Salmos 132, 13-18

Pues Yahvé ha escogido a Sión,
la ha querido como sede para sí:
«Aquí está mi reposo para siempre,
en él me instalaré, que así lo quiero.
Bendeciré sin medida su alimento,
hartaré de pan a sus pobres,
de fiesta vestiré a sus sacerdotes,
sus amigos gritarán de júbilo.
Allí suscitaré un vástago a David,
aprestaré una lámpara a mi ungido;
cubriré de ignominia a sus enemigos,
mas sobre él brillará su diadema».
Ver contexto