Salmos 29, 3-9

La voz de Yahvé sobre las aguas,
el Dios de la gloria truena,
¡es Yahvé sobre las aguas caudalosas!
La voz de Yahvé con fuerza,
la voz de Yahvé con majestad.
La voz de Yahvé desgaja los cedros,
desgaja Yahvé los cedros del Líbano,
hace brincar como novillo al Líbano,
al Sarión como cría de búfalo.
La voz de Yahvé afila llamaradas.
La voz de Yahvé estremece la estepa,
estremece Yahvé el desierto de Cades.
La voz de Yahvé retuerce las encinas,
deja desnudas las selvas.
Todo en su Templo grita: ¡Gloria!
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