Hechos 19, 8-10

Entraba en la sinagoga y hablaba con entereza. Y así, por espacio de tres meses, trataba del reino de Dios e intentaba convencer a los asistentes. Pero como algunos se endurecieran y rechazaran el Camino, hablando mal delante de la concurrencia, él se apartó de ellos, separó a los discípulos y diariamente les hablaba en la escuela de Tirano. Así lo hizo durante dos años, de forma que todos los habitantes de Asia, tanto judíos como griegos, oyeron la palabra del Señor.
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