Biblia Comentada, Profesores de Salamanca (BAC, 1965)
Enfermedad de Ezequias (20:1-19).
1
Por entonces enfermó de muerte Ezequías, y el profeta Isaías, hijo de Amos, vino a él y le dijo: Así dice Yahvé: Dispon de tu casa, porque vas a morir y no vivirás más. 2
Ezequías volvió su rostro con la pared y oró a Yahvé, diciendo: 3
¡Oh Yahvé! Ten en cuenta que he andado ante ti fielmente y con corazón íntegro y que he hecho lo que es bueno a tus ojos. Y Ezequías lloraba con gran llanto. 4
Isaías había salido; pero antes que llegase al atrio central, recibió palabra de Yahvé, que le dijo: 5
Vuelve a Ezequías, jefe de mi pueblo, y dile: Así habla Yahvé, el Dios de David, tu padre: He escuchado tu oración y he visto tus lágrimas. Te curaré. Dentro de tres días subirás a la casa de Yahvé. 6
Te añadiré otros quince años a tus días y te libraré a ti y a esta ciudad de la mano del rey de Asiría, y protegeré a esta ciudad por amor de mí y por amor de David, mi siervo. 7
Isaías dijo: Tomad una masa de higos. Tomáronla y se la pusieron sobre la úlcera, y Ezequías sanó. 8
Ezequías había preguntado a Isaías: ¿En qué señal conoceré yo que Yahvé me curará y que al tercer día subiré a la casa de Yahvé? 9
Isaías le respondió: He aquí la señal por la que conocerás que Yahvé cumplirá la palabra que ha pronunciado: La sombra avanzará diez grados o retrocederá diez grados. 10
Y Ezequías dijo: Poca cosa es que avance diez grados; no así que retroceda diez grados. 1
! Entonces Isaías, profeta, invocó a Yahvé, que hizo retroceder diez grados la sombra en el reloj de Ajaz. 12
Por este tiempo, Merodacbaladán, hijo de Baladán, rey de Babilonia, mandó una carta y un presente a Ezequías, pues había tenido noticia de su enfermedad. 13
Ezequías dio audiencia a los mensajeros y les enseñó todos sus tesoros, la plata, el oro, los aromas y el aceite refinado, el arsenal y todo cuanto de precioso había en el tesoro. Nada hubo que Ezequías no les enseñara, en la casa y en todas sus dependencias. 14
Isaías, profeta, vino luego a Ezequías y le dijo: ¿Qué han dicho esas gentes que han venido a ti? Ezequías contestó: Vienen de tierra lejana, de Babilonia. 15
Isaías añadió: ¿Qué es lo que han visto de tu casa? Ezequías respondió: Han visto todo cuanto hay en la casa; les he enseñado todo mi tesoro, sin dejar nada. 16
Entonces Isaías le dijo a Ezequías: Escucha la palabra de Yahvé: 17
Tiempo vendrá en que será llevado a Babilonia todo cuanto hay en esta casa, todo cuanto atesoraron tus padres hasta hoy, sin quedar nada. 18
Y de los hijos que de ti saldrán, de los engendrados por ti, tomarán para hacer de ellos eunucos del palacio del rey de Babilonia. 19
Ezequías respondió a Isaías: Buena es la palabra de Yahvé que has pronunciado. Que durante mi vida haya paz.
Con una indicación cronológica vaga introduce el autor sagrado el relato de la enfermedad y curación de Ezequías, que, con algunas variantes, aparece en
Isa_38:1-8;
Isa_38:21-28. Dos noticias (v.6 y 12) dan a entender que la escena se desarrolló antes de la invasión de Senaquerib. El rey curará en el plazo de tres días, sobreviviendo otros quince años. Por indicación del profeta Isaías le aplican sobre la úlcera una cataplasma. Entre los orientales se empleaban los emplastes de higo para curar úlceras e inflamaciones. Como puede observar el lector, el v.7 está desplazado de su contexto, debiendo colocarse después del v.11. No siendo instantánea la curación, pide Ezequías una confirmación de la promesa que se le hace. Accede Isaías a dársela, preguntando al rey lo que prefería, o que avanzara diez grados la sombra o que retrocediera otros tantos. Había en el palacio un reloj solar, llamado cuadrante de Ajaz por haberlo colocado allí él. Para Isaías era indiferente hacer avanzar o retroceder la sombra que señalaba las horas. Al rey, en cambio, le parecía más fácil que, a medida que avanza el día, lo haga también la sombra; lo difícil para él era hacerla retroceder. Por el contexto no aparece del todo claro si se trata de un cuadrante solar o de una escalera que construyó Ajaz. Los
maaloth pueden significar, o bien los peldaños o gradas de una escalera, o los grados marcados sobre un cuadrante. Anota Garofalo que el milagro no debe entenderse en el sentido de que las leyes físicas se suspendieran con una inversión del movimiento de rotación de la tierra, sino en el sentido de una refracción de los rayos solares.
Hemos mencionado más arriba la visita de los enviados de Merodacbaladán a Ezequías en tiempos de su enfermedad. Merodacbaladán pretendía ocupar el trono de Babilonia, en donde reinó los años 721-710, y el 703, en que fue vencido definitivamente por Senaquerib. Esta embajada pudo tener lugar en esta segunda etapa de su reinado. No podía Ezequías sospechar que cien años más tarde el rey de Babilonia conduciría a Judá al cautiverio y se apoderaría de todos los tesoros del palacio real y del templo (
Isa_25:1-21). Reconoce Ezequías que la sentencia divina era buena, alegrándose una vez más de la misericordia de Dios para con él al diferir el castigo hasta muchos años después de su muerte. Maravillosa profecía, tanto por haberse pronunciado con muchos años de anticipación como por haber predicho el hundimiento de un imperio que dominaba en todo el Próximo Oriente.
El acueducto de Exequias (Isa_20:20-21).
20
El resto de los hechos de Ezequías, todas sus hazañas, cómo hizo el estanque y el acueducto y trajo las aguas a la ciudad ¿no está escrito en el libro de las crónicas de los reyes de Judá? 21
Ezequías se durmió con sus padres, y le sucedió Manases, su hijo. Pensó Ezequías en construir un canal que llevara las aguas de Ain-Sitti-Mariam a través de la colina del Ofel hasta la piscina de Siloé (
2Cr_32:30; Eci 43:17). La obra se hizo famosa en la antigüedad; la ciudad de Jerusalén disponía de agua en su recinto en caso de cerco. El canal fue descubierto en 1838 por Robinson 2. Más tarde, en 1880, un alumno de la Escuela Industrial comunicó al arquitecto C. Schick el hallazgo de una inscripción en la pared oriental de la galería. Consta de seis líneas, en las que los mineros celebran en lengua hebrea y caracteres paleohebraicos el momento en que las aguas de la fuente fluyeron a través del canal hasta la piscina de Siloé 3.
En tiempos de Ezequías se incrementaron los conatos de cultura, recogiéndose los proverbios de Salomón (
Pro_25:1). En
Isa_38:10-20 se reproduce un himno que parece haber compuesto el mismo rey. También favoreció la música en el templo (
2Cr_29:30). En vida suya ejerció parte de su ministerio el profeta Isaías, que fue para él un válido consejero.