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Abre tus puertas, Líbano,
que el fuego devore tus cedros.
(Zacarías 11, 1) © Nueva Biblia de Jerusalén (Desclee, 1998)

BHSEk - Biblia Hebraica Stuttgartensia (Enhanced; KJV versification)

פְּתַ֥ח‎(פָּתַח)

Hebrew|pᵊṯˌaḥ|open

Part-of-speech: verb
Gender: masculine
Number: singular
Person: second person
State: not applicable
Verbal tense: imperative
Verbal stem: qal


[H6605] [q.ea.aa] [1854]
[פתח] [GES6537] [BDB7201] [HAL7134]

לְבָנֹ֖ון‎(לְבָנֹון)

Hebrew|lᵊvānˌôn|Lebanon

Part-of-speech: proper noun
Gender: unknown
Number: singular
Person: not applicable
State: absolute
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H3844] [l.ak.al] [1074e]
[לבנון] [GES3746] [BDB4181] [HAL4138]

דְּלָתֶ֑יךָ‎(דֶּלֶת)

Hebrew|dᵊlāṯˈeʸḵā|door

Part-of-speech: noun
Gender: feminine
Number: dual
Person: not applicable
State: absolute
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H1817] [d.bm.af] [431e]
[דלת] [GES1721] [BDB1939] [HAL1951]

וְ‎(וְ)

Hebrew|wᵊ|and

Part-of-speech: conjunction
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[f.ab.aa] [519]
[ו] [GES1991] [BDB2226] [HAL2241]

תֹאכַ֥ל‎(אָכַל)

Hebrew|ṯōḵˌal|eat

Part-of-speech: verb
Gender: feminine
Number: singular
Person: third person
State: not applicable
Verbal tense: imperfect
Verbal stem: qal


[H398] [a.dc.aa] [85]
[אכל] [GES389] [BDB413] [HAL428]

אֵ֖שׁ‎(אֵשׁ)

Hebrew|ʔˌēš|fire

Part-of-speech: noun
Gender: unknown
Number: singular
Person: not applicable
State: absolute
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H784] [a.gb.aa] [172]
[אש] [GES763] [BDB815] [HAL840]

בַּ‎(בְּ)

Hebrew|ba|in

Part-of-speech: preposition
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[b.ab.aa] [193]
[ב] [GES855] [BDB923] [HAL939]

אֲרָזֶֽיךָ‎(אֶרֶז)

Hebrew|ʔᵃrāzˈeʸḵā|cedar

Part-of-speech: noun
Gender: masculine
Number: plural
Person: not applicable
State: absolute
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H730] [a.fq.ab] [160a]
[ארז] [GES706] [BDB755] [HAL780]

Biblia Comentada, Profesores de Salamanca (BAC, 1965)



11. Anuncios de Castigo.

El juicio vengador de Yahvé sobre las naciones paganas (1-3).
1 ¡Abre, Líbano, tus puertas, que el fuego devora tus cedros 2 Gime, ciprés, porque ha caído el cedro, porque han sido abatidos los poderosos. ¡Gemid, encinas de Basan, porque es destruido el bosque impenetrable! 3¡Oyense lamentos de pastores por la ruina de sus riquezas! Oyense rugidos de leones por la ruina de la gloria del Jordán!

La ruina de los grandes imperios es dramatizada de modo solemne en este bellísimo oráculo punitivo. Ha llegado la hora del castigo divino sobre los opresores que parecían omnipotentes. El Líbano es símbolo de las grandes potencias x enemigas de Israel, porque con sus majestuosos cedros parecía simbolizar el orgullo y la insolencia entre los demás árboles modestos (pequeñas naciones). Ahora el profeta, en nombre de Yahvé, invita al llanto al Líbano, porque el fuego va a hacer presa de su colosal bosque. El mismo ciprés (hermano menor del cedro) debe sentirse amenazado al ver al rey de la selva (el cedro) caer abatido.
Las encinas de Basan (símbolo también de la robustez) deben sentirse amenazadas por el incendio que se va a declarar en el Líbano: Gemid, porque es destruido el bosque impenetrable (v.2). La ruina es general, y hasta la gloria del Jordán (v.3), la frondosidad exuberante que rodea al Jordán, sentirá el paso de la mano vengadora efe Yahvé. Como consecuencia, los pastores entonan lamentos desoladores al ver perdidas sus praderías, fuente de sus riquezas. Y hasta los leones que viven en la tupida maleza del Jordán (gloria del Jordán) lanzarán rugidos desesperados al perder sus habituales guaridas 2.
Con todos estos símbolos (cedros del Líbano, encinas de Basan y leones del Jordán) parece que el autor quiere dar a entender la ruina de las naciones enemigas de Israel. No obstante, algunos autores prefieren ver en este fragmento una alusión al castigo que espera a los dirigentes responsables de la ruina de Judá, los pastores y machos,Cabríos a que se alude en 10:3 3.

