Hechos 7, 44-50

«Nuestros padres tenían en el desierto la Tienda del Testimonio, como el que hablaba con Moisés le mandó hacerla según el modelo que había visto. Nuestros padres que les sucedieron la recibieron en herencia y la introdujeron bajo el mando de Josué en el país ocupado por los gentiles, a los que Dios expulsó delante de nuestros padres, hasta los días de David, que halló gracia ante Dios y pidió disponer de una morada para la casa de Jacob . Pero fue Salomón el que le edificó casa , aunque el Altísimo no habita en casas fabricadas por manos humanas como dice el profeta: El cielo es mi trono
y la tierra el escabel de mis pies.
Dice el Señor: ¿Qué casa me vais a construir?
O ¿cuál será el lugar de mi descanso?
¿Es que no ha hecho mi mano todas estas cosas?
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