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es porque era un necio y no sabía nada; era para ti como un bruto animal." (Salmos 73, 22) © Sagrada Biblia (Nacar-Colunga, 1944)

BHSEk - Biblia Hebraica Stuttgartensia (Enhanced; KJV versification)

וַ‎(וְ)

Hebrew|wa|and

Part-of-speech: conjunction
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[f.ab.aa] [519]
[ו] [GES1991] [BDB2226] [HAL2241]

אֲנִי‎(אֲנִי)

Hebrew|ʔᵃnî-|i

Part-of-speech: personal pronoun
Gender: unknown
Number: singular
Person: first person
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H589] [a.eg.aa] [129]
[אני] [GES567] [BDB598] [HAL620]

בַ֭עַר‎(בַּעַר)

Hebrew|ˈvaʕar|stupid

Part-of-speech: adjective
Gender: masculine
Number: singular
Person: not applicable
State: absolute
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H1198] [b.cj.af] [264b]
[בער] [GES1096] [BDB1264] [HAL1269]

וְ‎(וְ)

Hebrew|wᵊ|and

Part-of-speech: conjunction
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[f.ab.aa] [519]
[ו] [GES1991] [BDB2226] [HAL2241]

לֹ֣א‎(לֹא)

Hebrew|lˈō|not

Part-of-speech: negative particle
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H3808] [l.ab.aa] [1064]
[לא] [GES3708] [BDB4137] [HAL4092]

אֵדָ֑ע‎(יָדַע)

Hebrew|ʔēḏˈāʕ|know

Part-of-speech: verb
Gender: unknown
Number: singular
Person: first person
State: not applicable
Verbal tense: imperfect
Verbal stem: qal


[H3045] [j.au.aa] [848]
[ידע] [GES2952] [BDB3292] [HAL3272]

בְּ֝הֵמֹ֗ות‎(בְּהֵמָה)

Hebrew|ˈbᵊhēmˈôṯ|cattle

Part-of-speech: noun
Gender: feminine
Number: plural
Person: not applicable
State: absolute
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H929] [b.al.ab] [208a]
[בהמה] [GES911] [BDB988] [HAL1003]

הָיִ֥יתִי‎(הָיָה)

Hebrew|hāyˌîṯî|be

Part-of-speech: verb
Gender: unknown
Number: singular
Person: first person
State: not applicable
Verbal tense: perfect
Verbal stem: qal


[H1961] [e.bf.aa] [491]
[היה] [GES1888] [BDB2113] [HAL2109]

עִמָּֽךְ‎(עִם)

Hebrew|ʕimmˈāḵ|with

Part-of-speech: preposition
Gender: not applicable
Number: not applicable
Person: not applicable
State: not applicable
Verbal tense: not applicable
Verbal stem: not applicable


[H5973] [p.dj.aa] [1640b]
[עם] [GES5903] [BDB6525] [HAL6448]

Biblia Comentada, Profesores de Salamanca (BAC, 1965)



Salmo 73 (Vg 72): El Enigma de la Felicidad de los Malvados.
E n este salmo se plantea el gran escándalo para las almas justas del A.T.: ¿Por qué prosperan los impíos en esta vida? ¿Cómo es que Dios no les da el merecido según sus obras? El salmista aborda el problema y lo resuelve a las luces del A.T., cuando aún no había esperanza de retribución en ultratumba: el triunfo de los impíos es efímero, pues cuando más eufóricos están les llega leí hora del castigo fulminante divino. El poema, de tipo sapiencial, se divide en cinco secciones netas: a) prosperidad de los malvados (1-5); b) sus malas acciones son un escándalo para los justos (6-11); c) los sufrimientos del justo (12-17); d) la suerte desgraciada de finiüva de los perversos (18-22); e) la suerte del justo: unión con Dios (23-28).

