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Y de pronto hablo, tocante a una nación o un reino, de edificar y plantar; (Jeremías  18, 9) © Nueva Biblia de Jerusalén (Desclee, 1998)

BHSEk - Biblia Hebraica Stuttgartensia (Enhanced; KJV versification)

וְ‎(וְ)

Hebrew|wᵊ|and

Part-of-speech: conjunction
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[f.ab.aa] [519]
[ו] [GES1991] [BDB2226] [HAL2241]

רֶ֣גַע‎(רֶגַע)

Hebrew|rˈeḡaʕ|moment

Part-of-speech: noun
Gender: masculine
Number: singular
Person: not applicable
State: absolute
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H7281] [t.au.ab] [2116a]
[רגע] [GES7240] [BDB7972] [HAL7893]

אֲדַבֵּ֔ר‎(דָּבַר)

Hebrew|ʔᵃḏabbˈēr|speak

Part-of-speech: verb
Gender: unknown
Number: singular
Person: first person
State: not applicable
Verbal tense: imperfect
Verbal stem: pi“el


[H1696] [d.ai.aa] [399]
[דבר] [GES1602] [BDB1811] [HAL1822]

עַל‎(עַל)

Hebrew|ʕal-|upon

Part-of-speech: preposition
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H5921] [k.bg.ac] [1624p]
[על] [GES5848] [BDB6471] [HAL6395]

גֹּ֖וי‎(גֹּוי)

Hebrew|gˌôy|people

Part-of-speech: noun
Gender: masculine
Number: singular
Person: not applicable
State: absolute
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H1471] [c.ba.ag] [326e]
[גוי] [GES1367] [BDB1562] [HAL1569]

וְ‎(וְ)

Hebrew|wᵊ|and

Part-of-speech: conjunction
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[f.ab.aa] [519]
[ו] [GES1991] [BDB2226] [HAL2241]

עַל‎(עַל)

Hebrew|ʕal-|upon

Part-of-speech: preposition
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H5921] [k.bg.ac] [1624p]
[על] [GES5848] [BDB6471] [HAL6395]

מַמְלָכָ֑ה‎(מַמְלָכָה)

Hebrew|mamlāḵˈā|kingdom

Part-of-speech: noun
Gender: feminine
Number: singular
Person: not applicable
State: absolute
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H4467] [m.cd.al] [1199f]
[ממלכה] [GES4386] [BDB4886] [HAL4811]

לִ‎(לְ)

Hebrew|li|to

Part-of-speech: preposition
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[l.aa.ab] [1063]
[ל] [GES3706] [BDB4135] [HAL4089]

בְנֹ֖ת‎(בָּנָה)

Hebrew|vᵊnˌōṯ|build

Part-of-speech: verb
Gender: unknown
Number: unknown
Person: unknown
State: absolute
Verbal tense: infinitive (construct)
Verbal stem: qal


[H1129] [b.cb.aa] [255]
[בנה] [GES1054] [BDB1202] [HAL1209]

וְ‎(וְ)

Hebrew|wᵊ|and

Part-of-speech: conjunction
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[f.ab.aa] [519]
[ו] [GES1991] [BDB2226] [HAL2241]

לִ‎(לְ)

Hebrew|li|to

Part-of-speech: preposition
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[l.aa.ab] [1063]
[ל] [GES3706] [BDB4135] [HAL4089]

נְטֹֽעַ‎(נָטַע)

Hebrew|nᵊṭˈōₐʕ|plant

Part-of-speech: verb
Gender: unknown
Number: unknown
Person: unknown
State: absolute
Verbal tense: infinitive (construct)
Verbal stem: qal


[H5193] [n.db.aa] [1354]
[נטע] [GES5108] [BDB5703] [HAL5592]

Biblia Comentada, Profesores de Salamanca (BAC, 1965)



18. La Orza Rota.
Insidias contra Jeremías. Imprecaciones.
Con este capítulo se abre una nueva sección del libro, que se extiende hasta el c.20 inclusive. El sentido teológico de los tres capítulos se basa en la parábola en acción de la orza rota. Con ella el profeta quiere hacer ver que era vana la suposición de que, por ser Israel el pueblo elegido por Dios, nunca llegaría la ruina de Jerusalén. El capítulo se divide en dos partes: a) en la casa del alfarero (1-17); b) imprecaciones del profeta (18-23).

