I Samuel 1, 24-28

Cuando lo hubo destetado, lo subió consigo, llevando además un novillo de tres años, una medida de harina y un odre de vino, e hizo entrar en la casa de Yahvé, en Siló, al niño todavía muy pequeño. Inmolaron el novillo y llevaron el niño a Elí. Ella dijo: «Óyeme, señor. Por tu vida, señor, yo soy la mujer que estuvo aquí junto a ti, orando a Yahvé. Este niño pedía yo y Yahvé me ha concedido la petición que le hice. Ahora se lo ofrezco a Yahvé por todos los días de su vida; está ofrecido a Yahvé.» Y se postró allí, ante Yahvé.
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