Ver contexto
y él, como esposo que sale de su alcoba,
se recrea, como atleta, corriendo su carrera.
(Salmos 19, 6) © Nueva Biblia de Jerusalén (Desclee, 1998)

BHSEk - Biblia Hebraica Stuttgartensia (Enhanced; KJV versification)

מִ‎(מִן)

Hebrew|mi|from

Part-of-speech: preposition
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H4480] [m.cl.aa] [1212]
[מן] [GES4398] [BDB4898] [HAL4822]

קְצֵ֤ה‎(קָצֶה)

Hebrew|qᵊṣˈē|end

Part-of-speech: noun
Gender: masculine
Number: singular
Person: not applicable
State: construct
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H7097] [s.co.ab] [2053a]
[קצה] [GES7061] [BDB7763] [HAL7695]

הַ‎(הַ)

Hebrew|ha|the

Part-of-speech: article
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[e.ab.aa] [459]
[ה] [GES1804] [BDB2019] [HAL2031]

שָּׁמַ֨יִם‎(שָׁמַיִם)

Hebrew|ššāmˌayim|heavens

Part-of-speech: noun
Gender: masculine
Number: plural
Person: not applicable
State: absolute
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H8064] [v.dy.ab] [2407a]
[שמים] [GES8018] [BDB8822] [HAL8760]

מֹֽוצָאֹ֗ו‎(מֹוצָא)

Hebrew|mˈôṣāʔˈô|issue

Part-of-speech: noun
Gender: masculine
Number: singular
Person: not applicable
State: absolute
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H4161] [j.cq.ad] [893c]
[מוצא] [GES4088] [BDB4560] [HAL4490]

וּ‎(וְ)

Hebrew|û|and

Part-of-speech: conjunction
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[f.ab.aa] [519]
[ו] [GES1991] [BDB2226] [HAL2241]

תְקוּפָתֹ֥ו‎(תְּקוּפָה)

Hebrew|ṯᵊqûfāṯˌô|turning point

Part-of-speech: noun
Gender: feminine
Number: singular
Person: not applicable
State: absolute
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H8622] [s.aw.ab] [2001a]
[תקופה] [GES8589] [BDB9457] [HAL9367]

עַל‎(עַל)

Hebrew|ʕal-|upon

Part-of-speech: preposition
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H5921] [k.bg.ac] [1624p]
[על] [GES5848] [BDB6471] [HAL6395]

קְצֹותָ֑ם‎(קְצֹות)

Hebrew|qᵊṣôṯˈām|end

Part-of-speech: noun
Gender: feminine
Number: plural
Person: not applicable
State: absolute
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H7098] [s.co.ac] [2053b]
[קצות] [GES7064] [BDB7766] [HAL7699]

וְ‎(וְ)

Hebrew|wᵊ|and

Part-of-speech: conjunction
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[f.ab.aa] [519]
[ו] [GES1991] [BDB2226] [HAL2241]

אֵ֥ין‎(אַיִן)

Hebrew|ʔˌên|[NEG]

Part-of-speech: noun
Gender: masculine
Number: singular
Person: not applicable
State: construct
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H369] [a.cz.aa] [81]
[אין] [GES364] [BDB387] [HAL401]

נִ֝סְתָּ֗ר‎(סָתַר)

Hebrew|ˈnistˈār|hide

Part-of-speech: verb
Gender: masculine
Number: singular
Person: unknown
State: absolute
Verbal tense: participle
Verbal stem: nif‘al


[H5641] [o.cq.aa] [1551]
[סתר] [GES5591] [BDB6185] [HAL6100]

מֵֽ‎(מִן)

Hebrew|mˈē|from

Part-of-speech: preposition
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H4480] [m.cl.aa] [1212]
[מן] [GES4398] [BDB4898] [HAL4822]

חַמָּתֹו‎(חַמָּה)

Hebrew|ḥammāṯˌô|heat

Part-of-speech: noun
Gender: feminine
Number: singular
Person: not applicable
State: absolute
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H2535] [h.di.ad] [677c]
[חמה] [GES2459] [BDB2750] [HAL2743]

Biblia Comentada, Profesores de Salamanca (BAC, 1965)



