42:18 No es Dios quien, sordo y ciego ante la suerte de Israel, atrae sobre éste la desgracia, sino que el sordo y ciego es Israel: no entiende lo que le ocurre ni por qué le ocurre. Este oráculo es paralelo a las directrices dadas a Isaías en su vocación, ver Isa_6:10+. -Los vv. Isa_42:21 y Isa_42:24 b parecen adiciones.