Ver contexto
Pues temo el castigo de Dios,
no resistiría su majestad.
(Job  31, 23) © Nueva Biblia de Jerusalén (Desclee, 1998)

BHSEk - Biblia Hebraica Stuttgartensia (Enhanced; KJV versification)

כִּ֤י‎(כִּי)

Hebrew|kˈî|that

Part-of-speech: conjunction
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H3588] [k.bg.aa] [976]
[כי] [GES3481] [BDB3883] [HAL3852]

פַ֣חַד‎(פַּחַד)

Hebrew|fˈaḥaḏ|trembling

Part-of-speech: noun
Gender: masculine
Number: singular
Person: not applicable
State: absolute
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H6343] [q.bb.ab] [1756a]
[פחד] [GES6263] [BDB6915] [HAL6856]

אֵ֭לַי‎(אֶל)

Hebrew|ˈʔēlay|to

Part-of-speech: preposition
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H413] [a.di.aa] [91]
[אל] [GES400] [BDB422] [HAL438]

אֵ֣יד‎(אֵיד)

Hebrew|ʔˈêḏ|calamity

Part-of-speech: noun
Gender: masculine
Number: singular
Person: not applicable
State: construct
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H343] [a.bq.ad] [38c]
[איד] [GES336] [BDB358] [HAL369]

אֵ֑ל‎(אֵל)

Hebrew|ʔˈēl|god

Part-of-speech: noun
Gender: masculine
Number: singular
Person: not applicable
State: absolute
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H410] [a.dl.ab] [93a]
[אל] [GES400] [BDB422] [HAL437]

וּ֝‎(וְ)

Hebrew|ˈû|and

Part-of-speech: conjunction
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[f.ab.aa] [519]
[ו] [GES1991] [BDB2226] [HAL2241]

מִ‎(מִן)

Hebrew|mi|from

Part-of-speech: preposition
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H4480] [m.cl.aa] [1212]
[מן] [GES4398] [BDB4898] [HAL4822]

שְּׂאֵתֹ֗ו‎(שְׂאֵת)

Hebrew|śśᵊʔēṯˈô|uprising

Part-of-speech: noun
Gender: feminine
Number: singular
Person: not applicable
State: absolute
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H7613] [n.fm.am] [1421j]
[שאת] [GES7566] [BDB8339] [HAL8256]

לֹ֣א‎(לֹא)

Hebrew|lˈō|not

Part-of-speech: negative particle
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H3808] [l.ab.aa] [1064]
[לא] [GES3708] [BDB4137] [HAL4092]

אוּכָֽל‎(יָכֹל)

Hebrew|ʔûḵˈāl|be able

Part-of-speech: verb
Gender: unknown
Number: singular
Person: first person
State: not applicable
Verbal tense: imperfect
Verbal stem: qal


[H3201] [j.bm.aa] [866]
[יכל] [GES3092] [BDB3456] [HAL3431]

Biblia Comentada, Profesores de Salamanca (BAC, 1965)



31. Confesión Negativa de Job.
P ara probar su inocencia, el desventurado varón de Hus pasa revista a las diversas clases de transgresiones, para declarar que no ha tenido parte en ellas. Es un fragmento similar a la confesión negativa del difunto egipcio ante Osiris. Su inocencia es manifiesta, pues ha mantenido una integridad moral para con el prójimo y no ha abandonado a su Dios, yendo tras cultos y divinidades extrañas. Puede presentar un libelo justificativo ante el tribunal divino, consciente de no ser culpable.

Demanda de justicia (1-6).
1 Había yo hecho pacto con mis ojos de no prestar atención a la virgen. 2 Pero ¿cuál es la porción de Dios (reservada) desde arriba y la heredad del Omnipotente desde las alturas? 3 ¿No es la desgracia para el inicuo, y el infortunio para los obradores de iniquidad? 4 ¿No está El mirando mis caminos y contando todos mis pasos? 5 ¿He caminado fraudulentamente o corrieron mis pies tras el engaño? 6 ¡Péseme Dios en balanza justa, y Dios reconocerá mi integridad!

