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Y ahora descubriré su vergüenza
a los ojos de sus amantes,
y nadie la librará de mi mano.
(Oseas  2, 12) © Nueva Biblia de Jerusalén (Desclee, 1998)

BHSEk - Biblia Hebraica Stuttgartensia (Enhanced; KJV versification)

וַ‎(וְ)

Hebrew|wa|and

Part-of-speech: conjunction
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[f.ab.aa] [519]
[ו] [GES1991] [BDB2226] [HAL2241]

הֲשִׁמֹּתִ֗י‎(שָׁמֵם)

Hebrew|hᵃšimmōṯˈî|be desolate

Part-of-speech: verb
Gender: unknown
Number: singular
Person: first person
State: not applicable
Verbal tense: perfect
Verbal stem: hif‘il


[H8074] [v.ea.aa] [2409]
[שמם] [GES8030] [BDB8834] [HAL8770]

גַּפְנָהּ֙‎(גֶּפֶן)

Hebrew|gafnˌāh|vine

Part-of-speech: noun
Gender: unknown
Number: singular
Person: not applicable
State: absolute
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H1612] [c.ct.ab] [372a]
[גפן] [GES1513] [BDB1715] [HAL1733]

וּ‎(וְ)

Hebrew|û|and

Part-of-speech: conjunction
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[f.ab.aa] [519]
[ו] [GES1991] [BDB2226] [HAL2241]

תְאֵ֣נָתָ֔הּ‎(תְּאֵנָה)

Hebrew|ṯᵊʔˈēnāṯˈāh|fig

Part-of-speech: noun
Gender: feminine
Number: singular
Person: not applicable
State: absolute
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H8384] [w.ad.ae] [2490]
[תאנה] [GES8343] [BDB9188] [HAL9109]

אֲשֶׁ֣ר‎(אֲשֶׁר)

Hebrew|ʔᵃšˈer|[relative]

Part-of-speech: conjunction
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H834] [a.gk.aa] [184]
[אשר] [GES812] [BDB872] [HAL890]

אָמְרָ֗ה‎(אָמַר)

Hebrew|ʔāmᵊrˈā|say

Part-of-speech: verb
Gender: feminine
Number: singular
Person: third person
State: not applicable
Verbal tense: perfect
Verbal stem: qal


[H559] [a.ea.aa] [118]
[אמר] [GES535] [BDB564] [HAL587]

אֶתְנָ֥ה‎(אֶתְנָה)

Hebrew|ʔeṯnˌā|reward

Part-of-speech: noun
Gender: feminine
Number: singular
Person: not applicable
State: absolute
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H866] [w.bb.ab] [2524a]
[אתנה] [GES848] [BDB915] [HAL932]

הֵ֨מָּה֙‎(הֵמָּה)

Hebrew|hˈēmmā|they

Part-of-speech: personal pronoun
Gender: masculine
Number: plural
Person: third person
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H1992] [e.bs.aa] [504]
[המה] [GES1925] [BDB2150] [HAL2144]

לִ֔י‎(לְ)

Hebrew|lˈî|to

Part-of-speech: preposition
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[l.aa.ab] [1063]
[ל] [GES3706] [BDB4135] [HAL4089]

אֲשֶׁ֥ר‎(אֲשֶׁר)

Hebrew|ʔᵃšˌer|[relative]

Part-of-speech: conjunction
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H834] [a.gk.aa] [184]
[אשר] [GES812] [BDB872] [HAL890]

נָֽתְנוּ‎(נָתַן)

Hebrew|nˈāṯᵊnû-|give

Part-of-speech: verb
Gender: unknown
Number: plural
Person: third person
State: not applicable
Verbal tense: perfect
Verbal stem: qal


[H5414] [n.gg.aa] [1443]
[נתן] [GES5339] [BDB5941] [HAL5834]

לִ֖י‎(לְ)

Hebrew|lˌî|to

Part-of-speech: preposition
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[l.aa.ab] [1063]
[ל] [GES3706] [BDB4135] [HAL4089]

מְאַֽהֲבָ֑י‎(אָהֵב)

Hebrew|mᵊʔˈahᵃvˈāy|love

Part-of-speech: verb
Gender: masculine
Number: plural
Person: unknown
State: absolute
Verbal tense: participle
Verbal stem: pi“el


[H157] [a.bh.aa] [29]
[אהב] [GES157] [BDB169] [HAL173]

וְ‎(וְ)

Hebrew|wᵊ|and

Part-of-speech: conjunction
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[f.ab.aa] [519]
[ו] [GES1991] [BDB2226] [HAL2241]

שַׂמְתִּ֣ים‎(שִׂים)

Hebrew|śamtˈîm|put

Part-of-speech: verb
Gender: unknown
Number: singular
Person: first person
State: not applicable
Verbal tense: perfect
Verbal stem: qal


