Nehemías 10, 38

Lo mejor de nuestras moliendas, de los frutos de todo árbol, del vino y del aceite, se lo traeremos a los sacerdotes, a los almacenes del templo de nuestro Dios; y el diezmo de nuestro suelo a los levitas, que cobrarán el diezmo de la labranza de todas nuestras ciudades;
Ver contexto