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Caigan los malvados en sus redes,
al tiempo que yo escapo indemne.
(Salmos 141, 10) © Nueva Biblia de Jerusalén (Desclee, 1998)

BHSEk - Biblia Hebraica Stuttgartensia (Enhanced; KJV versification)

יִפְּל֣וּ‎(נָפַל)

Hebrew|yippᵊlˈû|fall

Part-of-speech: verb
Gender: masculine
Number: plural
Person: third person
State: not applicable
Verbal tense: imperfect
Verbal stem: qal


[H5307] [n.ek.aa] [1392]
[נפל] [GES5225] [BDB5822] [HAL5713]

בְ‎(בְּ)

Hebrew|vᵊ|in

Part-of-speech: preposition
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[b.ab.aa] [193]
[ב] [GES855] [BDB923] [HAL939]

מַכְמֹרָ֣יו‎(מִכְמָר)

Hebrew|maḵmōrˈāʸw|net

Part-of-speech: noun
Gender: masculine
Number: plural
Person: not applicable
State: absolute
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H4364] [k.bw.ab] [995a]
[מכמר] [GES4285] [BDB4781] [HAL4700]

רְשָׁעִ֑ים‎(רָשָׁע)

Hebrew|rᵊšāʕˈîm|guilty

Part-of-speech: adjective
Gender: masculine
Number: plural
Person: not applicable
State: absolute
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H7563] [t.et.ab] [2222b]
[רשע] [GES7514] [BDB8283] [HAL8196]

יַ֥חַד‎(יַחַד)

Hebrew|yˌaḥaḏ|gathering

Part-of-speech: noun
Gender: masculine
Number: singular
Person: not applicable
State: absolute
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H3162] [j.be.ac] [858b]
[יחד] [GES3054] [BDB3410] [HAL3389]

אָ֝נֹכִ֗י‎(אָנֹכִי)

Hebrew|ˈʔānōḵˈî|i

Part-of-speech: personal pronoun
Gender: unknown
Number: singular
Person: first person
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H595] [a.ei.aa] [130]
[אנכי] [GES573] [BDB606] [HAL626]

עַֽד‎(עַד)

Hebrew|ʕˈaḏ-|unto

Part-of-speech: preposition
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H5704] [p.aq.ad] [1565c]
[עד] [GES5654] [BDB6249] [HAL6171]

אֶעֱבֹֽור‎(עָבַר)

Hebrew|ʔeʕᵉvˈôr|pass

Part-of-speech: verb
Gender: unknown
Number: singular
Person: first person
State: not applicable
Verbal tense: imperfect
Verbal stem: qal


[H5674] [p.ah.aa] [1556]
[עבר] [GES5627] [BDB6220] [HAL6137]

Biblia Comentada, Profesores de Salamanca (BAC, 1965)



Salmo 141 (Vg 140): Oración del Justo en Peligro.
E l salmista pide sea aceptada su plegaria vespertina quizá con ocasión del sacrificio de la tarde para no desfallecer en el camino de la virtud. Desea que los rectos de corazón le reprendan para no ir tras de las sendas de la impiedad. Parece que alude el salmista a dos clases de peligros que le acechan: de índole corporal (miedo a perder la vida) y de índole moral (peligro de abandonar el camino de la virtud). Sobre todo le preocupan los peligros espirituales: pecados de pensamiento, palabras y acciones, que provienen de la mala inclinación del corazón y del ejemplo perverso. Por ello quiere evitar la compañía de los malvados y permanecer en estado de perpetua vigilancia con sus oraciones. Sobre todo quiere evitar los halagos de los malvados que tratan de atraerle al mal camino. Como en el salmo anterior, encontramos mezclados el acento deprecativo y el de las imprecaciones. El texto es muy incorrecto; por eso es uno de los más difíciles de traducir. Particularmente los v.6-7 son muy enigmáticos y parecen interrumpir el texto deprecativo. Por ello pueden considerarse como una inserción poco afortunada, tomada de un cántico épico en que se alude a hechos bélicos para nosotros desconocidos.