El í.1 parece que debe unirse al v.7, donde se habla de la integridad moral de Job en materia sexual. Con todo cuidado había evitado mirar atentamente a la virgen para no caer en la tentación de pecar.
De nuevo muestra su perplejidad ante la misteriosa providencia divina, ya que parece debiera ser premiada la virtud y castigado el vicio: ésa debiera ser la porción y la heredad reservada por el que habita en las alturas (v.2). Pero los hechos contradicen esta tesis, exigida por la equidad natural 1, pues, a pesar de que Dios contempla y conoce los caminos de todos los hombres, parece que no ha reparado en que él no ha caminado fraudulentamente en la vida (v.5). Consciente de su inocencia, pide a Dios que pese los actos de su vida en balanza justa, seguro de que ha de ser reconocido en su virtud. Según la mitología egipcia, el corazón del difunto era pesado ante Osiris, siendo la diosa de la verdad, Mat, la que equilibraba la balanza. El difunto entonces pronunciaba su famosa confesión negativa. 2

Rectitud moral de Job en materia sexual (7-12).
7 Si se apartaban mis pasos de tus sendas y tras mis ojos se fue mi corazón, o si se pegó algo a mis manos, 8 ¡siembre yo y cómalo otro, y sean desarraigados mis retoños! 9 Si mi corazón se dejó seducir por mujer y estuve al acecho a la puerta de mi prójimo, 10¡muela para otro mi mujer y sea entregada a brazos ajenos!3, 11pues maldad grande es ésta, es un gran crimen, 12fuego que devora hasta el abaddón y consumiría toda mi hacienda.

Job declara que toda su conducta giraba en torno a la ley divina; en su vida, jamás sus pasos se encaminaron fuera de las sendas señaladas por Dios, y para evitar toda prevaricación cohibió sus ojos, para que no se torciera su corazón, que se deja llevar siempre de los sentidos. No tiene conciencia de que nada pecaminoso se haya pegado a las manos (v.4) 4. Por ello se atreve a desear que, en caso contrario, otro se aproveche de su hacienda, por él trabajada, y hasta desenraice sus retoños o plantaciones (v.8).
Con todo cuidado ha evitado el pecado de adulterio como un gran crimen (v.9). En caso contrario, desea que su mujer se convierta en esclava y concubina del marido ofendido (v.10). Este delito era penado con la muerte 5, pues es un gran crimen, que lleva al Seol a abaddón y que es causa de la pérdida de la propia hacienda (v. 12).

Comprensión para con los débiles y pobres (13-22).
13 Si desdeñé el derecho de mi siervo y el de mi sierva cuando se querellaron contra mí, 14 ¿qué haría cuando se alzara Dios para juzgar? Cuando me pidiera cuentas, ¿qué respondería? 15 El que me hizo a mí en el materno seno, ¿no lo hizo también a él?¿No fue él mismo el que nos formó en el vientre?16 Si negué a los pobres lo que deseaban y dejé desfallecer los ojos de la viuda, 11 si comí solo mi bocado, sin dar de comer de él al huérfano, 18 antes bien, desde mi infancia le criaba como un padre y desde el seno materno le guiaba; 19 si vi al miserable sin vestido y al pobre sin ropas, 20 y si no me bendijeron sus carnes y no se calentaron con el vellón de mis corderos; 21 si alcé mi mano contra el huérfano, por ver en la puerta mi apoyo, 22 ¡despréndase mi espalda de su nuca y arranqúese del hombro mi brazo!

Las consideraciones de este fragmento son altamente enternecedoras y comprensivas para con los desvalidos. En primer lugar, Job declara que ha cumplido humanitariamente y con equidad con los siervos de su propia casa, atendiéndoles en las querellas justas planteadas por ellos en defensa de sus legítimos derechos (v.13). En el código hebraico se determinaban bien los derechos de los amos y de los siervos6. Job se atuvo, pues, a la legislación recibida y a las exigencias de su corazón humanitario. Tiene conciencia de que, de no haber cumplido con los suyos, no podría salir airoso en el juicio que Dios suscita cuando se levanta para dar su inapelable sentencia 7. En realidad, el fundamento para respetar los derechos de los siervos es que éstos tienen el mismo origen que los amos (v.15).
No sólo ha cumplido y respetado los derechos de los que le están subordinados, sino que se ha preocupado de aminorar el dolor de los pobres y abandonados, como las viudas (v.16), y ha compartido su comida con el huérfano (v.17). Desde su más tierna infancia se ha preocupado en criar con la ayuda material y guiar con sus consejos a los que han sido lanzados por la resaca de la vida (v.18). A todos les ha dado con su alimento vestidos para que cubrieran sus carnes macilentas. Estas, agradecidas, bendecían al que les proporcionaba abrigo contra las inclemencias del tiempo. Consecuente con este espíritu de benevolencia, nunca abusó de su poder e influencia en la puerta símbolo del tribunal judicial, porque en ella se tenía normalmente levantando la mano en signo amenazador contra su contrincante. Tan seguro está de esto, que pide la pena del tallón contra él mismo: que su brazo sea arrancado del hombro y que sea desnucado si ha cometido algún atropello contra el débil.

