Sabiduría 2, 16-18

Nos considera moneda falsa
y nos evita como a apestados;
celebra el destino de los justos
y presume de que Dios es su padre.
Ya veremos si lleva razón,
comprobando cuál es su desenlace:
pues si el justo es hijo de Dios, él lo rescatará
y lo librará del poder de sus adversarios.
Ver contexto