[H7760] [u.ap.aa] [2243]
[שים] [GES7845] [BDB8634] [HAL8568]

לְ‎(לְ)

Hebrew|lᵊ|to

Part-of-speech: preposition
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[l.aa.ab] [1063]
[ל] [GES3706] [BDB4135] [HAL4089]

יַ֔עַר‎(יַעַר)

Hebrew|yˈaʕar|wood

Part-of-speech: noun
Gender: masculine
Number: singular
Person: not applicable
State: absolute
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H3293] [j.cl.ab] [888a]
[יער] [GES3185] [BDB3557] [HAL3524]

וַ‎(וְ)

Hebrew|wa|and

Part-of-speech: conjunction
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[f.ab.aa] [519]
[ו] [GES1991] [BDB2226] [HAL2241]

אֲכָלָ֖תַם‎(אָכַל)

Hebrew|ʔᵃḵālˌāṯam|eat

Part-of-speech: verb
Gender: feminine
Number: singular
Person: third person
State: not applicable
Verbal tense: perfect
Verbal stem: qal


[H398] [a.dc.aa] [85]
[אכל] [GES389] [BDB413] [HAL428]

חַיַּ֥ת‎(חַיָּה)

Hebrew|ḥayyˌaṯ|wild animal

Part-of-speech: noun
Gender: feminine
Number: singular
Person: not applicable
State: construct
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H2416] [h.cd.ae] [644d]
[חיה] [GES2357] [BDB2633] [HAL2627]

הַ‎(הַ)

Hebrew|ha|the

Part-of-speech: article
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[e.ab.aa] [459]
[ה] [GES1804] [BDB2019] [HAL2031]

שָּׂדֶֽה‎(שָׂדֶה)

Hebrew|śśāḏˈeh|open field

Part-of-speech: noun
Gender: masculine
Number: singular
Person: not applicable
State: absolute
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H7704] [u.ak.ac] [2236b]
[שדה] [GES7662] [BDB8438] [HAL8357]

Biblia Comentada, Profesores de Salamanca (BAC, 1965)



2. Providencia de Yahvé sobre Su Pueblo.

Infidelidad de Israel a Yahvé (2-5).
2 (4) Protestad de vuestra madre, porque ni ella es mi mujer ni yo soy su marido. Que deje de su rostro sus fornicaciones y de entre sus pechos sus prostituciones, 3 (5) no sea que yo la despoje, y, desnuda, la ponga como el día en que nació, y la convierta en desierto, en tierra árida, y la haga morir de sed. 4 (6.) Y no tendré piedad de sus hijos, porque son hijos de prostitución. 5 (7) Su madre se prostituyó; la que los concibió se deshonró y dijo: Me iré tras de mis amantes, que ellos me dan mi pan y mi agua, mi lana y mi lino, mi aceite y mi bebida.

El profeta, después de dramatizar su situación familiar, quiere sacar la lección que de ella se desprende. El matrimonio suyo con Gomer simbolizaba el matrimonio de Yahvé con Israel. Este (la esposa infiel) se había ido tras de los ídolos, engendrando hijos bastardos, simbolizados en los nombres de los tres supuestos hijos de Oseas. Yahvé, por el profeta, invita a sus hijos bastardos (los israelitas) a echar en cara a su madre (Israel) su vergonzosa conducta: Protestad de vuestra madre. (v.2), pues por sus fornicaciones, o flirteos con los cultos idolátricos, se ha divorciado de su verdadero Esposo, Yahvé: Ni ella es mi mujer ni yo soy su marido.
Si no deja su conducta deshonrosa, Yahvé la abandonará y la dejará sola, abandonada como un desierto., como el día en que nació (v.5). Estas palabras aluden a la estancia de Israel en el desierto, cuando estaba abandonada de todos y sólo la especial providencia de Yahvé la salvó de la muerte, llegando su prodigalidad a darle una tierra feraz, la de los cananeos. Una vez que Israel logró organizarse como nación en Canaán, se creyó ya suficientemente fuerte y se olvidó de su Dios, yéndose tras de los ídolos cananeos. Pero Yahvé le puede castigar y volverla en tierra árida, quedando totalmente desamparada, con peligro de morir de sed 1.
Israel se fue tras de sus amantes (v.6), los ídolos, porque creía que así se multiplicarían sus bienes, su dote: me dan mi pan., mi lana., mi aceite. La feracidad exuberante de Canaán, en comparación de las estepas del Sinaí, había fascinado la imaginación rudimentaria de los israelitas al instalarse en Canaán, los cuales habían creído que los dioses locales eran más pródigos con sus adoradores que el adusto Dios del Sinaí. Esto exaspera al verdadero Esposo de Israel, que no va a tener piedad de los israelitas porque son hijos de prostitución (v.4).