Salmo 19 (Vg 18): La Gloria de Dios, Manifestada en el Cosmos.
E n este salmo encontramos, en realidad, dos composiciones poéticas totalmente diversas, que sin duda tuvieron distinto origen. El contenido, la forma poética y el ritmo son diversos en ambassecciones. Los v.2-7 constituyen un himno al Creador, cuya grandeza se manifiesta en los misterios del cosmos. Todo es armonía y sucesión sincronizada en la marcha de la creación, porque todo obedece a una inteligencia superior. Esta parte del salmo se caracteriza por el lirismo más subido y arrebatador. La segunda sección tiene el aire de un poema didáctico, que se divide en dos partes: a) excelencias de la ley divina, que es fuente de felicidad para el que la observa (8-11); b) parte deprecativa: súplica de perdón por las infracciones, petición para no caer en la apostasía y, finalmente, súplica de que su oración sea escuchada.
El compilador de ambos poemas parece que ha querido poner en paralelo la armonía y belleza del cosmos, obra del Creador, y la de las prescripciones de la Ley, que se deben al mismo Dios, que formó el universo 1. En la primera parte se emplea el nombre divino de El, mientras que en la segunda se usa el específico de Yahvé. El primero dice relación con el universo creado, mientras que el segundo dice relación con la elección de Israel, al que fue destinada la Ley. Así, pues, la segunda parte parece una adición de un autor de la escuela sapiencial que quiso establecer un paralelo entre la maravillosa obra de la creación del mundo y su segunda creación, la Ley mosaica, expresión de su voluntad y, a la vez, módulo y troquel del alma religiosa israelita. La Ley es un reflejo de la sabiduría y santidad divinas y el espejo en que debe mirarse el alma israelita para reconocer su defectibilidad y dependencia de Dios.
Según el título, el salmo tiene por autor al propio David, como los anteriores. Ya hemos adelantado que el estilo y perspectiva poética y doctrinal de las dos secciones reflejan autor diverso. La primera parte, más lírica, puede reflejar el temperamento poético del Rey Profeta; pero la segunda delata a un autor sapiencial enamorado de la Toráh después de los tiempos de Esdras. Los críticos descubren, incluso en la primera parte, arameísmos tardíos de la época postexílica 2.

El himno de los cielos a la gloria de Dios (1-5).
1 Al maestro del coro. Salmo de David. 2 Los cielos pregonan la gloria de Dios, y el firmamento anuncia la obra de sus manos. 3 El día transmite el mensaje al día, y la noche a la noche pasa la noticia. 4 No son discursos ni palabras cuya voz deje de oírse. 5 Su pregón sale por toda la tierra, y sus palabras llegan hasta los confines del orbe.

Los cielos límpidos de Oriente son de una belleza incomparable; por eso, mejor que en ninguna otra parte, se destacan las miríadas de luminarias que proclaman la grandeza, la omnipotencia y la sabiduría de Dios, que las gobierna. El salmista se extasía ante esta maravilla única de la creación, y declara que los cielos entonan un himno mudo y silencioso al Creador, pero no por ello menos elocuente. La gloria de Dios se refleja en esta obra grandiosa. Se manifestó en la presencia luminosa que dirigió al pueblo israelita por el desierto. Es la revelación de sí mismo. En la literatura rabínica, esta presencia o morada de Dios se llamó shekinah 3. El salmista considera aquí la gloria de Dios como la manifestación radiante de su poder y sabiduría en la creación. La creación en el fondo es una revelación de Dios. El firmamento, o bóveda maciza celeste, según la concepción de los antiguos hebreos, era la muestra palmaria de la magnificencia divina, al aparecer tachonada de estrellas y astros luminosos 4.
Y este clamor mudo de la creación no se interrumpe. El día y la noche, lejos de anularse mutuamente en la proclamación de la gloria de Dios, se completan, ya que se suceden como dos centinelas de turno que se transmiten el mensaje o consigna: la gloria de Dios. A la luz del día se manifiestan los portentos del reino natural y animal: los valles de verde esmeralda, las cumbres nevadas de las montañas, las ocres mesetas de cereales, las rocas calcáreas, los mares; todo es un despliegue deslumbrante de las posibilidades de Dios en la creación. Así, pues, el día y la noche son como dos coros que alternativamente proclaman la grandeza de Dios5. Estas afirmaciones del salmista tienen particular relieve en unos tiempos en que los pueblos gentiles egipcios, mesopotámicos, fenicios adoraban los astros como seres divinos. En su perspectiva son obras de Dios que tienen una finalidad en orden al ser humano 6. El lenguaje mudo de los cielos y del firmamento no es perceptible por los sentidos, pero no por eso es menos elocuente. San Pablo dirá que el Dios invisible puede ser rastreado a través de sus obras visibles 7. Toda la tierra pregona la grandeza y gloria de Dios (v.5).

