Genesis 7, 9-17

entraron por parejas con Noé en el arca, macho y hembra, conforme había ordenado Dios a Noé. Al cabo de siete días, las aguas del diluvio vinieron sobre la tierra. El año seiscientos de la vida de Noé, en el segundo mes, el día diecisiete del mes, en ese día se rajaron todas las fuentes del gran abismo y se abrieron las compuertas de los cielos; y llovió a torrentes sobre la tierra cuarenta días y cuarenta noches. En aquel mismo día entró Noé en el arca con Sem, Cam y Jafet, hijos de Noé, la mujer de Noé y las tres mujeres de sus hijos con ellos, y todas las bestias salvajes según su especie, todos los animales domésticos según su especie, todo reptil que se arrastra sobre la tierra según su especie, y toda ave según su especie, todo pájaro, todo ser alado. Y entraron con Noé al arca parejas de toda carne en que había hálito de vida. Y los que entraron fueron macho y hembra de toda carne, que entraron como había ordenado Dios a Noé; y tras él cerró Yahvéh la puerta. Cuarenta días duró el diluvio sobre la tierra. Subieron las aguas y elevaron el arca, que se alzó sobre la tierra.
Ver contexto