Yahvé castiga a Israel para atraerle (6-13).
6 (8) Por eso voy yo a cercar sus caminos con zarzas y a alzar un muro para que no pueda ya hallar sus sendas. 7 (9) Irá en seguimiento de sus amantes, pero no los alcanzará; los buscará, mas no los hallará, y se dirá: Voy a volverme con mi primer marido, pues mejor me iba entonces que me va ahora. 8 (10) No ha querido reconocer que era yo quien le daba el trigo, el mosto y el aceite, y la plata que yo pródigamente le di, igual que el oro, se lo consagró a Baal. 9 (n) Por eso voy a recobrar mi trigo a su tiempo y mi mosto a su sazón, y me tomaré mi lana y mi lino, que habían de cubrir su desnudez, 10 (12) y voy a descubrir sus vergüenzas a los ojos de sus amantes. Nadie la librará de mi mano. J1 (13) Haré cesar todas sus alegrías, sus fiestas, sus novilunios, sus sábados y todas sus solemnidades. 12 (l4) Talaré sus viñas y sus higuerales, de los que decía: Es el salario que mis amantes me dan. La reduciré a un matorral y la devorarán las bestias del campo. 13 (15) La castigaré por los días en que incensaba a los baales y, adornándose con sus anillos y sus collares, se iba con sus amantes y me olvidaba a mí, dice Yahvé.

Puesto que Israel está ciega, siguiendo a sus amantes, los ídolos, Yahvé, su verdadero Esposo, movido de extrema solicitud y amor por su esposa, va a tomar medidas extremas, privándola de muchas cosas, hasta que vea la inutilidad de seguir su conducta idolátrica. Yahvé se comporta aquí como un Esposo celoso y enamorado de su esposa, extraviada en amores adulterinos. Podía abandonarla, pero la ama tanto, que la va a hacer volver empleando medios extraordinarios. Yahvé va a sembrar de zarzas y de obstáculos, levantando un muro para que Israel se extravíe en su camino emprendido tras de sus amantes, los ídolos. El profeta presenta a Israel saliendo de su hogar, caminando en busca de sus ídolos; pero le sale al paso Yahvé, bloqueando sus sendas, para que se extravíe y no acierte con el camino acostumbrado hacia los santuarios de los ídolos. Después de probar diversas nuevas sendas extraviadas, se convencerá de la inutilidad de sus esfuerzos en seguimiento de sus amantes (v.7-9), y al no alcanzar su objetivo, se acordará de su legítimo hogar, y, volviendo en sí, retornará a su legítimo Esposo: voy a volverme con mi primer marido.
La decepción ha sido completa, y en la amargura de su alma comprende que su bien estaba en ser fiel a su verdadero Esposo.
Su conducta ha sido tan alocada, que ni siquiera se ha dado cuenta que sus bienes venían de Yahvé, su Esposo (v.8-10), y en su extravío llegó a utilizar su plata para consagrarla a Baal (utilizándola para hacer ídolos). Así, no sólo no ha reconocido los beneficios recibidos, sino que ha abusado de ellos, poniéndolos al servicio de los baales de Canaán. En castigo a su pérfida conducta, Yahvé la va a privar de todos los bienes que le había prodigado: por eso voy a recobrar mi trigo a su tiempo y mi mosto a su sazón. (v.9-11), es decir, en la época de recolección. Al verse en la total indigencia, comprenderá que de nada le sirvieron sus coqueteos con los ídolos. Yahvé le privará de todo, para que aparezca en toda su desnudez e indigencia.
Israel será privada de cosechas y de todo medio de subsistencia, y entonces será despreciada de todos los pueblos paganos. Nadie podrá ayudarla, porque Yahvé ha decidido castigarla: nadie la librará de mi mano. Israel será reducida a un estado de indigencia tal, que desaparecerán sus acostumbradas alegrías en las solemnidades tradicionales, en los novilunios y sábados (v. 11-13). Las solemnidades anuales, es decir, las fiestas de Pascua, Pentecostés y Tabernáculos, tenían por objeto festejar la presentación y recolección de los cereales y frutos. Eran fiestas originariamente agrícolas. Yahvé ahora, al privar a su pueblo de la recolección de los bienes agrícolas, convertiría en días de luto los tradicionales días de algazara. Particularmente en la fiesta de los Tabernáculos, en el otoño, la alegría popular se desbordaba, porque coincidía con la vendimia y la recolección de frutos en general 2.
Israel, al entregarse a sus amantes los ídolos cananeos, consideraba los frutos de las viñas e higuerales como el salario que como a cortesana le pagaban aquéllos: Es el salario que mis amantes me dan (v.12-14). La idolatría es considerada aquí como una prostitución espiritual. En los profetas posteriores, esta comparación aparece reiteradamente. Es una consecuencia de considerar las relaciones entre Yahvé e Israel como las íntimas de dos esposos unidos solemnemente por la alianza matrimonial del Sinaí. Así anuncia Oseas que-Yahvé va a privar a su esposa, Israel, de sus bienes, convirtiéndola en un matorral, expuesto a todas las bestias del campo (v.12-14). Y todo ello ha sido por los días en que incensaba a los baales (v. 13-15), o dioses cananeos, que se multiplicaban según las localidades. La idolatría ha sido la causa de la ruina de Israel como nación. Yahvé no podía transigir con un pecado que implicaba un abandono total de sus intereses, reconocidos en la alianza del Sinaí.