La alegoría del profeta pastor (4-14).
4 Así dice Yahvé, mi Dios: Apacienta las ovejas para el matadero, 5 las que matan los compradores impunemente, mientras sus vendedores dicen: ¡Bendito sea Yahvé, que me ha enriquecido ! sin que los pastores tengan piedad de ellas; 6 porque no tendré yo piedad de los moradores de la tierra, dice Yahvé, porque yo mismo entregaré a las gentes, cada uno en manos de su pastor y en las manos de su rey, y éstos devastarán la tierra, y yo no la libraré de sus manos. 7 Hícerrie, pues, pastor del rebaño de la matanza para los compradores del rebaño, y tomé dos cayados, dando al uno por nombre benevolencia y al otro unión y me puse a apacentar el rebaño. 8 En un mes hice desaparecer a tres pastores. Entonces tomé aversión del rebaño, el cual se hastió de mí, 9 y dije: No os apacentaré ya más; la que muera, que muera; la que se pierda, que se pierda, y las que queden, que se coman unas a otras. 10 Tomé luego mi cayado benevolencia y lo rompí, para deshacer el pacto que había concertado con todos los pueblos, 11 y quedó deshecho en ese día, y los mercaderes de ovejas que me observaban conocieron que aquello era cosa de Yahvé. 12 Yo les dije: Si queréis, dadme mi salario, y, si no, dejadlo; y me pesaron mi salario, treinta monedas de plata. 13 Y Yahvé me dijo: Tira al tesoro el rumboso precio en que te han apreciado. Y tomando las treinta monedas de plata, las tiré en la casa de Yahvé al tesoro 4. 14 Rompí luego el otro cayado, unión, para romper la hermandad entre Judá e Israel.

