Amos  5, 18-20

¡Ay de los que ansían el Día de Yahvé! ¿Qué creéis que es el Día de Yahvé*? ¡Es tinieblas, que no luz! Como cuando uno huye del león y se topa con un oso, o, al entrar en casa, apoya una mano en la pared y le muerde una culebra... ¡El Día de Yahvé será tinieblas, lóbrego, sin luz ni claridad!
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