La trayectoria del sol (5b-7).
5b Puso en ellos una tienda para el sol, 6 el cual, semejante al esposo que sale de su tálamo, se lanza alegre, como valiente, a recorrer su camino. 7 Sale de un extremo de los cielos, y su curso llega hasta sus confines, y nada se oculta a su calor.

Llevado de su inspiración poética, concibe al sol como un príncipe que habita suntuosamente en su palacio o tienda y que sale de mañana de refresco de su tálamo, como el esposo, a emprender su diaria tarea. El sol tiene ante sí un gran cometido: recorrer la inmensidad que se extiende desde los confines de los cielos a los más recónditos extremos de la tierra, de forma que nada quede oculto a su acción benéfica de dar calor y vida a los seres. He aquí cómo se expresa un himno asirio: ¡Oh Shamash! (dios solar), cuando tú sales de la gran montaña..., cuando tú sales del fundamento del cielo, donde se reúnen el cielo y la tierra...8. El salmista juega con dos símiles: el del radiante esposo que sale, lleno de alegría y optimismo, ataviado con sus mejores prendas; rebosante de belleza y juventud, el esposo es símbolo de la felicidad y del optimismo. Pero, como el camino que ha de recorrer es inmenso, entonces el salmista lo presenta como un héroe vigoroso y animoso que se lanza a su carrera como un joven atleta. Como el guerrero valiente, afronta con vigor y resolución la lucha con sus enemigos, que en el caso del sol son las tinieblas, que tiene que disipar, y el frío, que trae la muerte a la naturaleza. Luz y calor son los dos grandes beneficios del astro rey, que sale radiante de su magnífico palacio para diariamente luchar con los enemigos de la vida en la naturaleza. En otro himno asirio-babilónico encontramos una concepción parecida: (Shamash) se muestra cada día en el horizonte con un vigor y una juventud nuevas. Dios de la luz, tiene que luchar contra las tinieblas de la noche. Dios del calor, debe vencer el frío del invierno. También es el valiente entre los valientes, el qurudu, es decir, el guerrero y el héroe 9. El poeta israelita pudo utilizar estos símiles, e incluso conocer algún himno al sol, adaptándolo a su concepción monoteísta.

Panegírico de la Ley.
El tono del salmo cambia totalmente; desaparece el arrebato lírico grandioso y le sucede un gotear cansino de epítetos aplicados a la Ley, conforme a la tradición de las escuelas sapienciales que florecieron después del exilio. Este carácter esencialmente didáctico, totalmente diverso del lírico anterior, revela una nueva mano redaccional. No sabemos por qué este nuevo salmo fue yuxtapuesto al anterior. Quizá se deba al deseo de poner en paralelo la magnificencia de la Ley, que en la estimación rabínica era la nueva creación de Dios al servicio de su pueblo. El nombre de El (Señor de la creación, del orbe) es sustituido por Yahvé, el nombre que en la tradición israelita refleja la vinculación al pueblo de las promesas .

La Ley es sin mácula, verídica y recta (8-10).
8 La Ley de Yahvé es perfecta: restaura el alma; el testimonio de Yahvé es fiel: hace sabio al simple. 9 Los preceptos de Yahvé son rectos: alegran el corazón; los mandatos de Yahvé son limpios: esclarecen los ojos. 10 El temor de Yahvé es puro: permanece por siempre; los juicios de Yahvé son verdad: del todo justos.

Los pensamientos se desarrollan por paralelismos conceptuales, de forma que el pensamiento se va completando en cada estico. La Ley ha de tomarse aquí en sentido amplio, no sólo en su parte preceptiva, sino aun exhortativa, con sus promesas y amenazas. La felicidad del hombre está en conformarse con la voluntad de Dios y ésta se manifiesta en la Toráh, que es perfecta, de forma que el que camine según sus preceptos no se desvía del camino recto y da satisfacción plena al hombre: restaura el alma, confortando al hombre y dándole vigor, como el agua al sediento 10. Se la llama testimonio de Yahvé, en cuanto que refleja la voluntad divina ll; es fiel, porque nunca deja decepcionado al que se amolda a ella. Con sus prescripciones hace sabio al simple. Todo hombre puede dirigirse por el camino de la virtud o del vicio: el que escoge la primera senda es el sabio, mientras que el que sigue los senderos que se apartan de Yahvé es el simple o necio 12. El principio de la sabiduría está en el temor de Dios 13, y éste se refleja en el cumplimiento de la Ley, expresión de la voluntad divina.
La Ley se concreta en los preceptos, y, éstos son rectos, porque se amoldan al querer divino; con ellos se alegra el corazón, pues se siente la satisfacción moral de vivir en consonancia con el Dios omnipotente y dispensador de toda gracia. Esta alegría del corazón se refleja en la luminosidad radiante del rostro: esclarecen los ojos. La Ley es luz 14, y da luz y vida 15. Esa luminosidad procede de que sus preceptos son limpios y transparentes, y, como tales, no empañan la tranquilidad de conciencia. El temor de Yahvé reconocimiento de la Ley divina es puro, libre de toda contaminación; permanece para siempre, pues responde a las exigencias del Dios inmutable. Los juicios o decisiones de Yahvé son justos y verdaderos porque responden a los postulados de justicia que implica la divinidad, y, como tales, no engañan.