Reconocimiento de los derechos divinos (23-28).
23 Pues el terror de Dios me invadía8, y no podía resistir a su majestad. 24 ¿Puse en el oro mi confianza y dije al oro fino: Tú eres mi seguridad? 25 ¿me gocé en mis muchos bienes y en que mi mano mucho atesoraba? 26Mirando al sol cuando brilla9 o a la luna al caminar resplandeciente, 27¿fue seducido secretamente mi corazón, y les lancé con la mano el beso de mi boca, 28 que es también criminal delito, pues habría negado al Dios de lo alto?

La conducta de Job está presidida por la presencia de la majestad de Dios, que le infunde terror (v.23). Gracias a este sentimiento, ha sabido elevarse sobre el amor de las riquezas, no poniendo en ellas su confianza, como si ellas le proporcionaran la seguridad (v.24). Sabe que sólo Dios es digno de confianza absoluta, y esta creencia la ha mantenido a través de las diversas vicisitudes de su vida. A pesar de su gran fortuna, nunca sintió complacencia desmesurada en ella, pues sabía que venía de Dios, quien, como tal, podría quitársela.
Tampoco se dejó seducir por los cultos astrales, reconociendo al sol y a la luna como seres divinos, dignos de adoración. Entre los asiro-babilonios, Samas era el dios solar, mientras que Sin era el dios lunar. Estos cultos astrales fueron introducidos en el reino de Judá en tiempos de Manases (s.VI a.C.). Los mismos cultos cananeos tenían influencias astrales mesopotámicas y egipcias. El signo externo de adoración entre los babilonios era poner la mano en la boca; y a esto parece aludir Job cuando habla de no haber lanzado besos con la mano en la boca (v.27). Esto hubiera implicado renegar del único Dios que reside en lo alto (v.28), lo que constituiría un criminal delito.

Conducta comprensiva y sincera (29-34).
29 ¿Me alegré del infortunio de mi enemigo y me gocé en que le sobreviniera la desgracia? 30 Pues no di mi lengua al pecado 10 ni conjuré al Seol contra su alma. 31 ¿No decían las gentes de mi tienda: Quién habrá que no se haya saciado de su carne? 32 No pasaba la noche fuera el extranjero, pues abría mis puertas al viandante. 33 ¿Encubrí como hombre mi pecado, ocultando en mi seno mi maldad? 34 Porque habría temido de la muchedumbre, me habría aterrado el desprecio de las familias y, callado, no saldría a la puerta.

Su espíritu de equidad le ha inducido a no alegrarse de la desgracia de su adversario; y por eso estuvo muy lejos de lanzar imprecaciones contra él, deseándole la muerte o apelando a las fuerzas destructoras del seol epidemias contra él (v.30). Todos los de su servidumbre, las gentes de su tienda, son testigos de su generosidad, pues los que han llegado a ella han sido saciados con su carne (v.31). La hospitalidad era completa, ya que no permitía el gran jeque que nadie pasara la noche fuera de su tienda, ni el extranjero que inesperadamente llegaba a aquellos parajes; sus puertas estaban siempre abiertas al viandante (v.32).
Con la conciencia recta, Job no ha tenido necesidad de ocultarse en su casa para encubrir sus defecciones a las murmuraciones de la muchedumbre, sino que ha salido siempre afuera con la cabeza erguida, sin tener que avergonzarse de nada (v.34).

Invitación a que responda el Omnipotente (35-40).
35 ¡Quién me diera que se me escuchase! ¡Ahí va mi firma! ¡Respóndame el Todopoderoso! ¡Ahí está el libelo de acusación escrito por mi adversario! 36 Ciertamente lo llevaré sobre mis hombros, me lo ceñiré como corona, 37 le daré a conocer el número de mis pasos y me acercaré a él como un príncipe. 38 Si clamó la tierra contra mí, si a una lloraban sus surcos, 39 si comí su hacienda sin pagarla, si he hecho exhalar el alma de su dueño, 40 ¡názcanme cardos en vez de trigo, y cizaña en vez de cebada!
(Se terminaron las palabras de Job.)