Esta profecía ha sido calificada por algún autor como la más enigmática del A.T. El profeta debe hacer el papel de buen pastort representando a Yahvé; pero, en realidad, su misión, en vez de ser de benevolencia, es de justicia. El pueblo israelita es comparado a un rebaño destinado al matadero, sin que nadie tenga piedad de él: los compradores matan sus ovejas impunemente; los vendedores se alegran de su ganancia, y los mismos pastores no sienten compasión por ellas (v.4-5). El profeta debe presentarse como pastor de este rebaño destinado al matadero.
Yahvé entregará a las gentes del país en manos de pastores y reyes, que los tratarán como reses destinadas al degüello, sin compasión alguna (v.6). Y Yahvé no les prestará auxilio: no los libraré de sus manos. El profeta, como emisario de Yahvé, se presenta como el pastor del rebaño de la matanza (es decir, del pueblo judío, destinado al sacrificio). Como pastor, tomó dos cayados 5, que con sus nombres simbolizan la misión de benevolencia hacia las ovejas y de unión entre ellas que debiera en principio mantener. Yahvé le había establecido para ser pastor cuidadoso de su rebaño, que debe mantener unido; pero las circunstancias exigen que su misión de benevolencia y unión sea cambiada en una misión justiciera de castigo, como a continuación se indica.
El v. 8 es sumamente enigmático y ha sido muy diversamente interpretado. Los tres pastores que desaparecen en un mes en virtud de la intervención del pastor-profeta, representante de Dios, al castigar a su pueblo, parecen ser los dirigentes indignos de Judá en general. El número tres sería, pues, meramente simbólico. Quizá el hagiógrafo, al redactar esta profecía, haya pensado en la narración de Jer_22:6s, donde se habla de pastores que serán aventados a la cautividad. Justamente en este capítulo de Jeremías aparecen los símiles del Líbano, Galaad y Basan 6 para designar a la clase directora, responsable de la catástrofe de Judá.
Por otra parte, se habla en este mismo capítulo de tres reyes de Judá que serán castigados por Yahvé: Joacaz, deportado a Egipto, donde morirá; Joaquim, que no tendrá sepultura real, y Jeconias, que será llevado en cautividad. Zacarías, pues, bien pudo calcar su profecía sobre la de Jeremías, de cuyo profeta depende frecuentemente en la formulación de sus oráculos7. En ese caso, los tres pastores serían, pues, los dirigentes depravados de Judá, que no se preocupan de su grey y venden sus ovejas para el matadero. El término de un mes dado para la desaparición de los pastores hay que tomarlo también simbólicamente por un breve lapso de tiempo 8.
Por la mala conducta, el profeta-pastor, representante de Yahvé, sintió aversión hacia el rebaño, y a su vez el rebaño se desentendió de su verdadero Pastor (v.8b). Consecuencia de ello es que el profeta-pastor abandona el cuidado de su grey, dejándola a su suerte: la que muera, que muera. (v.8), alusión a la ruina de Judá, que culminó en la cautividad babilónica. El autor está trabajando con datos históricos, adaptándolos a la situación presente. El profeta-pastor, que tenía por misión apacentar normalmente a su grey con los cayados de la benevolencia y de la unión para protegerla, los rompió (v.10), renunciando así a su misión de pastor, guardián, y convertirse en juez castigador de su grey.
Como profeta-pastor, debía atraer a sus ovejas (Judá e Israel) a Dios con la benevolencia y la unión o conciliación; pero ante la falta de correspondencia de los componentes de su grey, tan cuidadosamente guardada, se desentiende de ella y la abandona a su suerte, rompiendo el pacto sellado con los pueblos o naciones gentiles, en el que había concertado que 110 atacaran a Judá. Desde entonces el pastor se comporta como un mercenario, que pone en venta sus ovejas, diciendo a los mercaderes: si queréis, dadme mi salario, y si no, dejadlo (v.12). Es de notar el tono displicente del pastor-profeta. Sólo le interesa liquidar de cualquier modo para verse libre del oficio de pastor de su rebaño. Las deja a cualquier precio, sin apelar a estipulaciones anteriores.
Los mercaderes le dan lo equivalente al precio de un esclavo: treinta monedas de plata (v.12) 9. El evangelista San Mateo ve en este número una semejanza con las treinta piezas de plata, o siclos, por los que Judas vendió a Jesús, y ve en ello el cumplimiento de una antigua profecía, que cita libremente juntamente con otra de Jeremías, al que atribuye todo el vaticinio 10. El texto es clásico para ver la libertad con que los autores del í. Ô. argumentan al aducir textos del A.T. En nuestro caso, la relación entre el texto de Zacarías y el del Evangelio puede establecerse apelando al sentido típico o al acomodaticio, que utiliza muchas veces San Mateo n. El evangelista relaciona el campo del alfarero, comprado con las treinta piezas de plata de Judas, con lo que se dice en Zac_11:13 : Tira al alfarero (según el TM) el rumboso precio en que te han apreciado. Es una mera relación de semejanza, basada en el nombre de alfarero, que en realidad en el contexto de Zacarías aparece totalmente extraño.
Creemos que debe adoptarse la lectura de tesoro, que encaja mejor con la casa de Yahvé del v.15b. El templo era también el depósito del peculio público y de los individuos en los tiempos posexílicos. En la frase de Yahvé al pastor-profeta hay un deje de ironía: Tira al tesoro (de la casa de Yahvé) el rumboso precio en que te han apreciado. La labor del pastor ha sido pagada con el bajo precio de un esclavo (treinta monedas de plata). No merece, pues, que conserve esa exigua e insultante cantidad, y, por tanto, debe entregarla al erario público. Naturalmente, todo esto es simbólico, y significa la ingratitud del pueblo israelita para con su pastor-profeta, que hacía las veces de su Dios.
Israel no ha querido ser gobernado con el cayado de la benevolencia, y lo será con el de la justicia. Por otra parte, la consecuencia de su defección de Yahvé ha sido la separación de las doce tribus en dos reinos, Israel y Judá. El pastor-profeta, para indicar esta separación, rompió su cayado llamado unión (v.14). Con esto se quiere decir contundentemente que Yahvé se desentiende de su pueblo como Pastor.