Valor de los juicios divinos (11-12).
11 Son más estimables que el oro acrisolado, más dulces que la miel, que el jugo de los panales. 12 También tu siervo es iluminado por ellos, y en guardarlos halla gran provecho.

Los juicios de Dios en cuanto sirven para dirigir al hombre en la vida son de más valor que el mejor oro. La comparación es un tópico en la literatura sapiencial16. Por el fruto que producen resultan más sabrosos y dulces que la miel, que sale directamente de los mismos panales sin haber sufrido adulteración 17. El salmista sabe reconocer su valor, y procura sacar provecho al dejarse iluminar por ellos.

Súplica de perdón por las faltas involuntarias (13-15).
13 ¿Quién será capaz de conocer los deslices? Limpíame de los que se me ocultan. 14 Retrae también a tu siervo de los movimientos de soberbia l8, no se adueñen de mí; entonces seré irreprochable y purificado del gran pecado. 15 Séante gratas las palabras de mi boca y la meditación de mi corazón. ¡Yahvé, mi Roca y mi Redentor!

Penetrado de la perfección de la Ley divina, se siente culpable de muchos deslices o infracciones. Particularmente le preocupan las inadvertencias ocultas. Tiene miedo de no corresponder al gran tesoro que para él es la Ley de Yahvé. Las faltas que se hacen por error 19 se contraponen a las realizadas deliberadamente con mano alzada20. El salmista quiere expiar todas las posibles transgresiones para no empañar la amistad que con Yahvé tiene por el cumplimiento fiel de la Ley, que es la revelación de Dios. La Ley mosaica había determinado concretas expiaciones para librarse de la secuela de las faltas cometidas por error o inadvertencia21. El salmista desea también verse libre de los movimientos de soberbia o presunción (v.14). Tiene conciencia de su debilidad, y teme rebelarse contra los caminos de Dios 22. Con la ayuda divina espera verse libre del gran pecado, es decir, de la apostasía o la rebelión espiritual contra su Dios 23.
Con estos sentimientos de humildad y compunción, el salmista espera que sus palabras sean gratas a Dios, y lo mismo sus consideraciones o meditación del corazón. Yahvé es el único apoyo para su alma, ansiosa de vivir en comunidad con El a través de la Ley. Yahvé es su Roca, en la que se siente segura, y es su Redentor, el vengador oficial de las ofensas 24.

1 Cf. Amo_4:13; Amo_5:7.8. 2 Véase A. Podechard, o.c., I 94. 3 Cf. Exo_16:7; Exo_16:10; Exo_33:22; Rom_9:4. 4 Cf. Gén_1:6s; Job_37:18. 5 Véase Cicerón, De natura deorum II 37.95. 6 Cf. Gen_1:14-15. 7 Cf. Rom_1:19. 8 P. Dhorme, Choíx des textes religieux assyro-babyloniennes 61:12Cr_19:1.9 nota. 9 Cf. P. Dhorme, o.c., XXI; 2Cr_211:1.43; 2Cr_285:1.23; 2Cr_299:1.9. 10 Cf. Lam_1:11.19. n Cf. Exo_25:16.21. 12 Cf. Sal_119:130; 2Ti_3:15. 13 Ecl_1:16. 14 Pro_6:23. 15 Cf. Sal_119:105.130; Efe_1:18. 16 Cf. Sal_119:72.127; Pro_3:14; Pro_8:10; Job_28:15-19. 17 Cf. Pro_16:24. 18 Los LXX: de (dioses) extranjeros; el TM lit. de los orgullosos; cf. Jer_3:13. 19 Cf. Lev_4:2. 20 Cf. Num_15:30; Num_15:22-31. 21 Cf. Lev_4:15.13; Num_15:22. 22 Cf. Sal_119:121. 23 Cf. Isa_1:2. 24 Cf. Job_19:25; Larn 3:58.