Plegaria contra las seducciones malignas.
1 Salmo de David. ¡Oh Yahvé! a ti clamo, apresúrate a socorrerme, oye la voz del que te invoca. 2 Séate mi oración como incienso en tu presencia, y el alzar a ti mis manos como oblación verpertina. 3 Pon, Yahvé, guardia a mi boca, centinelas a la puerta de mis labios, 4 No dejes que se incline al mal mi corazón, a hacer impías maldades; con los hombres que cometen iniquidad no tenga yo parte en sus suntuosos banquetes. 5 Que me castigue el justo es un favor; que me reprenda es óleo sobre mi cabeza, que mi cabeza no rechaza *. Incesantemente oraré por sus calamidades 2. 6 Fueron precipitados sus jueces desde el borde de la roca, y oyeron mis palabras, que eran blandas. 7 Como se hiende y ara la tierra, están esparcidos nuestros huesos a la boca del seol. 8 Pero mis ojos (se vuelven) a ti, Yahvé; a ti me acojo, no me rechaces. 9 Guárdame del lazo que me tienden, de los armadijos de los malhechores. 10 Caerán los impíos en sus mismas redes, mientras que yo paso (incólume).

El salmista se siente acechado por dos graves peligros: el de sus malas inclinaciones y el de las solicitaciones malignas de los enemigos de la ley de Dios, que le ponen tropiezos para caer y no seguir el camino de la virtud. Por eso suplica que su oración sea agradable a Yahvé como el incienso del sacrificio vespertino 3, y su elevación de manos (signo deprecativo) le sea acepta como la oblación de la tarde 4. Tiene miedo a prevaricar de palabra, y por eso suplica que guarde sus labios cuidadosamente como solícito centinela5. No quiere adoptar el lenguaje de los impíos, que no saben valorar las exigencias,de la ley divina. Por otra parte, desconfía de sus propias inclinaciones, que se dejan llevar por lo más fácil, por la pendiente del camino que conduce al mal 6. De ningún modo quiere tomar parte en las francachelas de los impíos, en las que comen el pan de la maldad y beben el vino de la violencia7. La vida licenciosa de los impíos es algo que repugna a la sensibilidad religiosa de las almas selectas.
Prefiere ser fustigado por el justo, cuya palabra de corrección es para él agradable como óleo perfumado sobre su cabeza (v.8). Lejos de molestarse por sus reprimendas, las agradecerá, y orará por ellos cuando se hallen envueltos en calamidades. Prefiere la voz acusadora de los justos a los halagos y atractivos de la vida placentera de los malvados, que le invitan a participar en sus banquetes y desmesuradas alegrías. Es lo que dice el sabio en Pro_27:6 : Leales son las heridas hechas por el amigo, pero los besos del enemigo son engañosos.
Los v.6-7 son extremadamente enigmáticos, y parecen estar fuera de contexto. Quizá aluda el salmista a alguna catástrofe en la que perecieron afrentosamente los jueces o jefes de la nación, que toleraban la vida disoluta a pesar de haber oído las palabras consoladoras y blandas del justo 8. El v.7 parece aludir a la situación angustiosa del justo, cuyos huesos están quebrantados y dislocados como la semilla que se echa al arar la tierra, pues ha estado al borde del sepulcro a las puertas del seol, la región tenebrosa de los muertos , sintiendo las angustias de la muerte. O quizá otra explicación posible de la frase sea que el cuerpo dolorido del justo está maltratado como la tierra que despiadadamente se hiende con el rejón del arado 9.
Pero, en medio de las angustias mortales, la mente del salmista se eleva lleno de esperanza hacia Yahvé, del que únicamente puede provenir el debido auxilio. Sus enemigos conspiran contra él con las artimañas del cazador, que pone lazos para coger la presa 10; pero gracias a la intervención divina serán burlados, cayendo en las mismas redes que tendieron a su paso.

