Biblia Comentada, Profesores de Salamanca (BAC, 1965)
18. Oráculo Sobre Etiopía.
También este oráculo parece debe colocarse entre el 705 y el 701, en que era inminente la amenaza de la invasión asiría. El motivo es una embajada etiópica de parte de su rey, probablemente Sabaka (711-700 a.C.), que pretendía conseguir la ayuda de Judá en una liga contra Asiría. El profeta amablemente les invita a volver a su país, diciendo que Dios se encargará de destruir a Asiría sin el concurso humano. Sólo hacía falta confianza ciega en Yahvé, Dios nacional.
1 Ay de la tierra del zumbido de alas detrás de los ríos de Cus, la que envía mensajeros por el mar en naves de juncos sobre las aguas 2 Id, veloces mensajeros, al pueblo de elevada talla y piel brillante, a la nación temible y lejana, 3 a la nación fuerte y pisoteadura, cuya tierra está surcada de ríos. Todos vosotros, los moradores del mundo, los habitantes de la tierra, cuando sobre el monte se alce la bandera, mirad; cuando oigáis sonar la trompeta, escuchad. 4Porque he aquí lo que ha dicho Yahvé: Yo miro tranquilo desde mi morada, como calienta sereno un sol brillante, como nube de rocío en el calor de la siega. 5Porque antes de la vendimia, cuando se ha terminado la floración y la flor se convierte en maduros racimos, cortará los sarmientos con la podadera, y aun quitará y arrancará las cepas; 6serán abandonados todos a los buitres de los montes y a las bestias del país; allí pasarán los buitres el verano, y las bestias del país el invierno. 7 En aquel tiempo traerán ofrendas a Yahvé de los ejércitos, del pueblo de alta talla y piel brillante, del pueblo temible lejano, de la nación fuerte y pisoteadora, cuya tierra está surcada de ríos, a la morada del nombre de Yahvé, al monte de Sión. La exclamación inicial es traducida también por
¡ayl como expresión de saludo o simpatía.
Tierra del zumbido de alas: de mosquitos, pues Etiopía era famosa por la infección de sus mosquitos, que pululaban en torno a los ríos. Algunos ven en la palabra hebrea empleada aquí,
silsal, una alusión a la mosca
tsetse 2.
Detrás de los ríos (
Sof_3:10): el Nilo con sus afluentes: Nilo Blanco, Nilo Azul y el Atbara. La expresión
detrás debe entenderse de modo general. Según la Biblia, Cus estaba al sur de Asuán, en la primera catarata del Nilo, el actual Sudán.
Mensajeros por el mar en naves de juncos: eran los tradicionales barcos de papiro que surcaban el Nilo 3. Por eso el
mar puede referirse al Nilo. De todos modos, el profeta sólo quiere decir que vienen de lejos, por vía marítima o fluvial. El profeta invita a volver a los embajadores:
id, veloces mensajeros, al pueblo de elevada talla y de piel brillante (v.1); la caracterización es perfecta al tratarse de una raza africana negroide, como los actuales sudaneses, con un color negro bruñido tirando a bronce 4. Isaías les comunica el mensaje que han de llevar a su pueblo, pero este mensaje interesa a todos los pueblos (
los moradores del mundo, ?.3). Cuando se levante la bandera y suene la trompeta, deben estar atentos para contemplar la gesta de Yahvé, que es lo que ha revelado al profeta (v.4): Dios contempla sereno desde su morada celeste esperando que maduren los acontecimientos de la historia, como el sol, que con sus rayos va madurando las cosechas, o como
nube de rocío, que acelera el proceso de maduración. Pero cuando llega el momento oportuno y los frutos están ya madurando (
cuando ha terminado la floración.),
interviene en la historia, dando un sesgo nuevo a los acontecimientos. Dios espera pacientemente que Asiría vaya colmando su misión y que vaya realizando el plan previsto, y cuando ésta cree llegar el momento de conseguir el fruto pleno de sus conquistas, la intervención inesperada de Yahvé frustrará totalmente sus planes (
quitará y arrancará las cepas, ?.6),
es decir, le infligirá una total derrota, y los cadáveres de sus guerreros quedarán en el campo expuestos a las aves de rapiña (v.6); y será tal la abundancia de cadáveres, que las aves de rapiña y alimañas tendrán comida para el verano y el invierno 5.
En el v.7 se dice que los etíopes, agradecidos, traerán presentes a Yahvé por haber destruido el ejército asirio, el enemigo común. Por razones de metrología, muchos críticos creen que este verso es una glosa posterior.