Yahvé forjador de pueblos (1-10).
1 Palabra que de Yahvé llegó a Jeremías, diciendo: 2Levántate y baja a la casa del alfarero, y allí te haré oír mis palabras. 3Bajé, pues, a la casa del alfarero, y he aquí que éste estaba trabajando a la rueda. 4Cuando se estropeaba entre las manos la vasija que estaba haciendol, tornaba a hacer otra vasija, según cumpliera hacerlo a los ojos del alfarero. 5Y me vino la palabra de Yahvé, diciendo: 6¿Acaso no puedo yo hacer de vosotros, casa de Israel, como hace el alfarero? oráculo de Yahvé . Como está el barro en la mano de alfarero, así estáis vosotros en mi mano, casa de Israel. 7De pronto decido yo arrancar, destruir y hacer perecer a un pueblo y a un reino; 8pero si este pueblo se convierte de las maldades por las que yo me había pronunciado contra él, también yo me arrepiento del mal que había determinado hacerle. 9Igualmente resuelvo yo de pronto edificar y plantar a un pueblo o un reino; 10pero, si obra el mal a mis ojos y no escucha mi voz, me arrepiento del bien que había determinado hacerle.

Jeremías recibe la orden de ir a la casa del alfarero (v.2) y observar lo que éste hace, para después sacar una lección moral para su pueblo. El alfarero estaba a la rueda o torno (v.5), alusión al sistema primitivo, aún existente en Palestina, de hacer la vasija utilizando dos ruedas de piedra o madera unidas por un eje. La inferior es movida por el pie, y en la superior se va modelando la arcilla a gusto del artífice. Jeremías se fijó en que, cuando se estropeaba entre las manos la vasija que estaba haciendo (v.4), la deshacía, y con la misma arcilla hacía otra a su gusto. El detalle tenía su significación en el orden religioso para el profeta, y así se lo declara Dios expresamente: Israel está en manos de Yahvé como la arcilla en manos del alfarero (v.6).
Lo que quiere destacar en primer término con este símil es la libérrima omnipotencia divina, en tal forma que puede hacer de Israel y de los pueblos lo que le plazca, como el alfarero hace la vasija a su gusto. Yahvé es dueño absoluto de los destinos de Israel. La aplicación más exacta, conforme al símil, es que así como el alfarero hace, con la misma arcilla de la vasija deshecha por haberse estropeado, otra a su gusto, así Yahvé, sin desechar las malas cualidades de Israel, sobre todo su obstinación, le utiliza con sus defectos para modelarle conforme a sus designios. Pero en las parábolas y alegorías es necesario atender sobre todo a la finalidad de la misma exigida por el contexto, que aquí es destacar la autónoma omnipotencia de Yahvé. Este carácter omnímodo se extiende a los destinos de todos los pueblos. No obstante, en los planes de Dios se salva siempre la justicia y la misericordia, y por eso muchas veces sus amenazas son condicionadas y dependen de la reacción de los pueblos. Aquí se presenta a Dios antropomónicamente, pues es capaz de arrepentirse de sus planes y designios (v.8). Son modos de hablar humanos que no han de tomarse al pie de la letra. La suerte, pues, de Israel depende de su conducta.

Contumacia de los judíos (11-12).
11 Di, pues, ahora a los hombres de Judá y a los habitantes de Jerusalén: Así habla Yahvé: He aquí que estoy trazando males y formando planes contra vosotros. Conviértase, pues, cada uno de sus malos caminos, y mejoradlos y mejorad vuestras obras. 12 Pero ellos dicen: ¡Es en vano! pues seguiremos nuestros designios, y cada cual obraremos según la dureza de nuestro perverso corazón.

Después de haber enunciado el principio general, el profeta detalla su aplicación práctica a Israel, que ha sido infiel a Yahvé; por tanto, la justicia vengadora puede rechazar y aniquilar a dicho pueblo, pero quiere dar una última posibilidad de salvación, invitando al arrepentimiento: Yahvé está trazando males contra los israelitas en el supuesto de que no cambien de conducta. Pero el pueblo sigue aferrado a sus malas costumbres: es en vano (v.12); no creen en las recriminaciones del profeta de Yahvé. Jeremías pone en boca del pueblo el modo de pensar de éste, reflejado en su conducta práctica: obraremos según la dureza de nuestro corazón. Es ya la obstinación declarada y porfiada.