Terminada su confesión negativa, Job invita a Dios para que dé su veredicto, y con toda naturalidad estampa su firma a su deposición, en espera de respuesta. En heb. tawí (mi taw, la última letra del alefato, que se utilizaba como firma de los que no sabían escribir). Job no teme el libelo de acusación que le pueda presentar su adversario; al contrarío, sabe que ha de poner en evidencia su inocencia, y por ello está dispuesto a llevarlo como corona sobre su cabeza. No sólo no se niega a que se le someta a un examen profundo, sino que se adelantará a darle a conocer minuciosamente su conducta: el número de sus pasos (v.37); y, lejos de presentarse cabizbajo como un reo, se acercará con la cabeza erguida como principe que se siente orgulloso de su honor y trayectoria en la vida.
No ha cometido ninguna usurpación de tierra ajena; por ello ésta no puede presentar reclamación contra él, ni sus surcos pueden quejarse de haber sido trabajados por otro fuera de su legítimo dueño (v.38). Con su conducta, Job no ha causado la muerte del dueño al no pagarle lo que le debía (v.39). En caso contrario, pide que su propia tierra se cubra de cizaña y de cardos, con pérdida total de su feracidad natural.
En el TM se añade: Se terminaron las palabras de Job, frase que los LXX colocan al principio del c.32.

1 Cf. Job_21:17.30. 2 He aquí el texto del famoso 0.125 del Libro de los muertos, donde se detalla la confesión m'gfif/'iM del difunto ante Osiris: No he cometido iniquidad contra los hombres; no de maltratado a mis gentes; no he cometido pecado en lugar de equidad; no he intentado conocer lo que no existía; no he hecho el mal; no he hecho trabajar, como jefe de hombres, más de la tarea; mi nombre no ha llegado al director de la Barca (de Osiris); no he calumniado al dios; no he puesto la mano sobre el hombre de baja condición; no he hecho lo que detestan los dioses; no he causado daño a un esclavo delante de su superior; no he hecho que alguno enfermara; no he hecho llorar; no he matado; no he dado orden a un asesino; no he causado sufrimiento físico a ninguno; no he disminuido el alimento en los templos; no he dañado los panes cíe los dioses; no he tomado las tortas de los muertos; no he tenido relación sexual coa un niño; no he cometido polución; no he añadido ni sustraído al cedazo; no he disminuido la arura (medida de áridos); no he engañado con media arura; no he añadido al contrapeso de la balanza; no he quitado la leche de la boca de los pequeñuelos; no he echado al ganado menor de sus pastos; no he cogido con la red un pájaro de los dioses; no he pescado los peces de sus estanques; no he detenido el agua en su estación; no he opuesto un dique al agua corriente; he apagado el fuego a su debido tiempo; no he descuidado los días rijos en lo concerniente a las ofrendas de carne; no he mantenido lejos los rebaños de los bienes'del dios; no he detenido al dios cuando salía (en procesión). Véase pritchard, Ancient Near F^ast Texts p.S4. Del examen comparativo de este texto egipcio y la confesión de Job se deduce que no hay dependencia literaria alguna de parte de aquél, sino que hay cierta coincidencia esencial en algunos preceptos de índole puramente natural . 3 Lit. el TM: y sobre ella otros se encorven·). 4 Cf. Job_11:14; Job_16:17; Job_22:30. 5 Cf. Deu_22:22. 6 Cf. Exo_21:1-11. 7 Cf. Sal_77:10; Job_16:8; Job_19:25. 8 Así siguiendo una corrección basada en los LXX, sir. y Vg. 9 El TM dice luz en vez de sol; pero esta palabra está exigida por paralelismo y está en el texto de los LXX. 10 Lit. el TM: mi paladar en lugar de mt lengua. 11 Así opinan Strack, Steuernagel, Driver, Eissfeldt, Holscher, Hoonacker, Dhorme, Steinmann.

King James Version (KJVO) (1611)



Chapter XXXI.