Nuevo Comentario Bíblico Siglo XXI (Editorial Mundo Hispano, 2019)



Salmo 19: Tres Voces en Contrapunto

1– 6 La voz de la creación: paradoja. A través del espacio (1), el tiempo (2) y el planeta (4) el orden creado manifiesta ([1] cuentan) cuán glorioso es el Dios cuya obra de sus manos son ellos (1b). 4 Toda la tierra significa dominio adjudicado, control. Este dominio es llevado a cabo (Gén. 1:16) por el sol (5, 6), que se levanta en renovada realización cada día, cruzando el firmamento en enorme potencia, entrando en todas partes. Paradójicamente, comunica su mensaje (2) pero no es un lenguaje (3). El orden creado cuenta y a la vez no cuenta: Comunica a nuestra intuición que existe un Dios glorioso que creó tales maravillas, pero su mensaje es limitado no puede contar acerca de él y confuso, porque la belleza de los montes cuentan una verdad y la tormenta y el volcán otra.

7– 10 La voz de la palabra: perfección. El Señor no nos ha abandonado a las incertidumbres de la religión natural; ha hablado su palabra que aquí lleva seis títulos: ley (7), instrucción; testimonio/ estatutos, lo que el Señor declara ser verdad es válido; preceptos (8), aplicable a los pequeños detalles de la vida; mandamientos, cuya intención es que los obedezcamos; temor (9); merecedor de reverencia; juicios, decisiones de su autoridad.

Tiene nueve cualidades: perfecta en todas sus partes y, en su totalidad, fiel (7), digno de confianza; rectos (8), derechos, de rectitud moral; puro, libre de contaminación; limpio (9) (ver 12:6), de una pureza aceptable a Dios; permanece, no cambia; verdad ... justos, auténticos ... correctos, correspondiendo a las normas objetivas de la verdad; deseables (10), deseables con razón, llena de valor intrínseco; más dulces, llena de auténtica satisfacción.

Da cuatro resultados: restaura (7), (35:17; cf. Rut 4:15; Lam. 1:16), restaurando la vida verdadera ya sea que un peligro la amenace o se ha empequeñecido por el dolor; ingenuo tiene un significado negativo: simple, crédulo (Prov. 7:7; 14:15; 22:3), que carece de principios morales que le guíen, y el significado positivo de enseñable (116:6; 119:30; Prov. 1:4), alegran (8), educando a las emociones (corazón); los ojos son los órganos de los deseos, lo que uno espera de la vida. La palabra de Dios infunde objetivos auténticos, valores dignos.

11– 14 La voz del pecador: orando. Aquí tenemos a alguien que ha llegado a estar bajo la influencia de la palabra divina. Es amonestado, iluminado y enriquecido (grande galardón) a través de la obediencia (11); convencido de pecado y presto para pedir perdón (12), le son dadas nuevas aspiraciones y anhelo de ser íntegro (13), perfecto, en cada parte e integralmente como un todo: Como la palabra misma (7) y en particular (14) aceptable a Dios en lo que dice. Si es conocido por la palabra que habla (7– 10), ¿no hemos de serlo igualmente nosotros? La creación guarda silencio pero nosotros no debemos hacerlo. ¿Cómo se sostendrá tal vida de obediencia? Sólo por medio de restaurar al Señor mismo en su Roca de poder y de veracidad, y en su bondad como Redentor, el pariente más cercano que se hace cargo de todas nuestras necesidades (Rut 3:13).

Notas. 3 Puntualiza que el orden creado no puede vocalizar (lenguaje), verbalizar (palabras) ni comunicar (ni se escucha). La noción de un Creador se transmite pero no es la revelación verbal que necesitamos. 11 Debiera empezar con Ciertamente, o sea que introduce una aplicación de un caso específico. 12, 13 El pecado es una falla (errores), una falta que hasta entonces no había reconocido, una arrogancia (en lugar de arrogantes) deliberada que desprecia la palabra de Dios. Rebelión es una transgresión intencional contra un superior. 14 Boca ... corazón, hacia afuera, hacia adentro.

King James Version (KJVO) (1611)



Psalm XIX.

