Proverbios 6, 6-11


El perezoso y la hormiga.
Acércate a la hormiga, perezoso,
observa su conducta y aprende.
Aunque no tiene jefe,
ni capataz, ni dueño,
asegura su alimento en el verano
y recoge su comida en tiempo de siega.
¿Hasta cuándo dormirás, perezoso?,
¿cuándo te levantarás de tu sueño?
Un rato de sueño, un rato de siesta,
un rato de descanso con los brazos cruzados
y te llega la pobreza del vagabundo
y la penuria del mendigo.
Ver contexto