El problema planteado en este salmo es semejante al del libro de Job y al de los salmos 38 y 49. El salmista muestra su inquietud por la anomalía de la prosperidad de los impíos; es una piedra de escándalo que está a punto de hacer debilitar su fe. Por razones estilísticas, los críticos comúnmente suponen que este poema sapiencial es de época tardía: su lenguaje es poco clásico y abundan los arameísmos.

La escandalosa prosperidad de los malvados (1-5).
1 Salmo de Asaf. Ciertamente Dios es bueno para el hombre recto 2, para los limpios de corazón! 2 Estaban a punto de deslizarse mis pies, por nada resbalaban mis pasos, 3 pues tuve envidia de los insensatos viendo la paz de los impíos. 4 Pues no hay para ellos tormentos; están sanos y rollizos. 5No tienen parte en las humanas aflicciones y no son atribulados como los otros hombres.

Antes de iniciar la descripción de la prosperidad del pecador, el salmista da la clave final de solución al problema, declarando que Dios es bueno para el que le es fiel, que será la tesis de todo el salmo. A pesar de las apariencias que va a exponer, Dios es bondadoso con los justos. Sólo exige pureza de corazón y rectitud íntima para otorgar su favor al hombre 3.
Con tocia sinceridad, el poeta declara que ha estado a punto de perder su fe en la Providencia al ser testigo de la prosperidad de los malvados, pues ha llegado hasta tener envidia de su situación prevalente en la sociedad. Su paz y bienestar contrastan con la inquietud del justo4. Gozan de buena salud y parecen libres de las tribulaciones que afectan al común de los hombres (v.5).

Desvergonzada insolencia de los impíos (6-11).
6 Por eso la soberbia los ciñe como collar, y los cubre la violencia como vestido. 7 Sus ojos se les saltan de puro gordos 5 y dejan traslucir los antojos del corazón. 8 Motejan y hablan malignamente, y altaneramente declaran sus propósitos perversos. Q Ponen su boca en el cielo, y su lengua se agita por la tierra. 10 Por eso el pueblo se vuelve tras ellos, y e sorben ? boca, llena esas aguas, 11Y dicen: ¿Lo sabe acaso Dios, lo conoce el Altísimo?

Consecuencia de esa prosperidad desbordante es la insolencia y orgullo que los caracteriza ante la sociedad. Se creen con derecho, en su prepotencia, para violentar y oprimir a los demás6. Con una bella metáfora, el poeta describe la soberbia de los impíos, que se destaca en ellos como un collar brillante o como un vestido llamativo. En su mirada altiva y saltona se reflejan las demasías y antojos injustos de su corazón (v.7). Lejos de ocultar sus perversos pensamientos, los declaran con altanería para herir a los demás. Con toda insolencia se atreven a hablar contra Dios ponen su boca en el cielo y contra los hombres en la tierra. Como consecuencia, la masa del pueblo los sigue y acepta sus juicios superficiales y blasfemos (v.10). La prosperidad de los malvados atrae a las gentes irreflexivas, y aceptan sus modos de obrar prescindiendo de la Ley divina. Para ellos, Dios no se preocupa de las cosas que aquí pasan, y, en consecuencia, no tiene providencia de los seres humanos (v.11). Es inútil, pues, seguir el camino de la virtud, ya que en esta vida triunfan los oportunistas sin escrúpulos de conciencia.

La inquietud del salmista (12-17).
12 Helos ahí: son impíos, pero tranquilos constantemente aumentan la fortuna. 13 En vano, pues, he conservado limpio mi corazón y he lavado mis manos en la inocencia; 14 y fui flagelado de continuo y castigado cada mañana. 15 Pero si dijere: Hablaré como ellos, renegaría de la generación de tus hijos. l6 Púseme a pensar para entender esto, pues era cosa ardua a mis ojos; 17 hasta que penetré en el misterio de Dios 7 y puse atención a sus postrimerías.

