,
24 And fell at his feet, and said, Upon me, my lord, vpon me let this iniquitie be, and let thine handmaid, I pray thee, speake in thine [ Hebrew: eares.] audience, and heare the words of thine handmaid.
25 Let not my lord, I pray thee, [ Hebrew: lay it to his heart.] regard this man of Belial, euen Nabal: for as his name is, so is he: Nabal is his name, and folly is with him: But I thine handmaid saw not the yong men of my lord, whom thou didst send.
26 Now therefore, my lord, as the Lord liueth, and as thy soule liueth, seeing the Lord hath withholden thee from comming to shed blood, and from [ Hebrew: sauing thy selfe.] auenging thy selfe with thine owne hand: now let thine enemies and they that secke euill to my lord, bee as Nabal.
27 And now this [ Or, present ] blessing which thine handmaid hath brought vnto my lord, let it euen be giuen vnto the yong men that [ Hebrew: walke at the feet of, etc.] follow my lord.
28 I pray thee, forgiue the trespasse of thine handmaide: for the Lord will certainely make my lord a sure house, because my lord fighteth the battels of the Lord, and euill hath not bene found in thee all thy dayes.
29 Yet a man is risen to pursue thee, and to seeke thy soule: but the soule of my lord shall be bound in the bundle of life with the Lord thy God, and the soules of thine enemies, them shall he sling out, [ Hebrew: in the midst of the bought of a sling.] as out of the middle of a sling.
30 And it shall come to passe when the Lord shal haue done to my lord, according to all the good that hee hath spoken concerning thee, and shall haue appointed thee ruler ouer Israel;

[Nabal dieth. Dauid marieth Abigail.]

31 That this shall bee no [ Hebrew: no staggering: or, stumbling.] griefe vnto thee, nor offence of heart vnto my lord, either that thou hast shed blood causelesse, or that my lord hath auenged himselfe: But when the Lord shall haue dealt well with my lord, then remember thine handmayd.
32 And Dauid sayd to Abigail, Blessed be the Lord God of Israel, which sent thee this day to meet me.
33 And blessed bee thy aduice, and blessed be thou, which hast kept me this day from comming to shed blood, and from auenging my selfe with mine owne hand.
34 For in very deed, as the Lord God of Israel liueth, which hath kept mee backe from hurting thee, except thou hadst hasted and come to meet me, surely there had not bene left vnto Nabal, by the morning light, any that pisseth against the wall.
35 So Dauid receiued of her hand that which shee had brought him, and sayd vnto her, Goe vp in peace to thine house; See, I haue hearkened to thy voyce, and haue accepted thy person.
36 And Abigail came to Nabal, and behold, he held a feast in his house like the feast of a king; & Nabals heart was merry within him, for hee was very drunken: wherefore shee tolde him nothing, lesse or more, vntill the morning light.
37 But it came to passe in the morning, when the wine was gone out of Nabal, and his wife had told him these things, that his heart died within him, and he became as a stone.
38 And it came to passe about ten dayes after, that the Lord smote Nabal, that he died.
39 And when Dauid heard that Nabal was dead, he said, Blessed be the Lord, that hath pleaded the cause of my reproch from the hand of Nabal, and hath kept his seruant from euil: for the Lord hath returned the wickednesse of Nabal vpon his owne head. And Dauid sent, and communed with Abigail, to take her to him to wife.
40 And when the seruants of Dauid were come to Abigail to Carmel, they spake vnto her, saying, Dauid sent vs vnto thee, to take thee to him to wife.
41 And shee arose, and bowed her selfe on her face to the earth, and sayd, Beholde, let thine handmayd bee a seruant

[Dauid marieth Abigail.]

to wash the feet of the seruants of my lord.
42 And Abigail hasted, and rose, and rode vpon an asse, with fiue damosels of hers that went [ Hebrew: at her feet.] after her; and she went after the messengers of Dauid, and became his wife.
43 Dauid also tooke Ahinoam [ Jos_15:56 .] of Iezreel, and they were also both of them his wiues.
44 But Saul had giuen [ 2Sa_3:14-15 .] Michal his daughter, Dauids wife, to Phalti the sonne of Laish, which was of Gallim.

