Riched20 5.50.30.2002;
Galatas
Introducción
La Importancia de la Carta
La epístola a los Gál. trata directamente la pregunta teológica más básica que enfrentaba la primera generación cristiana: ¿Cómo afecta el evangelio de Jesucristo a la división entre judíos y gentiles? Los primeros cristianos eran judíos, y al comienzo se presumía que el carácter especial de su nación, y por consiguiente las ceremonias religiosas relacionadas con ella, continuarían. Cuando gran nú mero de gentiles comenzaron a recibir el evangelio, estas suposiciones se vieron cuestionadas, y fue necesario un prolongado período de reflexión, ajustes y luchas para comprender los propósitos de Dios para gentiles y judíos.
Ningún documento resulta más importante para comprender estas luchas que la carta de Pablo a las iglesias de Galacia. Los cristianos de esa área se convirtieron en objeto de un intenso celo misionero por parte de ciertos "judaizantes" que estaban convencidos de que el evangelio no dejaba de lado las ceremonias judías, y que, por lo tanto, los cristianos gentiles debían convertirse en judíos para poder recibir la promesa de Dios dada a Abraham. (Originalmente, la palabra gr. para "judaizar" se utilizó para describir la adopción de las formas judías por parte de los gentiles que se convertían al judaísmo.) Movidos por los argumentos de los judaizantes, estos gálatas, que originalmente habían sido evangelizados por Pablo, comenzaron a observar las ceremonias judías. El Apóstol comprendió que este cambio en las cosas socavaba la misma esencia del evangelio de la gracia. La carta a los Gál. revela las más profundas convicciones de Pablo.
A medida que desarrolla sus argumentos en respuesta a las enseñanzas de los judaizantes, el apóstol toca varios temas fundamentales, como la naturaleza de la autoridad apostólica, la justificación por la fe, la promesa a Abraham, la calidad de hijos, el papel de la ley de Moisés, la libertad, la obra del Espíritu Santo y la santificación. No es de extrañarse que esta carta haya desempeñado un papel importantísimo a través de toda la historia de la iglesia, más notablemente en el tiempo de la Reforma en el siglo XVI, cuando Martín Lutero se apoyó en ella para atacar la doctrina católica romana de la salvación. Aunque el punto exacto de la controversia entre Pablo y sus opositores (¿deben circuncidarse los gentiles?) puede parecer una preocupación lejana para la mayoría de los cristianos después del siglo I, el tema central es nada me nos que la base de nuestra relación con Dios. La respuesta dada por los judaizantes, a primera vista, llamaba la atención hacia las ceremonias judías, pero su compromiso más profundo (la dependencia de la "carne" en vez del Espíritu) se puede expresar en muchas otras maneras.
Algunos eruditos modernos sostienen que este así llamado enfoque "protestante" de Gál. no es válido. Sin embargo, aunque Martín Lutero y otros reformadores posiblemente hayan perdido algunos ma tices, no se equivocaron al ver en esta carta la respuesta de Dios a las preocupaciones de esa época. Aparte de toda otra enseñanza que contenga Gál., no hay duda de que nos dice en un lenguaje claro y vigoroso que nuestra posición correcta ante Dios sólo puede ser un acto de gracia recibido por medio de la fe en Cristo. Ningún ritual de la iglesia y ningún esfuerzo humano puede determinar nuestra justificación. Por el contrario, "el justo vivirá por la fe" (3:11).


Marco Historico
Con respecto a ciertos temas históricos relativos a Gál., hay pocas dudas. Muy pocos eruditos cuestionan seriamente, p. ej. que Pablo sea su autor. Nuevamente, el texto deja bien en claro que algunas personas estaban creando una sedición espiritual en la comunidad gálata, predicando un falso evangelio que presionaba a los creyentes gentiles a observar ceremonias judías, particularmente la circun cisión (1:7– 9; 5:2, 3, 7– 12; 6:12, 13). Por otra parte, sí existe un considerable debate sobre la fecha, los destinatarios y la ocasión precisa de la redacción de esta carta importante.
En la actualidad muchos eruditos creen que las destinatarias de esta carta fueron las iglesias fundadas por Pablo y Bernabé en Iconio, Listra y Derbe (Hech. 14:1– 23). Estaban ubicadas en la parte sur de la provincia romana de Galacia, dentro de Asia Menor (lo que hoy es Turquía). El nombre de esta provincia proviene de una región ubicada al norte, donde se había establecido la raza de los gálatas (originalmente provenientes de Galia), y una opinión minoritaria sostiene que las iglesias en cuestión estaban ubicadas en esa área (opinión que afecta a la asignación de fecha a la carta). Se apela a Hech. 16:6 para apoyar el punto de vista de que Pablo fundó algunas iglesias allí, pero este texto es, cuando menos, ambiguo, y las otras evidencias no son firmes.
Un asunto más complicado, aunque relacionado con éste, es el de la fecha en que fue escrita la carta. El centro del debate es si Pablo escribió Gál. antes o después del llamado "concilio apostólico" en Jerusalén. Este acontecimiento, registrado en Hech. 15, es fechado por la mayoría de los eruditos en el año 49 d. de J.C. (de seguro, no antes del año 48). Pablo aparentemente se refiere a este concilio en Gál. 2:1– 10, pero muchos han argumentado que su descripción se contradice con la narración de Hech., especialmente en cuanto no menciona el decreto del que habla Hech. 15:22– 29.