El crimen inaudito de Israel (13-17).
13 Por eso así dice Yahvé: Preguntad a las naciones. ¿Quién oyó cosas semejantes? Un horrible crimen ha cometido la virgen de Israel. 14¿Por ventura desaparece de la roca del campo la nieve del Líbano o se agotan las aguas frescas que corren de los montes? 3 15 Pues mi pueblo se ha olvidado de mí, ha ofrecido incienso a la vanidad. Van de tropiezo en tropiezo por sus caminos, los senderos antiguos, siguiendo sendas extraviadas, camino no trillado, 16 para hacer de su tierra una desolación, objeto de eterna burla. Todos los que pasen por ella se asombrarán y moverán la cabeza. 17 Como viento solano los dispersaré ante los enemigos. La espalda les mostraré, no el rostro, el día de su infortunio.

El pecado de Israel no tiene paralelo en la historia, pues ha abandonado a su propio Dios, que le protegió en toda su vida nacional, para irse tras dioses extranjeros: es el horrible crimen. de la virgen de Israel. La frase tiene un sentido de ternura, reflejada en el epíteto aplicado a Israel: la virgen, e.d., Israel, que ha sido la virgen desposada de Yahvé en sus primeros tiempos de elección en el desierto. Su defección la explica el profeta por un símil de la naturaleza inanimada: la nieve del Líbano permanece unida en las cimas de la roca del campo 4; probable alusión al monte Hermón, que se eleva en el campo o llanura. En 21:13 se llama a Jerusalén roca de la llanura en un sentido análogo. La idea de la comparación es que,
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JEREMíAS 18
mientras la nieve permanece vinculada a las crestas de las montañas, donde sólo puede subsistir en las épocas de calor, y las aguas frescas siguen fluyendo de los montes, sin pretender buscar otros cursos caprichosos, que las harían agotarse en seguida, Israel, en cambio, no permanece unido a Yahvé, donde sólo puede subsistir y de cuyo manantial sólo puede recibir vida nacional. Los israelitas han olvidado a Yahvé, tropezando por sus caminos, los senderos antiguos (v.15b), e.d., apartándose o recalcitrando en los caminos de la tradición yahvista, que debía seguir, los cuales eran los senderos antiguos, trazados por Dios 5, siguiendo sendas extraviadas, peligrosas (la idolatría), que no era el camino trillado que se le había señalado desde el principio.
Consecuencia de su error será la desolación y la ruina. Dios los castigará con la destrucción de sus ciudades y con la deportación en masa, y todos los que pasen por ella se asombrarán y moverán la cabeza (v.16) en señal de burla y desprecio, pues verán en ello una maldición divina 6. Yahvé hará que venga un ejército enemigo que agoste, como el viento solano (el jamsim, viento abrasador del desierto), todo lo que haya de vida, dispersando a la población hacia el exilio (v.17). Yahvé se desentenderá de su pueblo, dándole la espalda u ocultando su rostro en el momento de la tragedia, el día del infortunio.

Imprecaciones del profeta (18-23).
18 Ellos dijeron: Venid, tomemos asechanzas contra Jeremías, pues no ha de desaparecer la ley del sacerdote, el consejo del sabio y la palabra del profeta. Venid, vamos a herirle con la lengua, y no demos oídos a ninguna de sus palabras. 19 Atiéndeme, ¡oh Yahvé! y oye la voz de mis adversarios. 20 ¿Se paga por ventura mal por bien? Pues me cavan una hoya. Acuérdate cómo me presenté ante ti para hablar en favor suyo, para apartar de ellos tu indignación. 21 Da, pues, sus hijos al hambre y entrégalos al poder de la espada. Quédense sus mujeres sin hijos y viudas, y mueran sus maridos de peste, y sus mancebos traspasados por la espada en la guerra. 22 Salgan gritos de sus casas cuando de repente hagas venir sobre ellos el salteador, pues han cavado una hoya donde capturarme, y tendieron a mis pies lazos ocultos. 23 Pero tú, ¡oh Yahvé! conoces sus maquinaciones de muerte contra mí. No les perdones por su iniquidad, no borres su pecado de ante tus ojos; caigan ante ti; en el día de tu ira obra sobre ellos.