El pastor insensato (15-17).
15 Y Yahvé me dijo: Hazte también el pastor insensato, 16 pues he aquí que voy a suscitar un pastor en la tierra que no se cuidará de que desaparezcan, y no buscará a las descarriadas, ni curará a las heridas, ni alimentará a las fuertes, pero se comerá las gordas y les arrancará las uñas. 17 ¡Ay del pastor inútil, que abandona el rebaño! (Descargará) la espada sobre su brazo derecho, se secará del todo su brazo y quedará ciego totalmente su ojo derecho.

Como antes el profeta tuvo que hacer de pastor que quiso gobernar su grey con benevolencia y unión, pero al fin tuvo que abandonarla a la justicia y a la ruina por culpa de sus ovejas, así ahora el profeta debe encarnar simbólicamente al pastor insensato, que no se cuidará de sus ovejas, sino que se aprovechará de ellas, matando las más gordas.
¿Quién es este pastor insensato? Como para la identificación de los tres pastores que desaparecen Deu_11:8, también aquí se proponen diversos nombres históricos. Se ha propuesto algún jefe político infiel de los tiempos posexílicos, y parece que en su descripción el profeta dependiente de Jeremías utilizó como modelo la figura histórica del desgraciado rey Sedecías (598-586 a.C.), el cual llevó una política suicida al enfrentarse con Babilonia. Al entrar los caldeos en Jerusalén huyó cobardemente, y fue apresado por las tropas de Nabucodonosor y trasladado al cuartel general de Ribla, donde le sacaron los ojos a presencia del conquistador babilonio. El v.17 puede ser una alusión a este lastimoso hecho.

1 Cf. Isa_10:333; Ez c.31. 2 La expresión orguíío o gloria del Jordán para significar la maleza espesa sus riberas aparece en Jer_12:5; Jer_12:44, Jer_12:191 50.44- 3 Así Hoonacker, o.c., p.671. Supone que estos v.i-3 son la respuesta a 9:16b ; selvática de 10.2-3ab. 4 Tesoro, según el Siríaco y Targum, seguido por la Bib. de Jér. Los LXX: al horno. La palabra hebrea yoser (alfarero) del TM es semejante a Oser (tesoro), 5 La sugerencia de los dos cayados puede depender de los dos bastones de Eze_37:15. 6 Cf. Jer_22:6.20. 7 En Jer_22:9 se habla también de la ruptura del pacto como en Zac_11:10. 8 S. Bullough resume así las distintas identificaciones propuestas para los misteriosos tres pastores: Se propone para antes de 722 a Zacarías, Sellum y Menajem (2 Re 15); para antes de 286, a Joaquim, Joaquín (Jeconías) y Sedecías, o a Joacaz (Sellum), Joaquim y Je-conías (2 Re 23-24; Jer 22). Para la época persa, tres sumos sacerdotes desconocidos (Driver); para el período macabeo, Jasón, Menelao y Lisfmaco (2 Mac 4), o los hijos de Tobías, o bien los satélites de Simón el benjaminita que lucharon contra Onías (2 Mac 3) (Kennett). Otros sugieren tres potencias extranjeras, tales como los asirios, los babilonios, los persas, o bien los persas, los griegos y los romanos, o bien tres reyes opresores, como los seléucidas Antío-co IV Epífancs, Antíoco Eupator y Demetrio I (Wright). Cf. Verbum Dei II n.5510. 9 Cf. Exo_21:32. Son treinta siclos, equivalentes a unos 20 dólares. 10 Cf. Mat_27:8 : Y tomaron treinta piezas de plata, el precio en que fue tasado aquel a quien pusieron precio los hijos de Israel, y las dieron por el campo del Alfarero, como el Señor me lo había ordenado. 11 Cf.

King James Version (KJVO) (1611)



Chapter XI.

