Nahúm  1, 2-8


Preludio
Salmo. La ira de Yahvé.

Alef.
¡Dios celoso y vengador Yahvé,
vengador Yahvé y rico en ira!
Se venga Yahvé de sus adversarios,
guarda rencor a sus enemigos.
Yahvé tardo a la cólera, pero grande en poder,
y a nadie deja impune Yahvé.

Bet.
Camina en la tempestad y el huracán,
las nubes son el polvo de sus pies.

Guimel.
Increpa al mar y lo seca,
todos los ríos agota.

(Dálet.)
...languidecen Basán y el Carmelo,
la flor del Líbano se amustia.

He.
Los montes tiemblan ante él,
se estremecen las colinas;

Vau.
en su presencia se levanta la tierra,
el orbe y los que lo habitan.

Zain.
Ante su enojo ¿quién aguantará?
¿Quién resistirá el ardor de su cólera?

Het.
Su furor se derrama como fuego,
las rocas se quiebran ante él.

Tet.
Bueno es Yahvé para quien lo espera,

Yod.
un refugio el día de la angustia;
conoce a los que a él se acogen,
cuando pasa la inundación.

Kaf.
Extermina a los que se alzan contra él,
a sus enemigos empuja a las tinieblas.
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