Josué 8, 30-33

Sacrificio en el monte Ébal y lectura de la ley

Entonces josué construyó un altar al Señor, Dios de Israel, en el monte Ébal, * conforme a lo que Moisés, siervo del Señor, había mandado a los israelitas y está escrito en el libro de la Ley de Moisés, a saber: un altar de piedras sin labrar, no tocadas por el hierro. A continuación ofrecieron al Señor holocaustos sobre él e inmolaron sacrificios de comunión. º Y allí mismo grabó josué sobre las piedras una copia de la ley que Moisés había escrito en presencia de los israelitas. º Y todo Israel, con sus ancianos, sus funcionarios y sus jueces, estaba de pie a ambos lados del Arca, ante los sacerdotes levitas que portaban el Arca de la alianza del Señor; extranjeros º y nativos se colocaron la mitad en la falda del monte Garizín º y la otra mitad en la falda del monte Ébal, según había mandado Moisés, siervo del Señor, cuando bendijo por primera vez al pueblo de Israel.
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