ECLESIASTÉS

El término qohelet (ekklesiastes en griego) alude al que reúne o convoca la asamblea, y su identificación -como autor- con Salomón es, como sucede en Prov y Cant, un caso de ficción literaria. Del verdadero autor nada se sabe; la composición del libro suele situarse en la segunda mitad del siglo iii a.C. Como Job, su protagonista desconfía claramente -basándose en la propia experiencia- de la teoría tradicional de la retribución divina, según la cual, Dios premia a los buenos y castiga a los malos. A pesar de sus reflexiones, no logra alcanzar una respuesta satisfactoria a sus interrogantes. Si la misma suerte aguarda al sabio y al necio, ¿qué ventaja aporta entonces la sabiduría? Si nada hay nuevo bajo el sol, ¿a qué buscar? La bancarrota del esfuerzo sapiencial deja paso a otra afirmación radical: la conveniencia de disfrutar de los placeres, que Qohélet entiende, sin embargo, como don divino.