Ver contexto
Te sentías segura en tu maldad,
te decías: «Nadie me ve.»
Tu sabiduría y tu misma ciencia
te han desviado.
Dijiste en tu corazón:
«¡Yo, y nadie más!»
(Isaías 47, 10) © Nueva Biblia de Jerusalén (Desclee, 1998)

BHSEk - Biblia Hebraica Stuttgartensia (Enhanced; KJV versification)

וַ‎(וְ)

Hebrew|wa|and

Part-of-speech: conjunction
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[f.ab.aa] [519]
[ו] [GES1991] [BDB2226] [HAL2241]

תִּבְטְחִ֣י‎(בָּטַח)

Hebrew|ttivṭᵊḥˈî|trust

Part-of-speech: verb
Gender: feminine
Number: singular
Person: second person
State: not applicable
Verbal tense: wayyiqtol
Verbal stem: qal


[H982] [b.bi.aa] [233]
[בטח] [GES971] [BDB1048] [HAL1064]

בְ‎(בְּ)

Hebrew|vᵊ|in

Part-of-speech: preposition
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[b.ab.aa] [193]
[ב] [GES855] [BDB923] [HAL939]

רָעָתֵ֗ךְ‎(רָעָה)

Hebrew|rāʕāṯˈēḵ|evil

Part-of-speech: noun
Gender: feminine
Number: singular
Person: not applicable
State: absolute
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H7451] [t.dq.ae] [2191c]
[רעה] [GES7416] [BDB8174] [HAL8092]

אָמַרְתְּ֙‎(אָמַר)

Hebrew|ʔāmart|say

Part-of-speech: verb
Gender: feminine
Number: singular
Person: second person
State: not applicable
Verbal tense: perfect
Verbal stem: qal


[H559] [a.ea.aa] [118]
[אמר] [GES535] [BDB564] [HAL587]

אֵ֣ין‎(אַיִן)

Hebrew|ʔˈên|[NEG]

Part-of-speech: noun
Gender: masculine
Number: singular
Person: not applicable
State: construct
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H369] [a.cz.aa] [81]
[אין] [GES364] [BDB387] [HAL401]

רֹאָ֔נִי‎(רָאָה)

Hebrew|rōʔˈānî|see

Part-of-speech: verb
Gender: masculine
Number: singular
Person: unknown
State: absolute
Verbal tense: participle
Verbal stem: qal


[H7200] [t.ab.aa] [2095]
[ראה] [GES7166] [BDB7891] [HAL7810]

חָכְמָתֵ֥ךְ‎(חָכְמָה)

Hebrew|ḥoḵmāṯˌēḵ|wisdom

Part-of-speech: noun
Gender: feminine
Number: singular
Person: not applicable
State: absolute
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H2451] [h.cg.ac] [647a]
[חכמה] [GES2386] [BDB2665] [HAL2662]

וְ‎(וְ)

Hebrew|wᵊ|and

Part-of-speech: conjunction
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[f.ab.aa] [519]
[ו] [GES1991] [BDB2226] [HAL2241]

דַעְתֵּ֖ךְ‎(דַּעַת)

Hebrew|ḏaʕtˌēḵ|knowledge

Part-of-speech: noun
Gender: feminine
Number: singular
Person: not applicable
State: absolute
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H1847] [j.au.ae] [848c]
[דעת] [GES1754] [BDB1970] [HAL1985]

הִ֣יא‎(הִיא)

Hebrew|hˈî|she

Part-of-speech: personal pronoun
Gender: feminine
Number: singular
Person: third person
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H1931] [e.aw.aa] [480]
[היא] [GES1885] [BDB2109] [HAL2106]

שֹׁובְבָ֑תֶךְ‎(שׁוּב)

Hebrew|šôvᵊvˈāṯeḵ|return

Part-of-speech: verb
Gender: feminine
Number: singular
Person: third person
State: not applicable
Verbal tense: perfect
Verbal stem: pi“el