El gran escándalo: a pesar de ser impíos, prosperan y viven tranquilos, acumulando riquezas sin cuento8. Esta realidad le turbó al principio, pues cree que su vida de virtud no sólo no le reporta ventaja alguna, sino que le trae calamidades cada mañana. El ser fiel a Dios y a su Ley supone gran sacrificio, pues es exponerse a la pobreza y a la incomprensión 9. Aparentemente, la piedad no le ha traído sino incomprensiones sin cuento. Esta es la realidad de cada día.
Pero la reacción del salmista es mucho más profunda: si se dejara llevar de las apariencias, aceptando sus juicios superficiales apartándose de Dios , sería traidor a los de su comunidad de yahvistas fervorosos 10. El pueblo israelita, vinculado a Yahvé por un pacto solemne, es llamado hijo de Dios. 11 El salmista se siente íntimamente relacionado con los destinos de la familia de Dios, y por eso, reflexionando más sobre el problema, creyó llegar a la solución verdadera del enigma penetrando en el misterio de Dios: la clave del problema, está en la consideración de las postrimerías del pecador, el fin siniestro que le espera (v.17). Su prosperidad es momentánea, pues a la hora de la verdad se encontrará con la justicia divina.

La inestable prosperidad de los impíos (18-22).
18 Ciertamente los pones tú en resbaladero y los precipitas en la ruina. 19 ¡Cómo en un punto son asolados! Acaban, y son consumidos por el espanto. 20 Son como sueño del que se despierta; y tú, Señor, cuando despertares, despreciarás su apariencia. 21 Cuando se exacerbaba mi corazón y sentía un aguijón en mis riñones, 22 es porque era un necio y no sabía nada; era para ti como un bruto animal.

La prosperidad cíe los malvados, en realidad, es un resbaladero, un camino engañoso que los lleva a la ruina total, a la muerte afrentosa. Es la vía más expedita para la ruina, aunque aparentemente parece lo contrario. Cuando están más desprevenidos, les sobreviene la muerte, y entonces toda su prosperidad les resulta como un sueño, del que no queda más que la apariencia: un fantasma sin consistencia.
Esta es la gran realidad que se impone después de la madura reflexión. Por eso, los sentimientos de envidia que el salmista tenía por la prosperidad de los malvados resultaba fruto de la irreflexión. Las impaciencias e inquietudes 12 antes sentidas eran fruto de un espíritu poco inteligente, pues reaccionaba como un bruto animal (v.22).

Confesión de fidelidad a Dios (23-28).
23 Pero yo estaré siempre a tu lado, pues tú me has tomado de la diestra. 24 Me gobiernas con tu consejo y al fin me acogerás en gloria. 25 ¿A quién tengo yo en los cielos? Fuera de ti, en nada me complazco sobre la tierra. 26 Desfallece mi carne y mi corazón; la roca de mi corazón y mi porción es Dios por siempre. 27 Porque los que se alejan de ti perecerán; arruinas a cuantos te son infieles. 28 Pero mi bien es estar apegado a Dios, tener en el Señor Yahvé refugio para poder anunciar todas tus obras (en las puertas de la hija de Sión) 13.

Frente a toda veleidad posible por la prosperidad momentánea del pecador, el salmista declara mantenerse fiel siempre a su Dios. Esta fidelidad probada al Señor tendrá por resultado que al fin será acogido en gloriat es decir, se reconocerá su virtud y se la premiará, siendo así glorificado ante la comunidad social. No encontramos aquí declarada la esperanza de la glorificación en la otra vida como nosotros la entendemos en la perspectiva cristiana; ésta es, en realidad, la clave para resolver el enigma de los sufrimientos del justo en esta vida, pero no la encontramos hasta el libro de la Sabiduría 14. Si el salmista hubiera llegado a estas claridades, de seguro que hubiera sido más explícito en el planteamiento del problema sobre la inestabilidad de la prosperidad de los pecadores. El pensamiento central del salmo versa sobre el hecho de que esta prosperidad es momentánea, pues Dios se la quitará cuando menos lo piensen. No va más lejos la perspectiva del hagiógrafo. La palabra gloria tiene aquí, como en otros lugares, el sentido de honor 15, y no el de glorificación espiritual después de la muerte en el sentido de la teología cristiana.
El salmista declara su adhesión inquebrantable al que está en los cielos, y fuera de El no encuentra nada digno de su amor, porque Dios es el centro de su corazón. Fuera de El no hay seguridad; por eso los impíos perecerán inexorablemente. Bajo su protección espera el salmista vivir tranquilamente para poder anunciar las obras maravillosas de Dios a sus contemporáneos.

