Ezequiel  43, 18-26


Consagración del altar.
Y me dijo: «Hijo de hombre, así dice el Señor Yahvé: Éstas son las disposiciones del altar el día en que sea erigido para ofrecer en él el holocausto y derramar la sangre. A los sacerdotes levitas —los de la descendencia de Sadoc que se acercan a mí para servirme, oráculo del Señor Yahvé— les darás un novillo en sacrificio por el pecado. Tomarás su sangre y rociarás los cuatro cuernos, los cuatro ángulos del zócalo y el reborde todo alrededor. Así quitarás el pecado y harás expiación por él. Luego tomarás el novillo del sacrificio por el pecado: se le quemará en una dependencia del templo, fuera del santuario. El segundo día, ofrecerás un macho cabrío sin defecto en sacrificio por el pecado y se quitará el pecado del altar como se hizo con el novillo. Cuando hayas acabado de quitar el pecado, ofrecerás un novillo sin defecto y un carnero del rebaño sin defecto. Los ofrecerás delante de Yahvé, y los sacerdotes les echarán sal y los ofrecerán en holocausto a Yahvé. Durante siete días ofrecerás el macho cabrío del sacrificio por el pecado, cada día; se hará también el sacrificio del novillo y del carnero sin defecto tomado del rebaño. Así, durante siete días se hará la expiación del altar, se le purificará y se le consagrará.
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