“
pero el que beba del agua que yo le dé, no tendrá sed jamás, sino que el agua que yo le dé se convertirá en él en fuente de agua que brota para vida eterna.» ”
4:14 Alusión a Pro_18:4 (LXX): «Un agua profunda es la palabra en el corazón del hombre, un río que brota, una fuente de vida», ver Isa_58:11. El agua que da Cristo es, pues, su palabra, su enseñanza llena de sabiduría divina, Sir_15:3; Sir_24:21; Isa_55:1-3. El que guarda esta palabra no verá la muerte jamás, Jua_8:51, vivirá para siempre, Jua_12:50; Deu_30:15-20; Pro_13:14. En Jua_7:37-39, el agua simboliza al Espíritu.