II Corintios 10, 12-14

Ciertamente no osamos igualarnos ni compararnos a algunos que se hacen propaganda a sí mismos. Midiéndose a sí mismos según su opinión y comparándose consigo mismos, obran sin sentido. Nosotros, en cambio, no vamos a extralimitarnos en elogios personales*. Lo haremos conforme a los límites que Dios mismo nos asignó cuando nos permitió llegar también hasta vosotros. Porque no traspasamos los límites debidos, como sería el caso si no hubiéramos estado antes con vosotros; pero resulta que llegamos hasta vosotros con el Evangelio de Cristo*.
Ver contexto