1 Este verso es oscuro y muy diversamente traducido: Que el justo me hiera, es un favor, que me castigue; pero que el aceite del impío no adorne jamás mi cabeza (Bib. de Jér.). 2 Bib. de Jér.: Yo opongo incesantemente mi oración a su malicia. 3 Cf. Exo_30:7-8; Lev_2:2; Sal_16:16. 4 Cf. Lev_2:1-2; Sal_38:3; Sal_63:5; 1Ti_2:8; Sal 25.2. 5 Cf. Sal_34:14; Sal_39:2; Pro_13:3; Pro_21:23. 6 Cf. Sal_119:10.133. 7 Pro_4:17; Sal_34:1-2. 8 Jueces en sentido de jefes (cf. Miq_5:1; Dan_9:12). 9 Algunos mss. del texto griego y la versión siríaca leen: sus huesos. En ese caso se aludiría al castigo de los jefes disolutos. 10 Cf. Sal_140:11; Sal_7:16; Sal_9:17.

Nuevo Comentario Bíblico Siglo XXI (Editorial Mundo Hispano, 2019)



Salmos 140-145. Orando Hasta Llegar a la Alabanza

Los Sal. 140– 145 forman un grupo davídico conectado. El 142 se conecta con las experiencias negativas de David con Saúl y el mismo período concuerda con todos los salmos hasta (como en el Sal. 18) que pasamos a la luz de un gran alfabeto de alabanza en el 145. Los Sal. 140– 143 son oraciones: la primera reacción a las dificultades en sus muchas manifestaciones (ver los títulos en el comentario) es "llevárselas al Señor".

Salmo 141. Provocación

La acusación calumniadora en el Sal. 140 contrasta con la preocupación por un hablar cuidadoso (3), que sea sólo la voz en oración (1, 2) y, cuando ya ha pasado la dificultad, palabras dulces (no vengativas) (6, ver más adelante). Pero el Salmo es, en efecto, una oración continua, el mejor uso que el creyente puede hacer de la lengua.

1– 4 Oración eficaz. David anhela que Dios encuentre en su oración todo el poder y aceptación de las ordenanzas divinas que eran las ofrendas cotidianas (Exo. 29:38– 42; 30:8). Pero la oración pura dirigida a Dios debe corresponder con un hablar controlado dirigido a los hombres (3, Stg. 3:10– 12). 4 La oración en la boca debe estar apoyada por la oración en el corazón. Con los hombres ... coma. La tentación de acabar con la tensión creada por la contemporización, de sumarse a la oposición. Coma yo de sus manjares puede interpretarse lit., participar en el compañerismo de la mesa, o metafóricamente: deleitarme en la cosas en que ellos se deleitan.

5, 6 Oración continua. En los vv. 1– 4 el salmista acepta la hostilidad de los impíos sin responder. Su espíritu humilde y resuelto va más allá, aceptando los reproches (5) de personas que debían haber sido comprensivas. El v. 5 expresa un contraste; parecería que el justo lo reprocha posiblemente por su reacción silenciosa y quizá instándolo a contestar o demostrar su oposición. Pero esto no habría de ser: sólo se escuchará la voz de la oración hasta que (6, más lit.) sus jueces sean tirados por los acantilados, no escucharán mis palabras, que son dulces. Las aflicciones del momento incluían cortes de justicia corruptas (cf. 1 Sam. 8:1– 3). La ejecución sumarísima (cf. 2 Crón. 25:12) de dichos jueces significa el final de la opresión. En aquel día el silencio que se ha impuesto acabaría, no felicitándose a sí mismo ni con represalias, sino con palabras ... dulces.

7– 10 Oración protectora. David y sus compañeros de sufrimiento se sienten aniquilados y ya se consideran muertos y enterrados (7) por eso (8); pero está la siempre presente (a) expectación (ojos), (b) un Señor Yahweh, (c) el refugio, la oración pidiendo vida (no expongas mi vida), seguridad (9), la caída merecida de los impíos y una segura liberación de la aflicción (10).