Iob maketh a solemne protestation of his integritie in seuerall dueties.
1 I made a couenant with mine eyes; why then should I thinke vpon a mayd?
2 For what portion of God is there from aboue? and what inheritance of the Almighty from on high?
3 Is not destruction to the wicked? and a strange punishment to the workers of iniquitie?
4 [ 2Ch_16:9; Job_32:21; Pro_5:21; Pro_15:3.] Doeth not he see my wayes, and count all my steps?
5 If I haue walked with vanitie, or if my foot hath hasted to deceit;
6 [ Hebrew: let him weigh mee in balances of Iustice.] Let me bee weighed in an euen ballance, that God may know mine integritie.
7 If my step hath turned out of the way, and mine heart walked after mine eyes, and if any blot hath cleaued to my hands:
8 Then let mee sow, and let another eate, yea let my off-spring be rooted out.
9 If mine heart haue bene deceiued by a woman, or if I haue layde wait at

[Iob professeth his integritie.]

my neighbours doore:
10 Then let my wife grind vnto another, and let others bow downe vpon her.
11 For this is an heinous crime, yea, it is an iniquitie to bee punished by the Iudges.
12 For it is a fire that consumeth to destruction, and would roote out all mine encrease.
13 If I did despise the cause of my man-seruant, or of my mayd-seruant, when they contended with me:
14 What then shall I do, when God riseth vp? and when hee visiteth, what shall I answere him?
15 Did not hee that made mee in the wombe, make him? and [ Or, did hee not fashion vs in one wombe?] did not one fashion vs in the wombe?
16 If I haue withhelde the poore from their desire, or haue caused the eyes of the widow to faile:
17 Or haue eaten my morsell my selfe alone, and the fatherlesse hath not eaten thereof:
18 (For from my youth hee was brought vp with me as with a father, and I haue guided [ That is, the widow, ] her from my mothers wombe.)
19 If I haue seene any perish for want of cloathing, or any poore without couering:
20 If his loynes haue not blessed me, and if hee were not warmed with the fleece of my sheepe:
21 If I haue lift vp my hand against the fatherlesse, when I saw my helpe in the gate:
22 Then let mine arme fall from my shoulder-blade, and mine arme be broken from the [ Or, the channell bone.] bone.
23 For destruction from God was a terrour to mee: and by reason of his highnesse, I could not endure.
24 If I haue made golde my hope, or haue said to the fine gold, Thou art my confidence:
25 If I reioyced because my wealth was great, and because mine hand had [ Hebrew: found much.] gotten much:
26 If I beheld [ Hebrew: the light.] the Sunne when it shined, or the Moone walking [ Hebrew: bright.] in brightnesse:
27 And my heart hath bene secretly enticed, or [ Hebrew: my hand hath kissed my mouth.] my mouth hath kissed my hand:
28 This also were an iniquitie to be punished by the Iudge: For I should haue denied the God that is aboue.

[Elihu reproueth Iob, and others.]

29 If I reioyced at the destruction of him that hated me, or lift vp my selfe when euill found him:
30 (Neither haue I suffered [ Hebrew: my palate.] my mouth to sinne by wishing a curse to his soule.)
31 If the men of my tabernacle said not, Oh that we had of his flesh! wee cannot be satisfied.
32 The stranger did not lodge in the street: but I opened my doores [ Or, to the way.] to the trauailer.
33 If I couered my transgressions, [ Or, after the manner of men.] as Adam: by hiding mine iniquitie in my bosome:
34 Did I feare a great multitude, or did the contempt of families terrifie me: that I kept silence, and went not out of the doore?
35 O that one would heare me! [ Or, behold my signe is that the Almightie will answere mee .] beholde, my desire is, that the Almightie would answere me, and that mine aduersary had written a booke.
36 Surely I would take it vpon my shoulder, and bind it as a crowne to me.
37 I would declare vnto him the number of my steps, as a prince would I goe neere vnto him.
38 If my land cry against me, or that the furrowes likewise thereof [ Hebrew: weepe.] complaine:
39 If I haue [ Hebrew: the strength thereof.] eaten the fruits thereof without money, or haue [ Hebrew: caused the soule of the owners therof to expire, or breath out.] caused the owners thereof to loose their life:
40 Let thistles grow in stead of wheat, and [ Or, noy-some weedes.] cockle in stead of barley. The words of Iob are ended.