1 Cf. 1Cr_15:16-19; 1Cr_16:4.5.7.37:2Cr_41:43; 2Cr_5:12. 2 El TM lee: para Israel. Así la Bib. de ]ér. No obstante, no pocos autores Cales, Podechard, Herkenne corrigen para el recto, leyendo layyáshar El en vez de leyi$ráel. 3 Cf. Sal_24:3s. 4 Cf. Job_21:7s; Sal_37:1; Pro_3:31; Pro_23:17; Pro_24:1.19. 5 La Bib. de Jet,: La malicia les sale de la grosura*, Así los LXX y Podechard. 6 Cf. Sal_10:2-4; Pro_1:9; Sal_109:17. 7 Lit. el TM: santuarios de Dios. No pocos autores lo entienden del templo de Jerusa-lén, en cuyos atrios habría el salmista entendido el enigma cíe la prosperidad de lúa impíos, 8 Cf. Job_3:26; Job_3:12.7 9 Cf. Sal_39:9-10; Job_7:18. 10 cf. Deu_14:1; Os 2,t. 11 Cf. Exo_4:32; Gal 3:Gal_2:6. 12 Los ríñones son considerados como centro de emociones (cf. Sal_7:8). 13 Falta en el TM, pero está en los LXX. 14 Sab 3:1s. 15 Cf. Sal_62:6; Sal_84:10; Sal_112:8; Sal_149:4.

Nuevo Comentario Bíblico Siglo XXI (Editorial Mundo Hispano, 2019)



Salmo 73. No en Vano, en el señor

Creemos en Dios el Padre Todopoderoso, pero con frecuencia nuestra experiencia y la de otros hacen dudar de que sea todopoderoso, (porque otros poderes parecen estar al mando); de su paternidad (porque la vida en este mundo contradice la idea de un Dios amante) y, para muchos, de su propia existencia: ¿Cómo puede ser que Dios exista cuando ... ? El libro de los Sal. se caracteriza por hacer frente a la vida, no por esconderse de ella. El Libro 1 empezó con una afirmación en la creencia (1:3) en la prosperidad del justo; el Libro 2 empezó (42:3, 5, 9 y 10) documentando que la vida no ofrece una correlación directa entre virtud y recompensa, ni es la experiencia de los justos uniformemente cómoda; el Libro 3 comienza con una pregunta franca: ¿Vale la pena ser recto o es una pérdida de tiempo (13)? Dado que los demás tienen todas las alegrías (4, 5) y nosotros sólo recibimos los puntapiés (14), ¿por qué no darnos por vencidos y unirnos a la feliz mayoría (10)? Asaf nos ha legado un Salmo que se destaca por su realismo sobre cómo es la vida, práctico en sus recomendaciones para encarar problemas serios, e inspirador al ofrecer un concepto que propone una alternativa. En efecto, Asaf contesta a su propio desesperarse ciertamente en vano (13) con la gran afirmación de Pablo: vuestro arduo trabajo en el Señor no es en vano (1 Cor. 15:58). El Salmo es un tratamiento integral de este tema.

A1 (v. 1) Verdad declarada: Dios es bueno

B1 (vv. 2– 14) ¡Pobre de mí!