[H7725] [v.bn.aa] [2340]
[שוב] [GES7693] [BDB8470] [HAL8388]

וַ‎(וְ)

Hebrew|wa|and

Part-of-speech: conjunction
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[f.ab.aa] [519]
[ו] [GES1991] [BDB2226] [HAL2241]

תֹּאמְרִ֣י‎(אָמַר)

Hebrew|ttōmᵊrˈî|say

Part-of-speech: verb
Gender: feminine
Number: singular
Person: second person
State: not applicable
Verbal tense: wayyiqtol
Verbal stem: qal


[H559] [a.ea.aa] [118]
[אמר] [GES535] [BDB564] [HAL587]

בְ‎(בְּ)

Hebrew|vᵊ|in

Part-of-speech: preposition
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[b.ab.aa] [193]
[ב] [GES855] [BDB923] [HAL939]

לִבֵּ֔ךְ‎(לֵב)

Hebrew|libbˈēḵ|heart

Part-of-speech: noun
Gender: masculine
Number: singular
Person: not applicable
State: absolute
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H3820] [l.ai.ac] [1071a]
[לב] [GES3722] [BDB4153] [HAL4111]

אֲנִ֖י‎(אֲנִי)

Hebrew|ʔᵃnˌî|i

Part-of-speech: personal pronoun
Gender: unknown
Number: singular
Person: first person
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H589] [a.eg.aa] [129]
[אני] [GES567] [BDB598] [HAL620]

וְ‎(וְ)

Hebrew|wᵊ|and

Part-of-speech: conjunction
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[f.ab.aa] [519]
[ו] [GES1991] [BDB2226] [HAL2241]

אַפְסִ֥י‎(אֶפֶס)

Hebrew|ʔafsˌî|end

Part-of-speech: noun
Gender: masculine
Number: singular
Person: not applicable
State: construct
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H657] [a.fd.ab] [147a]
[אפס] [GES636] [BDB673] [HAL697]

עֹֽוד‎(עֹוד)

Hebrew|ʕˈôḏ|duration

Part-of-speech: noun
Gender: masculine
Number: singular
Person: not applicable
State: absolute
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H5750] [p.bc.ab] [1576a]
[עוד] [GES5695] [BDB6301] [HAL6220]

Biblia Comentada, Profesores de Salamanca (BAC, 1965)



47. Caída de Babilonia.
Este fragmento es de un subido lirismo irónico. El profeta invita a Babilonia, concebida como una reina majestuosa sentada en su trono, a que deponga sus atavíos y abandone el trono, para dedicarse modestamente a las faenas domésticas, propias de una esclava. Ha tratado tiránicamente a los cautivos de Israel, y ahora es apostrofada con energía. La desgracia y la tragedia se abatirán sobre la gran metrópoli mesopotámica, señora de naciones. Por el tono, esta sección es muy similar al canto irónico dedicado al rey de Babilonia, que desciende al seol (Isa_14:4-21). La suerte de Babilonia contrastará con la de Sión, que antes había quedado como viuda sin hijos, y ahora va a sentir la alegría de la múltiple maternidad (Isa_49:1455; Isa_51:1755). Podemos considerar este fragmento como secuencia lógica del c.46, en que se ironiza la huida vergonzosa de los habitantes de Babilonia con sus ídolos.

Babilonia convertida en esclava (1-4).
1 Desciende y siéntate en el polvo, virgen hija de Babilonia. No más trono, siéntate en la tierra, hija de los caldeos. Ya no te llamarán más la delicada y tierna. 2 Toma la muela y ve a moler la harina; quítate el velo, pon haldas en cinta, descubre tus pantorrillas y pasa los ríos. 3 Descubierta será tu desnudez y se verán tus vergüenzas. 4 Yo tomaré venganza implacable, dice nuestro redentor; Yahvé de los ejércitos es su nombre, el Santo de Israel.