Promesas de rehabilitación (14-24).
14 (16) Así, la atraeré y le llevaré al desierto y le hablaré al corazón, 15 (17) y fuera ya de allí, yo le daré sus viñas y el valle de Acor como puerta de esperanza, y allí cantará como cantaba los días de su juventud, como en los días en que subió de la tierra de Egipto 16(18) Entonces, dice Yahvé, me llamará!shí, no me llamará Baalí. 17 (19) Quitará de su boca los nombres de los baales, para que rio vuelva nunca a mencionarlos por su nombre. 18 (20) En aquel día haré en favor de ellos concierto con las bestias del campo, con las aves del cielo y con los reptiles de la tierra, y quebraré en la tierra arco, espada y guerra, y haré que reposen seguros. 19 (21) Seré tu Esposo para siempre y te desposaré conmigo en justicia, en juicio, en misericordias y piedades, 20 (22) y yo seré tu Esposo en fidelidad, y tú reconocerás a Yahvé. 21 (23) En aquel día yo seré propicio, dice Yahvé, a los cielos, y los cielos serán propicios a la tierra, 22 (24) la tierra, propicia al trigo, al mosto y al aceite, y éstos, propicios a Jezrael. 23 (25) Yo sembraré en la tierra para mí, y me compadeceré de Lo-Rujamá 24 y diré a Lo-Ammí: Tú eres mi pueblo; y él me responderá: Tú, mi Dios.

Como es ley en los vaticinios profetices, después de anunciar el más duro castigo, se presenta el horizonte más luminoso. Las relaciones entre Yahvé e Israel descansaban sobre las promesas mesiánicas. Israel se había comprometido en el Sinaí a ser fiel a su Dios; de lo contrario, habría de sufrir los rigores de la justicia divina ultrajada. Pero el castigo de Yahvé sobre su pueblo nunca es de exterminio total, sino de purificación y expiación. Por eso, después que Israel haya reconocido sus yerros, Yahvé volverá a tener intimidades con él como en la época del desierto.
Yahvé se presenta aquí como un Esposo que, después de haber atraído de nuevo a su esposa, en un tiempo extraviada, la invita a la intimidad amorosa, y para ello la lleva al desierto, aislándola de las influencias paganas de la vida sedentaria en Canaán, La vida.sencilla de Israel en las peregrinaciones por las estepas del Sinaí era nostálgicamente recordada por los profetas como la época ideal de la historia de Israel, pues en el desierto, Israel, totalmente impotente, vivía de la providencia especialísima de su Dios. Cuando se constituyó en nación en Canaán, se creyó fuerte para prescindir de su Dios, y de ahí su tragedia histórica 3.
El profeta aquí presenta a Yahvé llevando a Israel al desierto para hacerla reflexionar sobre sus caminos, mientras le habla al corazón, siguiendo el símil del matrimonio. Quizá en la palabra desierto haya una alusión al futuro exilio babilónico con sus privaciones, similares a las de Israel en la vida campamental por las estepas del Sinaí. De todos modos, anuncia claramente que después de la dura prueba vendrá de nuevo la esperanza, recuperará sus viñas; y como en otro tiempo hizo su entrada en Canaán por el valle de Acor 4, así también en el futuro Israel retornará a su patria con la alegría con que en otro tiempo pasó el Jordán y se adentró por el valle de Acor, que se convertirá en puerta de esperanza (v. 15 -17)· Israel volverá a sentirse optimista y vigorosa como en los días de su juventud. al salir de Egipto.
Y aleccionado por la prueba sufrida, no volverá a tener veleidades idolátricas (quitaré de su boca los nombres de los baales.). Y sentirá tal repugnancia Israel por los baales, que no llamará a Yahvé más baalí (mi dueño), sino ishí (mi esposo). El nombre genérico de baal entrañaba como una alusión a los baales cananeos y no debía aplicarse en adelante a Yahvé. De hecho, después del exilio, Israel no volvió a caer en la tentación de la idolatría. Es el cumplimiento literal de la. profecía.
El profeta, después de haber anunciado que Israel volverá a reinstalarse en Canaán con sus finas, se traslada mentalmente a la venturosa era mesiánica y la idealiza imaginariamente conforme al estilo oriental. El temor desaparecerá totalmente, y la paz reinará de modo absoluto, en tal forma que hasta las bestias del campo perderán sus instintos feroces en virtud de un pacto que Yahvé hará con ellas (v. 18-20). Isaías desarrollará la idea con más imaginación: habitará el lobo con el cordero, y el leopardo se acostará con el cabrito, y comerán juntos el becerro y el león, y un niño pequeño los pastoreará. La vaca pacerá con la osa, y el león, como el buey, comerá paja; el niño de teta jugará junto a la hura del áspid, y el recién destetado meterá la mano en la caverna del basilisco. No habrá ya más daño ni destrucción, porque estará la tierra llena del conocimiento de Yahvé, como llenan las aguas el mar5. El cuadro idílico se completa con la destrucción de todo artefacto de guerra: quebraré en la tierra arco, espada y guerra. (v.9-11). Este ideal de paz edénica será repetido reiteradamente en los profetas posteriores6.
Oseas presenta este cuadro deslumbrador mesiánico como consecuencia de unas bodas eternas que va a sellar Yahvé con su esposa Israel: Seré tu esposo para siempre y te desposaré conmigo en justicia, en juicio, en misericordias y en piedades (v. 19-21). Es la nueva alianza indestructible, que nos describirán otros profetas, caracterizada por el reinado de la justicia 7. Y todo ello será consecuencia de las misericordias y piedades de Yahvé. Oseas es el profeta afectivo por antonomasia, quizá sólo superado en esto por Jeremías, y concibe siempre las relaciones de Yahvé con su pueblo como un matrimonio íntimo, surgido del puro amor. En la nueva era mesiánica, el conocimiento de Yahvé será la base de esas relaciones mutuas de amor.
Como consecuencia de esa entrega total a Yahvé por parte de Israel, Yahvé le colmará de toda clase de bienes: en aquel día yo seré propicio a los cielos; los cielos serán propicios a la tierra; la tierra, propicia al trigo, al mosto, al aceite. (21-23); es decir, Yahvé será propicio a la llamada de los cielos, enviándoles nubes; éstos a la tierra, enviando agua, y la tierra, propicia al trigo, mosto, aceite, ofreciéndolos con prodigalidad; y estos productos serán propicios á Jezrael, es decir, al pueblo de Israel, castigado en otro tiempo cruelmente, cuyo castigo estaba simbolizado en el nombre de Jezrael, que recordaba la matanza de Jehú. Las relaciones armoniosas entre Yahvé y su pueblo tendrán como efecto que los nombres siniestros de Lo-Rujamá (sin misericordia) y Lo-Ammi (no mi pueblo) desaparecerán, porque Yahvé volverá a tener misericordia de Israel, y éste podrá ser llamado por Dios: Tú eres mi pueblo; a lo que responderá éste: Tú, mi Dios.