C (vv. 15– 20) Nuevas perspectivas

B2 (vv. 21– 26) ¡Rico de mí!

A2 (vv. 27, 28) Verdad afirmada: ¡sí es bueno!

1– 14 La verdad en conflicto. Los versículos que comienzan con ciertamente (1, 13) encierran en paréntesis la primera sección del Salmo y resumen sus dos partes. La verdad (1) está en conflicto con la experiencia (2– 14). La verdad es la bondad de Dios hacia su pueblo; el conflicto surge ante su sufrimiento evidente (14) y la prosperidad de los impíos (3– 5). La bondad de Dios que se cuestiona no es su benevolencia en general (145:9), sino sus bendiciones de bondades prometidas a su pueblo, condicionadas a su fe y reverencia (34:8, 9), oración (86:5, 6; 107:6– 9) y, aquí (1), a la pureza del corazón. Pero la diligencia en lo moral, el esfuerzo por mantener la pureza interior (13a) y exterior (13b) sólo han dado como resultado plagas y castigos (14). Con cierta razón, esto generó envidia cuando los arrogantes (3, personas que viven sin pensar o preocuparse) y los impíos gozan de prosperidad, bienestar. Los veía morir sin sufrir (4) o por enfermedad mortal. Gozan de vidas singularmente libres de sufrimientos (5). El orgullo descubre su carácter y la explotación agresiva (violencia) de los demás, su conducta (6). Evidencian total autoindulgencia y no se privan de nada que se les antoja (7). Sus lenguas (siempre, en la Biblia, la norma para medir el carácter) revelan su engreimiento: su derecho innato de olvidar los valores morales (8a, maldad), de ser jefes (8b), de impartir órdenes a todas las cosas en el cielo y en la tierra (9). Atraen adherentes que con buena voluntad se suman a ellos en su abundancia (10), aun si involucra adoptar también su teología de un Dios irrelevante (11). Aun con lo devastadora que esta crítica de los impíos es, el análisis muestra que viven tranquilos y aumentan sus riquezas (12).

15– 20 Nuevas perspectivas. En esta perplejidad sobre la desigualdad moral de la vida se deducen tres principios de inmensa importancia. (i) En cada situación practiquemos lealtad al pueblo de Dios y cuidemos su bienestar (15). (ii) Estemos en el lugar de adoración. Como Asaf no podía compartir su problema sin alterar sin razón a los hijos (15) de Dios, tenía que luchar solo pero el problema fue demasiado para él (16). Entonces, parece, se dio cuenta de que no tenía necesidad de estar solo y se dedicó a la adoración (17a): el santuario, el lugar donde el Señor prometiera morar y donde siempre podía ser encontrado. (iii) Consideremos la eternidad. El destino final de ellos es inseguro (17, 18); se encontrarán con que han sido víctimas de engaño total (decepción, 18), no sólo siendo consumidos, sino aterrorizados (19) y, desastre de desastres, sin ninguna realidad en la estimación de Dios (20).

21– 28 La verdad triunfante. Las dos secciones que concluyen el Salmo son de diferentes extensiones y están claramente entre paréntesis: uno que se sabía ignorante y no entendía; era como un animal delante de ti (21, 22) descubre que la cercanía de Dios constituye el bien teniendo al Señor como refugio (27, 28). En toda su aflicción todavía era un hombre rico. Tenía a Dios y con él un presente (23), futuro (24a) y una eternidad (24b) seguros, una riqueza celestial y terrenal (25), una fuerza y una herencia más allá de la duración de la vida terrenal (26), una bondad y un refugio que no está a disposición de los que mueren bajo la ira divina (27, 28) y, en contraste con el silencio del v. 15, algo de qué hablar (28). 21, 22 Paráfrasis: Cuando mis pensamientos se agriaron y emocionalmente estaba hecho pedazos, pues, por mi parte estaba reaccionando como si espiritualmente no había sido enseñado y en tinieblas; ¡como un mero animal ante ti!(cf. 49:12, 20). 23, 24 Una riqueza cuádruple: paz con Dios (Yo ... contigo); el asimiento de Dios (me tomaste de la mano derecha); el plan de Dios para el futuro (guiará); y después ... gloria. La secuencia del pensamiento en los vv. 23, 24a demanda que 24b se extienda al después, más allá de esta vida. Pero también este después es un contraste intencional con el destino final, lit. el después de ellos (17). Lleva a los vv. 25, 26 que enfatizan los cielos y la porción que todavía le pertenece aún cuando exterior (cuerpo) e interiormente (corazón) esta vida lit. llega a su fin. 26 Porción. El cumplimiento para Asaf el levita (1 Crón. 24:30– 25:1) de Jos. 13:14, 33; 18:7.