La Biblia de Nuestro Pueblo (Liturgical Press, 2006),

David, Nabal y Abigail. En silencio desaparece Samuel de la escena histórica dejando en marcha el futuro de Israel; y el autor le ofrece el homenaje de todo Israel. ¿Quiere decir que asistió también Saúl a los funerales? Samuel juez ya no tiene sucesores; como profeta, le suceden Gad y Natán. Entre tanto David torna a su región preferida, no lejos de su patria. En el versículo 2 comienza una de esas narraciones bíblicas, con personaje femenino protagonista, en las que parecen complacerse los narradores luciendo su talento y sensibilidad; nos recuerda la historia de Rebeca o de Rut. La acción es sencilla y está llevada con habilidad: tras la presentación del lugar y de los personajes (2a) la primera escena está ocupada por el mensaje de David y la respuesta de Nabal (4-11); en la escena siguiente se ponen en movimiento David y Abigail hacia el encuentro (12-22); sigue la gran escena del encuentro, con el discurso de Abigail y la respuesta de David (23-35); los versículos 36-42 cuentan el desenlace. El mensaje de David es cortés en la forma, si bien está respaldado por seiscientos hombres a sus órdenes. Apela al principio común de la hospitalidad, particularmente en un día de abundancia y alegría; es lógico invitar en tales ocasiones. Además apela a los beneficios prestados a los pastores, que son más bien negativos, no haber abusado; la vieja condición del pastor asoma en esta actitud. El saludo con la triple «paz» indica las buenas intenciones y es augurio de prosperidad; David no viene en son de guerra. David se ha llamado siervo e hijo de Nabal, este retuerce los títulos: hijo de Jesé -de condición inferior- y esclavo huido. La respuesta es tacaña e insultante, y crea una situación de beneficios pagados con ofensas. Claro que el título de esclavos huidos no les va mal a algunos de los hombres de David. Hábilmente presenta el autor escenas distintas y paralelas. Nabal se ha retirado dejando el puesto a David y Abigail. Ambos reaccionan con decisión y rapidez: David en son de guerra, Abigail en son de paz -nótese la acumulación de regalos sabrosos-. Abigail tiene que contrarrestar y deshacer las ofensas del marido, es decir, las injurias verbales y el haber negado las provisiones. El segundo delito, en su aspecto material, es fácil de reparar; el insulto que contiene y que expresaron las palabras es delito que hiere más profundamente. Abigail pronuncia un discurso más psicológico que lógico. Pide protección a David: «cuando el Señor colme de bienes a mi señor; acuérdate de tu servidora» (31), como anticipando su viudez y su futuro matrimonio con el joven rey David, más generoso que su marido Nabal.

Nuevo Comentario Bíblico Siglo XXI (Editorial Mundo Hispano, 2019)



Matrimonios de David. El final de la historia relata la muerte de Nabal, seguida por el hecho de que David tomara por esposa a Abigaíl, su viuda. La muerte de Nabal fue después de todo una muerte natural, desde una perspectiva humana; pero el escritor expresa la verdad general de que toda vida y muerte están en las manos de Dios. Podemos estar seguros de que los vecinos de Nabal pensaban lo mismo, y tomaron nota de que Dios podría castigar cualquier hostilidad hacia David. Así que la muerte de Nabal puede haber ayudado a la causa de David.

La única esposa de David hasta ahora había sido Mical, la hija de Saúl (18:27). Saúl la había dado en matrimonio a otro hombre (44). Esta acción mostraba su odio por David; era también una maniobra política, que tenía la intención de arrasar con cualquier pretensión al trono que David pudiera haber tenido por ser el yerno de Saúl. Los casamientos por razones políticas eran comunes en aquella época, y al casarse con Abigaé l y Ajinoam (42, 43) David estaba formando importantes lazos con familias de influencia en Judá. Su camino futuro hacia la monarquía se debería al apoyo de la tribu de Judá, no al apoyo de la corte real existente. El escritor no lo dice, pero consideraba al casamiento de David con Abigaíl como parte de los planes de Dios para él.

Sagrada Biblia (Conferencia Episcopal Española, 2011)

*17:1-31:13 El azaroso itinerario de David que lo llevó a ser ungido y reconocido como rey de Judá en Hebrón fue labrando, paso a paso, su personalidad. Comenzó por el descubrimiento de su valía frente al gigante Goliat; siguió con la maduración del joven pastor de Belén en la corte de Saúl: la amistad y alianza con Jonatán, sus éxitos militares, el matrimonio, los padecimientos por los celos y los atentados de Saúl contra su vida; y acabó con sus aventuras en compañía de un grupo de gentes apartadas de la sociedad, que le llevaron a pasarse a los filisteos.

Torres Amat (1825)



[1] Se rinde un breve homenaje a Samuel.

[2] Este es un relato de la vida de David en el desierto de Judá, donde se encuentra Carmelo. Esta es una localidad distinta del monte Carmelo, situado al norte de Palestina.

[18] Abigaíl da muestras de ser una hábil negociadora, moviéndose con gran astucia. Nabal hace honor a su nombre, que significa loco.

[42] Se narran los matrimonios de David con Abigaíl y Aquinoam, mientras que Saúl le entrega a Micol, su otra esposa, a Falti.

Biblia Hispano Americana (Sociedad Bíblica Española, 2014)

1Sa 27:3; 2Sa 2:2; 2Sa 3:2-3.

Dios Habla Hoy (Sociedades Bíblicas Unidas, 1996)



Dios Habla Hoy 1996 Notes:



[1] 25.22 Me castigue duramente: según la versión griega (LXX). Heb. castigue duramente a los enemigos de David.

[2] 25.25 En hebreo, Nabal significa estúpido.