El profeta invita a Babilonia a sentarse en el polvo (v.1) en señal de duelo por su nueva situación (Isa_3:26). Se la llama virgen, hija de Babilonia, en cuanto que no ha sufrido el yugo extranjero. Históricamente, sin embargo, Babilonia había estado sometida a Asiría; pero el profeta habla de la situación actual, en que Babilonia obra a su antojo. La expresión hija de Babilonia equivale en el lenguaje bíblico a Babilonia simplemente. Es una aposición al nombre. La ciudad es concebida como un ser viviente lleno aún de juventud (cf. Jer_46:11). Se la llama hija de los caldeos (v.1) porque reinaba en Babilonia la dinastía caldea 2. Era tierna y delicada, en cuanto que, por constituir el emporio comercial de oriente y la capital política del imperio, se había hecho sibarítica y afeminada en extremo. La imagen se adapta bien a la idea de una virgen objeto de todas las atenciones domésticas, que teme contaminarse al pisar el suelo (Deu_28:56). La condición social va a cambiar totalmente, y la virgen hija de Babilonia tendrá que someterse a los duros trabajos de la esclava: toma la muela (v.2) (cf. Exo_11:5; Job_31:10). Por ello debe quitarse todo atuendo que indique distinción y señorío: quítate el velo. Era el gran velo que las damas de buena posición llevaban sobre la espalda, cayendo hasta la cintura o hasta los píes (Can_4:1-3; Can_6:7). Y al mismo tiempo se la invita a remangarse; pon haldas en cinta (v.2), pues va a ser deshonrada ante todos los pueblos, siendo obligada a descubrir su desnudez (v.3). Y todo esto como consecuencia de la venganza implacable (v.4) de Yahvé, que es el redentor (v.4) de Israel, en cuanto que le libera de la opresión babilónica, castigando a la nación tirana. Y todo ello porque es el Santo de Israel (v.4), e.d., está vinculado a los destinos históricos del pueblo elegido. Como santo, no podía tolerar indefinidamente las injusticias de la nación opresora, y, como vinculado a Israel, debía salir por sus fueros en virtud de las antiguas promesas mesiánicas.

La arrogancia de Babilonia, causa de su ruina (5-7).
5 Siéntate en silencio, súmete en tinieblas, ¡hija de los caldeos! Ya nunca más te llamarán soberana de los reinos. 6 Estaba yo airado contra mi pueblo, y dejé profanar mi heredad y la entregué en tus manos. Tú no tuviste piedad e hiciste pesar tu yugo sobre los ancianos. 7 Tú decías: Yo seré siempre, por siempre señora, y no reflexionaste, no pensaste en tu fin.

Apostrofe contra Babilonia, que, en su arrogancia, se consideraba la perpetua señora entre los pueblos. En su insolencia ha tratado tiránicamente al pueblo de Dios. Ahora que llega su hora, se la invita a sentarse en silencio., en tinieblas (v.6), símbolo de la humillación y de la prisión (Can_42:7).
Yahvé castigó a Israel por sus pecados, y permitió profanar su heredad (v.6), e.d., su pueblo escogido, entregándolo a los babilonios, que se excedieron en el castigo, sometiendo a un yugo sobre los ancianos y débiles (Lam_4:16; Lam_5:12). Quizá se les sometió a trabajos forzados. No obstante, por lo que nos dicen Jeremías (Lam_29:1) y Ezequiel, el cautiverio no fue tan duro, ya que se les permitía a los exilados cierta autonomía y participar en la vida económica y social. Babilonia, en su presunción, creyó que iba a permanecer siempre, y por eso oprimía a Israel sin reservas, sin pensar que es Yahvé quien lo entregó en sus manos. En realidad, el mismo Yahvé, que había hecho justicia sobre Israel, la haría al fin sobre su opresora Babilonia.

Babilonia, privada de sus hijos (8-9).
8 Escucha, pues, esto, voluptuosa, que te sientas tan segura, que dices en tu corazón: Yo, y nadie más que yo; no enviudaré ni conoceré la orfandad. 9Ambas cosas te vendrán de repente, en un mismo día: la orfandad y la viudez en toda su plenitud 3 vendrán sobre ti a pesar de tus numerosos agüeros y de tus poderosos encantamientos.