King James Version (KJVO) (1611)



Psalm LXXIII.

1 The Prophet preuailing in a Temptation, 2 sheweth the occasion thereof, the prosperitie of the wicked: 13 The wound giuen thereby, diffidence. 15 The victory ouer it, knowledge of Gods purpose, in destroying of the wicked and sustaining the righteous.
A Psalme [ Or, a Psalme for Asaph.] of Asaph.
1 [ Or, yet.] Truely God is good to Israel, euen to such as are [ Hebrew: cleane of heart.] of a cleane heart.
2 But as for mee, my feete were almost gone: my steps had well-nigh slipt.
3 [ Job_21:7; Psa_37:1; Jer_12:1.] For I was enuious at the foolish, when I sawe the prosperity of the wicked.
4 For there are no bands in their death: but their strength is [ Hebrew: fat.] firme.
5 They are not [ Hebrew: in the trouble of other men.] in trouble as other men: neither are they plagued [ Hebrew: with.] like other men.
6 Therefore pride compasseth them about as a chaine: violence couereth them as a garment.
7 Their eies stand out with fatnes: [ Hebrew: they passe the thoughts of the heart.] they haue more then heart could wish.
8 They are corrupt, and speake wickedly concerning oppression: they speake loftily.
9 They set their mouth against the heauens; and their tongue walketh through the earth.

[The description of the wicked.]

10 Therefore his people returne hither: and waters of a full cup are wrung out to them.
11 And they say, How doth God know? and is there knowledge in the most High?
12 Behold, these are the vngodly: who prosper in the world, they increase in riches.
13 Uerily I haue cleansed my heart in vaine, and washed my hands in innocencie.
14 For all the day long haue I bene plagued, and [ Hebrew: my chastisement was.] chastened euery morning.
15 If I say, I will speake thus: behold, I should offend against the generation of thy children.
16 When I thought to know this, [ Hebrew: it was labour in mine eies.] it was too painfull for me,
17 Untill I went into the Sanctuarie of God; then vnderstood I their end.
18 Surely thou didst set them in slippery places: thou castedst them downe into destruction.
19 How are they brought into desolation as in a moment? they are vtterly consumed with terrours.
20 As a dreame when one awaketh; so, O Lord, when thou awakest thou shalt despise their image.
21 Thus my heart was greeued, and I was pricked in my reines.
22 So foolish was I, [ Hebrew: I knew not.] and ignorant: I was as a beast [ Hebrew: with thee.] before thee.
23 Neuerthelesse I am continually with thee: thou hast holden me by my right hand.
24 Thou shalt guide me with thy counsell; and afterward receiue me to glory.
25 Whom haue I in heauen but thee? and there is none vpon earth that I desire besides thee.
26 My flesh and my heart faileth: but God is the [ Hebrew: rocke.] strength of my heart, and my portion for euer.
27 For loe, they that are farre from thee, shall perish: thou hast destroyed all them that goe a whoring from thee.
28 But it is good for me, to drawe neere to God: I haue put my trust in the Lord God, that I may declare all thy workes.