Algunos estudiosos evitan este problema argumentando que Gál. fue escrita antes del concilio. (Este argumento presume que la carta fue escrita a las iglesias ubicadas en el sur de la provincia. El punto de vista de que las iglesias en cuestión estaban ubicadas en el norte contradice esta fecha, ya que Pablo no evangelizó la región del norte sino hasta después de realizado el concilio.) Según la posición que apoya esta fecha temprana, Gál. 2 no entra en conflicto con Hech., simplemente porque en el momento de escribir esta carta el concilio aún no se había realizado. Los comentarios de Pablo, por lo tanto, deben referirse a otra reunión (po siblemente la que se describe en Hech. 11:29, 30). Para otros estudiosos, esta solución parece demasiado fácil, especialmente en vista de las grandes similitudes entre Hech. 15 y Gál. 2. Es posible argumentar que ambos pasajes se refieren al mismo acontecimiento, y que las diferencias pueden explicarse reconociendo las muy distintas perspectivas de los dos autores. Según este punto de vista, Gál. tiene que haber sido escrita después del 49 d. de J.C., y la fecha preferida es a mediados de la década del 50, mientras Pablo estaba en Efeso, durante su tercer viaje misionero.
La controversia sobre la fecha de Gál. no es meramente un juego de eruditos. Ciertas sutilezas sobre el significado de la carta sin mencionar cuestiones mayores relativas a la historia de la iglesia primitiva se ven afectadas por el punto de vista que uno pueda tener de su relación con el concilio de Jerusalén. Este comentario considera que Gál. fue escrita a mediados de la década del 50. No obstante, ya que no es posible lograr una certe za absoluta con respecto a este asunto, sería incorrecto interpretar la carta en una forma que dependa en manera excesiva de la fecha en que fue escrita. En especial, debe hacerse un esfuerzo por no dar explicaciones clave que podrían ser invalidadas por la adopción de otra fecha de escritura. Afortunadamente, el énfasis principal del argumento de Pablo es lo suficientemente claro y no gira alrededor de nuestra capacidad para determinar con precisión la fecha de escritura.
Proposito y Estructura
¿Cuál es, entonces, el argumento de Pablo? El Apóstol es muy explícito cuando declara que se vio motivado a escribir la carta porque los gálatas estaban en camino de desertar del evangelio (1:6, 7). En efecto, habían vuelto a prácticas ritualistas con reminiscencias de su anterior experiencia pagana (4:9, 10).
Dado que las personas que estaban causando estos problemas en Galacia aparentemente habían socavado la autoridad de Pablo, el Apóstol dedica la primera sección principal de la carta a defender el origen divino de su evangelio (caps. 1– 2; ver especialmente 1:1, 11, 12; 2:6– 9). En los dos capítulos siguientes, apelando al AT mismo, él demuestra que la promesa de Dios a Abraham se recibe, no por las obras de la ley, sino por fe (cf. 3:6– 14). Finalmente, encuentra necesario, en los caps. 5 y 6, detallar las implicaciones prácticas de este evangelio de la libertad (ver especialmente 5:13– 26). Estos tres temas, sin embargo, están subordinados a su único gran propósito: evitar que los gálatas abandonen el evangelio de verdad y se conviertan en apóstatas.
La triple estructura que acabamos de bosquejar refleja una forma común y tradicional de leer Gál. Estudios recientes, sin descartar esta perspectiva básica, han intentado definir más precisamente el carácter literario de la carta por examinar las técnicas de la retórica en la antigüedad. Algunos erudi-tos consideran que Gál. es un discurso "apologético" (algo así como una defensa en un tribunal), mientras que otros la consideran un escrito "deliberativo" (cuya intención es persuadir a sus lectores a hacer algo). Otra perspectiva, concentrada más en la estructura de la carta que en sus discursos, considera que Gál. está formada por dos secciones principales: una de reprensión (1:6– 4:11) y una de pedidos (4:12– 6:10).
Especialistas en este campo han propuesto otras alternativas, y los aportes de las investigacionessociológicas y antropológicas han contribuido aun más a nuestra comprensión de la forma en que Pablo construye sus argumentos. Dado que no se ha llegado a un consenso sobre dichos temas, este comentario utiliza un bosquejo más bien tradicional para indicar la estructura de la lógica que siguió el Apóstol. Cualquiera sea el estilo literario preciso que haya influido en la escritura de Pablo, es de gran importancia interpretar cada versículo o pasaje en el contexto de aquella lógica. (Ver también el artículo "Leyendo las epístolas".)
Bosquejo del Contenido
1:1-10Introducción
1:1-5Prólogo
1:6-10Ocasión
1:112:21El apostolado de Pablo
1:11, 12Proposición principal
1:13-24Pruebas sustanciales
2:1-21Dos casos especiales
3:14:31El evangelio de Pablo
3:1-5Apelación inicial
3:64:7Argumentos básicos
4:8-31Nuevas apelaciones
5:16:10Mandatos de Pablo
5:1-12Acerca de la circuncisión
5:13-26Acerca del amor
6:1-10Acerca de las cargas
6:11-18Epílogo