Deuteronomio  19, 16-21

Si un testigo injusto se levanta contra un hombre acusándolo de transgresión, los dos hombres que por ello tienen pleito comparecerán en presencia de Yahvé, ante los sacerdotes y los jueces que estén entonces en funciones. Los jueces indagarán a fondo, y si resulta que el testigo es un testigo falso, que ha acusado falsamente a su hermano, haréis con él lo que él pretendía hacer con su hermano. Así harás desaparecer el mal de en medio de ti. Los demás se enterarán y temerán, y no volverán a cometer una maldad semejante en medio de ti. No tendrá piedad tu ojo.
El talión.
Vida por vida, ojo por ojo, diente por diente, mano por mano, pie por pie.
Ver contexto