Babilonia se sentaba segura (v.8) en su trono, entregada a los placeres despreocupada, y, en su insolencia, decía interiormente: Yo, y nadie mas que yo (v.8), despreciando con arrogancia a los demás pueblos vasallos. Se siente fuerte y no teme quedarse sola: No enviudaré ni conoceré la orfandad (v.8). Cree que no se verá privada de sus numerosos hijos, que no han de caer bajo la espada ni serán llevados en cautividad. No ve la posibilidad de ser invadida por otro conquistador (cf. Sof_2:15). Pero se acerca el día en que (invasión de Ciro) le sobrevendrán los dos mayores males para una madre: quedarse viuda y sin hijos. La ciudad quedará sola como una viuda, y de nada le servirán sus agüeros. y encantamientos (í·9). Que constituían la ciencia característica de Babilonia. La astrología era muy cultivada, y, con sus conocimientos, los sabios creían poder dirigir el curso de la historia. Pero de nada servirán estos cálculos a la hora de la verdad, pues es Yahvé el que dirige los acontecimientos humanos.

Babilonia y la magia (10-12).
10 Tú estabas fiada en tu maldad, y decías: No me ve nadie. Tu sabiduría y tu ciencia te engañaron, y decías en tu corazón: Yo y no más que yo. 11 Pero va a caer sobre ti un mal que no sabrás conjurar, y caerá sobre ti una ruina que no podrás borrar 4; vendrá de repente sobre ti una devastación, sin que lo sepas. 12 Acude, pues, con tus encantamientos, con tus muchas hechicerías, con que te fatigas desde la niñez; quizá puedan servirte, quizá puedan hacerte terrible.

Babilonia confiaba en su astucia y malas artes para continuar su dominio sobre los pueblos, creyendo que nadie vigilaba sus actos (no me ve nadie, v.10), según el proceder general de los impíos (cf. Sal_10:11). Pero de nada le valdrá su sabiduría y ciencia (v.10), e.d., sus artes mágicas esotéricas, como la astrología, de la que se gloriaba ante los pueblos. No podrá conjurar (v.11) el mal que se cierne sobre ella en forma de amplia devastación. El profeta invita irónicamente a Babilonia a que despliegue todas sus artes mágicas, que maneja tan diestramente desde la niñez (v.12). Según Diodoro de Sicilia, los babilonios intentan evitar el mal y procurar el bien por purificaciones, sacrificios y encantamientos5. Estos tenían cierto valor expiatorio ante las divinidades; por eso aquí se dice que no podrá borrar o expiar (v.1:1) esa ruina que viene de Yahvé. Tampoco la harán terrible para espantar los malos genios que se ciernen sobre ella.

Impotencia de las artes mágicas (13-15).
13 Estás cansada de tanto consultar. Que se presenten, pues; que te salven los que dividen los cielos, y observan las estrellas, y hacen la cuenta de los meses, de lo que ha de venir sobre ti. 14 Helos aquí como briznas de paja que ha consumido el fuego; no podrán salvar sus vidas del poder de las llamas; brasas, pero no para calentarse a ellas, ni hoguera para sentarse ante ella. 15 Eso serán para ti aquellos por quienes te afanaste, tus mercaderes desde tu juventud 6. Cada cual vagará por su camino, y no habrá quien te salve.