1 Como adúltera, debía ser despojada de sus vestiduras (Eze_16:39; Lev_20:10; Deu_22:12). El día del nacimiento de Israel es el día que salió de Egipto, completamente inerme. En n,is, Oseas recordará que Israel era un niño que no podía valerse ni defenderse (cf. 2:17). Israel como nación surgió en las estepas del Sinaí (Ose_9:10; Ose_12:10). En Eze_16:5 encontramos un cuadro muy similar al presentado por Oseas, pero mucho más detallado y realista: Israel fue hallado en el desierto como una recién nacida en su sangre, y fue la solicitud de Yahvé la que le limpió y crió hasta organizaría como nación fuerte. 2 Cf. Jue_21:195; 1Sa_1:3ss; 1Sa_7:20; Exo_34:22. 3 Cf. Ose_2:5; Eze_16:45; Ose_7:12; Eze_12:13; Eze_17:20; Eze_20:345. 4 Cf. Jos_7:24-26. 5 Cf. Isa_11:6ss. 6 Cf. Isa_9:55; Miq_5:95; Zac_9:10. 7 Cf. Isa_55:3; Jer_31:3 :-34; Jer_32:40; Eze_16:60; Eze_34:25; Eze_37:26. Esta alianza traerá la paz y la segundad (Isa_11:19; Eze_34:25; Miq_5:9).

King James Version (KJVO) (1611)



Chapter II.

1 The idolatrie of the people. 6 Gods iudgements against them. 14 His promises of reconciliation with them.
1 Say ye vnto your brethren, [ That is, my people.] Ammi, & to your sisters, [ That is, hauing obtained mercy.] Ruhamah:
2 Plead with your mother, plead: for [ Isa_50:1.] she is not my wife, neither am I her husband: let her therefore put away her whordomes out of her sight, and her adulteries from betweene [ Eze_16:25.] her breasts;
3 Lest I strip her naked, and set her as in the day that shee was [ Eze_16:4.] borne, and make her as a wildernesse, and set her like a drie land, and slay her with thirst.
4 And I will not haue mercy vpon her children, for they be the children of whordomes.
5 For their mother hath played the harlot: shee that conceiued them hath done shamefully: for shee sayd, I will goe after my louers, that giue me my bread and my water, my wooll and my flaxe, mine oyle, and my [ Hebrew: drinks.] drinke.
6 Therefore behold, I will hedge vp thy way with thornes, and [ Hebrew: wall a wall.] make a

