1:7 (b) El término traducido por esta expresión está tomado del vocabulario de los estoicos. Subraya enérgicamente el papel del espíritu del Señor. El único paralelo bíblico (remoto) podría ser Gén_1:2. Pero el término, en un plano distinto, designa el poder eficaz de un Dios trascendente.
1:7 (c) El Espíritu entrelaza tan íntimamente a los seres que percibe inmediatamente cada palabra hablada. Mediante una acomodación, la liturgia de Pentecostés aplica este texto al «don de lenguas», Hch_2:2-4.