Se presenta a Babilonia nerviosa, consultando a los observadores de fuerzas ocultas, y desilusionada con sus respuestas: cansada de tanto consultar (v.13). Todos los adivinos que consultan el curso de los cielos no podrán hacer nada para salvarla. Los que dividen los cielos (v.13), e.d., los astrólogos, que parcelan el cielo para localizar sus observaciones, serán tan impotentes como los que hacen la cuenta de los meses o novilunios en los calendarios mensuales, con señalamiento de días de desastre y de bonanza relacionados con determinados hechos de los hombres: de lo que ha de venir sobre ti (v.13). En realidad, todos estos magos y adivinos son tan impotentes como briznas de paja (v.14) ante el fuego huracanado de la invasión y devastación, y si son impotentes para salvar sus vidas ¿cuánto más para ir en auxilio de otros? En realidad, el fuego de la invasión será tan devastador, que no servirá para calentarse, sino para abrasarse en sus llamas. Ni los mercaderes con los que traficó desde su juventud, e.d., desde su remota historia, le servirán de ayuda en el momento crítico, pues entonces cada cual vagará por su camino (v.15), e.d., huirán vagabundos hacia su país de origen para librarse del turbión, y la dejarán sola, sin que haya nadie que la salve.

1 Así según una reconstrucción seguida por Duhm y Skinner. 2 Los caldeos eran una tribu semita del sudeste de Mesopotamia. 3 En vez de en toda su plenitud, que es traducción literal del texto hebreo, los LXX y la Pesh. traducen súbitamente, por una ligera confusión de letras. Esta lectura es seguida por la Bib. de Jer . 4 La palabra hebrea que traducimos por borrar significa también expiar. Aquí en el sentido de alejar un mal con expiaciones. 5 Cf. Skinner, o.c., II 85. 6 Así según el texto hebreo. Con un ligero cambio de letras, otros leen magos en vez de mercaderes. Cf. Condamin, o.c., p.28g.

King James Version (KJVO) (1611)



Chapter XLVII.

1 Gods iudgement vpon Babylon and Caldæa, 6 for their vnmercifulnesse, 7 pride, 10 and ouerboldnes, 11 shalbe vnresistable.
1 Come downe and sit in the dust: O virgin daughter of Babylon, sit on the ground: there is no throne, O daughter of the Caldeans: for thou shalt no more be called tender and delicate.
2 Take the milstones and grinde meale, vncouer thy lockes: make bare the legge: vncouer the thigh, passe ouer the riuers.
3 Thy nakednes shalbe vncouered, yea thy shame shalbe seene: I will take vengeance, and I will not meet thee as a man.
4 As for our redeemer, the Lord of hostes is his Name, the Holy one of Israel.
5 Sit thou silent, and get thee into darknes, O daughter of the Caldeans: for thou shalt no more be called the Ladie of kingdomes.
6 I was wroth with my people: I haue polluted mine inheritance, and giuen them into thine hand: thou didst shew them no mercy; vpon the ancient hast thou very heauily layed the yoke.
7 And thou saydst, I shall bee [ Rev_18:7.] a Ladie for euer: so that thou didst not lay these things to thy heart, neither didst remember the later end of it.
8 Therefore heare now this, thou that art giuen to pleasures, that dwellest carelesly, that sayest in thine heart, I am, and none else besides mee, I shall not sit as a widow, neither shall I know the losse of children.
9 But these two [ Isa_51:19.] things shall come to thee in a moment in one day; the losse of children, and widowhood; they shall come vpon thee in their perfection, for the multitude of thy sorceries, and for the great abundance of thine inchantments.

[Vaine sciences.]

10 For thou hast trusted in thy wickednesse: thou hast said, None seeth me. Thy wisedome and thy knowledge, it hath [ Or, caused thee to turne away.] peruerted thee, and thou hast said in thine heart, I am, and none else besides me.
11 Therefore shall euill come vpon thee, thou shalt not know [ Hebrew: the morning thereof.] from whence it riseth: and mischiefe shall fall vpon thee, thou shalt not be able to [ Hebrew: expiate.] put it off: and desolation shall come vpon thee suddenly, which thou shalt not know.
12 Stand now with thine inchantments, and with the multitude of thy sorceries, wherein thou hast laboured from thy youth; if so be thou shalt be able to profite, if so be thou mayest preuaile.
13 Thou art wearied in the multitude of thy counsels: let now the [ Hebrew: viewers of the heauens.] astrologers, the starre-gazers, the [ Hebrew: that giue knowledge concerning the moneths.] monethly prognosticators stand vp, and saue thee from these things that shall come vpon thee.
14 Behold, they shall be as stubble: the fire shall burne them, they shall not deliuer [ Hebrew: their soules.] themselues from the power of the flame: there shall not bee a coale to warme at, nor fire to sit before it.
15 Thus shal they be vnto thee with whom thou hast laboured, euen thy merchants from thy youth, they shall wander euery one to his quarter: none shall saue thee.