[Gods promise of reconciliation.]

wall, that she shall not find her pathes.
7 And she shall follow after her louers, but she shall not ouertake them, and she shall seeke them, but shall not find them: then shall she say, I will goe and returne to my first husband, for then was it better with me then now.
8 For she did not know that I gaue her corne, and [ Hebrew: new wine.] wine, and oyle, and multiplied her siluer and gold, [ Or, wherewith they made Baal .] which they prepared for Baal.
9 Therefore will I returne, and take away my Corne in the time thereof, and my wine in the season thereof, and wil [ Or, take away.] recouer my wooll and my flaxe giuen to couer her nakednesse.
10 And now will I discouer her [ Hebrew: folly or villanie.] lewdnesse in the sight of her louers, and none shall deliuer her out of mine hand.
11 I will also cause all her mirth to cease, her feast daies, her new moones, and her Sabbaths, and all her solemne feasts.
12 And I will [ Hebrew: make desolate.] destroy her vines and her figge trees, whereof she hath said; These are my rewards that my louers haue giuen me: and I will make them a forrest, and the beasts of the field shall eate them.
13 And I will visite vpon her the daies of Baalim, wherein she burnt incense to them, and she decked her selfe with her eare-rings, and her Iewels, and she went after her louers, and forgate me, saith the Lord.
14 Therefore behold, I will allure her, and bring her into the wildernesse, and speake [ Or, friendly. Hebrew: to her heart.] comfortably vnto her.
15 And I wil giue her, her vineyards from thence, and the valley of Achor for a doore of hope, and she shall sing there, as in the dayes of her youth, and as in the day when she came vp out of the land of Egypt.
16 And it shall be at that day, saith the Lord, that thou shalt call mee [ That is, my husband.] Ishi; and shalt call mee no more [ That is, my Lord.] Baali.
17 For I will take away the names of Baalim out of her mouth, & they shal no more be remembred by their name.
18 And in that day will I make a [ Job_5:23 .] couenant for them with the beasts of the field, and with the foules of heauen, and with the creeping things of the ground: and I will breake the bow and the sword, and the battell out of the

[Gods promise of reconciliation.]

earth, and will make them to lie downe safely.
19 And I will betroth thee vnto me for euer; yea, I will betroth thee vnto me in righteousnesse, and in iudgement, and in louing kindnesse, and in mercies.
20 I will euen betroth thee vnto me in faithfulnesse, and thou shalt know the Lord.
21 And it shall come to passe in that day, I will heare, saith the Lord, I will heare the heauens, and they shall heare the earth,
22 And the earth shall heare the corne, and the wine, and the oyle, and they shall heare Iezreel.
23 And I will sow her vnto me in the earth, and I will haue mercy vpon her that had not obtained mercy, and I [ Rom_9:26 ; 1Pe_2:10 .] will say to them which were not my people; Thou art my people, and they shallsay, Thou art my God.

Nuevo Comentario Bíblico Siglo XXI (Editorial Mundo Hispano, 2019)



Profecía de juicio: castigo para Israel, la esposa infiel

Los vv. 2 y 3 están dirigidos a los hijos de Oseas. Los imperativos forman un abrupto nuevo comienzo, y el contenido de la primera oración tiene el propósito de dar al lector u oyente una sacudida. Es la primera vez que nos encontramos con una referencia al desacuerdo entre Oseas y Gomer. Es claro, conforme continúa el discurso, que no es tanto Gomer la que está en mente, sino el pueblo de Israel, ahora rechazado como esposa de Dios. Esta audaz representación es muy extraordinaria cuando recordamos la religión de los vecinos de Israel, porque se pensaba que Baal tenía una diosa consorte, Asera. Oseas, en efecto, dice que Dios tiene una consorte, el pueblo de Israel. El matrimonio es metafórico, por supuesto.

La palabra que se traduce como acusad (2) es la usada en las demandas legales. Mucha de la descripción de Oseas refleja las disputas legales que tenían lugar en la puerta de la ciudad.

Que quite sus fornicaciones [lit. prostituciones] de delante de su cara y sus adulterios de entre sus pechos bien puede referirse a formas específicas de ornamentos asociados con las prostitutas (cf. v. 13). El sentido es, entonces, que se quite las señas de sus infidelidades, no sea que yo la desnude por completo (2b, 3a).

El v. 3b implica que Israel regresaría al desierto, el tiempo antes que Dios hubiera cumplido su promesa de hacer de ellos su propio pueblo en su propia tierra. Sus hijos (4) son los miembros individuales del pueblo de Israel (véase también sobre 1:2).