Encontramos aquí una situación similar a la descrita en 11:18-20; I5,ioss. Los enemigos de Jeremías traman asechanzas contra él para quitarle de delante y verse libres de sus acusaciones, que consideran inoportunas (v.18). La acusación principal contra él es que ha predicho la ruina de la nación y del templo, lo que no podía concebirse conforme a las promesas divinas de permanencia del pueblo: no ha de desaparecer la ley del sacerdote, el consejo del sabio y la palabra del profeta (v.18). La teocracia hebrea se basaba espi-ritualmente en el sacerdote, el profeta y el sabio o escriba de la Ley. A pesar de las predicciones de Jeremías, estas instituciones fundamentales permanecerán, y, por tanto, son blasfemas y atentan contra la providencia que Yahvé tiene de su pueblo las palabras de ruina de la nación que constantemente anuncia Jeremías. Así discurrían los grupos de oposición al profeta7. La expresión Darnos a herirle con la lengua alude a las maquinaciones secretas y calumnias que urdían contra el profeta para acusarle y condenarle. Querían condenarlo ante la opinión pública como sacrilego, pues anunciaba cosas contra los intereses de la nación elegida por Dios. Es la misma acusación que los contemporáneos de Cristo hicieron contra El. Una vez más Jeremías aparece como tipo del Cristo doliente.
Al profeta, ante estas insidias y acusaciones, no le queda sino recurrir a Yahvé, que le ha prometido liberarlo de los violentos 8; por eso a El acude confiado: oye la voz de mis adversarios (v.ig). Se siente herido por la ingratitud de su pueblo. Todo lo que ha hecho es en bien de sus compatriotas, y, sin embargo, pagan mal por bien (v.20). En sus predicciones no ha buscado sino el arrepentimiento del pueblo para librarlo de la ira divina. Pero se lo pagan acusándole de traidor y sacrilego. Es la eterna tragedia íntima de Jeremías, que durará toda su vida hasta ver consumadas literalmente sus profecías de ruina y de exterminio.
En un momento de amargura, el profeta deja desahogar su alma con unas imprecaciones que hieren nuestro sentido cristiano de la caridad. De nuevo nos encontramos aquí con expresiones orientales hiperbólicas, y de nuevo tenemos que recordar que el nivel espiritual del A.T. era muy inferior al del í. Ô. El perdón total de los enemigos, orando por ellos, y su conversión, es un fruto espiritual de la muerte de Jesús, perdonando a sus enemigos desde la cruz. San Esteban es el primero en iniciar la serie de mártires que bendicen a sus verdugos, implorando para ellos el perdón de sus pecados y ofreciendo su sangre por ellos. En el A.T., sólo el Siervo de Yahvé del libro de Isaías culminación máxima de las profecías personales mesiánicas aparece sufriendo callado, sin protestar ante sus enemigos. Precisamente esto era lo que no pudieron comprender los judíos en la profecía, y de ahí que, cuando Jesús aparece cumpliendo materialmente los detalles del vaticinio, sus compatriotas le condenen, por considerarle en oposición a las concepciones tradicionales de Israel. El amor a los enemigos es una revelación de la predicación evangélica, y la fundamental de todas, y es tan elevada que aun los grandes justos del A.T., como los patriarcas y profetas, no pudieron llegar a ella, a pesar del profundo sentido de justicia que los dominaba. Es que la caridad cristiana tiene unas cimas muy superiores a la más elevada justicia humana.
La expresión salgan gritos de sus casas (v.22) alude a los gritos de los niños y demás seres débiles que están en casa cuando llega el salteador o ejército enemigo invasor. Estas imprecaciones del profeta son un deseo de castigo para sus enemigos, que han cavado una hoya para tomarlo. Los conciudadanos de Jeremías le tienden asechanzas, como hacen los cazadores para cobrar sus piezas, poniendo lazos ocultos y hoyas, para que caigan inadvertidamente en ellas. La imagen es muy usual en la Biblia 9. Por eso pide a Yahvé que no olvide la iniquidad de ellos: no borres su pecado de ante tus ojos (v.23). Yahvé lleva en un libro la contabilidad de las buenas y malas acciones, y Jeremías quiere que continúe el enorme pasivo que carga sobre sus enemigos 10 y que en el día de la ira de Yahvé reciban el pago de sus obras.

