Salmos 75, 2-5

Te damos gracias, oh Dios, te damos gracias,
invocando tu nombre, pregonando tus maravillas.
«En el momento en que decida,
yo mismo juzgaré con rectitud.
Aunque tiemblen la tierra y sus habitantes,
yo establecí firmemente sus columnas. Pausa.
Digo a los arrogantes: ¡Fuera arrogancias!,
y a los malvados: ¡No alcéis la frente,
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