Nuevo Comentario Bíblico Siglo XXI (Editorial Mundo Hispano, 2019)



¡Oh que tuviera los cargos de mi opositor! La sección final del discurso de Job es en el estilo de una confesión negativa: Niega cualquier crimen de que se le haya acusado. Puede expresar estas maldiciones de sí mismo únicamente si está totalmente convencido de su inocencia y no es de sorprender que el capítulo llegue a un clímax (35-37) con el ruego audaz de Job pidiendo a Dios que lo escuche y lo castigue por cualquier cosa que se me rece. Le pide a Dios que por lo menos le haga saber los cargos que tiene en su contra ya que estaría muy orgulloso de llevar con él una lista de las acusaciones a las cuales él podría dar respuestas tan convincentes. En cada caso excepto uno (el de idolatría; 26-28) los crímenes que Job imagina son pecados contra su prójimo, pero a la vez son también pecados contra Dios.

1-4 Aunque más adelante se menciona el pecado de adulterio (9-12), aquí Job dice que no ha pecado en desear a una virgen, una costumbre muy conocida de los dueños de muchos siervos como Job. Ha hecho un pacto con sus ojos; el pecado radica en las intenciones interiores del corazón, no únicamente en el acto externo.

5-8 Nuevamente, el pecado es algo que ocurre primero en el corazón (7). La referencia a la balanza (6) y a la pérdida de sus cosechas como castigo por su deshonestidad (8) sugieren que Job está pen sando principalmente en la falsedad y el engaño (5) en las transacciones comerciales.

9-12 El adulterio era juzgado en sociedades patriarcales como un crimen grave (una infamia, ... un delito digno de castigo) ya que hacía caso omiso de los derechos de propiedad del hombre y podía crear problemas relacionados con la herencia. El texto demuestra su antigüedad al considerar el adulterio masculino como resultado de ser seducido por una mujer (y por ende en cierta forma es culpa de la mujer) y en hacer que la degradación de la esposa sea de alguna manera un castigo para el adúltero. Nosotros mismos preferiríamos enfatizar los valores de la lealtad y demandaríamos que sólo el culpable fuera castigado.

13-15 Job aduce que ha ido más allá de las costumbres de su época y que ha tratado a sus sirvientes como si tuvieran derechos como seres humanos, de la misma familia, cuando la sociedad contemporánea le hubiera permitido tratarlos como posesiones.

16-23 Job ya ha hecho una presentación de su simpatía por el pobre, la viuda, el huérfano y el extraño, o sea, las típicas personas necesitadas de la sociedad en la antigüedad (29:12-16). Aquí dice que hasta ha acogido a huérfanos en su propia casa (18) y pregunta si alguna vez ha levantado su mano contra los huérfanos, creyendo que la injusticia contra ellos no se notaría, que la retribución caiga so bre la mano levantada injustamente y que su brazo se desgaje de su coyuntura y se rompa (22).

24-28 Job ahora enfoca otros pecados interiores (cf. vv. 1-4): El amor secreto por las riquezas (24, 25), la adoración del sol y la luna (26, 27), la satisfacción de ver caer a sus enemigos (29, 30), delibera damente cerrar los ojos a cualquier necesidad ajena (31, 32) o a cualquier otra hipocresía (33, 34). Emite una maldición contra sí mismo si fuere culpable en cualquiera de estas cosas. Aunque ha si do excesivamente rico, reclama que su riqueza nunca se convirtió en un ídolo que remplazara a Dios.

26, 27 La idolatría es el único pecado religioso en el catálogo de crímenes de Job. Era normal en el mundo de la antigüedad adorar los cuerpos celestiales, pero para Job tal adoración hubiera sido ser vir a lo creado en lugar del Creador.

29, 30 No era falta de ética en la época de Job que uno se alegrara por el infortunio del que lo aborrece. Los salmistas a veces se muestran contentos an te el castigo de los malos (p. ej.: Sal. 54:7; 118:7; 137:8, 9), pero Job ha seguido el espíritu de la ley que recomienda ayudar al enemigo (Ex. 23:4, 5; cf. Prov. 20:22; 24:17, 18; 25:21, 22).

31, 32 Job parece estar pensando aquí en ocasiones cuando hubiera podido pretender no saber de casos de necesidad. Ha sido generoso con los necesitados no sólo en casos de necesidad obvia (16-21), sino también en casos cuando él era el único que sabía de ella.

33, 34 Job no admite ningún pecado de hipocresía. Si alguna vez he pecado y tratado de encubrirlo (como lo hizo Adán).