1 Así siguiendo a los LXX. El TM añade como arcilla en las manos del alfarero, que es parafraseado por algunos: como (sucede con) la arcilla en manos del alfarero. 3 Lit. el TM: ¿se derretirán las aguas extranjeras frescas? 4 La versión de los LXX da otra versión muy enigmática, al traducir por pecho lo que nosotros hemos traducido, con un ligero cambio, por campo. 5 Cf. Jer_6:16, donde los senderos antiguos significan los buenos caminos tradicionales de Israel. 6 Cf. Deu_29:23; 1Re_9:8; Isa_37:22; Sal_22:8; Mat_27:30. 7 Muchos autores prefieren entender la frase de los enemigos de Jeremías en el sentido de que, aunque muera éste, no faltarán sacerdotes, profetas y sabios que los guíen. Así Ric-ciotti, Trochon, siguiendo la interpretación de San Efrén y de otros Santos Padres. 8 Cf. 15:20. 9 Cf. Sal_7:16; Eco_11:32; Ecl_10:8; Pro_26:27; Eclo 27 20 10 Cf. Sal_109:145.

King James Version (KJVO) (1611)



Chapter XVIII.

1 Vnder the type of a potter is shewed Gods absolute power in disposing of Nations. 11 Iudgements threatned to Iudah for her strange reuolt. 18 Ieremiah prayeth against his conspiratours.
1 The word which came to Ieremiah from ye Lord saying,
2 Arise and go downe to the potters house, & there I will cause thee to heare my words.
3 Then I went downe to the potters house, and behold, hee wrought a worke on the [ Or, frames or seates.] wheeles.
4 And the vessell [ Or, that he made, was marred as clay in the hand of the potter.] that he made of clay, was marred in the hand of the potter; so he [ Hebrew: returned and made.] made it againe another vessell as seemed good to the potter to make it.
5 Then the word of the Lord came to me, saying,
6 O house of Israel, [ Isa_45:9; Rom_9:10; Wis_15:7.] cannot I doe with you as this potter, saith the Lord ? behold, as the clay is in the potters hand, so are ye in mine hand, O house of Israel.
7 At what instant I shall speake concerning a nation, and concerning a kingdome, to [ Jer_1:10.] plucke vp and to pull downe, and to destroy it.

[Euill for good.]

8 If that nation against whom I haue pronounced, turne from their euill, [ Iona.3.10.] I will repent of the euill that I thought to doe vnto them.
9 And at what instant I shall speake concerning a nation, and concerning a kingdome to build and to plant it;
10 If it doe euill in my sight, that it obey not my voice, then I will repent of the good; wherewith I saide I would benefite them.
11 Now therefore goe to, speake to the men of Iudah, and to the inhabitants of Ierusalem, saying, Thus saith the Lord; Behold, I frame euill against you, and deuise a deuice against you: [ 2Ki_17:13 ; Jer_7:3 ; Jer_25:5 ; Jer_35:15 .] returne ye now euery one from his euill way, and make your waies and your doings good.
12 And they said, [ Jer_2:25 .] There is no hope, but wee will walke after our owne deuices, and wee will euery one doe the imagination of his euil heart.
13 Therefore thus saith the Lord, [ Jer_2:10 .] Aske ye now among the heathen, who hath heard such things? the Uirgin of Israel hath done a very horrible thing.
14 Will a man leaue [ Or, my fields for a rocke, or for the snow of Lebanon? Shall the running waters be forsaken for the strange cold waters?] the [ Jer_2:13 .] snow of Lebanon which commeth from the rocke of the fielde? or shall the colde flowing waters that come from another place, be forsaken?
15 Because my people hath [ Jer_17:13 .] forgotten mee, they haue burnt incense to vanitie, and they haue caused them to stumble in their waies from the [ Jer_6:16 .] ancient paths, to walke in paths, in a way not cast vp,
16 To make their land [ Jer_19:8 ; Jer_49:13 ; Jer_50:13 .] desolate and a perpetuall hissing: euery one that passeth thereby shall bee astonished, and wagge his head.
17 I will scatter them as with an East winde before the enemie: I will shew them the backe, and not the face, in the day of their calamitie.
18 Then said they, Come, and let vs deuise deuices against Ieremiah: [ Mal_2:7 .] for the Law shall not perish from the Priest, nor counsell from the wise, nor the word from the prophet: Come and let vs smite him [ Or, for the tongue.] with the tongue, and let vs not giue heede to any of his wordes.
19 Giue heed to me, O Lord, and hearken to the voice of them that contend with me.
20 Shall euill bee recompensed for good? for they haue digged a pit for my