1 The destruction of Ierusalem. 3 The elect being cared for, the rest are reiected. 10 The staues of beauty and bands broken by the reiection of Christ. 15 The Type and curse of a foolish Shepheard.
1 Open thy doores, O Lebanon, that the fire may deuoure thy cedars.
2 Howle firre tree, for the cedar is fallen; because all the [ Or, gallants.] mighty are spoiled; howle O yee okes of Bashan, for the [ Or, the defenced forrest.] forrest of the vintage is come downe.
3 There is a voyce of the howling of the shepheards; for their glory is spoiled: a voyce of the roaring of young lyons; for the pride of Iordan is spoiled.
4 Thus saith the Lord my God; Feede the flocke of the slaughter;
5 Whose possessours slay them, and hold themselues not guiltie: and they that sell the say, Blessed be the Lord; for I am rich: and their owne shepheards pitie them not.
6 For I will no more pitie the inhabitants of the land, saith the Lord: but loe, I will [ Hebrew: make to be found.] deliuer the men euery one into his neighbours hand, and into the hand of his King, and they shall smite the land, and out of their hand I will not deliuer them.
7 And I will feede the flocke of slaughter, euen you, O [ Or, verily the poore.] poore of the flock: and I tooke vnto me two staues; the one I called Beautie, and the other I called [ Or, binders.] Bandes, and I fed the flocke.

[Two staues.]

8 Three shepheards also I cut off in one moneth, and my soule [ Hebrew: was straitened for them.] loathed them, and their soule also abhorred mee.
9 Then said I, I [ Jer_15:2 .] will not feede you: that that dieth, let it die: and that that is to be cut off, let it be cut off, and let the rest eate, euery one the flesh of [ Hebrew: of his fellow or neighbour.] another.
10 And I tooke my staffe, euen Beautie, and cut it asunder, that I might breake my couenant which I had made with all the people.
11 And it was broken in that day: and so [ Or, the poore of the flocke, etc. certainly knewe.] the poore of the flocke that waited vpon me, knew that it was the word of the Lord.
12 And I said vnto them, [ Hebrew: if it be good in your eyes.] If yee thinke good, giue me my price: and if not, forbeare: so they [ Mat_26:15 .] weighed for my price thirtie pieces of siluer.
13 And the Lord said vnto mee, Cast it vnto the [ Mat_27:9 .] potter: a goodly price, that I was prised at of them. And I tooke the thirtie pieces of siluer, and cast them to the potter in the house of the Lord.
14 Then I cut asunder mine other staffe, euen [ Or, binders.] Bands, that I might break the brotherhood betweene Iudah and Israel.
15 And the Lord said vnto me, Take vnto thee yet the instruments of a foolish shepheard.
16 For loe, I wil raise vp a shepherd in the land, which shall not visit those that bee [ Or, hidden.] cut off, neither shall seeke the yong one, nor heale that that is broken, nor [ Or, beare.] feed that that standeth still: but he shal eate the flesh of the fat, and teare their clawes in pieces.
17 [ Jer_23:1 ; Eze_34:2 ; Joh_10:12 .] Woe to the idoll shepheard that leaueth the flocke: the sword shall be vpon his arme, and vpon his right eye: his arme shall be cleane dryed vp, and his right eye shall be vtterly darkened.

Nuevo Comentario Bíblico Siglo XXI (Editorial Mundo Hispano, 2019)



Un llamamiento a lamentar. El Líbano ha sido mencionado en 10:10 como si fuera un destino para los exiliados que vuelven, de modo que podríamos pensar que ¡Abre tus puertas, oh Líbano ... ! sería simplemente para dejarlos entrar. No es así. Es para que entre el fuego y queme los impresionantes cedros del Líbano. Estos frecuentemente se mencionan como símbolo de orgullo. Los robles de Basán, muy al norte de la tierra y al oriente del Jordán, son similares. Ambos se encuentran en Isa. 2:13 (cf. Eze. 27:5, 6). Es posible que las regiones del Líbano y Basán fueran culpables de algunos males particulares en contra de los israelitas, pero el principal propósito aquí es el de representar la oposición orgullosa a los propósitos de Dios.

Este tipo de llamamiento a lamentar se usa frecuentemente en pasajes proféticos como una manera gráfica para describir un desastre inminente (Isa. 13:6; 14:31; Jer. 25:34; Sof. 1:11). Los pastores y los cachorros de león señalan a los líderes que serán juzgados: se destruye su ambiente y ya no pueden funcionar.

