Isaías 33, 20-21

Contempla ahora a Sión, villa de nuestras solemnidades; tus ojos contemplarán Jerusalén, albergue firme, tienda estable: sus clavijas nunca serán removidas, sus cuerdas nunca serán arrancadas. Allí tendremos un Yahvé magnífico, en un lugar de ríos y amplios canales; no navegarán barcos de remos, no lo atravesarán navíos de alto bordo*.
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