Proverbios 14, 2-5

El que procede rectamente respeta a Dios,
el de conducta torcida lo desprecia. De la boca del necio brota la soberbia,
los labios del sabio son su defensa. Donde no hay bueyes el establo está limpio,
pero la fuerza de un toro trae rica cosecha. Un testigo fiel no miente,
un testigo falso respira mentiras.
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