Nahúm  3, 16

(16a) multiplica tus mercaderes más que las estrellas del cielo*,
(17a) tus guardias como langostas, y tus escribas como enjambres de insectos, que se posan en las tapias al abrigo del frío; sale el sol y se van,
(16b) se despliegan los pulgones y vuelan,
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