Jueces 1, 1-8

Después de la muerte de Josué, los israelitas hicieron esta consulta a Yahvé: «¿Quién de nosotros subirá el primero a combatir a los cananeos?» Yahvé respondió: «Subirá Judá. He puesto el país en sus manos.» Judá dijo a su hermano* Simeón: «Sube conmigo al territorio que me ha tocado. Atacaremos al cananeo, y luego yo también iré contigo a tu territorio.» Simeón marchó con él. Cuando subió Judá, Yahvé puso en sus manos a los cananeos y a los perizitas. Derrotaron en Bézec a diez mil hombres. Como encontraran en Bézec a Adoni Bézec*, le atacaron y derrotaron a los cananeos y a los perizitas. Aunque Adoni Bézec huyó, le persiguieron, lo capturaron y le cortaron los pulgares de manos y pies. Entonces dijo Adoni Bézec: «Setenta reyes, con los pulgares de manos y pies cortados, andaban recogiendo migajas bajo mi mesa. Según lo que yo hice, así me ha pagado Dios.» Lo llevaron a Jerusalén, donde murió. (Los de Judá atacaron Jerusalén, la tomaron, la pasaron a cuchillo y prendieron fuego a la ciudad).
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