La Biblia de Nuestro Pueblo (Liturgical Press, 2006),

Súplica individual, que se desdobla en una «gran súplica» (1-7) y en una mini súplica (8-10). Ambas comienzan con una invocación (1-2//8). ¿Qué hacer cuando acecha la maldad y se encubre en formas de fraternidad como pueden ser los banquetes (4d; cfr. Pro_1:8-18) y los agasajos (5b)? El justo puede caer en la trampa y pecar de palabra y de pensamiento (3s). El yo del salmo dirige su mirada en una triple dirección: hacia sí mismo, hacia Dios y hacia los malvados. El orante no quiere tener nada en común con los malvados: no participará en sus banquetes, ni permitirá ser ungido con perfumes refinados (5); en vez de eso, orará por los demás (5c) y por sí mismo (2). Su oración será incesante: estará siempre ante la presencia divina como lo está el incienso de la ofrenda vespertina (2). Está dispuesto a sufrir la reprensión y los golpes procedentes de los justos (5a), pero que la maldad de los malvados no le contamine. Es consciente, sin embargo, de la propia debilidad. Aquí ha de intervenir Dios. El orante dirige su súplica a Dios: que él sea el centinela, vigilante de los labios que pronuncian las palabras y también del corazón donde nace la palabra (3-4a); que le guarde y no le destruya (9). Para los malvados, por el contrario, que sea una Roca puntiaguda contra la que éstos se estrellen, a la vez que escuchan unas palabras «amables» de la Roca (7), dicho no sin ironía. Los malvados están en lo suyo: comenten iniquidades, camufladas en banquetes amigables o bien en cepos y en trampas hábilmente escondidos (9-10a). Que Dios intervenga, y haga caer a los malhechores en sus propias redes y trampas, que sean destruidos (8b.10a). En definitiva es Dios quien ha de vérselas con el inocente y con los malvados. Podemos orar con este salmo cuando vemos que la maldad nos rodea y no quisiéramos pecar, ni herir a nadie con nuestras palabras. Con este salmo pedimos a Dios que nos arranque del mal.

King James Version (KJVO) (1611)



Psalm CXLI.

1 Dauid prayeth that his suit may bee acceptable, 3 his conscience sincere, 7 and his life safe from snares.
A Psalme of Dauid.
1 Lord, I crie vnto thee, make haste vnto mee: giue eare vnto my voice, when I crie vnto thee.
2 Let my prayer bee [ Hebrew: directed.] set foorth before thee as incense: and the lifting vp of my hands as the Euening sacrifice.
3 Set a watch ( O Lord ) before my mouth: keepe the doore of my lips.
4 Incline not my heart to any euill thing, to practise wicked workes with men that worke iniquitie: and let mee not eate of their dainties.
5 [ Or, let the righteous smite mee kindly, and reproue me, let not their precious oile breake my head, etc .] Let the righteous smite mee, it shalbe a kindnesse: and let him reprooue me, it shalbe an excellent oile, which shall not breake my head: for yet my prayer also shalbe in their calamities.
6 When their Iudges are ouerthrowen in stonie places, they shall heare my words, for they are sweet.

[Prayers against the wicked.]

7 Our bones are scattered at the graues mouth: as when one cutteth and cleaueth wood vpon the earth.
8 But mine eyes are vnto thee, O God the Lord: in thee is my trust, [ Hebrew: make not my soule bare.] leaue not my soule destitute.
9 Keepe mee from the snare which they haue laide for me, and the grinnes of the workers of iniquitie.
10 Let the wicked fall into their owne nets: whilest that I withal [ Hebrew: passe ouer.] escape.

Biblia Hispano Americana (Sociedad Bíblica Española, 2014)

Sal 7:15; Sal 140:8-11; Pro 26:27.

Dios Habla Hoy (Sociedades Bíblicas Unidas, 1996)



Dios Habla Hoy 1996 Notes:



[1] 141.2 Mis manos levantadas: alusión a un gesto que con frecuencia acompaña a la oración (cf. Sal 5.7). Acerca de la ofrenda de la tarde, cf. Ex 29.38-39; 30.8; Nm 28.3-4.

Sagrada Biblia (Conferencia Episcopal Española, 2011)

*141 Súplica individual. El justo podrá cumplir su propósito de no tener nada en común con los malhechores si Dios se convierte en su centinela.

Jünemann (1992)


10 g. Dios.
h. Por el mundo.


Torres Amat (1825)



SALMO 141 (140)

[3] Eclo 22, 27.