35-37 Job termina su juramento formal de inocencia diciendo: He aquí mi firma, como si fuera un documento escrito. Anhela contar con la lista de cargos que Dios tiene contra él, para compararla con su propia declaración de inocencia. No sería humillado por los cargos de su acusador, tan seguro está de que probarían su inocencia que se la ceñiría cual corona (36). No se acercaría a Dios como un criminal sino como un hombre inocente que puede responder a aquello de la que se le acusa (37).

38-40 La automaldición final de Job viene, extrañamente, después del resumen y el clímax de su discurso en los vv. 35-37. En ella reclama castigo si ha adquirido sus tierras por haber oprimido a los que eran dueños por derecho (39).

La Biblia de Nuestro Pueblo (Liturgical Press, 2006),

¡Juro que soy inocente! Dos veces ha citado antes Job a Dios para que comparezca en juicio y responda a los cargos que tiene contra él (13,13-19; 23,2-7); ahora pronuncia un largo juramento de inocencia. Pide a Dios, en primer lugar, que lo pese en la balanza de la justicia, es decir, en una balanza verdadera (6). Después presenta un sumario de comportamientos morales a los que Job se ha adherido estrictamente. El texto es a veces incierto, pero podemos citar, al menos, los siguientes apartados:
1. Falsedad y engaño (5-8). 2. Lujuria y adulterio (9-12). 3. Derechos de los esclavos (13-15) -Job no sólo ha tratado bien a los esclavos, sino que para él todos los hombres y las mujeres eran iguales, pues todos son criaturas del único Creador (cfr. Pro_14:31; Pro_17:5; Pro_22:2; Pro_29:13)-. 4. Malos tratos al pobre y al necesitado (16-23). 5. Idolatría (24-28) -el versículo 25 se refieren al ídolo de las riquezas y al dinero; los versículos 26s son una advertencia contra las religiones paganas circundantes, adoradoras del sol y de la luna-. 6. Odio a los enemigos (20-30) -la maldición contra los enemigos es corriente en los salmos de lamentaciones (cfr. Sal_29:23-29), pero Job no ha maldecido a nadie-. 7. Hospitalidad (31-33) -en la sociedad antigua, la hospitalidad hacia los extranjeros era una obligación especialmente sagrada-. 8. Hipocresía (33s) -de nuevo Job se centra en actitudes de integridad personal-. 9. Explotación de la tierra (38-40). En la crisis ecológica por la que atravesamos en nuestros días, esta preocupación del Antiguo Testamento por la integridad de la creación debe hacernos pensar.
Job ha cubierto todas las relaciones que tejen la vida de los humanos: con Dios, con uno mismo, con los demás -amigos, enemigos, siervos, pobres y necesitados-, y con el medio ambiente. Todo ello entra en el concepto bíblico de justicia. Por última vez, Job afirma su inocencia (35-37).

Sagrada Biblia (Conferencia Episcopal Española, 2011)

*29-31 A partir de aquí desaparecen los tres amigos, y Job hace un resumen de su vida pasada y presente (Job 29:1-25; Job 30:1-31), preparando su defensa, y proclama bajo juramento su inocencia ante un hipotético tribunal (Job 31:1-40).

Libro del Pueblo de Dios (San Pablo, 1990)



26-28. Ver Jer_8:2; Eze_8:16.

Dios Habla Hoy (Sociedades Bíblicas Unidas, 1996)



Dios Habla Hoy 1996 Notes:



[1] 31.31 Querían abusar de un extranjero: lit. querían saciarse de su carne. Parece referirse al abuso sexual contra los extranjeros, como en el caso de Sodoma y Gomorra (Gn 19); otros lo interpretan como una forma extrema de agresividad.

Nueva Biblia de Jerusalén (1998) - referencias, notas e introducciones a los libros


NOTAS

31:23 «Pues temo el castigo de Dios», lit. «para mí el castigo de Dios» hebr. Otros corr. «el terror de Dios caería sobre mí».

Torres Amat (1825)



[1] El juramento de inocencia es un acto de profesión de fe religiosa, que sometía un pleito al juicio de Dios. Eclo 9, 5-7; Mat 5, 28.

[12] Acabando los linajes.

[27] En señal de adoración.

Nueva Biblia de Jerusalén (Desclée, 1998)


NOTAS

31:23 «Pues temo el castigo de Dios», lit. «para mí el castigo de Dios» hebr. Otros corr. «el terror de Dios caería sobre mí».

Jünemann (1992)


23 f. Peso.