Isaías 5, 8-10


Las maldiciones.
¡Ay, los que juntáis casa con casa,
y campo a campo anexionáis,
hasta ocupar todo el sitio
y quedaros solos en medio del país!
Así ha jurado a mis oídos Yahvé Sebaot:
«¡Han de quedar desiertas muchas casas;
grandes y hermosas,
pero sin moradores!
Porque diez yugadas de viña darán sólo una medida,
y una carga de simiente producirá una medida.»
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