1 The creatures shew Gods glory. 7 The word his Grace. 12 Dauid prayeth for Grace.
To the chiefe Musician, A Psalme of Dauid.
1 [ Gen_1:6.] The heauens declare the glory of God: and the firmament sheweth his handy worke.
2 Day vnto day vttereth

[Gods works.]

speach, and night vnto night sheweth knowledge.
3 There is no speach nor language, where [ Or, without these their voyce is heard .] their voyce is not heard.
4 [ Hebrew: without their voyce heard.] [ Rom_10:18 .] Their line is gone out through all the earth, and their words to the end of the world: In them hath he set a tabernacle for the Sunne.
5 Which is as a bridegrome comming out of his chamber, and reioyceth as a strong man to runne a race.
6 His going forth is from the end of the heauen, and his circuite vnto the ends of it: and there is nothing hidde from the heat thereof.
7 The [ Or, doctrine.] Law of the Lord is perfect, [ Or, restoring.] conuerting the soule: the testimonie of the Lord is sure, making wise the simple.
8 The Statutes of the Lord are right, reioycing the heart: the Commandement of the Lord is pure, inlightning the eyes.
9 The feare of the Lord is cleane, enduring for euer: the Iudgements of the Lord are [ Hebrew: trueth.] true, and righteous altogether.
10 More to bee desired are they then gold, [ Psa_119:72 ; Psa_119:127 ; Psa_119:103 ; Pro_8:19 .] yea, then much fine gold: sweeter also then hony, and [ Hebrew: the dropping of hony combes.] the hony combe.
11 Moreouer by them is thy seruant warned: and in keeping of them there is great reward.
12 Who can vnderstand his errours? cleanse thou me from secret faults.
13 Keepe back thy seruant also from presumptuous sinnes, let them not haue dominion ouer me: then shall I be vpright, and I shalbe innocent from [ Or, much.] the great transgression.
14 Let the words of my mouth, and the meditation of my heart, bee acceptable in thy sight, O Lord [ Hebrew: my rocke.] my strength, and my redeemer.

La Biblia de Nuestro Pueblo (Liturgical Press, 2006),

El cielo y el firmamento tienen un lenguaje propio, que es escuchado en la tierra. Aquellos hablan de orden como algo ontológico e invitan al hombre a la alabanza y a la obediencia como respuesta religiosa. El ser humano tiene la vocación de ser liturgo de la creación (2-7). Pero esta vocación no es seguida. En ese momento interviene la palabra de Dios, vehículo de la revelación y de la voluntad divina. Si el ser humano se adhiere a la voluntad divina y se comporta de acuerdo con la ley, su vida será refulgente como la norma y más valiosa que el oro (8-11). Pero el hombre es incapaz de servir incondicionalmente a Dios; de ahí que pida auxilio, y que la ley encamine al hombre hacia su liberación (12-14). Sólo quien es inocente e íntegro puede entonar la alabanza divina (15). Rom_10:18 aplica el versículo 4 del salmo a la predicación del Evangelio. Este salmo es indicado para confrontar la vida con la presencia de Dios en la creación y en la Ley.

Sagrada Biblia (Conferencia Episcopal Española, 2011)

*19 Se compone este salmo de dos himnos: al Creador (Sal 19:1-6) y a la ley (Sal 19:7-13), que finalizan con una antífona (Sal 19:14). La creación entera habla del Creador con lenguaje silencioso e ininterrumpido. La obra maestra de Dios, que es la ley, transmite el buen querer de Dios y da vida al «siervo» de la ley.

Nueva Biblia de Jerusalén (1998) - referencias, notas e introducciones a los libros


REFERENCIAS CRUZADAS

[1] Sal_65:9 [Sal_65:8]

Biblia Hispano Americana (Sociedad Bíblica Española, 2014)

Gén 1:1-8. Job 38:31-33.

Nueva Biblia de Jerusalén (Desclée, 1998)


REFERENCIAS CRUZADAS

[1] Sal_65:9 [Sal_65:8]

Libro del Pueblo de Dios (San Pablo, 1990)



5-7. El curso diurno del sol es comparado con la carrera victoriosa de un "atleta". El lirismo de la descripción se acentúa con algunas reminiscencias mitológicas.

8. Ver nota 1. 2.

11. Ver 119. 103.

Dios Habla Hoy (Sociedades Bíblicas Unidas, 1996)



Dios Habla Hoy 1996 Notes:



[1] 19.13 Libre de gran pecado: probable alusión al gran pecado de la idolatría, mencionado con esas palabras en Ex 32.31-33 y 2 R 17.21, en el texto hebreo.