Habacuc  . 1,12
“
Segunda queja del profeta: Las vejaciones del opresor.
¿No eres tú desde antiguo, Yahvé,
mi Dios, mi santo? ¡Tú no mueres!
¡Para juzgar lo pusiste, Yahvé,
oh Roca, fiscal lo nombraste!
”
Segunda queja del profeta: Las vejaciones del opresor.
¿No eres tú desde antiguo, Yahvé,
mi Dios, mi santo? ¡Tú no mueres!
¡Para juzgar lo pusiste, Yahvé,
oh Roca, fiscal lo nombraste!
”