El pasaje tiene varios nexos con los versículos precedentes (especialmente 9:4 consumida por fuego; 10:2, 3, pastores; 10:10, Líbano; 10:11, soberbia [de Asiria], traducido espesura en 11:3). Así que sirve de pasaje transicional, preparando el camino para la siguiente alegoría de los pastores.

Libro del Pueblo de Dios (San Pablo, 1990)



4. Las "ovejas" son el pueblo de Israel víctima de la codicia y venalidad de sus malos pastores. Ver Jer_23:1-2; Eze_34:1-10.

7. Los "dos bastones" simbolizan, respectivamente, la seguridad de Israel frente a las naciones extranjeras (v. 10) y la paz interior entre las tribus (v. 14).

8. Resulta imposible identificar con certeza a estos "tres pastores". Probablemente se trata de tres sumos sacerdotes, desaparecidos en muy poco tiempo.

12. Este exiguo "salario" es una señal de desprecio, ya que esa suma se pagaba por el rescate de un esclavo ( Exo_21:32). Ver Mat_27:9.

14. Esta ruptura de la "fraternidad" podría referirse a la separación definitiva de Jerusalén y Samaría, hacia el 328 a C., cuando los samaritanos construyeron su templo cismático en el monte Garizím.

15. Este gesto simbólico anuncia la llegada de un mal pastor -probablemente un nuevo Sumo Sacerdote- que al fin recibirá el castigo merecido.

Dios Habla Hoy (Sociedades Bíblicas Unidas, 1996)



Dios Habla Hoy 1996 Notes:



[1] 11.4-17 Las ovejas representan al pueblo de Israel, víctima de la codicia y opresión por parte de sus malos pastores, es decir, de sus reyes o gobernantes.

[2] 11.5 Los compradores podrían representar a los gobernantes extranjeros después de la conquista de Alejandro Magno (9.1-8); los vendedores o tratantes (v. 7), a los funcionarios judíos puestos al servicio de los poderes extranjeros.

[3] 11.7 Por cuenta de los tratantes: según la versión griega. Heb. por tanto los humildes del rebaño.

[4] 11.10 El hecho de romper el bastón llamado "Bienestar" y de anular la alianza, equivale a afirmar que Dios ha retirado la protección a su pueblo. Cf. Os 1.9.

[5] 11.13 Échalas en el tesoro del templo: según algunas versiones antiguas; heb. dáselas al alfarero.

[6] 11.12-13 Como treinta monedas de plata era el precio de un esclavo (Ex 21.32), el pastor se consideraba mal pagado. La expresión el espléndido precio tiene, por lo tanto, un sentido irónico. Cf. Mt 26.15; 27.9-10.

[7] 11.14 Algunos intérpretes han visto aquí una referencia muy antigua al cisma entre judíos y samaritanos. Hacia el 328 a.C., los samaritanos construyeron un templo en Guerizim, para rivalizar con el templo de Jerusalén.

Torres Amat (1825)



[1] Líbano y Jordán son los límites de la tierra santa. Cedros y abetos o encinas simbolizan a los soberbios y poderosos. Ez 17, 3; Jer 22, 23.

[6] Anuncia el profeta la ruina de Jerusalén.

[7] El primer cayado simboliza la dulzura y paciencia con que Dios gobernó al pueblo judaico. El otro cayado indica el castigo que sufre la nación.

[12] Dios abandona la nación judía, que era su grey, porque ella no lo quiere por pastor. La paga oprecio de su vida se reduce a treinta monedas. Mat 27, 9.

Biblia Hispano Americana (Sociedad Bíblica Española, 2014)

Jue 9:15; (ver 1Re 4:33-4); Sal 29:5.

Nueva Biblia de Jerusalén (1998) - referencias, notas e introducciones a los libros


NOTAS

11:1 Símbolos de las grandes potencias, ver Isa_10:33 s; Ez 31, o de sus reyes.

Nueva Biblia de Jerusalén (Desclée, 1998)


NOTAS

11:1 Símbolos de las grandes potencias, ver Isa_10:33 s; Ez 31, o de sus reyes.