Deuteronomio  34, 10-12

No ha vuelto a surgir en Israel un profeta como Moisés, a quien Yahvé trataba cara a cara; nadie como él en todas las señales y prodigios que Yahvé le envió a realizar en el país de Egipto, contra el faraón, y contra todos sus siervos y contra todo su país, y en la mano tan fuerte y el gran terror que Moisés puso por obra a los ojos de todo Israel.
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