Israel ha actuado como prostituta. La implicación es que ha tenido muchos amantes. Esto se refiere a la prostitución de Gomer con otros hombres, y también a los intentos de Israel por ganar el favor de otros dioses. En ambos casos asumió equivocadamente que las buenas cosas que disfrutaba venían de ellos. La respuesta de Dios a esto no es la de destruir a Israel inmediatamente, sino iniciar un programa de educación (6, 7a). Una serie de des cripciones la muestra experimentando barreras de varias clases (espinos, vallado), yendo tras ellos sin alcanzar a sus amantes, buscando, pero sin en contrarlos. Esto la lleva al punto crucial del procedimiento (7b): comprende que estaba mejor con su primer esposo Jehovah, y regresa a él. Por supuesto, la tribulación viene al justo y también al malvado (cf. Sal. 44:17-22; Juan 16:32, 33), pero una nación o individuo que experimenta desgracia y fracaso necesita preguntar si Dios puede estar tratando de decirles algo (cf. Amós 4:6-11).

De aquí en adelante encontramos un resumen de material mencionado antes. Ella no reconoció que era Dios el que proveía alimento y bebida, y hasta los metales preciosos que eran usados para hacer imágenes de Baal (8). Así pues, Dios le quitaría esos dones (cf. v. 5) y expondría su desnudez (cf. v. 3), y nadie podría librarla de su mano (10). En otras palabras, los otros dioses no pueden proveerle a Israel ni impedir que sea castigado por Jehovah.

Los vv. 11-13 se concentran en las fiestas religiosas de Israel y en los festivales que Dios hará cesar. Esto podría hacerse ya fuera por interrupción debida a la guerra o por escasez de alimento y bebida para el sacrificio y la celebración. Ambas son vislumbradas aquí (12). El v. 13 redondea esta sección de juicio con otra referencia a la prostitución espiritual y física (cf. vv. 2b, 7, 8).

Libro del Pueblo de Dios (San Pablo, 1990)



1. Ver Rom_9:26.

4. "Acusen a su madre": al denunciar la infidelidad de Israel, los profetas emplean con cierta frecuencia el lenguaje típico de los procesos judiciales (4. 1, 4; Isa_1:18; Miq_6:1).

7-15. Los israelitas reconocían al Señor como su Dios, pero también rendían culto a Baal, porque pensaban que de él dependían las lluvias, la fertilidad del suelo y la fecundidad del ganado. Si el Señor los priva momentáneamente de todos esos bienes, es para que comprendan que él solo, y no otro dios, es el dispensador de la vida.

16. "La seduciré": con esta expresión, Oseas pone de relieve la vehemencia de un amor que no se da por vencido. El "desierto" es el símbolo de la prueba, del despojamiento total y la pobreza. Al verse privado de todo lo que le impide acercarse al Señor, Israel estará en condiciones de escuchar la voz de Dios, que le hablará al "corazón", y entonces volverá a encontrarse con él en el amor y la fidelidad.

17. El "valle de Acor", cuyo nombre significa "valle de la Desgracia", traía espontáneamente a la memoria el recuerdo del primer pecado y de la primera derrota de Israel a su entrada en la Tierra prometida ( Jos_7:24-26).

18. La palabra "baal", que significa "dueño" o "señor", se empleaba en el lenguaje corriente para designar al marido. Pero ese término estaba tan asociado al culto del dios Baal, que el profeta quiere desterrar su uso .

20-25. En este célebre pasaje, Oseas traza un cuadro grandioso de la futura restauración de Israel. El Señor volverá a desposarse con su pueblo, y ese matrimonio nuevo y definitivo tendrá una repercusión cósmica. La creación recobrará la armonía destruida por el pecado y todos los elementos estarán al servicio de los hombres.

25. Ver Rom_9:25; 1Pe_2:10.

Nueva Biblia de Jerusalén (Desclée, 1998)


REFERENCIAS CRUZADAS

[1] Sal_80:13-14 [Sal_80:12-13]; Isa_5:5-6

NOTAS

2:14 «Viñedo e higuera»: expresión tradicional de la paz, de la tranquilidad y de la comodidad que hubo en tiempo de Salomón, 1Re_5:5 [1Re_4:25], y que volverá a haber en los tiempos mesiánicos, Miq_4:4; Zac_3:10. Aquí, se trata de la prosperidad que desvía al pueblo de Yavhé, ver Deu_8:11-20, y arrastra al culto de los ídolos a los que se atribuye esta prosperidad, Ose_2:7-14 [Ose_2:5-12].

Nueva Biblia de Jerusalén (1998) - referencias, notas e introducciones a los libros


REFERENCIAS CRUZADAS

[1] Sal_80:13-14 [Sal_80:12-13]; Isa_5:5-6

NOTAS

2:14 «Viñedo e higuera»: expresión tradicional de la paz, de la tranquilidad y de la comodidad que hubo en tiempo de Salomón, 1Re_5:5 [1Re_4:25], y que volverá a haber en los tiempos mesiánicos, Miq_4:4; Zac_3:10. Aquí, se trata de la prosperidad que desvía al pueblo de Yavhé, ver Deu_8:11-20, y arrastra al culto de los ídolos a los que se atribuye esta prosperidad, Ose_2:7-14 [Ose_2:5-12].