La Biblia de Nuestro Pueblo (Liturgical Press, 2006),

Humillación de Babilonia y de sus magos. Las ideologías del poder hacen que se crean invencibles los poderosos de turno. Babilonia ostentó por varias décadas el título de «reina de los reinos»; su ascenso al poder no fue por la vía más «santa»; todo lo contrario; y ése es el motivo de su caída. Todo poder fundado sobre la injusticia, la violencia y la muerte está condenado al fracaso por más fuerza y firmeza que aparente. El debilitamiento de Babilonia y el fortalecimiento de los persas hacen sospechar la inminente caída de los caldeos. Esto es visto por el profeta como la hora del Señor, el momento de llamar a juicio. La caída y destrucción de Judá y Jerusalén estaban previstos como un castigo, pero Babilonia se excedió y por eso será también castigada.
Los versículos 13-15 son una sátira contra los magos y adivinos de Babilonia. Es verdad que en Mesopotamia y especialmente en Babilonia había excelentes astrónomos, personas muy diestras en el conocimiento de los astros, pero desafortunadamente utilizaban su conocimiento de una manera poco ortodoxa; otras veces eran manipulados también por los propios poderosos que les pagaban para que auguraran cosas siempre buenas y positivas, con tal de mantener el dominio sobre la conciencia del pueblo.

Nuevo Comentario Bíblico Siglo XXI (Editorial Mundo Hispano, 2019)



Babilonia condenada. Es una endecha o una canción de burla, en el característico ritmo decreciente de tales poemas (se la percibe, en la traducción, en la sucesión de una frase larga a una corta del v. 2a). Cf. 1:21-31; 14:4-23.

Es el destino que le corresponde a Babilonia: no puede haber misericordia, pues jamás mostró misericordia (cf. Stg. 2:13). Pero la descripción no está exenta de lástima. Somos testigos del triunfo de la justicia pero al mismo tiempo de la tragedia del pecador. Polvo, trabajo, desnudez, vergüenza, silencio, tinieblas (vv. 1-5) son símbolos de condenación que se suman a la amargura ante el fugaz resplandor de su arrogante ufanía (v. 8), que se apagará para siempre (vv. 7-11). Se nos hace carne la congoja de su corazón al fracasar los recursos en los que confía (los encantamientos, hechicerías y horóscopos de los vv. 12-14), que los antiguos aliados prudentemente se retiran cada uno ... por su lado (v. 15) como que eran amigos solamente para los tiempos de bonanza.

Digamos de paso que las crónicas confirman la enorme profusión de ritos mágicos en Babilonia, a los que se alude en los vv. 9, 12, 13; y Eze. 21:21 describe con vivos trazos una selección de los mismos utilizados por Nabucodonosor.

Biblia Hispano Americana (Sociedad Bíblica Española, 2014)

Sal 10:4; Sal 94:7.

Libro del Pueblo de Dios (San Pablo, 1990)



1. La hermosura de una joven "virgen" es una imagen común en la poesía hebrea para referirse al esplendor de una ciudad. Aquí este título tiene evidentemente un matiz irónico.

Torres Amat (1825)



[3] Nah 3, 5.

[8] Contraste de la exaltación y humillación de Babilonia.

Dios Habla Hoy (Sociedades Bíblicas Unidas, 1996)



Dios Habla Hoy 1996 Notes:



No Comments at this time.