II Macabeos 9,2
“
En efecto, habiendo entrado en la ciudad llamada Persépolis, pretendió saquear el santuario y oprimir la ciudad; ante ello, la muchedumbre, sublevándose, acudió a las armas y le puso en fuga; y Antíoco, ahuyentado por los naturales del país, hubo de emprender una vergonzosa retirada. ”