INTRODUCCIÓN


1. Trasfondo histórico-cultural


Todo el libro gira en torno al hecho histórico de la destrucción de Nínive, capital del imperio asirio, que tuvo lugar en el año 612 a. C. a manos de los medo-caldeos. Se podría interpretar la mención de Nínive como una metáfora de otro imperio (por ejemplo, el seléucida); pero no parece probable este empleo dado que el texto recoge otras menciones tales como la caída de Tebas en Nah 3:8-10.


2. Aspectos literarios


Las únicas noticias que poseemos sobre el autor son las facilitadas por el propio texto: su nombre era Nahum y procedía de Elcós, lugar no mencionado en ningún otro lugar del AT.


Para intentar una datación del libro debería resolverse previamente una cuestión: ¿se contempla la destrucción de Nínive como un acontecimiento ya pasado o se anuncia su consumación futura? Asumiendo como más probable que se trata de un acontecimiento futuro y teniendo en cuenta que la mencionada caída de Tebas ocurrió en 668-667 a. C. (según otros en 663-662), la composición del libro se situaría entre estas fechas y el 612 a. C. Algunos precisan más la datación y la sitúan en el período 668-654 a. C., coincidente con el reinado de Manasés, a cuya política proasiria se opondría Nahum. El autor es un poeta de gran altura, capaz de descripciones muy plásticas de estilo impresionista, que construye mediante el empleo frecuente de la yuxtaposición. El fragmento Nah 1:2-8 parece ser un poema alfabético incompleto, aunque podría no ser así teniendo en cuenta otros casos como el Sal 9:1-20.


3. Contenido y dimensión religiosa


El libro de Nahum es ante todo un panegírico del poder divino que se manifiesta tanto en la creación como en la historia. La descripción dramatizada de la ruina de Nínive es un ejemplo emblemático de cómo actúa este poder divino.


Cualquier lector avisado advierte en seguida la diferencia con el libro de Jonás donde Nínive recibe un trato misericordioso. Pero en la perspectiva de Jonás, Nínive es perdonada por su arrepentimiento. Cuando no se contempla tal presupuesto, como es el caso de Nahum, Dios no podía menos de hacer justicia a los oprimidos destruyendo a los opresores.


El NT se hace eco del tema de la ira divina (Nah 1:6) solamente en Apo 6:17; en cambio, acentúa las referencias al mensajero de la paz (Nah 1:15) en diversos pasajes (ver Hch 10:36; Rom 10:15; Efe 6:15, además de los evangelios).