[The potters vessell.]

soule: remember that I stood before thee to speake good for them, and to turne away thy wrath from them.
21 Therefore deliuer vp their children to the famine, and [ Hebrew: powre them out.] [ Psa_109:10 .] powre out their blood by the force of the sword, and let their wiues be bereaued of their children and be widowes, and let their men be put to death, let their yong men be slaine by the sword in battell.
22 Let a crie bee heard from their houses, when thou shalt bring a troupe suddenly vpon them, for they haue digged a pit to take me, and hid snares for my feet.
23 Yet Lord thou knowest all their counsell against me [ Hebrew: for death.] to slay mee: forgiue not their iniquitie, neither blot out their sinne from thy sight, but let them bee ouerthrowen before thee, deale thus with them in the time of thine anger.

Libro del Pueblo de Dios (San Pablo, 1990)



6. La imagen del "alfarero" es usada varias veces en la Biblia para expresar la absoluta dependencia del hombre con respecto a su Creador ( Isa_29:16; Isa_45:9; Ecli. 33. 13; Rom_9:20-21).

8. El Señor no actúa arbitrariamente, sino que tiene en cuenta la libre decisión de los hombres. Él está siempre dispuesto a perdonar al que se convierte de corazón.

18. Los "sacerdotes", los "sabios" y los "profetas" eran los responsables de hacer conocer al pueblo la voluntad de Dios: el sacerdote como intérprete de la "instrucción" de la Ley, el sabio con sus "consejos" extraídos de la experiencia, y el profeta en cuanto transmisor de una "palabra" recibida por inspiración divina. Los contemporáneos de Jeremías se creen autorizados a rechazar su mensaje, creyendo que el Señor nunca dejará de guiarlos a través de estos medios.

La Biblia de Nuestro Pueblo (Liturgical Press, 2006),

En el taller del alfarero. Una nueva acción simbólica. Se trata de una actividad cotidiana y, por tanto, muy familiar para el pueblo: el alfarero que arma y rearma sus vasijas. Eso es lo que intenta hacer entender Jeremías a sus oyentes: así crea y re-crea Dios a su pueblo. Los versículos 7-10 introducen la idea de que esa acción divina abarca también a las demás naciones. Pese al sentido profundo de la parábola visual del alfarero, el hombre no queda «programado» para hacer siempre la voluntad de su Hacedor; siempre queda intacta su libertad, incluso para decir «no» al proyecto gratuito del Señor.

Sagrada Biblia (Conferencia Episcopal Española, 2011)

*18:1-12 Se presenta a Dios como creador de su pueblo y dueño de lo que ha salido de sus manos. Su decisión de destruir no es arbitraria. También en Gén 6:5-7 toma la decisión de destruir toda su creación.

Nueva Biblia de Jerusalén (1998) - referencias, notas e introducciones a los libros


REFERENCIAS CRUZADAS

[1] Jer_1:10

Torres Amat (1825)



[11] Experiencia ordinaria de Jeremías, que luego es interpretada como mandato del Señor. 2 Re 17, 13; Jon 3, 9.

[16] Jer 50, 13.

[18] Con la calumnia.

[21] Ya que tu justicia lo exige.

Nueva Biblia de Jerusalén (Desclée, 1998)


REFERENCIAS CRUZADAS

[1] Jer_1:10

Dios Habla Hoy (Sociedades Bíblicas Unidas, 1996)



Dios Habla Hoy 1996 Notes:



[1] 18.7 Arrancar, derribar y destruir: Jer 1.10.