Eclesiástico 6, 8-12

Porque hay amigos de ocasión,
que te abandonan el día de la desgracia.
Hay amigos que se convierten en enemigos,
y te avergüenzan descubriendo tus riñas.
Hay amigos que comparten tu mesa,
y te abandonan el día de la desgracia.
Cuando las cosas van bien, son como otro tú,
e incluso son amables con tus servidores;
pero si eres humillado, se ponen contra ti
y se esconden de tu presencia.
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