Dios Habla Hoy (Sociedades Bíblicas Unidas, 1996)



Dios Habla Hoy 1996 Notes:



[1] 2.1 "Pueblo de Dios"... "Compadecidas": Estos dos nombres se contraponen a Lo-amí y Lo-ruhama, respectivamente (Os 1.6,9).

[2] 2.3--3.5 Cf. Ez 16.8-63.

[3] 2.5 Jer 2.23-25; 3.1-2; Os 4.12-14; 9.1. Los israelitas, sin dejar de adorar al Señor, también rendían culto a Baal, porque pensaban que de él provenían las lluvias, la fertilidad del suelo y la fecundidad del ganado (cf. v. 12). Cf. vv. 7,10,13. Contra esta falsa creencia, Oseas insiste en señalar que el Señor es el único dispensador de todos esos bienes.

[4] 2.14 La llevaré al desierto: Oseas evoca la marcha por el desierto, después de la salida de Egipto, como un tiempo de amorosa intimidad (2.2).

[5] 2.15 El valle de Acor, situado al sudoeste de Jericó, a la entrada de Canaán, fue escenario del pecado y muerte de Acán (Jos 7.24-26). Su nombre significa desastre o desgracia, pero aquí se presenta como un símbolo de esperanza, porque por allí se producirá el retorno de los israelitas a las tierras fértiles de Palestina central.

[6] 2.16-17 En hebreo, el término baal significa señor, dueño o marido, pero utilizado como nombre propio designa al dios cananeo de la fertilidad (Jue 2.13).

[7] 2.22 El nombre Jezreel se emplea aquí para designar a Israel, debido a la semejanza entre los dos nombres (véase Os 1.4 n.).

[8] 2.23 Lo-ruhama... Lo-amí: Véase 1.6 n.; 1.9 n.

[9] 3.1-5 Algunos intérpretes han visto en este relato autobiográfico un segundo matrimonio del profeta, pero es más probable que se trate de la reconciliación del profeta con Gómer, que había incurrido en adulterio y se había hecho indigna de ser su esposa.

La Biblia de Nuestro Pueblo (Liturgical Press, 2006),

El buen amor: pleito y reconciliación. La siguiente «fotografía» del álbum familiar de Oseas no es agradable de mostrar, pero ahí está. Los versículos 4-15 describen: 1. El comportamiento infiel de Gomer, sus ambiciones, su indiferencia por su esposo y sus hijos; en fin, la vida que lleva a sus anchas con otros amantes. 2. El profundo dolor del esposo engañado que invita a sus hijos para que acusen a su propia madre y se unan a las acciones de castigo que le infligirá.
Sin embargo, puede más el amor del Oseas enamorado. No va a tener en cuenta sus desmanes e infidelidades y probará a seducirla de nuevo (16-25), la llevará al desierto y allí le hablará al corazón. Aquí se alternan pues los sentimientos del hombre Oseas respecto a su mujer con sus convicciones religiosas y su análisis sobre lo que Dios hará con su pueblo. Sólo cuando el pueblo vuelva al desierto, cuando se encuentre con las manos vacías y traicionado por aquellos en quienes ponía su confianza, se dará cuenta de que allí estará su Dios esperándolo para acogerlo de nuevo y hablarle una vez más al corazón.

Sagrada Biblia (Conferencia Episcopal Española, 2011)

*2:4-25 Se entreteje aquí una historia familiar de infidelidad de la esposa, abandono del esposo y castigo, con la historia religiosa del pueblo de Efraín (Israel). A la escena del castigo (v. Ose 2:4-15) sucede la reconciliación y las promesas (v. Ose 2:16-23). Estos últimos versos prometen la fertilidad de la tierra, el abandono de los baales por parte del pueblo, la paz con la naturaleza y el fin de las guerras.

Torres Amat (1825)



[2] Condenad los excesos de vuestra nación.

[3] Ez 16, 4-39; 22, 24; 23, 26.

[5] Jer 44, 17.

[9] Rom 8, 20.

[13] Martini dice que antes del verso 14 deberían ponerse el 6 y 7, para que el sentido sea claro.

[18] Is 11, 6-7; Hech 10, 11-12.

[24] Rom 9, 25; 1 Pe 2, 10.

Biblia Hispano Americana (Sociedad Bíblica Española, 2014)

Isa 5:5-6.

Biblia Textual IV (Sociedad Bíblica Iberoamericana, 1999)

mi paga... Se refiere al salario de una prostituta.

Biblia Latinoamericana (San Pablo, 1995)



[=] *Jn 10:28