La Biblia de Nuestro Pueblo (Liturgical Press, 2006),

Reflexión sapiencial sobre la retribución de los buenos y de los malos. De tejas hacia abajo la pregunta es ésta: ¿Merece la pena persistir en la inocencia sin obtener ninguna ganancia? La prosperidad de los malvados incuba la envidia en los inocentes y pone en crisis su comportamiento, pese a que sabe que Dios es bueno para con los inocentes. (1-3). El retrato del malvado es magnífico: sin penalidades, sin las fatigas del resto de los mortales, orgullosos y violentos, presuntuosos y opresores, rebosantes de felicidad, se burlan de los hombres e incluso de Dios, arrastran tras de sí a otros. Con la última pincelada queda dicho todo: son despreocupados y acumulan riquezas (4-12). ¿Para qué obstinarse en ser bueno? Surge un dilema: si se comporta como los malvados, el inocente traiciona a sus hermanos; si persiste en su conducta, ¿no será un estúpido? (13-16). El poeta se eleva sobre sí mismo y enfoca el problema desde otra perspectiva: desde el santuario de Dios, desde la cercanía a Dios (17). Tras una magnífica fachada, los malvados son pura apariencia transitoria. El atractivo de antaño se convierte en horror; el terror los invade al experimentar el desprecio divino. (18-20). En diálogo con Dios se descubre la necedad de las pasadas cavilaciones. Existe un bien supremo: estar junto a Dios, ser tomados de la mano, conducidos y aun «arrebatados» por Dios. El salmista sale de la crisis intelectual y existencial afianzado en su fe (21-28). Pablo de Tarso nos transmitió su experiencia personal hablando de los opuestos: pérdida/ganancia (cfr. Flp_3:7-9). En una sociedad de consumo como la nuestra un salmo de este tipo nos viene muy bien. Quien ore con él puede preguntarse: ¿dónde está mi felicidad?

Dios Habla Hoy (Sociedades Bíblicas Unidas, 1996)



Dios Habla Hoy 1996 Notes:



[1] 73.10 Por eso... falta en ellos: sentido probable de un texto difícil; otra posible traducción: Por eso mi pueblo se vuelve hacia ellos y bebe sus aguas a raudales.

[2] 73.17 Santuario de Dios: Se trata, probablemente, de una revelación que el salmista recibió en el templo (cf. Is 6.1-13). Otros, en cambio, traducen: hasta que penetré en los secretos de Dios.

Libro del Pueblo de Dios (San Pablo, 1990)



1. "Salmo de Asaf": ver nota 50. 1.

11. Ver 10. 4, 11; 14. 1; 36. 2; 53. 2; 94. 7.

13. "Lavé mis manos": ver nota 26. 2-8.

17. Algunos autores piensan que el Salmo no se refiere al "Santuario", sino a los secretos divinos, revelados al salmista. Sin embargo, esta interpretación parece menos probable.

Sagrada Biblia (Conferencia Episcopal Española, 2011)

*73 Reflexión sapiencial. La prosperidad del malvado, despreocupado y cada día más rico, plantea un problema intelectual y pone en crisis la actitud existencial del inocente, que se resolverá en contacto con Dios, en el seno de la oración. .

Nueva Biblia de Jerusalén (1998) - referencias, notas e introducciones a los libros


NOTAS

73:22 Lit. «Behemot», el prototipo de la torpeza, ver Job_40:15+.

Nueva Biblia de Jerusalén (Desclée, 1998)


NOTAS

73:22 Lit. «Behemot», el prototipo de la torpeza, ver Job_40:15+.

Torres Amat (1825)



SALMO 73 (72)

[7] Se puede traducir De la abundancia y regalo nació su iniquidad.

[9] Han blasfemado de Dios y de lo divino y su lengua no ha perdonado a viviente alguno sobre la tierra.

Jünemann (1992)


22 h. Sin embargo.