Deuteronomio  19, 1-13

Cuando YHVH, tu Elohim, haya destruido las naciones cuya tierra YHVH tu Elohim te da, y tú las hayas desplazado, y habites en sus ciudades y en sus casas, te reservarás tres ciudades ° en medio de la tierra que YHVH tu Elohim te da °. Prepararás el camino de acceso, y dividirás en tres partes el territorio de tu tierra que YHVH tu Elohim te hace heredar, para que huya allí todo homicida. Y este será el caso del homicida que se refugie allá para salvar la vida: quien mate a su prójimo sin intención, y sin que lo haya aborrecido anteriormente. Tal como el que va con su prójimo al bosque a cortar leña, y al blandir con su mano el hacha para cortar el árbol, el hierro es desprendido del mango y alcanza a su prójimo, y muere. Ése podrá huir a cualquiera de esas ciudades para conservar la vida, no sea que el vengador de la sangre persiga al homicida mientras esté enardecido su corazón, y, por ser largo el camino, lo alcance y le quite la vida no siendo él digno de muerte, ya que no lo aborrecía anteriormente. Por tanto yo te ordeno, diciendo: Te reservarás tres ciudades, y si YHVH tu Elohim ensancha tus fronteras, tal como lo juró a tus padres, y te da toda la tierra que habló a tus padres que te daría, si guardas todos estos mandamientos que yo te ordeno hoy para ponerlos por obra, amando a YHVH tu Elohim y andando en sus caminos todos los días, entonces te podrás agregar tres ciudades más sobre aquellas tres. Así no será derramada sangre inocente en medio de tu tierra que YHVH tu Elohim te da en herencia, ni recaerá sobre ti sangre alguna. Pero cuando haya alguno que aborrezca a su prójimo y lo aceche, y levantándose contra él lo hiera mortalmente, de modo que muera, y huya a una de aquellas ciudades, en tal caso, los ancianos de su ciudad enviarán a sacarlo de allí y lo entregarán al vengador de la sangre para que muera. No se compadecerá tu vista de él. Así limpiarás de Israel la sangre inocente, para que te vaya bien.
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